| Summer|

~No tengo duda de cuán
hermosa eres, luz de la
oscuridad, alegría del
infierno.

~señor, ella es muy bella,
más de lo que creía posible.

~Oh Archie, no sabes cuánto
he deseado poder estar
así de cerca de ella.

~¿Sabe lo que ha pasado
en estos últimos años?

~Aún no, recuerda que he roto
su hilo del destino pequeño.

~¿Qué pasará ahora señor?

~Trazaré uno nuevo,
uno en el que ella y yo
seamos inseparables, donde
nada ni nadie logre alejarme de ella.

~¿Ella puede
escucharnos señor?

~Aún no Archie, no ha
llegado el momento, falta
poco.

~¿El momento para qué señor?

~Despierta ahora

Con una pequeña y simple frase me trajo de regreso, como el efecto de gravedad al planeta Tierra. Aquella voz atraviesa mi propio subconsciente y me arrastra de vuelta con una sorprendente facilidad.

Esa fría y tranquila voz me llama, la misma que comencé a escuchar junto a las de mis sueños, pero esta a diferencia de las otras me hace sentir segura, protegida, en paz.

No conozco el dueño de la voz pero sé que llega en el momento más inesperado y cuando es necesario.

Tengo la sensación de que volvió solo para que me levantara de la cama, y dejara de prestar atención a aquellas voces, para que tome el camino de vuelta a la realidad.

Pero una pregunta me sigue como un felino acechando a su presa, una interrogante que no me ha hecho velar por una respuesta, pero si me causa conflicto el no saber la razón del...

¿Por qué escucho estas voces?
¿No saben que si puedo escucharlos?

De algo estoy segura, y es que si aquella voz interrumpió es por algo y significa que aún no estoy lista para enfrentar la respuesta, para saber la causa de esta extraña e inusual situación.

Cerrando los ojos me estiro y presiono mis dedos contra mis párpados tratando de quitarme el escozor que se estaba formando por haber dormido tanto tiempo.

Y por desgracia tengo que ir al Instituto Wentworth cinco días de la semana, lugar donde solo tengo 2 amigos y cerca de 400 enemigos.

🦋

¿Han escuchado de las personas que no tienen sueños?

Yo creía que era un rumor hasta que se hizo una realidad para mí. Hace 5 años que dejé de visualizar una película imaginaria en la que vemos cosas fuera de la realidad, si, mis sueños habían sido esfumados de mi subconsciente.

Ni una figura, color, forma u objeto. Nada.

Aunque estoy cansada de esto lo prefiero antes que las pesadillas que me perseguían día y noche, causando que mis sentidos se mantengan alerta constantemente.

Porque así era mi vida cotidiana.

No me relajaba en ningún momento.No cuando sé que posiblemente el enemigo está a mi alrededor, no con aquellos terribles recuerdos sobre mi cabeza.

Parece que fueron hace semanas, meses o años desde que estoy viviendo de esta forma, si es así como se le puede llamar a lo que hago.

No sé porqué le llaman a esto vivir, cuando es mayor el sufrimiento que la alegría.

El tiempo cambia y nosotros también, pero viene en compañía del tormento, o ese es mi caso.

Aprendí que el dolor y el miedo tienen una forma de prolongarse. Y como si eso no fuera lo suficientemente cruel, nuestras mentes se aseguran de que revivamos esos momentos una y otra vez, incluso después de que hayan pasado y de que aparentemente los vamos superando.

Qué bastardo es el tiempo y su forma de desempeñar su función.

Sé que dejé de hacer tantas cosas por culpa de él, por el miedo de revivir todo, de repetir la historia. De volver a sufrir más de lo experimentado y sucedido.

He pasado por suficientes momentos trágicos como para reconocer la sensación de dolor, sufrimiento, tristeza y aceptar la situación.Ya no lloro frente a los demás, ya no quiero amar a alguien, no quiero perder a quien me ame, y tampoco quiero seguir alejando a todos.

Cada angustia que he soportado en mi vida, cada momento desgarrador, todo ha llegado a arrancar una parte de mí.

He visto como conforme voy perdiendome en el camino, dejo migas de pan para las aves de los cielos, y pierdo trozos de piel en el sendero para las bestias de los campos.

Y no, no exagero mi situación, estoy siendo realista, siendo honesta entre lo que digo, hago y pienso.

Porque a pesar de todo trato y vuelvo a ser sincera con mis sentimientos, emociones y pensamientos, profundizo todo para aclarar mi estado.

[🕛]

—¿Sabías que Nicolas dará una fiesta mañana por la noche?—Mi mejor amigo como se darán cuenta es un amante de las fiestas.No importa si conoce o no al anfitrión, si saben de una,no lo duden, Zarek Kennedy ahí estará.—¿Nos acompañarás, cierto?—

—No lo sé—Mi respuesta no le resultó convincente, o no fué lo que quería escuchar, lo digo por su expresión.—No quiero que suceda lo de las últimas dos fiestas a las que acepté ir con ustedes.—

—Esta vez será diferente, vamos a cuidarte mejor y estaremos juntos toda la fiesta, lo prometo.—Algo característico de Zarek es su comportamiento y la facilidad de convencer a las personas, en especial conmigo.

—Iré, pero deben cumplir con esta promesa,ambos.—Su rostro pareció iluminarse,como si mi respuesta fuera a sorprenderle.

~Tonta, deberías aprender a decir no

—La rubia cumplirá, tenlo por seguro.—Me dedica una sonrisa, aquella que transmite tanta calidez y galantería a la vez.

—¿Qué es lo que debo cumplir?—Cloe había llegado de forma sigilosa hasta nosotros. Era extraño que alguien supiera cuando iba a llegar, pues su andar era tan cauteloso y delicado que incluso pasaba desapercibida, y eso era sorprendente.

—Que no nos apartaremos de Summer el día de la fiesta.—Le informa Zarek, la rubia solo le miró con incredulidad o quizás molestia.

—¿Summer en la casa de Nicolas Smith?—Bisbiseó, incluso parecía que había perdido el aliento al decir semejante frase— mejor dicho, ¿Stone en la casa de su ex novio? —De tantas preguntas que pudo hacer y existen, ella decidió realizar la más inoportuna.

—Ella lo ha superado, deberías hacerlo también Cloe.—Zarek tenía razón, mi mejor amiga no dejaba de mencionar a Nicolas desde que terminamos, haciendo que me fuera más difícil superarlo, pero al final lo logré.

—Sabes lo que le hizo, no podemos dejar que vuelva a herirla.—Y es por eso que seguía con ellos a mi lado, han sido desde que tengo memoria los únicos amigos leales que he tenido, y mis defensores cuando más los necesite, además de que los considero mi familia.

Nicolas Smith es un cliché, ya saben el chico deseado, popular, mujeriego y solicitado tanto por chicos como por chicas al por mayor, y sí, también usa chaqueta de cuero, es millonario y futuro heredero de las empresas de sus padres.

Yo también soy un cliché según he leído en algunos libros, la chica invisible, tímida y que también viene de una familia prestigiosa pero nadie lo sabe.

Antes pasaba desapercibida dentro del Instituto, o eso era hasta que un juego de apuestas hizo que él se acercara a mí, y como era de suponerse me enamoré de él, pensé que los sentimientos eran correspondidos, que tendríamos un lindo amor de película.

Grave error.

La apuesta consistía en romperle el corazón a la chica más tímida de todo el Instituto, y vaya que lo hizo.

Conforme pasaba el tiempo se volvió violento, posesivo, tóxico y alguien que me hacía llorar cada vez que tenía la oportunidad.

Citas canceladas, golpes, insultos, incluso me dejaba plantada cuando decía que llegaría tarde o iba en camino a nuestras citas.

Me humilló y destrozó de la forma más cruel y despiadada posible, me hizo vulnerable, manipulable y totalmente insegura.

Aprendí que no por palabras bonitas y detalles constantes significa que me ame, que me quiera a su lado, o esté completamente dispuesto a cuidar y defenderme de los demás.

Solo era un interés disfrazado.

—Debemos ir a clases Summer— Cloe logra sacarme de mi burbuja cuando me llama, haciendo que vuelva al ahora — ¿Estás bien?—

—Claro, vamos—Mentí descaradamente, con una sonrisa que cubría todo el dolor acumulado en mi ser.

Caminamos hasta llegar a nuestra clase de Humanidades, nos sentamos en los últimos asientos del aula, un lugar libre del bullicio y de ser blanco fácil para los demás.

— ¿Podrás regresar sola a casa Summ? —Me hablaba Zarek en suaves susurros, evitando una futura reprimenda de parte de la profesora.

—¿Volver sola?—Le pregunté con confusión, pues siempre me llevaban a casa, excepto los Martes que tienen clases extra, ese día es Ty quien me recoge.

—Me temo que hoy no podremos acompañarte,  tenemos algunos pendientes por cubrir.—Queria decirles que me llevaran con ellos, que podría llegar tarde, que no había alguien que me esperara en casa.

Pero no, no debía ser egoísta.

—No hay problema, podré hacerlo, descuiden—Respondí tratando de sonar convincente.

—Bien, envíanos un mensaje cuando llegues  pequeña.—Pidió Cloe, hablando en susurros al igual que el pelinegro que estaba a mi lado derecho.

[⌛]

Las clases seguían de forma lenta,odiaba que el tiempo fuera tan perezoso cuando se trataba de estar en el Instituto pero sorprendentemente pasaba rápido cuando estaba en casa,o con mis amigos.

—¿En serio tienen que irse?—Dije en cuanto ese sentimiento de abandono llegó de nuevo,como un trago amargo dejando mal sabor de boca.

—Nos veremos en el almuerzo Summ.—Explicó Zarek, lamentablemente tenía tres clases completamente distintas a las de sus cursos.—Si pasa algo dinos quién fué y qué te hizo,sabes que no estás sola.—

—Lo recuerdo muy bien chicos—Tratando de aligerar el ambiente respondí con un cansancio fingido, amaba que fueran así de protectores, pero no se los haría saber—Estaré aquí y esperaré por ustedes hasta entonces.—

—Muy bien pequeña, te extrañaré mucho.—Me abrazó Zarek como si no volviéramos a vernos dentro de mucho tiempo.

Y sin más, ambos se fueron.

(...)

—¿Cómo podré divertirme contigo,ah?—Una de las tantas chicas que solía molestarme preguntó apenas había cruzado la puerta.—¿Prefieres golpes en baños,patio, cafetería, aquí?—

—Ninguno.—Respondo con firmeza y valentía,justo como me habían dicho que debía hacer.

—No trates de ser valiente.—Se acercaba a mí con pasos amenazantes.—Porque no lograrás que me detenga.—Con fuerza tiró de mi cabello,haciendo que mi cuello doliera.—¿Entendido chiquilla?—

No dije nada, permanecí en silencio,haciendo que sonriera.

—Átenla.—Ordenó,haciendo que tres chicos me sujetaran con fuerza, sentí como pequeñas cuerdas estaban siendo colocadas sobre mis manos y pies.—Lleven a esta escoria al cuarto de limpieza—Pidió,y yo no hice algo para impedirlo,era inútil intentarlo.

~Puedes ganarles con facilidad, inténtalo.

¿Podría ganar?
¿Eso es posible?

En realidad no creo que esté cerca de lograrlo,apenas y puedo levantar un kilo y medio de naranjas con ambas manos.Así que poder contra tres chicos teniendo mis extremidades atadas está lejos de ser posible.

[...]

Las clases siguieron y el conserje nunca llegó al cuarto de limpieza.Pedí ayuda a gritos,pero nadie parecía escucharme,así que esperé hasta que fuera hora del almuerzo, quizás alguien vendría y me salvaría.

Hoy habia tenido suerte o eso pensé,pues justo cuando se escuchó el timbre que indica que había iniciado el tiempo de descanso abrieron el cuarto para llevarme hasta la cafetería,en contra de mi voluntad.

Golpe tras golpe fué recibido en mi estómago, fueron tantos los impactos grotescos que tuve que tirarme al piso y tratar de hacerme bolita para que no me golpearan más en esa zona,pero comenzaron a patear con fuerza,con odio.

—DETENGANSE—Escuché gritar a un chico,alguien me había ayudado, sonreí al pensar que todo había terminado.

—¿Nick?—No era de sorprenderse el ver como la chica cambiaba en su forma de hablar con él.

—Dejen que yo pueda jugar un poco ella.—Aquello no me gustaba en lo absoluto, prefería que tres desconocidos sean quienes me lastimen a que Nicolas vuelva a golpearme.

Comencé a llorar y a mover mi cabeza en repetidas negaciones,me levanté con dificultad quedando de rodillas,miré a mis agresores, suplicando que no me dejen en sus manos.

—Chicos,dejen que Nick juegue con la chiquilla.—Ordenó con una sonrisa en la que supe que disfrutaba ver ese miedo en mis ojos.—Nos vemos mañana,linda.—La hipocresía en sus palabras me daba náuseas,odiaba que fuera tan falsa,tan ignorante, tan,tan...

Mi cuerpo fué levantado, sentí esa calidez de nuevo por la forma en que mi cuerpo encajaba a la perfección con sus brazos.

Fuí transportada de la cafetería hasta un lugar lleno de luz,no quería abrir mis ojos,pero lo hice inconscientemente,estaba en enfermería.

Miré a Nicolas,creí que volvería a mostrar su faceta violenta,no fué así.

—¿Por qué no te defiendes? — Su molestia era evidente,no lo culpaba,incluso yo estaba enojada conmigo por no ser valiente.—Si permites que sigan golpeándote de esa forma podrías terminar en un hospital,o peor.—Su mirada era lastimera,parecía que le afectaba lo que pudiera pasarme.

— No lo entiendes,no puedo hacer nada.— Respondí con dificultad,suaves susurros brotaban de mis labios—¿Cómo podría defenderme de tantas personas?—

—Hoy logré pararlos,mañana no sé.—Susurró, él también sentía esa impotencia,no podíamos detenerlos,eran más de 4 personas las que se encargaban de herirme, como si de turnos se tratara, en donde cada día le corresponde a tantas personas. —Solo cuídate mejor Summer, odiaría tener que visitarte en un hospital.—

Nos quedamos observando en silencio,no era incomodo,más bien era algo pacífico y reconfortante.

~No es malo, lo sabes ¿No?

—Lo siento,lo siento,lo siento.—Zarek decía con la voz entrecortada recargando su peso en el marco de la puerta,se veía la falta de respiración, debió haberme buscado por todo el colegio.—Yo me encargo de ella, gracias Smith.—Dijo mientras le dedicaba la peor de las miradas a Nick.

—Traje el botiquín.—Al parecer Cloe había llegado con mi amigo,ella solía tener esa manía de traer de todo en su bolso,y en su mayoría eran cosas que yo necesitaría,incluso traía dos repuestos de uniforme para mí.—¿Qué hace éste chico aquí?—Odio y rencor,eso era lo que podías notar en su mirada.

~Sus almas brillan,tienen
un color extraño.

Ignoré la voz de mi cabeza,para defender a alguien que nunca imaginé.

—Él detuvo la pelea.—Informé.—También me trajo hasta aquí.—Estaba a punto de decir algo más pero él habló.

—Evité que la tonta de su amiga no muriera mientras ustedes estaban por ahí,olvidando que la chica es un blanco fácil.—Escupió,estando a la defensiva.Entendí el porqué de su molestia.—Un gracias no estaría mal ¿Eh?—

—Gracias Nicolás.—Logré articular.—¿Podrían darme un poco de hielo? Esto duele demasiado.—Tratando de sonreír volví a hablar, aligerando el ambiente,o eso intenté.

—Cuiden bien de ella,me retiro—Miró a Zarek y Cloe,pidiendo algo que ellos habían hecho de la mejor forma que les era posible,pero aún así le agradecí mentalmente.—Recuperate Summer,espero ver un golpe de tu parte la próxima vez.—Dijo antes de salir de enfermería.

~El también lo sabe,debiste
intentarlo,eres más fuerte de lo
que crees.

Mis amigos seguían observando al marco,lugar donde pasó Nick, incrédulos de su buen acto.

Mi vista comenzó a nublarse,un gran peso estaba sobre mis párpados, tenía sueño, cansancio y unas incontrolables ganas de cerrar mis ojos.

| ? |

~¿No era ese el chico su destino?

~Algo no está bien.

~¿Por qué la defendió? ¿Cómo logró acercarse de nuevo?

~Silencio.

~¿Y si su destino volvió a unirse?

~Eso no pasará,la chica es mía.