Tzuyu no sabía que hacer con Sana, ella aún seguía bajo los efectos del alcohol, solo que ahora estaba despierta y bastante alegre.

Comenzó a preocuparse más cuando desalojaron a todos del lugar y no tuvo más remedio que pasar el brazo de Sana sobre su hombro para ayudarla a caminar fuera de ahí.

—¿Por qué nos vamos? Yo no me quiero ir..  —preguntó Sana con una sonrisa risueña en los labios—. Chuwi, ¿a dónde me llevas?

—No lo sé, pero debemos desalojar... —Tzuyu paró en seco cuando Sana enredó su otro brazo alrededor de su cuello, quedando así la una frente a la otra. Su piel se erizó sin poder evitarlo y todavía más cuando sintió el aliento caliente de Sana golpear sobre su cuello—. Por favor no me hagas esto...

—¿Hacer qué? —Sana dejó un tierno beso sobre el cuello de Tzuyu que la hizo tragar en seco—. Que rico hueles —dijo y sin más regresó a su posición anterior apoyándose de Tzuyu para poder caminar.

Una vez fuera del club, la más alta se quitó su sudadera y ayudó a Sana a ponersela. La madrugada estaba muy fría y ella sólo tenía un vestido puesto, no quería que cogiera un resfriado, prefería mil veces ser ella quien se enfermara.

—¿Y ahora qué hago? —Tzuyu se preguntó a sí misma. No podía esperar respuesta ya que Sana solo jugaba con las puntas de su cabello y de vez en cuando soltaba una risita. La joven taiwanesa optó por caminar un poco, ya era muy tarde, a esta hora no encontraría un taxi, estaba en problemas. Sintió miedo cuando a lo lejos pudo observar a una camioneta alumbrarlas con sus luces. Quiso correr pero con Sana en ese estado, no se lo ponía fácil.

—¡Oh Dios! vamos a morir...

La camioneta apagó sus luces y se estacionó en una orilla. Pudo ver la sombra de una persona bajar, la oscuridad de la noche no le permitía ver más.

—¿Tzuyu? ¿Eres tú? —la más alta reconoció la voz inmediatamente—. ¿Sana? —Chaeyoung corrió hasta su amiga para abrazarla—. ¡Oh, aquí estás! Lo lamento, lo lamento tanto. Juro que no quería olvidarme de ti, pero es que se llevaron presas a Jeongyeon y a Rosé y...

—¿Jeongyeon está presa? —preguntó Tzuyu con impresión a lo que Chaeyoung solo asintió—. ¿Cómo pasó?

—Jeongyeon tuvo una pelea con otra chica y a mi otra amiga también se la llevaron por vaciar la comida de la barra—. Chaeyoung tomó el hombro de Sana y la encaminó hasta su camioneta en el asiento trasero—. Muchas gracias por cuidar de Sana, no sabes lo mal que me siento por haberme olvidado de ella.

—Descuide, yo entiendo, no hay problema  —le dijo Tzuyu con las manos en sus bolsillos sintiendo el frío golpearla.

—Toma esto —Chaeyoung sacó un par de billetes de su cartera y se los extendió a la taiwanesa. Sus ojos se abrieron en grande, posiblemente ahí había mas dinero de lo que ella ganaba en su quincena en el bar. Tzuyu negó rotundamente con la cabeza.

—No la cuide por dinero, lo hice porque Jeongyeon me lo pidió como un favor...

—Pero ese favor terminó en el momento en que yo te pedí que cuidaras de ella —Chaeyoung tomó la mano de Tzuyu y colocó los billetes en su mano—. Gracias por cuidarla, no me hubiese perdonado que algo malo le pasara a mi amiga.

—No hay nada que agradecer —le respondió sonriendo.

—¿Tienes como volver a casa? .
—preguntó Chaeyoung antes de subir a su camioneta. Tzuyu se rascó el cuello y negó—. Entonces sube, yo te llevaré.

[🍈]

—Disculpe, estoy aquí por Im Nayeon y Kim Jisoo, soy su abogada —dijo Mina al oficial encargado—. Quiero verlas.

—Las señoritas están rindiendo su declaración, en un momento podrá verlas —Mina asintió buscando un asiento para esperar.

A unos lugares de ella estaba otro chico de traje, supuso que era quién vendría a abogar por las otras dos chicas.

—Hola —Mina volteó a su lado para encontrarse cara a cara con el chico—. Mi nombre es Cha Eunwoo, el abogado de la contraparte. No quise parecer impertinente pero escuché cuando dijo que usted era la abogada de las otras dos chicas.

—Así es, soy Myoui Mina —le extendió su mano a modo de saludo y Eunwoo la tomó.

—Myoui Mina en persona, un gusto conocerla, aunque es una pena que haya tenido que ser bajo ésta situación. Siempre he admirado mucho su trabajo —Eunwoo le sonrió y Mina le devolvió la sonrisa, el chico le parecía agradable—. Quisiera que llegaramos a un acuerdo, para no hacer esto más grande. Tengo entendido que una de las chicas es su hermana y la otra es su amiga. Ambas forman parte de Freedom Law, su bufete de abogados y a ninguna le conviene que se arme un escándalo.

—Ellas me dijeron que sus clientas tuvieron la culpa, no voy a detenerme por evitar un simple escándalo. Si esas chicas le hicieron daño a mis chicas, haré que les caiga todo el peso de la ley —Eunwoo abrió sus ojos con sorpresa al ver la dureza en las palabras de Mina.

—Abogada Myoui, solo fue una pelea entre dos chicas en estado de ebriedad y lo otro es realmente patético, mire que enviarlas a prisión solo por comer mientras estaba el bullicio. Es más que obvio que el dueño del lugar busca que se le pague una remuneración —Mina asintió procesando sus palabras—. Podemos simplemente llegar a un acuerdo con el dueño y pagarle en partes iguales, claro, si usted esta de acuerdo.

—Claro, por dinero no vamos a parar, abogado.

—Bien, hagamos eso y así evitemos más problemas de posibles escándalos innecesarios. Lic. Myoui, nos encontramos en la misma posición, mis clientas son abogadas también —Mina arqueó una ceja al escuchar eso, no se lo esperaba—. Solo estaban pasadas de alcohol.

—De acuerdo, me parece bien, terminemos con esto.

[🍇]

—¿Aquí es? —preguntó Chaeyoung mirando a su alrededor. Al frente se encontraba un grande edificio. Tzuyu asintió y se quitó el cinturón de seguridad, volteó hacia el asiento trasero para mirar a Sana quizás por última vez. Ella permanecía durmiendo—. Que lindo.

—No debe ser igual a lo que usted está acostumbrada, pero solo soy una simple estudiante y mi trabajo de bartender por las noches no me da para más —contestó Tzuyu encogiéndose de hombros.

—¿Qué estás estudiando? —le preguntó Chaeyoung con interés.

—Tecnologías de la información —respondió la taiwanesa con una amplia sonrisa—. Me gustaría invitarla a pasar pero vivo con dos amigas más y podrían pensar mal...

—Oh, no te preocupes Tzuyu, ya está por amanecer y quiero llegar lo mas pronto posible a casa, me muero de cansancio, fue una noche de locura —Chaeyoung suspiró recostándose en el respaldar de su asiento—. Que bueno que estudies lo que te gusta y por favor, hablame de "tú" —Chaeyoung sacó una tarjeta de su bolsillo trasero y se la entregó a Tzuyu—. Son Chaeyoung, del bufete de abogados Tigers Law. Llámame cuando me necesites.

—Wow, ¿eres abogada? —Tzuyu le preguntó y Chaeyoung asintió—. Es que, no lo pareces...

–¿Por qué?

—Los abogados son... son muy serios —respondió Tzuyu nerviosamente y escuchó una risita por parte de Chaeyoung.

—Realmente lo somos, te sorprenderías de la gran transformación que tenemos, es como si fuesemos otras personas cuando estamos en el trabajo.

—Eso esta muy cool —Tzuyu bajó de la camioneta—. Lamento que hayas tenido que venir a dejarme en lugar de ir con tus amigas.

—Descuida, ya alguien se está encargando de ellas—. Chaeyoung encendió el motor.

—Salúdame a Jeongyeon por favor —gritó Tzuyu antes que la camioneta comenzase a avanzar.

Se abrazó a sí misma, el frío la congelaba. Cuando llegó a la puerta de su apartamento quiso hacer el menor ruido posible para no despertar a sus compañeras pero fracasó al instante cuando al llegar y encender la luz de la sala se encontraban ellas. Shuhua estaba estaba sentada de brazos cruzados con una mascarilla blanca en toda su cara, mientras que Yuna sostenía una taza de café en sus manos.

—Cuatro de la mañana, Tzuyu ¿qué horas son estas de llegar? —Yuna se levantó a rodear con pasos lentos a su compañera de apartamento—. Sóplame.

—No tomé Yuna, solo hubo un percance en el trabajo y por eso se me hizo un poco tarde —Tzuyu trató de explicar.

—¿Estuviste con alguien? —Shuhua arqueó una ceja—. Cuéntanos, es lo menos que puedes hacer ya que estuvimos toda la noche en vela.

—No estuve con nadie, ya les dije lo que pasó, hubo un problema en el club y hasta fue la policía —Tzuyu intentó hacerse la desentendida y caminó hasta su habitación—. Agradezco que se hayan quedado despiertas por esperarme pero no se preocupen más, ya estoy aquí, ahora vamos a dormir, estoy muriendo de cansancio.

—¿Y tu suéter? —cuestionó Yuna—. Saliste de aquí con una sudadera amarilla, ¿en dónde está?

—Yo.. no lo sé, creo que la olvidé en el trabajo.. ahora si me disculpan, buenas noches, tengo clase a primera hora, solo podré descansar un rato —les dijo antes de cerrar la puerta de su habitación.

[🍉]

—No puedo creer que me hayan hecho venir por ustedes a la delegación. Son unas irresponsables, ¿cómo se les ocurre? ¿en que cabeza cabe? —Mina regañaba a las chicas que iban en el asiento trasero. Una Nayeon con el vestido desgarrado y el cabello revuelto y una Jisoo con la ropa manchada de comida—. Agradezcan que los medios no se enterarán de esto. Pude llegar a un arreglo con el abogado de la contraparte para pagarle al dueño del lugar y que no levantara cargos en su contra. Y por si fuera poco, pagamos la fianza en la delegación y un poco más para que dieran por olvidado el caso.

—Es estúpido que me hayan metido a la cárcel solo por comer —Jisoo gruñó de coraje—. En todo caso Nayeon y la otra tipa tuvieron la culpa, ellas armaron todo el escándalo —Nayeon la miró incrédula.

—¡No tienes idea de lo que esa mujer me hizo! Me tiró sus bebidas encima, arruinó mi vestido —expresó Nayeon con indignación.

—Esa no era razón suficiente para iniciar una pelea, Nayeon —habló Mina continuando con su vista al frente y con las manos fijas en el volante—. Tienen serios problemas con el alcohol. Quizás yo lo tenga por el trabajo pero el caso de ustedes es mucho peor.

—Tranquila hermanita, ya pasó, te prometo moderar mi consumo de alcohol —le contestó Jisoo haciendo a Mina girar los ojos—. Oye, ¿esas chicas son personas importantes? la tal Rosé me dijo que era abogada, seguramente me mintió porque yo le dije que lo era.

—Ahora que lo mencionas, la oxigenada me habló sobre un artículo de la ley penal —mencionó Nayeon.

—Lo son, son abogadas —afirmó Mina.

—¿Pertenecen a algún bufete?

—No lo sé, lo único que sé es que su abogado tampoco quería que se armara un escándalo y estaba dispuesto a pagar una gran suma de dinero para que esto no saliera a la luz —contestó Mina exasperada de la situación.

—Así que tienen dinero... —susurró Jisoo con la mirada perdida.

—El que tengan dinero, no les quita lo salvaje —mencionó Nayeon en tono molesto. Mina no hacía mas que rodar los ojos, estaba cansada, ella solo quería descansar.

[🍊]

—Me dan vergüenza, mucha vergüenza. Lo que hicieron no tiene nombre —Chaeyoung continuaba dando vueltas alrededor de sus amigas con expresión seria—. Estuve encerrada en el baño de ese club por más de una hora. Tenía la esperanza de que mis amigas fuesen a buscarme pero no, ¡eso no paso!

—Lo lamento Chaeyoung, yo solo quería ver el ambiente de la otra sección, mentí cuando dije que iría al baño porque supuse que no me dejarían ir... —murmuró Rosé con la mirada baja.

—Y yo lamento haber abandonado a Sana para irme a la otra sección —se disculpó Jeong jugueteando con sus dedos—. Pero no la dejé sola, le dije a Tzuyu que se quedara con ella...

—Exactamente y si no hubiese sido por eso, quien sabe que cosas horribles le pudieron haber pasado a Sana —la reprendió Chaeyoung logrando que Jeongyeon sintiera un gran peso de culpabilidad sobre ella—. Por suerte ya todo pasó, ustedes ya no están en la cárcel y Sana esta bien.

—No volverá a pasar... —Rosé habló esta vez levantando su vista hacia Chaeyoung quién aún las veía con severidad.

—No, no volverá a pasar y de eso me encargo yo —sentenció Chaeyoung con firmeza—. Nada de alcohol ni visitas a clubs nocturnos ¿me oyeron?

—¡Entendido! —ambas chicas dijeron al unísono.

—Muy bien, ahora vayan a dormir lo poco que queda de la mañana, les aseguro que tendrán castigo suficiente con la resaca que les espera en unas horas.

Esa noche todas la pasaron en el  apartamento de Chaeyoung, ya era demasiado tarde como para llevarlas a todas a sus respectivos hogares, así que quedarse en casa de ella, había sido la opción más viable.

Aproximadamente transcurrieron  alrededor de cinco horas, eran las diez de la mañana y lo primero que hizo Chaeyoung al levantarse fue dirigirse  al cuarto de huéspedes en donde Rosé y Jeongyeon yacían dormidas en la cama.

Chaeyoung hizo una mueca cuando vio que Rosé tenía uno de sus pies cerca de la cara de Jeong, esa era una de las cosas por las que no le gustaba tanto dormir con ella.

Sin consideración alguna, Chaeyoung corrió las cortinas de la ventana dejando pasar la luz directo a las caras de sus amigas. Los gruñidos por parte de las dos se hicieron presentes.

—¡Arriba! Levántense, ya es tarde, son las diez de la mañana —gritó Chaeyoung palmeando la cama para despertar a sus compañeras—. ¡Vamos!

—Agh.. mi cabeza —Jeongyeon se cubrió la cara con las manos y enseguida botó el pie de Rosé a un costado de la cama—. No Chaeyoung... cinco minutos más.

—¡Rosé! Despierta —al ver que su amiga no despertaba, procedió a pellizcarle los cachetes.

—Dios, ¿cuál es el afán de levantarnos temprano? Es sábado —Rosé gruñó cubriéndose la cara con una almohada.

—Ya no es temprano, es muy tarde y las necesito en el despacho, así que tomen una ducha y arréglense —avisó la más pequeña saliendo de la habitación, escuchando un par de maldiciones por parte de sus amigas.

Se dirigió a su habitación que esta mañana había compartido con Sana y la encontró sentada justo al borde de la cama, al parecer recién había despertado.

—Chae, buen día... —Sana la saludó frotando sus ojos con las manos—. ¿De casualidad tienes algún analgésico? Siento que la cabeza me va a estallar.

—No es para menos, ayer tomaste demasiado —comentó Chaeyoung abriendo un cajón del buró y sacando una caja de pastillas.

—¿Lo hice? —preguntó resoplando con sus mejillas—. No lo recuerdo, no recuerdo muchas cosas, solo pequeños fragmentos.

—¿De verdad no recuerdas? —Sana negó—. Te pusiste muy mal, tanto que terminaste bailando sobre una mesa del club —Sana abrió los ojos con terror mientras negaba con la cabeza—. El dueño del lugar llamó a la policía, te detuvieron... estuviste en los sepáros de la delegación pero por suerte te dejaron salir bajo fianza —añadió logrando que Sana se pusiera pálida en cuestión de segundos—. Estoy bromeando —dijo Chaeyoung soltando una fuerte carcajada.

—¡Que mala eres! —Sana la miró con el ceño fruncido—. Yo no sería capaz de hacer eso.

—Pero si de besar a una chica... —murmuró Chaeyoung recibiendo una mirada incrédula de parte de Sana.

—Es otra broma, ¿verdad? —la más baja se puso seria y negó—. Basta, odio tus bromas pesadas.

—Eso no fue una broma, tú en verdad te besaste con una chica, con la bartender, es verdad, yo misma te vi —le contestó con diversión—. ¿Ves la sudadera que tienes puesta? Es de ella, de Tzuyu.

—¿Tzuyu? —Sana se miró a sí misma y en efecto, ella portaba una sudadera amarilla que no era suya—. Chaeyoung, sí esta es otra de tus bromas, dejame decirte que..—

—No te estoy mintiendo, te voy a contar, porque tienes derecho a saber lo que pasó, pero no te enojes... —Sana la miró con los brazos cruzados esperando una explicación—. Bien, ayer todas tomamos demasiado, tanto que Jeongyeon tuvo una pelea con otra chica y se la llevaron a la delegación, ah y también a Rosie se la llevaron por comer y no pagar. El punto es que se armó todo un escándalo y yo me quedé encerrada en los baños del club por más de una hora.

—¿Y yo? ¿qué pasó conmigo? ¿en dónde estaba?

—Tú estabas muy ebria como para poder levantarte del privado donde estábamos. Te dejé encargada con Jeong porque fui a buscar a Rosie pero ella te dejó por irse a la sección de baile... — Sana frunció el ceño indignada—. Pero te dejó encargada con Tzuyu y tú la besaste. Después yo tuve que irme a la delegación por ellas pero luego me olvidé de ti y regresé a buscarte...

—¿Me abandonaste?

—No, Tzuyu te cuido todo el tiempo, es una buena chica —Chaeyoung vio como Sana se dirigía a la ventana y se acercaba directo al balcón—. ¿Qué haces?

—Voy a matarme — Chaeyoung la detuvo soltando una pequeña risita—. No te rías, si lo que me dices es cierto, entonces pasé la peor vergüenza de mi vida.

—Puedes estar tranquila, nadie se enteró de nada, ni siquiera se enteraron de que Jeongyeon y Rosé estuvieron encerradas en la delegación, todo está bajo control.

[🖤]

Gracias por leer, no olvides votar si te gusta mi contenido 💙

Pdt: Feliz cumpleaños a nuestra pequeña Mina.. 🥺❤