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I will stay with you

— ¡Sana apresúrate! —. Asiento y salgo del auto con la canasta, día de picnic, quién iba decir que estaría con Tzuyu en un parque, el mismo en el que estuve cuando no la quería cerca, es bastante relajante y a ésta hora de la mañana no hay casi nadie, solo algunos niños que viven cerca, sus madres los consienten mucho, corretean de un lado a otro sin ningún tipo de complicación o preocupación, me gustaría volver a esa época en la que lo único que me importaba era a que hora salían mis amigas para jugar.

O si todo estaba perfecto para una larga maratón de Barbie, recuerdo los días en los que mis padres me prestaba la suficiente atención como para saber que cumplo años en diciembre, no en enero, verlos jugar conmigo y sonreír, siendo una verdadera familia pero las cosas iban empeorando cuando crecía, porque por más que los niños sepan cosas no las entienden así que no piensan tanto en ellas pero cuando pasas a ser adolescente, todo para ti se convierte en importante, de la mosca que pasó cerca de tu cara hasta de la señora que vive a diez cuadras de tu casa.

Estas al pendiente de todo porque buscas una manera de enojarte, en mi caso, de pensar en otra cosa que no fuera la soledad que me estaba invadiendo, cuando se iba la luz abrazaba la almohada y contaba hasta quedarme dormida para no sentirme tan mal, el miedo se apoderaba de mi y me sentía terrible, sobre todo cobarde, alguien que no puede dormir por esas tontas historias de miedo que te contaban cuando eras pequeño, se vuelven importantes ahora que te encuentras solo y no tienes a nadie a quien pedirle ayuda o refugio.

Mis padres nunca estaban en casa y cuando si lo estaban se la pasaban en sus asuntos, su hija no era tan importante como para prestarle mucha atención, en los pocos momentos que lo hacían me sentía sumamente especial porque por fin tenía la atención de dos personas que se supone deberían amarme por sobre todas las cosas, incluso de su trabajo pesado, hacia todo tipo de tonterías para llamar su atención, mis notas subieron al tope y luego bajaron tanto que sentía que no merecía estar en esa escuela, todo para que llegarán a darse cuenta de lo necesitada de amor que estaba.

Por eso a veces siento que todo el amor que proyecto en Tzuyu es exactamente el que necesite en toda mi vida, que alguien me amara así y poder abrazar a esa persona sabiendo que nunca se iría de mi lado, pero lamentablemente en algún punto de la vida no estaremos juntas y solo serán recuerdos, porque la vida que tuve me enseñó que nada es para siempre hay que disfrutar el momento, porque a la final lo que quedan son recuerdos difusos de nuestro pasado que nosotros mismos vamos perfección hasta que llega un punto que el recuerdo se convierte en un anhelo.

Exactamente lo que quieras que pase pero nunca sucedió.

— ¿Te encuentras bien? —. Le sonrío, a veces me meto tanto en mis pensamientos que no me doy cuenta de lo que sucede a mi alrededor, eso ha sido el causante de que me sienta así de mal todo el tiempo por no prestarle atención a nada,— ¿No me estabas prestando atención? —. Aprieta los labios y acaricia mi mejilla derecha, es la cosa más adorable y linda que existe en el mundo, es que ni un bebé se compara con ella, esa pequeña sonrisita, sus mejillas levemente sonrojadas, me imagino que por el calor, y sus labios abultados porque no le presto la atención necesaria, es todo lo que está bien en este mundo.

— Perdoname estaba recordando algo—. Acaricio la mano que está sobre mi mejilla y la separo lentamente para darle un pequeño beso,— Ahora te prestaré total atención —. Es lo mejor que me he pasado en mucho tiempo, una buena chica capaz de hacer que mi corazón se acelere con una mirada, es que cuando la recuerdo mi corazón da un brinco de felicidad porque se que es lo mejor de éste mundo, alguien que me ama y que es consciente de que hay cosas que debemos mejorar para tener una perfecta relación.

— Como te decía cuando era pequeña mi madre siempre hablaba sobre comprar una cámara para tomarme muchas fotos —. Sonríe y come un poco de arroz,— Pero nunca lo pudo hacer porque todo el dinero se lo llevaba mi tío —. Suspira,— Él se lo gastaba todo en alcohol y llegaba a la casa enojado, era un adolescente en ese momento —.

Yo no sabía que su madre se había hecho cargo de su tío, eso me parece un poco injusto sobre todo con el temperamento que Tzuyu dice que tenía, era todo un mal agradecido,— ¿Cuantos años tenía? —.

— La última vez que lo vi tenía veinte, dijo que ya era todo un adulto y que podía irse... —. Baja la mirada a la comida pero no la come solo la mira,— Lo último que supe es que se drogaba y que gracias al estrés que le hizo pasar a mi madre enfermó —.

— ¿Tu tío está enfermo? —.

— Mi madre —. Me mira como si supiera que yo ya lo sé,—. Mi tío presuntamente falleció de una sobre dosis, eso me dijeron ayer pero no lo creo él no ha muerto —. Niega y sigue comiendo como si lo que haya dicho es de lo más normal, a veces no la entiendo, se le rompe el corazón y comienza a llorar por la muerte de un personaje en una caricatura pero cuando se trata de la muerte de un familiar se lo toma muy a la ligera, de seguro era un mal hombre como para no sentir nada de dolor,— Sabes lo que dicen... —.

Sonrío un poco y asiento,— Hierba mala nunca muere —. Suspira y se apoya de sus manos, mientras me mira sonríe y se ve tan inocente que ablanda mi corazón, lo está derritiendo poco a poco y sanandolo, exactamente lo que le dije que hiciera, que lo mantuviera a salvo y que si no era mucha molesta que lo sanará ya que estaba muy herido.

Cuando la conocí era una chica cualquiera pero poco a poco comenzó a llamar mi atención, ahora mismo es a lo único que en verdad le prestó tanta atención que me impresiona que no se sienta amenazada o algo por el estilo, puedo estar horas observando cada detalle de su rostro, quiero que se quede a mi lado, que luchemos juntas y que volvamos a creer en el amor.

Juntas lucharemos contra a lo que creemos tenerle miedo, nos acercaremos cada vez más y llegado el día ambas seremos novias, comenzar una relación no es tan fácil sobre todo nosotras que no hemos pasado por buenas cosas en cuanto al amor,— Hoy estás especialmente hermosa —. Me acerco y dejo un corto beso en sus labios, no quiero que nadie nos vea pero no pude contenerme, es tan linda cuando se sonroja, sobre todo si es por algo que le dije o hice.

— Lo mismo digo Sana unnie —. Quiero gritar se emoción, es que tenerla cerca fuera de la casa implica tener que aguantar lo que siento, me encantaría besarla pero debo contenerme, no es algo que debamos hacer porque no quiero que nos insulten o algo por el estilo, como detesto a la sociedad.

— Sonará un poco trillado pero... —. Debí ser sincera con ella, todo el tiempo, porque se que me cuidara incluso si me abro por completo y le cuento todo lo que siento, ella va a sonreír y sostener mi mano, no debo tener ningún tipo de temor hacía ella,— Quiero decirte que siempre voy a estar para ti —. Me abraza así de la nada, mi cuerpo cae como una pluma en el pasto y siento un hormigueo en todo mi cuerpo cuando sus labios se dirigen a mi cuello el cual besa, si ella supiera lo que eso me hizo sentir se avergonzaria al instante, me late super rápido el corazón.

— Y yo siempre voy a estar para ti pase lo que pase no quiero que te alejes de mi —. Se levanta con cuidado, me quedo un rato observando su belleza y me preguntó ¿Cómo llegamos aquí?, a un punto en el que parecemos unas enamoradas de película, a dónde siempre quise estar pero nadie era capaz de llenarme.

Ella solo tuvo que aparecer en mi vida y ya todo cambio de la nada, ahora me doy cuenta que lo mejor que puedo hacer es quedarme a su lado, cuando nunca quise hacerlo, porque la amo y deseo besarla hasta que se me escape todo el aliento, tener una vida a su lado sería lo mejor que me pueda pasar.

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