Me recuesto en la cama con los ojos cerrados, estar tan relajada no es muy común pero la verdad es que siento que solté todo lo que quería decirle y escuché lo que tanto quería escuchar, por fin puedo decir que estoy segura de lo que siento y que puede que si exista una oportunidad entre ambas, si no fuera así ella no hubiera hablado de esa forma, tan linda como si quisiera entrar en mi corazón, me tomo por sorpresa pero aún así no esperaba menos de ella.

Me tiene sonriendo como una boba mientras me imagino un mundo en el que ambos estamos juntas, siendo felices, haciéndole saber al mundo que por una vez en nuestras vidas decidíamos lanzarnos a este abismo llamado amor, quisiera poder patalear a gusto y reírme hasta que me duela la garganta, la felicidad no me cabe en el pecho.

Ella se quedó en la sala viendo televisión, al parecer no tenía sueño y quería distraerse, yo decidí entrar a mi habitación para poder sonreír con las tranquilidad sin que me pregunte el motivo de mi felicidad cual do claramente es ella, es que es la chica más hermosa del mundo, me gusta todo de ella y cada vez más cosas entre ambas van mejorando de una forma tan rápida.

Inflo las mejillas al darme cuenta que paso bastante tiempo y que no he hecho nada, la verdad es que tampoco tengo sueño pero no quiero ver la televisión, no me entretiene, entrar a las redes sociales siempre me deja con menos autoestima de la que tengo y quiero que permanezca intacta, aprieto los labios y me siento en medio de la cama, cuando estoy sola la mayoría de las veces comienzo a hablar en voz alta, como si estuviera hablando con una persona.

Ahora sí lo hago tal vez me escuche y me tache de loca, cosa que soy pero me da vergüenza que ella lo sepa, me encojo de hombros y vuelvo a recostarme, el colchón es bastante incómodo, es lo único que le agradezco a mis padres, comprarme el colchón, es como dormir encima de nubes esponjosas que me relajan tanto que me comienza a dar sueño.

Debería dormir para dejar de pensar tanto en Tzuyu porque se lo que pasa cuando sobre pienso las cosas, a la final termino en un karaoke llorando mientras canto una canción de desamor que deprime a todas las personas, me da demasiado vergüenza el día que sigue y luego estoy como si nada.

No quiero volver a pasar por eso, por lo que pasó con Nayeon fui a un bar y di un gran discurso del por qué las mujeres como ella no servían, sin saber que ella se encontraba entre la multitud escuchando todo, lo bueno es que eso nos ayudó bastante y así logramos de volver y terminar, fue una linda culminación, dentro de lo que cabe, eso también hizo que le dijera a los demás que todo lo que divulgó fue un mal entendido.

Claro todo eso no quita lo que hizo y el daño afligido, nunca olvidaré los días en los que no comía porque cada que trataba de hacerlo vomitaba, las noches en las que no podía dormir y los eternos días en los que no podía dejar de pensar en otra cosa que no fuera en lo hija de puta que fue conmigo cuando yo no le hice nada, hay cosas que no se olvidan y es algo que me marco tanto que hasta el día de hoy sigo pensando en ello.

- Buenas -. Abre la puerta y entra, yo no sé quién le dio el permiso de hacerlo pero la verdad es que no me quejo, mucho menos de cómo me abraza y acaricia mi cabeza, tal vez quiere que me duerma pero la verdad es que yo tengo algo en mente,- En el camino me di cuenta que estabas cabeceando, ¿Quieres que te cante para dormir? -. Quiero reírme, ésta es una nueva versión de la misma chica que me lanzó el jabón de baño que compre porque se me olvidó en la mesa, la misma que por maldad me dio a probar un chile super picante para luego reírse de mi cara.

Digamos que sus bromas son demasiado pesadas y yo lo único malo que le hice fue entrar al baño y cambiar la temperatura del agua mientras se enjuagaba el cabello, hay cosas que nunca ase superan y luego está su cara, daba tanta risa verla gritarme en chino cuando yo no tengo ni la menor idea de lo que me está diciendo,- Quiero que me canses para poder dormir -. Me siento en su regazo e inclino para besar su cuello, es tan lindo escuchar como jadea ante mis toques, tarareo una canción mientras me apoyo de ambas manos, succiono un poco la piel y la mantengo entre mis dientes por unos segundos hasta que la suelto.

Al separarme la veo, su mirada es más profunda y su respiración lenta, como si la estuviera tratando de nivelar para verse más tranquila, le sonrío inocente,- ¿Por qué haces eso? -. Aprieto los labios y me encojo de hombros, la verdad es que no tengo ni la menor idea de donde saque tanta seguridad en mí para hacer eso sin tener una crisis nerviosa,- ¿Quieres que te vuelva a castigar como la vez anterior? -. No se cómo pero me da la vuelta super rápido, quedo debajo suyo, boba abajo, no puedo mirarla muy bien y eso me preocupa.

- Eso no seria un castigo, más bien un regalo div- ¡¿Me acabas de dar una nalgada?! -. Trato de acomodarme para pegarle pero con su mano derecha aprieta mi espalda, se me hace imposible moverme, siento que soy una tortuga que no puede dar la vuelta,- ¡Suéltame idiota! -. Chillo, detesto que lo hagan y lo sabe muy bien, baja un poco mis pantalones y lo vuelve a hacer,- ¡Ahora duele más! -. Pero por alguna razón la sensación es agradable a la tercera nalgada, aprieto la sábana con mis manos y arqueo la espalda, espero que no me comience a gustar.

- Entonces ya cambiaste de parecer -. Ríe y vuelve a darme, es un ardor distinto al que ya había conocido,- Que rápido cambias de opinión -. Gruño y estoy lista para decir una grosería cuando me aprieta, duele como el infierno así que chillo en respuesta,- Ahora si a dormir que tengo sueño -. Frunzo las cejas y asiento, me quedo en la misma posición y veo como ella se recuesta a mi lado, boca arriba con una sonrisa de oreja a oreja.

Me está tratando de provocar pero no lo haré, no voy a caer tan bajo como la otra vez, me acerco y subo la pierna, la rodilla queda justo en el ombligo y cierro los ojos,- A mí también me dio sueño -. Es una total mentira, estoy más despierta que nunca, hasta me pican los ojos para mantenerlos abiertos, aprieto mi mejilla en la sábana muy cerca de su oído izquierdo,- Que linda oreja -. Murmuro, se lo que le pasa cuando lo hago,- ¡Oh! Chou Tzuyu tienes tanto sueño -. Me muevo hacía arriba y luego lentamente hacia abajo, la veo tragar lentamente y luego una sonrisa boba.

- Si, tengo mucho sueño así que deja de moverte así -. Ruedo los ojos y acaricio su abdomen, quiero estar con ella no es difícil de entender, todas las señales que le estoy mandando son por algo, jadeo en su oído por la falta de aire, no es muy lindo estar en ésta posición, su cuerpo se estremece y se acomoda, haciendo que me enganche más a ella, sonrío en su cuello e inhalo ese suave aroma a bebé.

Muy pocas veces pude sentirlo tan íntimamente ya que no éramos de esas amigas que se tocan mucho, cuando lo hacíamos era porque no teníamos de otra, como un saludo o una despedida en la que nos volvíamos un poco más cariñosas, ebrias varias veces también nos abrazamos pero nada del otro mundo y ahora que puedo tenerla solo para mi en esta cama, solo un tonto no aprovecharía semejante oportunidad.

- Tú eres la que me está moviendo así -. Su risa ronca activa algo en mi interior, mis oídos se agudizan y puedo escuchar hasta los latidos de su corazón, es tan hermoso cerrar los ojos y sentir como aumentan,- Voy al ritmo de los latidos de tu desenfrenado corazón -. Tarareo, se que eso le molesta que trate de ser cariñosa o demasiado empalagosa pero si ella puede hacerlo entonces yo también puedo, eso es así.

Puedo entender que ella lo evita a toda costa porque cuando soy así muevo algo en su corazón, se que lo hago por como me mira pero no es valiente y yo tampoco, no somos valientes y nos enfrentamos a ésto que sentimos.

Pasa un largo rato en el que lo único que escucho son nuestras respiraciones y es ahí cuando su mano acaricia mi mejilla que decido hablar,- Tzuyu -. Susurro con miedo a que se asuste y dejé de tocarme.

- Dime -. Se nota agitada.

- ¿Vamos en caminos diferentes? -. Es una pregunta que llevo analizando desde hace demasiado tiempo.

- Siento que si -. Se me va el aire,- Definitivamente si -. Asiento lentamente.

- Entonces cogeme toda la noche -. Su cuerpo se congela,- Hazlo y mata todos mis sentimientos -.