-¿Qué te paso?- veo como James se sienta a mi lado ya que nos encontrábamos en la cafetería de la universidad.

-Tu me besaste- le digo mirándolo mal, y si, gracias a que bese a James había despertado con alergia por todo mi cuerpo debido a que el había comido sushi.

-Eso es imposible- dice ahora el mirando me mal y al mismo tiempo ofendido.

-Tu comiste sushi.

-Yo no te dije que me besaras-me quedó mirándolo sería por lo cual este evita mi mirada mirando hacia otro lado.

-Y no lo volveré a hacer- le digo de un modo ofendido por lo cual el vuelve a mirar en mi dirección.

-¿De verdad?- pregunta en un tono triste mientras toca las pequeñas roncha que se encontraban en mi piel.

-Si- digo mientras tomo un poco del refresco con el que el había llegado.

-Pues en este momento me estas besando indirectamente- dice señalando el vaso del cual había tomado- pero lo haré más directo- toma mis mejillas y deposita un beso rápido en mis labios, me limpio para ver su reacción y este frunce el ceño.

-¿Qué?- le digo con una sonrisa burlona.

-No hagas eso- dice en un tono triste- a mí me parece que te ves igual de hermosa que siempre aún con esa alergia.

Y mi corazón prácticamente se aceleró con esas simples palabras, aunque lo único que hacía James últimamente era hacerme cumplidos el hecho de que lo hiciera cuando mi cara estaba he ha un desastre hacia que mi corazón quisiera salirse de su lugar.

-Solo lo dice para que no limpie tus babas- le digo reposando mi cabeza sobre la mesa en la que nos encontrábamos.

-Claro que no, bueno, en parte si- dice rascándose un poco la nuca- pero debes creerme que para mí eres la persona más hermosa.

- Ahí viene tú amiga- le digo viendo como una chica se acerca a nuestra mesa y estaba segura de que no era para mi.

-Stacy- dice el mirando a la chica y claramente yo estaba prestando demasiado atención a todo lo que estaba por suceder.

-Quien te crees para cambiarme por esta cara de volcán- abro ligeramente mi boca, realmente creía que esto sucedía solo en el colegio pero al parecer en la universidad aún había personas que peleaban por chicos y pues yo no iba a pelear por James.

-Pues, no la trates así, además estoy seguro de que no somos nada, ahora, déjanos estar tranquilos disfrutando de esta bebida- le da la espalda y me mira con una sonrisa la cual respondo un poco incómoda mientras veo como la chica lo ve.

-Con que me veo hermosa- suelto una pequeña patada por debajo de la mesa- mentiroso.

-Eres hermosa- dice el- Amy, ¿Cierto que es hermosa?- dice señalándome a mi amiga la cual había llegado acompañada de Evan.

-Es como una obra de arte- hace unos movimientos extraños haciéndome reír.

-Los dos son unos mentiroso.

-Tienes razón, con eso que tienes en la cara se arruina tu belleza- Evan da un mordisco a su sanduche como si no hubiera dicho nada que lastimara mis sentimientos.

-Eres un idiota- le digo haciendo un puchero- sé cómo ellos y miénteme solo por hoy.

-Eres un obra de arte Ely- hace los mismos movimientos que Amy y vuelvo a reír.

-Gracias por sus lindos comentarios, debo ir a clase- me despido con una sonrisa, empiezo a caminar a la salida pero un grito me detiene.

-Hey guapa, espérame- Jacob pasa su brazo por mis hombros y yo suelto una risa.

-¿Tambien vienes a darme cumplidos porque tengo la cara así?- le pregunto burlona.

-Claro que no, en realidad si eres hermosa.

-Le serás infiel a tu novio conmigo- le guiño un ojo.

-Te dije que lo sería si cambiabas tu aparato reproductor- suelta una risa.

-Exiges mucho, hombre- palmeó su espalda- nunca te agradecí por conseguirme trabajo, además, tu novio es genial.

-Siempre que necesites uno, búscame- besa mi mejilla.

-lo hare- le doy una sonrisa y ambos entramos al salón de clase.

La. Made paso de una forma rápida, además de eso el profesor nos había avisado que terminaría un poco más temprano debido a algunos asuntos que debía resolver, me levanté de mi escritorio y camine a la salida donde pude ver a James esperandome con una sonrisa por lo cual solté una pequeña risa.

-Ely- escucho como el profesor me llama por lo cual me dirijo a paso rápido a dónde se encuentra.

-¿Sucede algo?- pregunto mientras miro a James en la puerta.

-¿Cómo va el evento?

-Todo va demasiado bien, la bienvenida para los nuevos estudiantes se volverá una integración de las familias al mismo tiempo y de acuerdo a los cálculos que hicimos obtendremos buenas ganancias además de que los chicos de artes están dispuestos a vender sus obras y contribuir con una parte para la donación que realizaremos- digo sería, la verdad el profesor Collins me parecía aterrador además de que habían varios chismes circulando los cuales dañaban más su imagen.

-Me alegra haberte escogido- suelto una sonrisa forzada al ver cómo su mano la deposita en mi hombro para acariciarlo.

-Ely, es hora de irnos- suelto toda la respiración que tenía acumulada.

-Gracias por haberme elegido- le sonrió y muevo mi mano en forma de despedida para acercarme a James.

-No te acercas tanto a el- susurra James rodeando con su brazo- los chismes no son buenos.

-Lo sé- le digo en susurro.

-Te compensare con hamburguesas por tus alegias- me dice y prácticamente mi cara al oir eso se ilumina.

-En este preciso momento doy muy feliz- le digo y avanzamos otro poco para encontrar con Amy tomada de la mano de Bruce y Evan pegado a su celular- vamos chicos, este caballero pagara- digo depositando un beso en la mejilla de James y tomando su mano para acelerar el paso.

-Este caballero pagara- Ely besa mi mejilla y sonrió, la verdad deseaba ir solo con Ely pero al parecer ella no pensó en eso.

Todos empezamos a caminar fuera de la universidad mientras mirábamos a Amy y Bruce, en que momento aquellos dos se habían vuelto pareja, conozco a Ely desde que era una pequeña pecosa y lo único que había conseguido hasta el momento era unos cuantos beso y al parecer el que más había disfrutado yo a ella le causó alergias, siento un pequeña toque en mi mano por lo cual dirijo mi mirada a esta y puedo ver la mano de Ely sosteniendo la mía.

-Para que no te pierdas- me dice con una sonrisa por lo cual suelto una risita.

-¿Tratando de disimular que quieres que tome tu mano?- ella dirige su mirada rápidamente a mí.

-Entonces pierdete- la trata de soltar rápidamente pero antes de lograrlo hago el agarre un poco fuerte para que no lo deshaga.

-Es mejor que la tomes no la quiero perder- ella da un pequeño saltito mientras sonríe.

Al llegar a Mc' Donals los asientos de Ely y míos quedaron separados ella quedó en una esquina mientras yo quede en la otra esquina de la mesa, todos hablaban de temas triviados por lo cual yo lo único que hacía era escuchar atentamente hasta que fijo mi mirada en Ely que estaba cambiando de asiento para estar a mi lado.

-¿No puedes estar sin mí?- le pregunto a Ely mientras paso mi brazo por sus hombros y ella rodea sus ojos.

-Dejaste comida, entonces eso me atrajo a ti- tomo suavemente las cosas que quedaban en mí mesa y se la paso a ella- ¿No te gusta Mc' Donalds?

-No es mi lugar favorito pero no lo odio- y claro que era mentira, lo odiaba solo me encontraba sentado porque a Ely le parecían gustar demasiado sus hamburguesas por lo cual siempre dejaba una que otra cosa de las que pedía.

-Pues vamos para la próxima vez a otro lugar, que sea el restaurante italiano- dice con su boca llena de comida por lo cual hago una nueva de asco.

- Me parece una gran idea- le digo mientras le cierro la boca y está me mira ofendida y vuelve a abrir la boca solo para que yo viera.

-¿Si te paso un chicle con la boca te da asco?- me preguntó justo cuando la mesa estaba en silencio por lo cual solté una risa mientras los demás la miraban como si estuviera loca de remate.

-Ely, no seas asquerosa- le dice Amy negando con su cabeza.

-No entiendo, ¿Qué hay de malo?

-Es un chicle Ely, tan siquiera que sea un chocolate- ahora a la que miraban raro era a Amy. Creo que quedó aclaraba mucho del por qué amaba eran mejores amigas, les faltaban los mismos tornillos.

-Ohhh, gracias mi pelirroja- dice mientras le tira un besito que Amy recoge como su fuera lo mejor que le hubiera pasado- James, puede ser chocolate- dice, sin embargo esta vez nadie había escuchado su nueva petición.

-Tal vez- le digo con una sonrisa de lado, croe que sería algo raro nunca había pensado en hacer algo como eso en mi vida.

-¿Puedo terminar tu hamburguesa?- asiento con mi cabeza mientras acarició su cabello y al parecer eso la hace sacar una sonrisa.

-¿Desean ordenar algo más?- siento la mirada de la chica de McDonald's en mi por lo cual me hago el tonto y miro a Ely.

-Si- dice Ely mirándome y acercándose a mi oído- Me regalas otra hamburguesa con helado, si algo no es para mí, es para ti, pensaran que como mucho- dice mientras deposita un beso en mi mejilla y la chica la mira mira alzando la ceja.

-Hamburguesa con helado- ella asiente, me da un último vistazo guiñando el ojo.

Regreso mi mirada a Ely la cual ya estaba terminando lo que yo había dejado, ella siente mi mirada en ella por la cual observó detalladamente su rostro, en el cual ahora sus pecas se encontraban tapadas, pongo suavemente mi mano en su mejilla y ella me sonríe con una sonrisa malvada.

- se me acaba de ocurrir algo- llega toma una papa la pone en su boca y de un momento a otro siento como ésta se lanza y mete la papa en mi boca haciendo que abra los ojos de lo sorprendido que estaba, incluso ahora todos se encontraban mirándonos.

-Esa es mi chica- decía Amy en el momento de que Ely se estaba separando de mi sin embargo en el momento en que ella ya iba a volver a su lugar la tomo suavemente de su cuello y la acerco a mi y meto mi lengua en su boca haciendo que el beso se profundice mucho más.

-Besas bien- golpea mi hombro suavemente y se gira nerviosa para tomar lo que la chica había traído por lo cual suelto una risita.

-Eres muy hermosa- beso su mejilla haciendo que una sonrisa fugaz se cruce por mi cara.

-Oh mira, no croe que ella quiera que yo lo tenga- dice entregándome un pequeño papel el cual contenía el número de la mesera.

-No creo que lo necesite, en este momento tengo justo lo que quiero- le digo mirándolo sin embargo ella se encontraba tan concentrada devorando su hamburguesa que no había puesto atención a mis palabras.

-¿Cuando quieres que te invite a comer en el restaurante italiano?- me pregunta mientras me da una cuchara de su helado el cual acepto gustosamente.

-Cuando tú lo desees- ella asiente con su cabeza y deposita más helado en mi boca.

-Esta bien, será de improvisto la salida, ponte guapo todos los dias- guiña un ojo por lo cual una pequeña sonrisa se asoma en mi cara.

Después de pasar un par de horas divagando por el centro comercial la noche ya se encontraba asomando por lo cual era necesario que cada uno regresará a casa, tome suavemente la mano de Ely y la dirigí al coche llevándola de una forma lenta a su casa debido se que aún quería pasar mucho tiempo con ella.

-¿Nos vemos mañana?- le pregunto con una sonrisa bajandome del auto acompañándola hasta la puerta.

-Siempre que tú quieras- guiña un ojo y se acerca a mi cara por lo cual cierto el espacio entre nosotros y la besó.