- ¿¡Yo!?

Las miradas se volvieron a mi, las caras de sorpresa de todos fue grande.

- ¿Pero porque? - Pregunte

- Pues digamos que eres el más inteligente del curso, el chico social que más contactos tiene y alguien que no tiene un perfil de asesino

- ¡CALLATE MALDITO!¡LO CONOZCO DESDE QUE HERAMOS NIÑOS! - Lo mira detenidamente mientras él seguía intentando zafarse del agarre de sus compañeros - Él es algo egosentrico, terco y muy poco gracioso, pero él jamás seria un asesino ¡JAMÁS!

- Felix... - Dije algo feliz por sus palabras y triste por la verdad

- No es para que te lo tomes muy a pecho, como dije, es solo una suposición, es más aun no conozco un motivo para que lo hiciera ni una pista de que él haya sido, pero no mentire, él es mi mayor sospecho...

Aquel detective quedo en el piso por acción de un golpe proveniente de Felix que se había logrado desatar del agarre que lo detenía.

- DEJA DE DECIR ESTUPIDECES!¡SI NO TIENES PRUEBAS ¿¡PARA QUE MIERDA VIENES A TIRARNOS TUS CONSPIRACIONES EN CARA!? - Grito mientras le volvía a agarrar el cuello del uniforme en el piso

- Sabia que reaccionarían así, y actuaron tal cual lo imagine

- ¡AGH!¡MUERETE, NO SOMOS TUS EXPERIMENTOS!

Aquel chico lo siguió golpeando y tubo que ser frenado por sus compañeros que lo detuvieron ya que el pelirojo no se defendía. Por cada golpe él se reía, parecia masoquista.

- ¡QUE ESTÁN HACIENDO! - La directora llego con un enfado similar al poder de mil demonios - ¡SE VAN LOS DOS DIRECTAMENTE A MI OFICINA!

Ambos solo se gruñeron y sin hacer contacto visual se dirigieron a la dirección. Todos veíamos como se iban de allí con la imponente directora.
 
- Keito... - Me dijo una de las chicas

- En serio creen que yo fui...

- No, nadie cree eso...

- ¡Demonios! - Tan solo salí de allí con mis lagrimas de cocodrilo

(...)

Las cosas se estaban complicando y si no actuaba como debia, las sospechas serian las palas para cavar mi propia tumba.

Aquella mañana después de volver del baño y hacer mi actuación del día, volví al aula, y todos allí me pidieron disculpas y me dijeron que no creían nada de los que le había contado aquel sujeto. Keito 1, Detective 0

Ahora estaba en el almacén de todos los días, aquel que no es grande, pero aun así te pierdes cuando estas en busca de los fideos.

- Demonios este viejo siempre se aprovecha de los precios - Me queje imprudentemente en voz alta

- ¿Keito? - Una voz que no esperaba escuchar, pero lo deceaba se acerco a mi

- Teru, ¿Que haces aquí?

- Eso fue mi culpa, estábamos por aquí y tuve la idea de comprar algo para la merienda, al ver este lugar entramos de inmediato - Dijo aquella "inservible" que estaba en mi camino para conquistar a Teru

- Oh, ya veo - Le sonreí

- Hey Keito ¿Estas bien? Lo que te dijo fue muy grave - Dijo preocupado por mi

- Teru... - Mi corazón latía a mil, con el solo hecho de hablar con él me provocaba que mis manos sudaran y me temblaran. Encima estaba preocupado por mi... mi corazón parecía que iba a explotar en cualquier momento - Tranquilo, estoy mejor - Fue lo único que pude decir con una sonrisa y un leve rubor en mi rostro

- Me contó como te acuso aquel chico y sin pruebas, eso debió ser horrible - Dijo aquella chica - Hay que tonta que soy, aun no me presento...

- Cyntia ¿Cierto?

- S... si, ¿Como lo sabes?

- Bu...bueno, te vi varias veces entrar al aula y escuche a Teru decir tu nombre - Dije para no decir que la tenia fichada para torturarla y masacrarla del peor modo posible

- Oh ya veo - Me sonrie

- Bu...Bueno - dije algo nervioso al ver a Teru nuevamente - I...ire a... pagar

- Cla...claro nosotros buscaremos algo y haremos lo... lo mismo - Dijo él también algo nervioso

Nos despedimos y cada uno fue por su lado, ellos fueron a comprar lo suyo y yo fui a pagar lo mio y me fui de ahí.

Con el hecho de que lo pude ver me hizo sentir que mi día no era tan malo después de todo... excepto esa molestia... Pero pronto no será ningun problema... la haré desaparecer.

Mientras caminaba por el camino de siempre en dirección a mi casa, con la bolsa de las compras y pensando como le haría para hacerla desaparecer sin levantar sospechas de aquel chico ni de nadie, sentí un ruido atrás mio.

Al darme vuelta no pude ver nada que produjera aquel ruido. La verdad que en aquella plaza en la que solía caminar para poder volver a mi casa, siempre habían muchas personas y animales, pero en este caso no pude ver ni un misero pajarito.

Varias veces escuche diferentes ruidos que provenían de atrás mio, pero cada vez que me daba la vuelta no había nada. Me canse de simular de que no sabia lo que estaba pasando.

- Sal de ahí - le dije dandome la vuelta

- En mi defensa, sirvo como detective, no como asesino esperando a su presa ¿Me entiendes?

- Ya detente, solo me sigues para seguir acusándome de algo que no hice

- Para nada, solo sigo tus pasos, hay que asegurarse de que no estés planeando matar a alguien

- *Suspiro* Mi paciencia no es infinita

- Soy consciente de eso, después de todo el primer crimen fue pasional

- ¡Detente!¡Deja de decir esas cosas! Del solo hecho de que me involucres en tus estúpidas teorías me hace helar la sangre

- Jaja, tranquilo, solo juego contigo, pero es verdad aun sospecho de ti un 10% pareces un chico ganador siempre a la cabeza de los demás

- Tsh poco me importan tus calculos, Vete de una vez

- No sin que escuches mi propuesta antes

- Propuesta ¿Porque quisiera hacer un trato contigo?

- Sencillo, si me dejas estar a tu lado desde ahora hasta el lunes que pisemos la entrada del colegio, dejare de molestarte con ser el asesino

Me lo pensé y me lo repense. Aceptar era la mejor opción. Se que no era idiota para que de la nada dejara de pensar que yo no podía ser el culpable porque estuve con él solo 3 días, pero ya se me ocurriría como contratacar. El pago seria más costoso, pero puedo aprovechar que la mafia estaba de mi lado.

- Acepto - esas fueron mis palabras, para aceptar el acuerdo

Pero no tenia ni la más mínima idea... de lo que estaba por ocurrir en aquellos 3 días de aquel frío invierno.