La llamada finalizó, ahora tocaría esperar a que Namjoon llegara a casa de nuevo. Taehyung observó como su abuelo extendía su mano hacia a él, invitándole a que se acercase.

"Vamos borreguito, preparemos la sala" pide.

"¿Tienes frío?" toma su mano, apretándola un momento antes de empujar la silla hasta llevarlo a la sala.

"No, la verdad es que no" él apuntó el suelo cerca del sofá. "Mueve la mesita hasta el televisor, debajo de él y luego, extiende las sábanas que te regale en el suelo."

"Vale" Taehyung obedece, dejándolo en el lugar y comenzando a mover todo.

Una vez hecho, Taehyung subió las escaleras para llegar al cuarto donde Jungkook y él habían puesto un armario con todas las sábanas, toallas, abrigos y cubrecamas, tomando las que su abuelo le había regalado hace tiempo. Esas se caracterizaban por ser mullidas, tanto que podías dormir en ellas sin que la espalda duela. Llevó las dos, extendiéndolas en el suelo como él indicaba.

"¿Qué más?"

"Cojines, trae cojines y otras sábanas" pide, su nieto asintiendo, volviendo a subir cuando el timbre sonó, sin embargo, gritó desde abajo. "¡Yo abro, Taehyung!"

"¡Está bien!" contesta tomando las sábanas, y mientras veía como me iba a llevar los cojines, decidió hacer un segundo viaje cuando Namjoon entró y le sonrió tomando los cojines. "Hola."

"Hola, es lindo, ¿no?" él le miró, pero su mirada estaba apagada "¡Pijamada de nietos y abuelo!"

"Siempre quise una contigo," confiesa "cuando era navidad Heemin te llevaba a otros países con mamá. El abuelo y yo hacíamos pijamada mientras la abuela nos preparaba galletas."

"Galletas, ¿hay galletas?" pregunta, carraspeando porque se siente sentimental "Ya no tenemos a la abuela, así que hay que traicionarla un poco y comprar galletas preparadas."

"Creo que hay, y si ella estuviese aquí, te golpearía por comer otras galletas" bromea.

"Desearía que me golpeara" dijo con una sonrisa más pequeña. "Vamos, hay que buscar esas galletas y leche."

"La leche te provoca diarrea" Taehyung le recuerda a lo que su mayor ríe.

"Sí, pero por hoy pienso soportarlo" él sonrió, y su hermano menor se la devolvió. Los dos tenían los ojos cristalizados, sintiéndose heridos, pero reconfortados a la vez. "Aunque, si tengo miedo, la voy a mezclar con café."

"Yo con un poco de chocolate" ambos salen de la habitación apagando la luz, pueden ver a Tapioca durmiendo en la cama de Taehyung aprovechando que ni él ni Jungkook se encontraban en casa. Cuando llegaron al primer piso, el abuelo estaba observando la foto de Namjoon y Taehyung con mucho cariño.

"Chicos" llamó en cuanto los escuchó llegar. "Deberíamos tomarnos fotos, con esos celulares que ustedes se cargan voy a salir guapo."

"Tú ya eres guapo" halaga Namjoon.

"Ya lo sé, solo quería ser modesto" dijo él con otra sonrisa, palmeó sus muslos. "Siéntense y nos tomamos la foto."

Taehyung se sentó en una pierna de su abuelo, Namjoon colocó su celular en el sillón con el temporizador mientras corría y se sentaba en la otra pierna. Los tres sonrieron, Taehyung sonrió porque se sentía feliz, tanto que podría llorar ya que sabía lo que significaba ese momento. Se tomaron otras fotos, para luego preparar el café con leche y una taza de leche con chocolate para Taehyung. El Kim menor descubrió que su suegra, la señora Jeon, le había dejado un paquete de galletas de animales que Hoseok comía, tenía una nota donde rezaba que eran un aperitivo rico, que las disfrutara sin problema.

Una vez la comida estaba lista, ayudaron al señor Kim a bajar de la silla y sentarse en las sábanas justo en medio de nosotros. Namjoon abrió Netflix en la pantalla de su televisión, buscando películas infantiles animadas, terminaron por ver tres de ellas.

La cuarta estaba por comenzar, pero el sueño comenzó a apoderarse de los tres porque los bostezos y suspiros eran repetitivos entre ellos. Taehyung sintió como su abuelo se acomodaba en la cama improvisada, lo que fue una señal para Namjoon de apagar la televisión. Taehyung se acostó también.

"¿Apago la luz?" preguntó Namjoon en un susurro.

"Solo deja la de la lámpara" susurró el señor, apuntando una lámpara que Taehyung tenía sobre una mesita de madera.

"Vale" hizo lo pedido y luego se acostó junto a él.

El silencio se instaló en ellos, pero el señor Kim necesitaba hablar.

"Niños..."

"¿Sí?"

"¿Pueden abrazarme?" pide, siendo complacido tan rápido como Namjoon y Taehyung pueden; pasando un brazo por encima de su estómago. Recibieron un beso en la frente. "Creo que ya saben que va a pasar, ¿no?"

"Sí..." susurró el menor.

"Tienen que saber que en serio los amo," comienza "Les he dejado unos regalos para Navidad y tu cumpleaños Taehyung, cuando esto acabe puedes ir a mi casa por lo necesario."

"Nosotros también te amamos, abuelo" dijo Namjoon por ambos, con la voz quebradiza.

Los tres cerraron suavemente sus ojos, sus respiraciones volviéndose cada vez más pesadas mientras caían en el sueño, esperando inconscientes que todo pasara.

No saben bien a qué hora fue, pero Namjoon tuvo que despertar a las cuatro para ir al baño, cuando descubrió que solo podía escuchar la respiración de su hermano menor. Temblando, posó su mano debajo de la nariz de su abuelo, y luego colocó su mano oreja en su pecho, entonces, decidió hablarle a Taehyung.

"Taehyung..." dijo, volviendo a levantarse y acercándose a él, zarandeándolo un poco. "Tae..." dijo cuando el menor se despertó, encontrándose con sus ojos llenos de lágrimas a puntos de romper.

"¿Y-ya?" preguntó con un enorme dolor en el pecho.

Namjoon no podía decir nada, así que solo asintió con fuerza rompiendo a llorar y Taehyung se giró para encontrar a su abuelo sin moverse y sin respirar, pero con una expresión tranquila. Llevó sus manos hacia su pecho donde nada se movía, donde nada latía, donde nada existía y sintió un jalón en su cuerpo. Y el dolor fue tan parecido y a la vez diferente al que sintió con la muerte de su abuela, con la de Soonsim y la señora Han. No importaba quien fuera, mientras lo amara, siempre iba a sentirse desgarrado, como si no pudiese respirar. Iba a pasar, y eso su hermano y él lo sabían. Iba a pasar, iba a pasar. Y aun cuando lo sabes, o no lo sabes, duele porque no estás preparado emocionalmente para prepararte ante la pérdida de alguien tan importante en tu vida.

Se quedó sentando en las sábanas, apartando sus manos cuando la mirada comenzó a nublarse y no podía distinguir el cuerpo inerte de su abuelo. Sin poder evitarlo, soltó un jadeo que solo fue el preludio a la obra musical que su llanto y el de su hermano provocarían en ese lugar.

Namjoon lo abrazó por detrás, apretándolo fuertemente contra él, ambos destrozados.

Sin embargo, Taehyung tomó el celular como pudo y llamó a su padre, sin poder hablar realmente.

"¿Taehyung?" pero ni una sola respuesta más allá que un llanto fuerte y desconsolado. "Voy para allá, con la ambulancia, ustedes... ustedes solo no se muevan, ¿sí?"

Había pasado dos semanas desde la muerte y el entierro del señor Kim, dos semanas llenas de un vacío que Taehyung no quería y no iba a llenar más que con lágrimas. Nunca iba a ser fácil perder alguien, y jamás sería bonito, sean las circunstancias que sean, eso lo sabía a la perfección.

Nayoung había decidido quedarse a dormir durante esas últimas semanas en casa de su hijo menor pensando que sería mejor apoyarse entre ambos. Namjoon se había negado a quedarse por razones que no eran no querer estar con ellos, simplemente él lidió de otra forma con el dolor y la ira, porque él también se sentía furioso con una única persona.

Jungkook se había quedado también, pero ciertos días regresaba a casa cuando Jinyoung no podía cuidar a Hoseok y su mamá se la pasaba trabajando.

Ese día, Taehyung se sentía con pocas ganas de hacer algo; llevaba un tiempo así, simplemente acostado en su cama, solo cerrando los ojos y creyendo que Namjoon estaría con Jaeshi trabajando en la demanda que Kim Heemin iba a recibir por parte de ellos. Luego del almuerzo, Jungkook le dijo que tendría que ir a echarle un ojo a Hoseok y que probablemente lo traería junto a Soonsim para alegrarlo un rato, mas Taehyung se negó, prometiendo que iría a verlos mañana.

"Volveré antes de cena" él dice, mientras toma su mochila. Nayoung lo mira desde la cocina, sonriéndole de forma dulce.

"Te esperaremos. Ten cuidado al cruzar la calle" pide y Jungkook asiente, saliendo de casa. Nayoung se gira para abrir el refrigerador y tomar un aperitivo cuando la puerta es llamada cinco minutos después. "¿Uhm? ¿Jungkook olvidó algo?"

Ella camina hacia la puerta, con sus tacones resonando sobre el suelo. Se detiene un momento, pensando en que Jungkook tiene su propia llave, y mira hacia un lado de la puerta donde hay un colgador de llaves, encontrando que solo se encuentra la de Taehyung.

Abre la boca para preguntar quien es, antes de revisar por el ojo de pescado. Sin embargo, antes de que su voz pueda pronunciar algo, escucha un disparo que da en el pomo de la puerta, arruinándolo. Grita, echándose para atrás, aturdida mientras la puerta se abre y Kim Heemin entra con el rostro rojo, el cabello despeinado, sudado y los ojos sin enfocarse en una sola cosa.

Porque cuando le dispara, no es certero y, aunque es horriblemente doloroso, la bala roza con su muslo, haciéndole sangrar y tambalear.

Nayoung cae al suelo, gritando por el dolor, y Heemin vuelve a elevar la pistola, tratando de apuntar a su cabeza, pero todo en él está temblando por la mezcla de la frustración, la ira y el alcohol.

"Heemin"

Asustado por esa voz, dispara al aire, dando con la parte trasera del respaldo del sofá largo del juego de sillones y luego busca con la mirada a Taehyung, el dueño de la voz, quien sostiene una pistola, posicionado desde el inicio de las escaleras.

"¿Qué haces en mi casa?"

"¡Devuélveme mi empresa, malnacido! ¡Devuélveme mi dinero, hijo de puta!" le gritó encolarizado. "¿¡Te crees más inteligente que yo!? ¡Ojalá tu abuelo se pudra en el infierno!"

"No te atrevas a hablar así de mi abuelo" Taehyung pide, sintiendo que su cuerpo en cualquier momento va a colapsar porque la situación es demasiado para él observando a su madre con la pierna herida desangrando y escuchándola llorar.

"¡¿No te gusta?! ¡Que se pudran todos, Taehyung! ¡Tu abuelo, la mendiga esa, tu perra, el tío de ese idiota que fue tu novio! ¡No me arrepiento! ¡Ellos no valen absolutamente nada! ¡¿Sabes cuanto dudé en matarlos? ¡Nada! ¡Porque ellos no valen ni un centavo! ¡Devuélveme mi puta empresa, Kim-!"

Nayoung gritó cuando escuchó otra bala, y se cubrió los oídos, gritando despavorida. Las lágrimas no dejaron de salir de ella, junto al dolor que le provocaba sentir su herida palpitando. Sin embargo, el hecho de que el cuerpo de Heemin cayera frente a sus ojos de una forma floja y apagada frente a ella, escuchando el impacto de su cuerpo y el cráneo sobre el suelo fue lo que la dejó en shock por varios minutos.

Su sangre se combinó con la que comenzó a brotar de la cabeza de Heemin, con el arma al lado, con el cuerpo exánime. Nayoung solo pudo abrir su boca sin poder soltar nada de ella, y todo a su alrededor de pronto fue caos.

Al parecer, ante el sonido de los cuatro disparos, los vecinos habían llamado a la policía, Nayoung no sabe cuanto tiempo pasó mirando el cuerpo de Heemin, tampoco pudo notar como Taehyung caía al suelo sintiendo que moría por lo que acababa de hacer, sujetando su pecho y pidiendo perdón a gritos.

La policía entró con las armas apuntando, encontrando la escena demasiado fresca y dejaron entrar a los paramédicos para que tomaran a Nayoung, pidiéndole a Taehyung que se alejara del arma, quien solo siguió pidiendo perdón, alzando las manos, demostrando que no había sido con malas intenciones y que no iba a luchar contra ellos.

Una vez en la ambulancia, Nayoung regresó en sí, sujetándose del paramédico en cuanto observó a Taehyung salir escoltado, sentándolo en la patrulla y poniéndole las esposas. Los vecinos habían salido de para checar, asustados.

"¡No, no!" gritó ella desesperada, queriendo ir con él. "¡Mi hijo no ha hecho nada malo! ¡Fue para protegerme!"

Los paramédicos trataron de calmarla, pero Nayoung siguió gritando la verdad esperando que alguien les creyera.

Taehyung estaba en un estado tan vulnerable y de conmoción que no era consciente de que iba a ser arrestado. Sin embargo, parecía que la vida iba a estar a favor de él de nuevo, porque un vecino se adelantó, acercándose al policía junto a un perro.

"¡Señor! ¡Un hombre entró a la fuerza a la casa! ¡Yo lo vi! Yo estaba paseando a mi perro y él llegó en ese auto," dijo apuntando un auto frente a la casa de Taehyung "¿qué fue de él? ¿lo atraparon?"

Los investigadores se miraron entre ellos antes de mirar a Taehyung, inclinándose uno para hablarle.

"Oye, ¿qué ha pasado?"

"¡Tenemos cámaras!" grita Nayoung llorando desesperada, recibiendo una mirada por parte de la policía. "¡Hay cámaras dentro y fuera de la casa! ¡No se lleven a mi hijo, por favor!"

"Hay que checar las cámaras" dice otro policía. "No suelten al chico, pero súbanlo en la ambulancia, está conmocionado."

"Bien. Vamos."

Pa los que leyeron la versión anterior seguro que este cambio fue bastante fuerte, pero tenía ganas de cambiarle algo así super grande a SANC. Por cierto, ya nos falta poco para el final.

En fin, los amo abejitas.