Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

USA x Bolivia (UsBol)

Esto había pasado hace ya mucho tiempo atrás, mucho antes, eran en momentos como este en los cuales el menor apoyaba al estadounidense, por algún motivo ocurrió.

Era en esos tantos momentos políticos en los cuales el presidente del país,  solo quería dinero para irse a algún lado, como todo el tiempo, como siempre fue.

Pero para que ello ocurra debería de dar algo a cambio, para ello aquel presidente, mando al menor a los estados unidos, o más bien dicho se fue con él con el único propósito dinero.

Aunque para el menor el viaje fue largo, no le era grato la idea de ser utilizado solo por dinero, todos solo pedían eso, no sabia cuando tiempo más iba a aguantar estando con deudas, solo esperaba que no terminará mal.

-------

Al llegar, el primero en recibirlos fue el Norteamericano, que se encontraba con una gran sonrisa, saludando y muy tranquilo, como si nada malo pasara, claro que nada malo le iba a pasar a él, si tenia para él una semana completa para tener un tipo de esclavo o algo así, alguien que le obedecerá ante cualquier cosa.

-----

El primero día, fue de lo más extraño, se tendría que quedar en la casa del rubio, este para su suerte solo le pedía comida y nada más.

- Una pregunta - Hablo el rubio, mientras esperaba ver si el moreno respondía o solo ponía cara de que se cansaba a cada rato. - ¿Para qué traen, si después se van?. - la pregunta era extraña.

- A que te refieres. - dijo seco, no estaba muy alegre, aunque estaba sentado esperando a que la semana terminarse.

- Siempre que vienes, a la semana tu jefe se va. - le dijo, mientras comía rápido como siempre.

Para el moreno no sabia si el de lentes o era un poco despistado o estúpido, ya debería saber la razón de porque cada que iba siempre se iba o más bien escapaban muchos de sus jefes.

- Y ¿Porque? - le volvió a preguntar, el menor solo negó, mientras otra vez ponía cara de que le valía aquello, ya se sentía acostumbrado, sentía que pronto su deuda iba a terminar por los cielos, y terminaría comprado al final, porque no podía pagar deudas como aquellas. Tomo los platos y empezó a lavar, no pensaba responderle, ya era culpa del otro si no entendía.

Al terminar, ambos estaban ahí sin hacer nada, sentados en el patio trasero del rubio, Julio esperando alguna cosa que el otro pidiera, cruzado de brazos, mirando el día pasar de manera lenta.

- ¿Y por qué no te quedas aquí por dos semanas? Tal vez así no se vaya. - Julio pensando que él otro ya había acabo con ese tema, pero ahí estaba otra vez.

Suspiro pesado y le miro serio - Tú que crees que hacen cuando le das dinero a alguien que sólo quiere eso, dinero. - le dijo, tratando de hacer entender.

- Ah... - No respondió, más solo se quedo mirando delante, por mucho tiempo. Fue tanto el tiempo, que Julio pensó que ya el tema había acabado, y volvió a mirar delante, mientras la tarde caía, y se notaba el tono amarillento del cielo, sintió un peso en su hombro, era el Norteamericano que acababa de dormirse, el moreno suspiro, sabía que iba a costar mucho levantarlo o llevarlo al cuarto. Era demasiado pesado y no sólo en su peso, sino también en sueño.

- Oye! - le dijo golpeando suavemente la mejilla del otro, al ver que no despertaba, trataba de moverlo, no podía - Deberías hacer dieta. - Suspiro, buscando algo con que levantarlo, solo pensó en levantarlo o quedarse ahí con el otro par que no tenga frío. - Maldita sea. - Fue a la cocina, agarro agua en un vaso de agua, y fue donde el rubio - Oye! Despierta! Un fantasma! - y le tiro agua en la cara. Vio como el otro se levantó de golpe, y no sólo eso también asustado, dentro del moreno eso hacia sonreír de manera malvada, porque sabía de la debilidad del ojiazul.

Grito mucho, y rápidamente abrazo al menor, porque en su subconsciente había escuchando la palabra fantasma - Donde! - estaba muy asustado. Mientras que Julio trataba de apartarlo, porque le estaba asfixiando.

- Apártate de mi. - trataba de empujarlo, por suerte le escucho y se apartó - Mejor ve a dormir antes de que venga. - le dijo, y sin pensando el rubio corrió a su cuarto, para el moreno ya sabia que tenia que hacer, buscar un vaso de leche caliente, ir al cuarto del norteamericano, decirle que se vaya a bañar y comportarse como si fuera su madre.

Espero y como siempre el rubio se baño, y tomó su vaso de leche, para Julio eso era suficiente ya podía ir a su cuarto  descansar, aunque tenía ganas de bañarse, estuvo un buen rato ahí, tratando de relajarse, mirando el techo.

Salio y se puso ropa con la cual dormiría, Apago la luz y se echó en su cama, iba a dormir hasta que escucho la puerta abrirse, y dijo el moreno - Que quieres Alfred - Sabía muy bien que era él.

- Puedo dormí aquí - Y fue ahí donde el menor se preguntó de como fue que Inglaterra crió al niño - Está bien - dijo haciéndose  un lado para dejar que el otro se eche, no tardó mucho en escuchar que el rubio termino dormido, mientras que el moreno, se sentía incómodo dormir así, el preferiría dormir solo, y peor aún cuando el rubio le abrazo como si de un peluche se tratara.

- No otra vez... - dijo, sintiendo que no dormiría bien en toda la noche. Aunque para sorpresa suya fue cuando escucho al norteamericano susurras entre sueños, no entendía muy bien que decía, porque eran palabras que no se entendían. Esa semana sería muy agotadora, demasiada.

Para el día siguiente el moreno se levantó y lo primero que vio fueron los ojos del otro muy abiertos, eso asustaba no estaba acostumbrado a ello - Buenos días - Dijo tan alegre el Norteamericano.

Para Julio era el día que iba a empezar mal - Buenos días - Dijo desganado, solo quería dormir más, sin que nadie estuviera estuviera a su lado.

- Gracias - fueron las palabras del rubio, sin entender el moreno solo le miro para que le explicará - Gracias por dejarme dormir contigo. - dijo, para luego acurrucarse muy cerca de julio - Hace tiempo que no hago esto. - Suspiro no sabia el porque, y tampoco le importaba al moreno - Y si salimos hoy. - dijo aun emocionado, hay muchas cosas que hacer.

Julio, sintió que esto era peor que cuidar a un niño menor de edad - Son las cinco de la madrugada, a donde vamos a salir a esta hora.

- No se - Dijo poniéndose nervioso el rubio, para Julio esto era un castigo, como lidiar con un niño con hiperactividad.

- Es muy temprano, mejor, porque no dormimos y punto final. - Fue lo que le dijo, esperando a que acepte.

- Está bien, pero yo me quedo aquí - Para el moreno esa no era su idea. - Además me gustaría estar así contigo. - Dijo volviendo a asfixiar al menor.

- Me asfixias - le dijo - Bueno, esta bien duerme aquí, pero no te me apagues mucho.

Dicho eso el rubio obedeció, y volvieron a dormir, esperando a que sea un poco más de mañanita, aunque de todas formas ambos terminaron abrazados durmiendo.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro