Mis ojos están en ti
Mandar al carajo todo lo establecido jamás se podía sentir más bien en ese momento.
Se acercó lo suficiente para que sus cuerpos estuviesen tan pegados como fuese posible, tan conscientes del calor que estos emanaban en contacto con el otro.
Sus labios rozaron delicadamente la curvatura de su cuello, mientras su cálida respiración dejaba su rastro sobre la piel que tanto estaba deseando probar en ese momento, que tanto le estaba haciendo perder la cordura.
—Mis padres no van a llegar — aclaró con impaciencia y un tono juguetón—
La risa ronquita del mayor había atravesado por completo todo su cuerpo, se había escuchado tan erótico y tan sensual en que aquel sonido salía de esos labios que se moría por probar, aún con su inexperiencia necesitaba sentir su suavidad, que ese bello chico le mostrará como debía ser besado de forma correcta, que lo dominara y lo hiciera suyo de una vez por todas.
Taehyung giro su cuerpo para quedar frente al pelinegro y fijar sus ojos en los de el.
Sus brazos rodearon el cuello del contrario, mientras se ponía de puntillas para quedar a su altura, cosa que no conseguía, ya que Jungkook era considerablemente más alto y su contextura era más grande en todo sentido.
—Deberias besarme —hablo disimulando lo nervioso que estaba— ¿No quieres hacerlo Jungkook?
Lo sostuvo con firmeza y apegó descaradamente sus cuerpos, haciendo que se sintieran por completo, que cada parte de su piel sintiera el calor que estaba desprendiendo y del que el responsable estaba tan convencido en hacerse cargo.
—No tienes idea todas las cosas que quiero hacerte Taehyung —mordió su mandibula— ¿Podrás soportar todo lo que quiero darte?
—Puedes hacer lo que quieras conmigo Jungkook, te prometo que mi padre no se enterará, será nuestro pequeño secreto — susurró sobre sus labios.
El mayor no le permitió alejarse luego de eso y sostuvo su nuca para juntar sus labios en un beso desesperado, sintiendose sediento de obtener hasta el último de los alientos de ese chico que lo tenía tan perdido en sus encantos.
Las manos comenzaron a ansiosas a querer arrancar sus ropas y verse en completa desnudez, necesitaban tocar la piel libremente, sentir la textura, probar su sabor y grabar cada sensación solo para ellos.
Sin despegar sus labios avanzaron hacia el interior de la casa, dónde no pudieron esperar llegar hasta el dormitorio, cayendo entre risas sobre el sofá y continuando con su desenfreno sin detenerse ni un solo segundo.
—Abre tus piernas para mí Taehyung, déjame internarse en ellas y darte todo lo que estoy ansiando —pidió—
Sin pensarlo la petición fue acatada y el pelinegro no perdió oportunidad de internarse entre ellas, rozando desacradamente su intimidad endurecida sobre la contraria que se encontraba en las mismas condiciones.
El cuerpo de Taehyung temblaba levemente, el nerviosismo lo había invadido, no quería decepcionar a Jungkook, no quería ser solo un acoston, quería que el pelinegro quisiera quedarse después de ello, porque estaba seguro que en el mismo momento que le entregara su cuerpo, entregaba junto a el su corazón.
Los labios de Jungkook iban de un lado a otro sobre su piel, haciéndolo jadear y enterrar sus uñas sobre la blanca espalda que estaba seguro tendría sus marcas al día siguiente.
Su rostro decendio hasta la intimidad de Taehyung, la cual fue ignorada mientras sus piernas eran elevadas dejando así su entrada expuesta ante los ojos del contrario, quien lamía sus labios con lujuria mientras la observaba antes de acercarlo a ella sacando su lengua y pasándola lacivamente sobre la zona.
Sus muslos eran sostenidos firmemente mientras la boca experta trabajaba en su intimidad, preparándola a su antojo, metiendo y sacando su lengua del lugar como si estuviera follandolo con ella.
Taehyung jalaba sus cabellos desesperado, sintiéndose sin dominio de su propio cuerpo que estaba siendo poseído tan exquisitamente que sentía que podría correrse en cualquier momento.
—Aun no bebé, quiero que te corras mientras estoy dentro de ti, follandote como es debido, como merece ser follado alguien como tú, con deseo, con dedicación y tan fuerte que los vecinos podrán escuchar tus gemidos — acarició el abdomen del peliazul con suavidad— ¿Quieres que me entierre en ti Taehyung? ¿Puedo follarte? —casi Suplicó.
Sabía que el contrario quería lo mismo pero había algo en escuchar a Taehyung pidiéndole que lo hiciera, que hacía su miembro palpitar de exitacion y anticipación por cumplir cada una de esas palabras que había profesado.
—Hazlo — dijo mientras mordía fuertemente sus labios — Follame de una vez Jungkook — pidió —
El pelinegro sonrió ladino antes de tomar ubicación nuevamente entre sus piernas y besarlo profundamente mientras su intimidad se abria paso al interior del chico que lo apretaba tan deliciosamente que estaba seguro que ese encuentro no duraria tanto como quisiera.
—Dios Cariño~ — Gimió ronco— me apretas tan bien, tan rico.
Los gemidos de Taehyung no se hicieron esperar cuando Jungkook comenzó sus movimientos profundos y certeros, llegando tan dentro como le fuese posible, tomando cada parte de sus ser.
Sus cuerpos sudaban y sus gargantas dolían por cada gemido que salía de su interior cuando en cada embiste sus cuerpos se unían de una forma gloriosa.
—Eres mío Taehyung, me perteneces desde ahora ahh~~ no permitas que nadie profane este cuerpo, solo yo puedo tocarte y follarte de esta manera.
Sonaba tan demandante y tan posesivo que el peliazul solo podía gemir y asentir efusivamente.
Su garganta se había cerrado por completo, ni una palabra lograba salir de sus labios que habían Sido presos de los gemidos y jadeos.
Su cuerpo temblaba, las sensaciones eran tan abrumadoras que el orgasmo no tardó en invadirlo y apoderarse por completo de el, dejando salir su escencia abundantemente entre ambos cuerpos mientras sentía al pelinegro penetrarlo sin descanso buscando su propia liberación, sintiendo un segundo orgasmo que se hacía presente aun si terminar de recuperarse del primero.
Está vez ambos alcanzaron el climax juntos mientras caían exaustos sobre el sofá, tratando de regular sus respiraciones y sonriendo por el desastre que habían hecho.
—Tu padre va a matarme Tae.
—No lo sabrá.
—Lo sabrá en algún momento, que eres mío, no fue una declaración por el calor, es lo que realmente quiero.
—¿De que hablas? —pregunto con sus ojos brillantes.
— Serás mi novio bebé, ni el diablo podrá separarme de ti jamás — hablo serio —
Taehyung asíntio mientras se refugiaba en su pecho completamente feliz de que Jungkook quisiera estar con el, se sentía a gusto y muy protegido entre sus brazos.
Disfrutaría todo lo que estaba pasando, no había impedimento para que ellos estuviesen juntos, más que tal vez un regaño de su padre.
"¿No podía ser tan malo verdad?"
Hay bebe, si supieras 😔
Espero sus comentarios, gracias por leer.
🌸 ErLith_ 🌸
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