【Eva x Afrodita x Hrist】

Pedido por: sigurd-sedric

Gracias por pedir, si hay algo que no te gusta de este Oneshot, dímelo y lo corregiré.

Advertencia: Mención de desnudos y muerte, amor lesbico, poliamor, etc.

Ubicación: Coliseo donde se realiza el Ragnarok.

Contenido: Romántico y triste (pérdida de un ser querido, romance poliamoroso lesbico).

Sin más, ¡Disfruten!

Era algo muy cruel, pero el mal augurio le jugó en contra y se vió sometido a una indecorosa situación.

Adán estaba desesperado, sentía una horrible sensación; un mal presagio que le deparaba su fallecimiento a manos del dios supremo del Olimpo.

Temía lo que pasaría y por lo tanto, se mío metido en un extraño deseo.

No podía creer lo que estaba a punto de realizar, pero con todo el coraje se vió buscando a la seductora e impresionante Afrodita, quién no se esperaba verlo antes de la pelea.

Ella examinó su rostro, parecía que tenía una molestia y que quería desatarla en ella. Pestañeo dos veces, dispuesta a escuchar lo que este valeroso hombre le diría.

━⁠¿Qué desea codicioso mortal? ⁠━⁠Levantó una ceja, sabiendo que iba a hacerle una petición.

Tenía la idea de que iba a proponerle algo, lo cual se le hizo muy curioso y espero a que el mortal tuviera el coraje de responderle.

Adán solo suspiró y lo dijo con un tono medio tranquilo.

━⁠En caso donde yo no esté... necesito que cuide y proteja mi esposa.

¡Vaya! La rubia no se esperaba eso.

¿Esto era lo que se consideraba como una broma?, ¿en serio el protector y en ocasiones celoso Adán quería que alguien como ella cuidará a su mujer?

Parece que el mortal acaba de enloquecer, pero él se veía demasiado cuerdo y serio para hacer algo así por burla.

Era una idea demasiado arriesgada a su parecer.

Afrodita puso una mano su propio mentón, meditando en silencio, debatiéndose mentalmente si debía considerar hacerlo o no...

Era una simple locura, pedirle a alguien del bando oponente a proteger algo que tu darías la vida sin pensarlo dos veces...

La diosa del amor solo miraba sus profundos ojos azules, notando que él quería romper a llorar. Eso no era nada fácil de asimilar y veía todo ese cariño que envolvía al par de mortales.

Con mucha pena y lastima, se compadeció de Adán, prometiendo que sí en el hipotético caso de que él muera, la diosa velaría por el bienestar de la viuda.

『𝘌𝘯 𝘭𝘢 𝘴𝘦𝘨𝘶𝘯𝘥𝘢 𝘣𝘢𝘵𝘢𝘭𝘭𝘢 𝘥𝘦𝘭 𝘙𝘢𝘨𝘯𝘢𝘳𝘰𝘬』

Adán estaba dándole una gran pelea a Zeus. Todos estaban expectantes a ello.

Fue impresionante como lo golpeaba a la velocidad de la luz.

Para desgracia de la dulce humana, su esposo quedó como una estatua y con sus ojos venosos, viendo hacia el cielo.

El alma de Reginleif salió de la manopla y cuando se hicieron polvo cósmico para el cielo, ya sabían que todo había acabado.

El público hizo saber su pésame, vitoriando el nombre del fallecido y Zeus admitió que fue un honor haber peleado con el hombre.

A Afrodita le dió pesar que el humano muriera y es que, desde unos kilómetros a las distancia, veía a la viuda llorar como magdalena, con sus hijos a un lado.

Cuando los dioses se disolvieron, la diosa aprovechó a ir a buscar a Eva, pero primero...

━⁠Diosa Afrodita ━⁠La rubia fue detenida por esa voz y miró a la valkirya mayor━⁠. Antes de que se vaya.

━⁠No tengo tiempo para tus sandeces, Brunhilde ━⁠Comentó poco interesada de lo que sea que la azabache le vaya a decir━⁠. ¿Y bien, qué se le ofrece?

━⁠¿No piensa reclamar el premio de la apuesta? ━⁠Su rostro serio no denotaba ningún sentimiento a lo que estaba apunto de hacer.

━⁠¿Podría recordarme? ━⁠Por más que quisiera no recordaba eso.

Brunhilde frustrada solo hizo una mueca y volvió a expresarse.

━⁠Que sí otro humano perdía ⁠━⁠Decía forzadamente, ya que quería gritar y solo pudo apretar los dientes━⁠. Usted se queda con... la hermana Hrist.

La mencionada hizo gesto sorprendido y Afrodita por fin pudo recordar el resto de la apuesta.

Hace unos días, Brunhilde fanfarroneó con que ellos eran superiores a los dioses y que los iban a acabar por juiciosos, la diosa del amor no estuvo de acuerdo, por lo que le dió un llamado de atención.

La valkirya envés de ser consciente de sus acciones, prefirió seguir burlándose y hasta haciendo una apuesta, que fue aceptada por Afrodita. Esta consiste en que si un dios gana la siguiente pelea, la azabache le daría una de sus hermanas a la rubia, que aceptó sin más.

Mientras la griega recordaba todo eso, Hrist le gritoneaba a su hermana mayor.

¿Qué clase de "premio doble" era este?

━⁠¡Eres una maldita Brunhilde!

━⁠No es para tanto ━⁠Intentó razonar con la pelimorada, pero le era imposible.

━⁠¿Qué dices? ¡Literalmente me apostaste! y para tu descaro ¡perdiste! ━⁠Quería arrancarle la cabeza ahí mismo.

━⁠Vale Brunhilde, si ella no quiere, no tienes porque obligarla ━⁠Comentó Afrodita, con ganas de irse.

Pero la antes mencionada "tiene que cumplir con sus promesas" y dejó a Hrist, a manos de la rubia.

━⁠Te odio ━⁠Expresó con rabia, mientras se junta con la rubia━⁠. ¡Espero te mueras!

Se fue enojada, dejando a una Brunhilde mirando al suelo muy pensativa, Geir viendo con tristeza a su hermana y a Afrodita que miró la aguerrida muchacha a su carga.

━⁠¿Mandaste al diablo a tu hermana, la valkiria que quiere "salvar a la humanidad"? Nada mal niña, nada mal ━⁠Por lo alto, para que la azabache lo escuchase y comenzó a caminar para seguir a Hrist━⁠. ¿Qué será de nosotras ahora?

Hrist se puso a la par de la diosa y solo tenía la cabeza cabizbaja.

Afrodita le dió su espacio y siguió caminado hasta que llegó donde los humanos reposan.

Escuchó unos lloriqueos y supo que era la persona a la que buscaba.

━⁠¿Qué estamos haciendo aquí? ━⁠Preguntó Hrist━⁠. ¿Qué tramas diosa-?

━⁠¡Shhh! Debo hablar con alguien ━⁠La calló y buscó entre el público━⁠. Si, si humanos, estoy entre ustedes, pero ¿dónde está la madre de la humanidad?

Con eso muchos abrieron la boca.

¿Para qué buscaba a Eva?

La mencionada apareció y con lágrimas en los ojos, se acercó a la diosa.

━⁠¿Diosa Afrodita? ¿Qué hace aquí?

━⁠Querida, se que estás confundida por mi presencia, pero si vienes conmigo, verás una "mejor explicación" ━⁠La toma de la mano y se la lleva, a pesar de que a sus hijos no les gustó.

━¡Síguenos valkiria!

Eva miró a Hrist, quién le devolvió la mirada desconcertada.

¿Este día podría empeorar?

Afrodita sabía que ambas estaban confundidas, por lo que se detuvo y pensó en una buena explicación.

━⁠Pfff... bueno. Se que ninguna entiende como llegó aquí, pero les explicaré a continuación ⁠━⁠Para y mira a la rubia━⁠. Señorita Eva, su esposo, antes de fallecer, me pidió que viese por su bienestar, en el hipotético caso que de que fallecieron y como ese fue el caso...

La mirada de la humana se empezó a nublar, las lágrimas amenazaban con caer pronto.

Afrodita no quería ser dura, pero seamos realistas, eso ocurrió y no pueden pasarlo de largo.

━⁠De algún modo, él presentía su final ━⁠Dedujo Hrist, su comentario fue escuchado por las demás.

━⁠Hasta en m-momentos a-así, él era t-tan p-preocupado ━⁠Dijo la viuda con voz apagada.

━⁠Era un buen hombre ━⁠Admitió la diosa, puesto que vió como los humanos recitaban cánticos de apoyo al rubio.

Eso fue colosal como fantaseoso.

Pero tuvo la oportunidad de verlo, en sus ojos profundos y admirar a los mortales por todo lo que hacían.

━⁠Son una especie interesante ━⁠Pensó rápidamente.

La pelimorado consoló a la mortal y la diosa también tenía que darle alguna explicación.

━⁠Hrist, temo comentarle, que su hermana vino a mí y a la región de dioses, con la ímpetu desgañosa de darnos cizaña ━⁠Admitió Afrodita━⁠. Me harté de su actitud y la muy altanera me ofreció una apuesta, donde en ese momento acepté, sin hacerle mucho caso. Honestamente solo quería que se callase.

La valkirya escuchó todo y en la última parte, solo una risita.

━⁠En fin, como ya saben lo que ocurrió ━⁠Queriendo evitar recordar la muerte de Adán━⁠. La frívola de tu hermana, me ofreció tu mano y yo ahora prometo verlar por tu bienestar a ti también.

Hrist cruzó los brazos.

No esperaba un trato justo, pero puede dudar y preguntar ahora mismo.

━⁠¿Y por qué nosotras tendríamos que confiar en ti? ━⁠Preguntó muy desconfiada, a lo que Eva se une, a favor de la valkirya.

━⁠Hrist tiene razón, ¿usted no odia a la humanidad? ━⁠Confundida, por la reacción de la diosa, que reía mucho al escuchar esas palabras.

━⁠Jajaja~ no ━⁠━⁠. No odio a los humanos. Literalmente tuve romances con mortales, incluso me llegué a enamorar de ellos.

━⁠Lo que pasa, es que estoy descontenta por el cómo permanece este planeta y las arraigadas situaciones en las que se ven sometidos; como la contaminación en los mares o el maltrato hacia los animales ━⁠Frunce el ceño, recordando todas las noticias que había visto de siglos pasados hasta en la actualidad━⁠. Aunque no me gusta mucho como se comportan algunos barbajanes, no diría que los odio, más bien, yo como una diosa del amor, debo interceder en los romances y apasionantes parejas que existen en todo el mundo.

Su voz seria se volvió más relajada y encantadora para cualquier oído que pudiese escucharle relatar su penar.

━⁠No me gustan los altaneros, esos que van a presumir sobre como "son los mejores en cualquier cosa que este otro tipo", personas como tu hermana en sí y prefiero evitar coexistir en un sitio donde hayan muchos como ella.

━⁠En eso tiene razón ━⁠Dándole el punto, pues Brunhilde no era una fichita━⁠. ¿Está usted segura de que quiere que nosotras permanezcamos a su lado?

No podía creerlo, pero la diosa no parecía una cabeza hueca como su hermana murmuraba.

Parecía ser consciente y muy culta sobre diversos temas que desea conocer.

¿Estaba ilusionandose?

Quizás, pero aún así, se preguntaba sí Eva accedería ante la ayuda que la diosa les proporcionaría.

━⁠Yo con mucho acepto y puedo llevarlas a mi sitio hermoso en mi país natal, Chipre ━⁠Ruiseña aseguró con toda la amabilidad que puedes tener━⁠. ¿Vendrán conmigo?

Afrodita les estaba ofreciendo de irse por caminos separados y ser libres de ella, pero por alguna razón ninguna quería eso.

━⁠Si mi esposo me confío su vida a usted, es porque tenía la certeza de algo especial en usted ━⁠Comentó Eva, dándole una sonrisa a la rubia━⁠. Yo si quiero ir.

━⁠Yo también ━⁠Respondió la pelimorada━⁠. No quiero ver la estúpida cara de Brunhilde por mucho tiempo.

━⁠Fu-fu-fu~ entonces, acompañenme que yo os juró que daré toda mi protección mientras estén a mi cargado ━⁠Les agarró de la mano y se las llevó en santiamén.

Cuando llegaron, todo el lugar era lindo, bueno no es lindo, es ¡Hermoso y fascinante!

Muy alucinante también.

Había una gran jardinera llena de flores como tulipanes, claveles, rosas y hasta girasoles, una florecida que ocupaban distintas épocas para florecer, pero como era el lugar por excelencia de la diosa de la belleza, la tierra le otorgaba a la rubia la posibilidad de ver cada flor cuando ella quisiese.

Animalitos y artesanías ocupaban gran parte del espacio del lugar.

Había un aposento con ninfas, que ¡estaban desnudas o con poca ropa en general!

Y es que, si no fue por el cabello u otro factor, podrían ver las intimidades de esas chicas.

━⁠¿Y qué les parece? ━⁠Preguntó con orgullo.

━⁠Tan glorioso como si fuese un sueño ━⁠Dijo Eva sorprendida de ver tanta lindura.

━⁠Me alegra que sea de sus gustos y para que se acomoden mejor, ¿podrían quitarse las prendas de vestir? ━⁠Las mujeres solo abrieron los ojos de par en par━⁠. ¿Qué? Aquí nos juzgamos y el lema es que estés como estés, siéntete en la comodidad de la no vergüenzas ━⁠Se sonrojó un poco.

Eva se quitó la hojas que usaba de ropa y Hrist, también se quitó su vestimenta, eso sí, se sentían avergonzadas por estar totalmente desnudas frente la mirada de la diosa rubia, quién también se quitó las telas de su vestido.

Para quitarles esa incomodidad, Afrodita les invitó a bañar en un río de agua cristalina.

Hrist accedió tomando la mano de la rubia, pero Eva no estaba impulsada en hacerlo.

━⁠¿Vienes?

━⁠Es que, yo no me siento con muy bien con todo esto.

Afrodita lo entendió y con una voz tranquila, le hizo un comentario.

━⁠Si no deseas participar, esta bien no te obligare, pero si lo intentas me aseguraría de que la pasarás bien ━⁠Le ofreció la mano.

Algo que la diosa no era consciente, era de que gracias al atardecer que se estaba formando, hizo que cuando Eva la mirara, viera toda la belleza que Afrodita tenía, sin esforzarse.

Sonrojada por ello, la mortal le agarró de la mano y se fueron al río.

Será el comienzo de una bonita relación, llena de amor, bienestar y protección.

【𝘍𝘪𝘯】

Este es mi banner/separador favorito, me encantó hacerlo y me quedó bien bonito.

El escrito me gusto mucho y más en las partes finales de la historia.

Gracias a sigurd-sedric por hacer tu pedido y espero te haya gustado todo.

En fin, ¡me despido!