Caía la noche, y de nuevo llovía, una lluvia fuerte y sin relámpagos, pero mas intensa que la primera, tanto que, Hans se dirijía hacia la tienda y Pedro no dudó en aparecer.

–Tu nunca llevas paraguas, eh– Le decía mientras lo llevaba con su paraguas
–Gracias, me estaba mojando mucho– Decía Hans con todo el frío en su cuerpo

No tardó mucho en despedirse de su amigo de la infancia, y luego partió para su casa, dónde allí recibía como siempre a su hijo y a su esposa.
Tras la mañana, el sol no tardo en salir, y de nuevo, el despertador se quejaba.

–Apaga eso– Decía Lorena con su voz dormida
Un par de golpes bastaron para lograr apagarla
–¿Cómo fue tu primer día de trabajo amor?– Le preguntaba mientras lo abrazaba cariñosamente por detrás
–Agotador
–Me imagino
–Tengo que irme– Cortaba con lo romántico– Hoy tengo que ir temprano
Lorena no dudó en levantarse y preparar el desayuno, un poco molesta por arruinar el momento

Mientras caían las 8 en punto, Hans en la puerta de su casa, se despide de su esposa y parte rumbo al trabajo. En su mente, no podía contener decirle toda la verdad, el no es un hombre de mentir, sabía que hoy partirían rumbo a Rusia y que quizás nadie vuelva a casa, pero lo que mas le dolía, era que no se pudo despedir de su hijo.
Ya en la puerta del edificio–Bueno, aquí de nuevo, tu puedes Hans– Se  motivaba a el mismo

–¡Hans!, Llegas tarde– Exclamaba Santino algo furioso–¿Cómo es que llegas siempre tarde si vives a unos metros de aquí?
–El... Despertador no sonaba– Intentaba meter una escusa
–Bueno no importa, la limusina está por llegar, prepárate que ya nos vamos

Algo sorprendido, Hans no pudo dejar de ver a sus compañeros, estaban vestidos de traje y corbata, simulando que esto sería una junta de negocios, la limusina no tardó en llegar, y los héroes no tardaron en subir. Era un lindo carro, repleto de luces y una mesa con bebidas alcohólicas

El viaje fue algo incómodo, nadie tenia tema de conversación y todos estaban callados, algo bueno para Hans, ya que no es un hombre de soltar muchas palabras.
Se puede escuchar que el auto frena cada vez más, ya estaban llegando al punto de partida

–Muchachos, bienvenidos al ¡SantinoBank!
–Pero esto no es un banco– Exclamaba Hans
–Tienes razón– Responde pensativo– Tendré que cambiarle el nombre, bueno no importa, entren
Santino se acercaba hacia la puerta, escribió un codigo de números y acto seguido se abrió la puerta

–Tengo muchos enemigos, sin la seguridad de este edificio quizás ya estaría muerto– Exclamó Santino

El edificio era gigante, en uno de los cuartos se encontraba una mesa rodeada de sillas muy modernas, Hans pudo notar que se encontraban 8 asientos con sus respectivos números, lo cuál le pareció un tanto ectraño, pero sabia que era un lugar donde se dictarán los problemas presentes
–Oh, no tenemos tiempo– Exclamaba mientras miraba su reloj– Todos al Helicóptero, ¡Ahora!

Rápidamente, se subieron todos al helicóptero, y sin más problemas, partieron rumbo a Rusia.
–Ese maldito me las pagará– Decía Santino con mucha furia en sus ojos
–Tranquilo, nosotros los venceremos– Trataba de tranquilizarlo Bárbara–Tenemos personas muy hábiles aquí
–Tienes razón, tendré que tranquilizarme– Dijo mientras se tomaba un tequila

–Así que tú estás aquí porque tienes algo que nosotros no, ¿Eh?– Preguntaba Zing–¿Qué es?
–Si supiera te lo diría– Respondía graciosamente Hans
–Eso es lo que dicen todos... Tú tienes algo
–Si, dime que es ese "algo" porque yo no lo tengo
–No es momento de charlar– Decía Fella muy seria– Rapzi, sabés que hacer, ¿Verdad?
–Si, me lo haz dicho miles de veces Fella– Respondía cansado
–Bien, ¿Y tú?– Preguntaba Fella hacia Stevan
–No necesito que nadie me de ordenes, sé lo que hago y nadie me obligará a nada– Respondió frío Stevan
–Vaya– Exclamaba Thin

Caía la noche, para Rusia, eran las 3 AM, horario justo para entrar en las instalaciones, cada uno llevaba una cucaracha en su oído, para escuchar las indicaciones de Bárbara y Santino

–Posicionado– Dijo Hans
–Posicionado– Dijo también Zing
–Localizado, dos francotiradores en 30° norte y sur, esto ya es serio– Decía Hans
–Siempre lo fue– Le respondió Zing
–Fella, Rapzi, Stevan, ¿Están en posición?
–En posición– Respondían los tres
–¿Thin y Sakari?
–En posición– Respondían
–Ok, Bárbara desactivará el sistema de seguridad en el subterráneo en 3..2..1 ¡Ahora!

Bárbara desactiva el sistema de seguridad por 30 segundos y Thin y Sakari entran en acción.

–Muy bien, ya estamos dentro– Murmuraba Thin
–Tenemos visitas– Le interrumpía Sakari
Se pudieron ver dos guardias yendo directamente hacia ellos con aspecto amenazante cuando, dos golpes de Thin son suficientes para vencerlos, uno en el estómago y otro en la cabeza
–Pontelo– Le decía Thin mientras le quitaba el uniforme a los guardias.

–Fella, por el primer piso, Bárbara desactivará el sistema de seguridad en 3..2..1.. Ahora

Fella fue directamente hacia los guardias, dos musculosos vigilando la puerta, cuando le preguntan si tiene pase, ella respondé–Оливер Петрок–
Rápidamente, los guardias la dejan pasar

–¿Desde cuándo sabe ruso?– Se preguntaba sorprendido Santino
–Lo mismo me pregunto– Le siguió Bárbara

–Todo está muy aburrido por aquí– Dijo Hans mientras colocaba el silenciador en su francotirador
–Es verdad, todo lo divertido se lo llevan ellos... Y nosotros aquí, a 300 metros de toda la acción– Respondió Zing–Bueno, para esto nos pagan.
–Franco detectado en 28° al norte
–De acuerdo, no disparen todavía– Decía Santino

–Vaya, aquí no hay más de 29-30 guardias
–Claro, si esta parte es el subterráneo– Le respondió Sakari a Thin
–Espera... hay dos guardias– Susurraba Thin
–Что ты будешь делать дня вечером?
–Я буду с жено– No pudieron terminar de charlar los guardias sin que un cuchillo le atraviese la garganta a cada uno, Sakari por un lado y Thin por el otro
–Dos muertos mas– Susurraba Thin mientras ocultaba los cuerpos
–Bueno, sigamos con la misión
Ya con el traje de guardias, infiltrados fueron hacia donde le indicaba Santino.

–Solicito para disparar– Decía Zing
–Denegado– Respondía Santino– Espera hasta que de la orden Zing

–Fella, ¿Te han detectado?
–Привет мой господин, no... todavia
–De acuerdo, ve al ascensor de tu izquierda y ve al cuarto piso
Fella le hace caso y cuando se encontraba en el ascensor rápidamente entraron cuatro hombres.

–Santino, ¿Hacia donde vamos?– Preguntaba desesperadamente Thin mientras avanzaba
–Sube las escaleras que están a tu izquierda– Le respondia Santino. Cuando un guarda los interrumpe
–¡¡злоумышленники!! (Intrusos)– Exclamaba el guardia mientras avisaba con un intercomunicador, dos segundos después Sakari lo atravesaba con su cuchillo
–Nos descubrieron– Gritaba Thin

De pronto, se activó una alarma fuerte, que cerraba todas las puertas y todos los ascensores dejaron de funcionar
Fella se encontraba en el piso 3 cuando se detuvo, en un abrir y cerrar de ojos, asesinó con un cuchillo a los 4 hombres que se encontraban en ese ascensor –Estoy atrapada– Le avisaba a Santino desesperada
Cuando un gran cuchillo atravesaba la puerta y abría el ascensor liberándola
–Esto no estaba en los planes, ¿Eh?– decía Rapzi con una sonrisa en su rostro
–Bien hecho, veo que han acabado con todos los del piso 3, ¿Verdad?– Preguntaba Fella
–Si, Stevan me ayudó un poco– Decía Rapzi mientras lo miraba todo ensangrentado

–Señor, se puede oír una fuerte alarma que suena por todo el edificio, permiso para disparar señor... ¿Santino?– Preguntaba Hans desesperado
–Se acabó, voy a disparar– Decía Zing mientras quitaba el silenciador
–No lo hagas, espera la orden– Respondía Hans
–¿Con que ese es tu "algo oculto" eh? ¿Seguir órdenes de un Italiano adinerado?
–Zing, no digas esas cosas
–Claro que si, tu tienes "esa cosa que nadie tiene" ¿Que puede ser? Quizás tu superpoder sea que sigues los órdenes al pie de la letra ¿Verdad?
–Zing, cálmate
–No me calmaré– Gritaba Zing mientras se levantaba
–Zing, acuéstate, te van a ver
–*Saca un arma y le apunta* creo que ya todos sabemos lo que sucederá luego de ésta misión...
–¿De qué hablas Zing?
–Dos francotiradores no caben aquí... Y como tú eres "especial" seguro se despedirán de mi
–Zing, estás delirando
–¡Silencio!– Gritaba Zing mientras le acercaba el arma en la cara –Es hora de que mueras
Cuando un disparo en el edificio lo distrae –¿Qué fue ese disparo?
Hans no dudó en levantarse y golpearlo
–Mi arma– Decía Zing mientras golpeaba fuertemente a Hans
–Eres un maldito traidor– Dijo Hans

Cuando le dió una fuerte patada y Zing se caía del edificio arrastrándo su francotirador con él, haciendo que el arma se dispare una vez que impactó contra el suelo
–¡Diablos!– Exclamaba Hans mientras de ocultaba–Santino lo siento, pero tendré que disparar– Dijo mientras apuntó con su francotirador y le disparó a los dos guardias del techo

–Hans, ¿Quién te dió el permiso de disparar?– Preguntaba Thin mientras disparaba a los guardias–Sakari, atrás tuyo– Decía mientras le daba un gran tiro en la cabeza
–Ya no quedan tantos
–Unos 6-7– Calculaba Sakari
–*Dispara* seis– Aseguraba Thin

–Oye Santino, estamos encerrado en el tercer piso... ¿Santino?– Decia Fella
–No responde, esta alarma interviene los intercomunicadores– Decía Stevan
–Tenemos que buscar unas escaleras para bajar al segundo piso
–Tienes razón Rapzi, Thin o Sakari deben estar en peligro– Decía Fella

–Ты умрешь– Decía uno de los guardias
–Si... Tú tambien– Respondía Thin sin saber lo que le decía
–Necesitamos ayuda– Avisaba Sakari por el intercomunicador
Cuando un guardia con una escopeta los sorprende por atrás –Время умирать– Decía
Cuando un disparo proveniente de un francotirador le atravesaba la cabeza –¿Están bien?– Preguntaba Hans
–Si, gracias– Respondía Thin
–Tenemos que ir al cuarto piso por afuera, es la única manera de llegar hacia el Ruso– Le decía Hans–Lo último que sé de Fella es que se quedó atrapada en un ascensor
–Creo que es la única manera, tendremos que ir antes que se escape por helicóptero– Le decía Sakari a Thin
–De acuerdo, ¡vamos!