Lisa se mira al espejo con una sonrisa en su rostro, sus piernas se ven muy bonitas en esa falda color rosa pastel, muerde su labio y observa sus senos, los toca y se encoge de hombros.

—Han crecido bastante.

No coloca un bracier, los deja completamente libres. Sus pezones se notan completamente, y sabe quién los observará sin cesar.

Jennie Kim.

Profesora de Física, la materia que ella está por reprobar.

Suspira y agarra su mochila, bajando las escaleras poco a poco con su celular en su mano derecha, mientras observa los mensajes que sus compañeros han mandado.

Maldice cuando nota que está llegando tarde, y la primera hora pertenece a su profesora favorita, aquella mujer que la hace mojarse cada vez que la ve con un pantalón que marca su redondo trasero, el cual ella quiere lamer por completo.

Sus mejillas se sonrojan porque algo viene a su mente, niega con la cabeza, riendo.

—Adiós, hija —su madre besa su mejilla, Lisa le devuelve el beso saliendo de la casa, ve a Rosé, su mejor amiga, quien cruza la calle y la saluda. Ambas, desde que tienen memoria, han ido juntas al colegio, siendo siempre inseparables.

—Otra vez sin bracier, Lisa.

Ella sonríe.

—Sabemos que a Jennie le encanta, siempre los mira. Además, ¿por qué no podría? En el reglamento del colegio no dice "no sé puede ingresar al colegio sin bracier" —su amiga rueda los ojos y suspira.

—Tú sigue provocando a la profesora que puede que no salgas muy bien librada —la castaña muerde su labio.

—Eso es lo que quiero, tener a la profesora en mi cama —la rubia la mira y niega—. Ambas sabemos que a la profesora un poco le atraigo, nunca quita la mirada de mis pechos ni de mis labios.

—Lisa, ella es muy profesional, no creo que caiga —dice, y la mencionada ríe, porque en serio hará todo para poder conquistarla, además de que también tiene que salvar la materia.

Un buen polvo tal vez la ayude aún más.

***

—Llegan tarde —reprocha Kim, cruzada de brazos.

—Perdón, profesora, es que tuvimos un problema en el camino —dice desde la puerta, sabe que si no da una buena excusa, se perderían la clase y eso es algo que no quiere.

—¿Qué problema, Lalisa?

Quiere gemir por la manera que menciona su nombre, vaya mujer.

—Estaba esperando a que los veterinarios fueran a buscar a mi perrita, la iban a castrar.

Rosé quiere reír por la excusa, pero sabe que si lo hace, todo podría irse al carajo.

Trata de no reír y muerde su labio.

—Pasen.

Ambas asienten, la menor nota como los ojos gatunos de su profesora van a sus senos, sonríe y la voltea a mirarla, mientras le guiña un ojo.
Jennie traga saliva, dándose la vuelta para escribir algo en el pizarrón.

No tienes que caer... Se repite una y otra vez la surcoreana.

Las dos horas pasan rápidamente y Lisa no entiende nada, por más que intente ponerle ánimos y mucha atención, no lo logra hacer.

Además de que su vista siempre se va a los pechos de la mayor, ni hablar de su trasero.

El timbre suena y todos se levantan. Rosé está a su lado, mientras guarda sus objetos.

—Lalisa, necesito hablar contigo.

Ella asiente y Rosé sale del salón de clases deprisa, se nota que está algo enojada.

—Dígame, profesora.

—Estás por reprobar el año, Lalisa, venías muy bien con tus notas, pero desde junio has decaída —Lisa asiente, un poco sonrojada.

—Es que no entiendo muchas cosas.

Jennie se cruza de brazos y suspira.

—¿Por qué no me has dicho?

La castaña muerde su labio.

—No sé.

—Algo tienes que hacer para remontar la materia sino la llevarás a examen.

Lisa sonríe y se acerca coquetamente hasta su mayor, donde coloca dos dedos justos en el pecho de esta.

—¿Qué haces? —la respiración de Jennie es escasa, mira sin poder creer lo que su alumna
está haciendo.

—Tú dime qué hacer, mommy, y yo lo haré, piénsalo —le guiña el ojo y sale del salón, dejando a la profesora Kim con sus bragas sumamente mojadas.

—Maldita mocosa.

A D V E R T E N C I A S

Smut.
Mommy kink.
Jentop.

Lisa será muy provocativa.

[💋]

Jennie Kim | 26 años | Castaña oscura

Lalisa Manoban | 18 años | Castaña (un poco más clara que el de Jen)

Gráficos
(muchísimas gracias a ambos editores, sus trabajos son maravillosos)