5: "Por favor, nada de preguntas estúpidas"
Luna
Sol_Shining ha empezado a seguirte.
Esa es la notificación que me llegó hace un par de minutos. Aparentemente a la niña esta le caí bien, pero no sé si devolverle el follow o simplemente ignorarla.
—¿Tú qué opinas? —le pregunto a Marte.
—No lo sé. Si te agradó síguela—me responde.
—No es tan insoportable como creí, pero no lo sé, no quiero que malpiense las cosas.
—No creo que mal piense nada, ella no es así. Habrá estado catorce minutos debatiendo si seguirte o no.
—De igual manera no le devolveré el follow ahora. Esperaré—decido guardando el celular en mi bolsillo.
—Okey—me dice Marte— . Oye ¿sabes que he estado pensando?
—¿En qué? —le digo mientras me balanceo en la hamaca donde me encuentro.
—Entraré al equipo de porristas.
Miro a Marte con el ceño fruncido
—¿Tanto te gusta Venus que entrarás al equipo por él?
—¿Porqué todos piensan que es por eso? No es por eso. Es porque siempre quise entrar y nunca me animé hasta ahora.
—Sí. Claro.
No dudo que Marte quiera entrar al equipo por que le gusta, a ella siempre le ha encantado todo lo que tiene que ver con el baile y esas cosas, pero tampoco dudo que entra en gran parte por Venus.
—Él también gusta de ti.
—No digas tonterías—me dice la pelirroja mientras se hamaca cada vez más fuerte.
—No es una tontería. He visto cómo te mira y te considera como una diosa.
—Te equivocas.
—Cree lo que tú quieras, yo solo te informo—digo mientras miro el piso—. Oye ¿sabes si Sol se alimenta bien? —le pregunto.
—Ni idea. Supongo que, sí ¿Por qué preguntas?
—Porque pasé tres horas con ella y he notado que no come absolutamente nada.
—Pues no todos son como tú, Luna, que necesitas comida a cada hora.
—No me refiero a eso, también he notado que es muy flaca y si come algo es alguna fruta.
—Dudo que no se alimente bien con las cocineras carísimas que trabajan para ella y su madre— me responde.
Algo me dice que Sol no come absolutamente nada y no es solo porque esté flaca, sino también porque estuve con ella desde las 4:00 pm hasta las 6:00 pm y no comió absolutamente nada teniendo una barra de cereal en la mochila. ¿A quién no le da hambre en esas horas? No puedo ser la única.
—¿Sabes si tiene padre? —le pregunto a la pelirroja, quien se está hamacando con todas sus fuerzas.
—Solo sé que murió cuando ella tenía ocho años y su madre se deprimió tanto que tuvo que tomar antis depresivos, luego tuvo que hacerse cargo de la compañía que tienen—me cuenta.
—Vaya. No sabía eso de ella.
—Veo que te interesa mucho Sol—me dice Marte mientras intenta frenar la hamaca.
—Simplemente me da curiosidad, es todo—me encojo de hombros—, siento que es la típica chica de una película que tiene la vida perfecta, pero tiene un lado oscuro y muy triste.
—Bueno, ella no está lejos de eso. Sé que ella extraña mucho a su papá y que su mamá nunca volvió a ser la misma después de su muerte.
No respondo nada ante su contestación, solo me hamaco.
⋇⋆✦⋆⋇
—¿Qué clase tienes primero? —pregunta Marte cerrando su casillero.
Otra vez estoy en esta horrible escuela. Que bien.
—Arte—le contesto sin ganas.
—Oye, Marte.
Escucho una voz gritar el nombre de mi amiga a lo lejos. Veo a Sol caminar en nuestra dirección con unos papeles en la mano, su cabello lacio recogido en una cola y un lápiz en la oreja.
—Hola, Sol—la saluda Marte cuando ya está a nuestro lado.
La rubia tuerce la cabeza para el lado izquierdo y me ve con la espalda contra el casillero—Hola, Luna.
—¿Qué tal? —le digo mientras me arrastro contra el casillo en dirección al piso hasta que logro sentarme.
Ella arruga el entrecejo y vuelve a mirar a Marte—Oye, ya tengo fecha para las audiciones de porristas—la oigo decir—. Son este jueves a las 7:00 pm. Ya te anoté en la lista de candidatas.
—Oh, gracias. ¿Sabes quienes van a elegir a las que entran al equipo?
—Sip. vamos a ser Hydra, Venus y yo.
Veo como mi amiga se sorprende al escuchar el nombre del chico que la tiene babeando, yo suelto una risita por su reacción.
—Ah, okey—reacciona—. Bueno, supongo que nos vemos el jueves—le dice la pelirroja a la rubia—. Adiós—se despide.
Sol le devuelve el saludo a Marte simpáticamente y se da vuelta para mirarme.
—¿Cómo te ha tratado la vida? —me pregunta.
—No tan mal como suele hacerlo—le digo sin ganas.
Ella se agacha y se sienta en el piso a mi lado. Suelo odiar que las personas vengan y me hablen cuando estoy sola, pero por alguna extraña razón no me molesta que Sol lo haga.
—Oye, vi que me empezaste a seguir en Instagram—le digo para tener una tema de conversación—, yo iba a devolverte el follow, pero apretar el botón me daba mucha pereza—le comento y ella se ríe.
—Tranquila, no pasa nada—me responde—. Puedes seguirme cuando se te pase la pereza.
—Dudo que en algún momento se me pase—saco mi celular y se lo ofrezco—. Ten, síguete si quieres.
Ella agarra mi celular, se busca en Instagram y se empieza a seguirse con una sonrisa.
—Listo.
—¿Eres de las personas que suben muchas fotos? Porque si no te dejo de seguir, eso no me da pereza—le pregunto ya sabiendo la respuestas.
—Na. No tantas.
Ese "no tantas" de seguro es una foto por semana y 10 historias por día.
—Ah, te traje algo—le digo buscando el objeto en mi mochila.
—Por favor que no sea un smoothie de frutilla—me dice ella.
—Jaja, no—me rio sin gracia— Toma— le doy un paquete de galletitas.
—¿Qué es esto? —me pregunta viendo al paquete extrañada.
—Una nave alienígena, Sol ¿Tú qué crees que es? Es un paquete de galletas ¿Qué no ves?
Las preguntas estúpidas me hartan.
—¿Por qué me lo das? —me pregunta.
—Creí que podrías tener hambre, no lo sé.
Ella me mira extrañada, pero acepta el paquete de galletas que le regalé. Le compré uno porque no come nada y estoy segura de que algún día de estos se desmayará y quiero que tenga algo para evitarlo.
Es del tipo de chica que deja todo en su mochila y no saca nada, así que ese paquete de galletas se quedará ahí en caso de emergencia.
No es que me importe ella, pero digamos que no es sano para una persona andar desmayándose por ahí.
—Bueno me iré a mi clase— le digo levantándome—. Por suerte esta no es tan mala. Adiós.
—Adiós, Luna. Que tengas un bonito día.
—Sí, lo mismo para ti—me alejo de la chica.
⋇⋆✦⋆⋇
Mi parte del día favorita es irme de esta escuela, porque la detesto con mi vida.
Estoy bajando las escaleras cuando una voz masculina me detiene.
—Vaya. Vaya ¿Qué tenemos aquí?
—A un patán ¿Por qué preguntas? —digo mientras me doy vuelta para ver a Draco.
—No eres graciosa, Luna—me dice el chico.
—Lo sé, y jamás te pregunté.
—Tú tienes algo que necesito—reclama.
—En realidad no lo tengo, lo necesito tanto como tú.
—Ya te esperé mucho tiempo ¿Cuándo me darás el dinero?
—Pues cuando lo tenga —le digo con obviedad.
—¿Y cuándo será eso? —me responde
—No lo sé, cuando vea a una anciana adinerada para robarle.
—Pues más te vale que aparezca pronto.
—Eso díselo a la anciana no a mí.
El chico se acerca a mí. Es mucho más alto que yo, pero no me intimida, él agarra mi mandíbula y me dice lentamente:
—Más te vale que me des el dinero porque si no me tendrás que pagar de otra manera.
—Sí. Claro. Sigue soñando—digo mientras saco su mano de mi mandíbula—. Te veo luego u ojalá nunca—le digo mientras me alejo.
Sol
El centro comercial, mi lugar favorito.
Y no es porque sea una niña creída que viene a comprarse ropa y gastar dinero, aunque tengo que admitir que a veces sí. Me gusta venir a ver cosas absurdas que tienen un beneficio inútil para mi vida, pero sin embargo las quiero.
Además, quiero despejar mi mente sobre lo de Júpiter. Ya me acostumbré a la idea de que no tengo otra opción, es ser su novia o se acabó, con suerte tal vez con el tiempo se aburra de mí y me deje.
También he pensado que Júpiter es un chico atractivo, es simpático y divertido. Tal vez pueda enamorarme de él, así que ya decidí que el propósito de esta semana es enamorarme de Júpiter.
Estoy viendo vidrieras de tiendas de ropas cuando una chica se choca conmigo y hace que derrame mi jugo de naranja sobre mí.
Al ver bien a esta chica veo que es Luna encapuchada con una campera negra y con la respiración agitada.
—Vaya, a ti sí que te gusta tirarme cosas encima ¿Qué andas haciendo, Luna?—le pregunto curiosa a la peli azul que tengo al frente, parece estar intentando recuperar el aliento.
—Shh, cállate. No digas mi nombre—me dice haciendo un gesto de que me calle.
—¿Por qué no puedo decir tu nombre?
—Porque no—solo me da esa explicación—. Ahora, agárrame de la mano y haz como si yo hubiera estado aquí todo el tiempo ¿sí? Vamos a caminar ven.
—¿Por qué quieres que hagamos esto? ¿Qué te pasa? —le pregunto sin entender.
—Nada—al momento que dice eso veo como intenta guardarse un fajo de billetes en el bolsillo.
—No puede ser, Luna ¿robaste?
—¡Shh, que te calles!—exclama—. Sí, robé un poco de dinero y la policía me vio, así que estoy intentando escapar. Ayúdame a salir de aquí.
—Dios mío. ¡No puedes robar! ¿Cuánto robaste?
—Eso no importa. Por favor, Sol, ayúdame a salir de esta.
—¡Allí está! —escucho a unos policías gritar y veo que vienen corriendo hacia nosotras.
Luna maldice y me agarra de la mano llevándome corriendo a no sé dónde mientras los policías nos persiguen. Ahora mismo siento mucha adrenalina.
—Ven, entra aquí—me dice la chica mientras me sumerjo hacia un pasillo todo asqueroso, intento negarme a la idea, pero ella me empuja al ver que no entro.
—¡¿Que carajos, Luna?!—ella me estampa contra la pared y me tapa la boca.
—Cierra la boca—me dice seriamente.
Respira agitadamente mirándome a los ojos. Ella tiene unos ojos hermosos, lo noté el día del castigo. Su aliento a tabaco choca con mi nariz, es bastante más alta que yo. Casi me olvido que estamos en una callejón todo asqueroso y que nos están buscando.
Cuando notamos que todos los policías ya dejaron de buscarla me destapa la boca
—Lo siento, no quería meterte en esto—me dice y noto sinceridad es sus palabras. En serio se siente mal por haberlo hecho.
—Está bien. No pasa nada, fue divertido—ella suelta una pequeña risita de boca cerrada ante mis palabras— ¿Por qué robaste?
—Emm, como sabrás soy pobre y le debo dinero a alguien, así que esta fue la solución.
Me da mucha tristeza que tenga que recurrir a estos medios para poder sobrevivir, yo no tendría problema en darle un poco.
—¿Por qué no me pediste dinero a mí?
—No te pediré dinero, Sol.
—¿Por qué no?
—Porque no sería apropiado. Ya sé que a ti no te molestaría ni un poco, pero de igual manera son mis problemas no hay razón para involucrarte en esto—me dice mientras prende un cigarrillo—. Ya es demasiado que te haya metido en una persecución.
—Bueno, ahora tendré que ayudarte a salir de aquí.
—No es necesario.
—Sí que lo es ¿Qué pasa si te atrapan? No quiero el cargo de conciencia de que te metieron a la cárcel y yo no hice nada para evitarlo—le digo.
—Está bien ¿Qué sugieres hacer? —me pregunta.
Una sonrisa pícara inunda mi cara y Luna me mira con el entrecejo fruncido, de seguro me odiará por mi idea, pero yo la disfrutaré.
—Te odio—me dice mientras caminamos.
—Lo sé, pero tenía que cobrarte lo del smoothie.
—Me siento ridícula.
—Eso es porque estás vestida como yo.
Le puse a Luna la ropa que había comprado, así que ella se ve exactamente igual a mí solo que con la diferencia del cabello.
Cuando logramos estar a dos cuadras lejos del centro comercial Luna se mete por un callejón y se cambia de ropa.
—Muchas gracias por ayudarme a escapar—me dice devolviendo la ropa que le di.
—No hay de que, me pareció muy divertido—le digo con una sonrisa en mi rostro.
—Bueno, yo me iré yendo ¿Quieres que te acompañe a tu casa?
—Ah, no. No. Está bien, puedo ir sola.
Luna me mira de arriba abajo con el ceño fruncido
—Te acompañaré hasta tu casa.
—¿Por qué?
—Por que son las 9:00 pm y tú estás con una mochila con dos mil dólares en efectivo, una tarjeta de crédito, ropa carísima y con anillos de oro y una cadena valuada en aproximadamente cinco mil dólares.
¿Cómo carajo sabe todo eso? Es decir, entendí que ella analiza, pero es imposible que sepa todo eso. Literalmente acertó el precio de mi collar.
—En tu cabeza te estás preguntando ¿Cómo carajo sabe todo eso? No es tan difícil darse cuenta de esos detalles. Además, revisé tu billetera. A lo que voy es que si te encuentras con una persona como yo te robaría, porque yo lo haría y admito que me plantee varias veces la idea de sacarte esa cadena que tienes.
Es adivina.
—Está bien. Acompáñame, si quieres. Pero, no me robes mi cadena, por favor. Era de mi abuelita, y ¿en qué momento revisaste mi billetera?
—Un mago nunca revela sus secretos, niña. Ven—me dice mientras se va caminando para el lado de mi casa y la sigo.
El camino hacia mi casa es entretenido.
Luna es una chica interesante, me encantaría conocerla más, pero ella es muy reservada. No importa, me dedicaré a conocerla y ¿Quién sabe? Tal vez con el tiempo nos hagamos cercanas, además es una chica muy linda, me sorprende que no tenga novio, aunque una parte de mí me dice que ella aleja los chicos.
—Listo, llegamos— le digo, ella mira mi casa con la boca abierta.
—¿Esta es tu casa?
—Sip.
—¿Cuánto gana tu madre? —me pregunta.
—No lo sé— le digo levantando los hombros.
—Y yo que creí que no podías ser más creída—me dice y me rio, ya me acostumbré a sus comentarios de amor-odio.
—Adiós, Luna.
—Adiós, Ridícula—me dice mientras se aleja por la oscuridad de la calle.
.
.
.
.
.
⛄Nota de la autora ⛄
Holiss
Actualización nueva para un buen comienzo se semana 💕😊
Ojala Luna me incluyera en su persecución de policias jaja.
Por cierto quiero comentarles que tengo tik tok asique si quieren ver cosas de los personajes estoy subiendo bastante seguido es dell_h1.
DATO: alli les presenté un personaje que aqui aun no aparece je.
Tambien quiero aclarar que hay un personaje nuevo llamado Draco, no se llama asi por el personaje de Harry Potter si no por una constelacion con ese nombre.
Tengo a que admitir que cuando escribo al personaje me imagino a Draco Malfoy JSJSJS.
🍃 ¿Que les parecio este capitulo? 🍃
🍄 ¿Como les cae Luna? 🍄
🍁 ¿Creen que Draco traiga problemas en el fututo? 🍁
SPOILER DEL PROXIMO CAP: vemos a ver si Marte entra al equipo de porristas o no 🤍
Les gusta la historia pueden votar 🥰❤
Nos vemos el viernes 🌜☀
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro