Hola a todos lamento que no haya actualizado esta historia pero, después de todo gracias a las siguientes ideas que salen de mi mente esta historia vuelve con este nuevo capítulo a pesar que he estado con un bloqueo de ideas para este fanfic, sin nada más que decir comenzemos con este nuevo capítulo.
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Mientras tanto con Horus, él se encontraba en su forma humana debido a sus poderes dirigiéndose hacia un hotel donde alquilo una habitación para pasar el resto de días allí, todo era normal a pesar que Horus empezaba a acostumbrarse de haber estado encerrado en la tablilla por muchos años veía muchas cosas nuevas, en la mañana de las 6 am Horus se encontraba durmiendo hasta que sintió una energía dentro de él, en su mente había aparecido una visión de hace tanto lo que ocurrió en la guerra de los Egipcios contra los romanos, la gente de Egipto gritando del pánico, niños y bebés de las familias llorandos, soldados romanos y Egipcios que se mataban entre ellos, hasta que todo se desvaneció mostrando lo que es la galaxia y al dios Zeus presente, tanto que Horus empezó a despertar de golpe por aquella visión.

12 de la mañana.

–¿Dices que has tenido una visión? –pregunto Anubis a Horus.

–Si, aquella visión era lo que pasó en Egipto durante la guerra hasta que después....aparecio la galaxia y al dios....Zeus –respondió Horus a Anubis.

–¿Zeus?, ¿el padre de los dioses que viene de Grecia?

–Exactamente Anubis, era él pero, algo me esta dejando mucho que pensar sobre esta visión que tuve mientras que estaba durmiendo en el hotel.

–¿Y que quiere decirte esa visión?

–No lo sé, esto me deja mucho que pensar.

Mientras tanto con Gregorio que se encontraba en una tienda de libros de la ciudad buscando algún libro interesante que leer, cogió un libro de héroes que tanto le gustaba, un libro de aventuras y finalmente agarró un libro de comedia, cuando iba hacia la dueña de la tienda para comprar los libros se detuvo cuando había un libro que le llamaba la atención, era un libro con el color dorado forrado en negro, cuando agarró el libro para ver de qué era la portada tenía dos misteriosos símbolos que nunca habían sido vistos, el primer símbolo de la portada era de una estrella con 9 puntas, la verdad era una estrella bastante extraña, el segundo símbolo representaba a una ave, por la curiosidad decidió también comprar aquel libro.

–¿A cuanto cuesta? –pregunto Gregorio a la dueña de la tienda.

–Son 50 dolares joven –respondió la dueña de la tienda a Gregorio, que era en verdad una mujer de 56 años con pelo algo gris y un poco oscuro con una tranquila sonrisa.

Gregorio le pago a la dueña lo que le costaba para después con los libros que compró se fuera de la tienda, la mujer se metió al cuarto privado donde empezó a bajar por las
escaleras bajo hacia un sótano, cuando abrió la puerta había alguien....resulto que allí estaba la verdadera dueña de la tienda que era igualita a ella, se encontraba con miedo y los ojos llorosos mientras tenía la boca tapada con un pañuelo y atada a una silla, la mujer se acerco hacia ella para después formar una sonrisa aterradora y los ojos se volvieron oscuros con las pupilas de diferente color, tenía las pupilas ahora de un color rojo como si fuera el color carmesi.

–Bien... –dijo con una sonrisa aterradora mientras miraba a la mujer que seguía atada en la silla –. De ti me encargaré en llevarme tu alma jejejejejejeje pero primero....¿en donde es el museo de esta ciudad? –dijo para después quitarle el pañuelo de la boca a la verdadera.

–¡¡T-te lo diré p-pero....por favor no me hagas daño!! –dijo la verdadera mientras que lloraba del miedo.

De vuelta con Anubis ella se encontraba junto con su hermana Kebechet y su amiga Bastet que se encontraban hablando sobre el tema de la visión que tuvo Horus, mientras que tomaban un te y unas galletas que había en la cocina de la casa.

–¿Horus tuvo una visión?, ¿de que es esa visión? –pregunto Bastet a Anubis.

–Digamos que Horus tuvo la visión de lo que ocurrió hace tiempo en Egipto, ya sabes cuando nos han encerrado Horus por muchos años –respondió Anubis a Bastet.

–¿No creen que esa visión nos trate de decirnos algo? –dijo Kebechet muy dudosa del tema.

–Creo que si pero- –Bastet no pudo terminar la frase debido a que algo la interrumpió donde se le apareció una visión de los soldados Egipcios muertos y los soldados romanos que quedaban vivos tenían los ojos en blanco gritando por la victoria.

(Como en esta imagen).

–.... –Bastet se quedó callada y paralizada al ver esa extraña visión.

–¿Bastet que ocurre? –pregunto Kebechet preocupada al igual que Anubis.

–Chicas....se me apareció una extraña visión..... –respondió Bastet aún paralizada y más en shock.

–¿Que era? –pregunto Anubis bastante preocupada.

–Sobre la guerra en Egipto....habia algo que no andaba bien..... –volvió a responder Bastet bastante paralizada y en shock.

Mientras tanto en otro lugar se encontraban unos tipos que llevaban ropas oscuras de discípulos, tenían las caras encapuchadas por las capuchas, uno de ellos se acerco a un círculo que había en el suelo formada por velas empezando a recitar una frase.

–¡Líder del apocalipsis!, ¡estamos aquí para servirte y ser tus discípulos, recibe nuestro llamado oh líder del mismísimo apocalipsis....Sakiriel!

Justo en ese momento el fuego de las velas se empezaron a crucar donde un agujero apareció hasta que de allí salió una poderosa demonio que tenia apariencia de mujer y con los ojos negros con las pupilas rojas, la piel morada, un largo cabello rojo y unos cuernos que parecían de una cabra, era aquella demonio que se hizo pasar como la dueña de la tienda, su nombre era Sakiriel la poderosa demonio del apocalipsis.

–Saludos mis nuevos discípulos, soy Sakiriel la poderosa demonio del apocalipsis, ¿que quieren de mi?

–Venimos a servirle mi señora, queremos seguirte y también pedirnos lo que sea que quiere que hagamos –dijo uno de los discípulos presentes.

–¿Servirme eh?, esto se pondrá muy interesante~, quiero que ustedes hagan algo muy importante para mi –dijo la demonio con una sonrisa maliciosa.

12 de la noche.

Gregorio llegó al museo para continuar con su trabajo de vigilante en el museo, mientras revisaba el lugar mientras estaba atento por si un ladron entrará, vio una luz que parpadeaba en la sala de la época romana.

–¿Que era eso?

Gregorio fue a la sala y cuando entró la luz blanca volvió a aparecer pero, más cerca cegandolo completamente hasta que la luz blanca desapareció, Gregorio abrió los ojos lentamente y vio que apareció en un desierto junto con un palacio egipcio.

–¿Pero como he acabado aquí? –dijo Gregorio sorprendido mientras miraba a sus lados que estaba en el desierto hasta que miró el palacio –. Ese palacio me llama la atención....deberia ir a ver que hay allí.

Gregorio se dirigió al palacio a pesar que estaba en el desierto y el camino hacia aquel palacio no era tan largo como en los otros desiertos, una vez que llegó al palacio abrió la puerta y entró.

–¿Hola?, ¿hay alguien aquí? –pregunto Gregorio alzando un poco la voz para ver si había una respuesta.

–Gregorio...te he llamado....ven a mi.... –dijo una misteriosa voz que se escuchaba muy de cerca.

–Hay alguien pero, ¿como sabrá mi nombre?

Gregorio vio que una luz iluminaba el camino por lo que este decidió ir por aquel camino donde estaba la luz, empezó a explorar por todo el palacio siguiendo aquella luz o aquella iluminación que quisiera que nuestro protagonista vaya, hasta que llegó al final y abrió una gran puerta que había enfrente de él, se mostraba en el interior que era una especie de sala del trono donde se sentaban los reyes egipcios, entró a la sala al ver que nadie estaba.

–¿Hay alguien?, holaaaaaaaaaa

–Aquí mismo –dijo aquella voz que le respondía a Gregorio.

Una silueta apareció enfrente del trono hasta que se reveló, Gregorio se quedó sorprendido al ver que era uno de los dioses egipcios, aquel dios tenía la piel color verde como si fuera de un zombie pero, según las representaciones egipcias ese dios era nada más ni menos que el dios....Osiris.

–Eres Osiris....el dios y quien fue rey del antiguo Egipto –dijo Gregorio bastante sorprendido.

–Así es Gregorio, yo soy el mismo Osiris, aunque te preguntes como se tu nombre te responderé eso después de que tenga que contarte algo importante que quiero que le digas a Anubis y a los demás –dijo Osiris para después sentarse en el trono.

–¿Y cuál es lo que quiere decirme?

–Algo bastante malo que va a ocurrir al mundo.....

–¿Que va a pasar?

–Se trata de una demonio poderosa que pertenecio al apocalipsis hace años.

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CONTINUARÁ.
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