CAPITULO DOS: Primeros encuentros

Mina soltó un largo suspiro, adentrándose en las relajantes aguas termales mientras sentía la tensión de su cuerpo desaparecer, los días en los que sólo aprendían teoría eran un poco más estresantes para ella que los días en los que debían entrenar con sus poderes.

—Esto si es vida —dijeron ella y Hakagure al unísono.

Jirou se adentro a las aguas termales, observando a Mina mientras charlaba animadamente con la chica invisible.

—Mina, ¿Ishiwaka no vendrá?

Mina miró a Kyoka con una sonrisa, negando con la cabeza.

—Aún está organizando su habitación, realmente tiene muchas cosas por acomodar, Kirishima la está ayudando —explicó.

Kyoka asintió mientras Momo la observaba.

—Deberías relajarte un poco, Jirou —dijo YaoMomo, acercándose a su amiga.

Kyoka se sonrojó.

—Estoy relajada, es solo que es extraño tener una compañera nueva —comentó, sonrojada.

Ashido soltó una pequeña risa.

—Es normal, las acciones de Sango tienden a tener ese efecto en las personas —explicó la pelirrosa—, ella es realmente una persona un tanto misteriosa. Pero cuando la conoces no puedes evitar querer ser su amiga.

—Estuviste con ella en secundaria ¿no? —preguntó hakagure.

Mina asintió.

—Al principio se veía un poco inaccesible, pero poco a poco nos fuimos acercando a ella y nos dimos cuenta que era una persona realmente agradable, simplemente es un poco tímida.

—Parece llevarse muy bien con Kirishima —expresó Hakagure.

Mina rió con picardía.

—Demasiado bien —dijo Mina, meneando las cejas.

—Oh, ¿es así? —preguntó Hakagure, sabiendo las intenciones de su amiga.

—Realmente creo que harían linda pareja, siempre lo he creído, pero Kirishima siempre ha sido muy firme en eso de no confesarse —dijo Mina—. Creo que es porque en ese entonces Sango tenía alguien que le gustaba. Pero ahora los tiempos han cambiado.

Justo en ese momento, la chica de cabellos azul verdosos entró a las duchas, fue entonces cuando todas se quedaron en silencio. Todas rezaban por qué la chica no se diera cuenta que estaban hablando de ella.

Luego de cinco minutos, los sonidos del agua cayendo cesaron, fue entonces cuando ella apareció frente a ellas y se adentró a las termas.

—Que día —susurró, manteniendo sus ojos cerrados.

Luego de diez largos segundos en completo silencio, Sango abrió los ojos y observó el ambiente.

—Lo siento, ¿las incómodo? —preguntó.

—¡No! Para nada —exclamó Momo, rápidamente.

Sango las observó con una sonrisa:—Tal vez es porque no nos hemos presentado apropiadamente, aunque, no creo que esta sea la mejor situación para presentarme —la chica soltó una pequeña risita que aligeró el ambiente—. Es un placer conocerlas.

—Igualmente es un placer —dijo la chica invisible—. Mi nombre es Hakagure Tōru.

—Yo soy Kyoka Jirou —se presentó la azabache de cortos cabellos.

—Es un placer —dijo, Sango—. A Mina y Yaoyoruzu ya las conozco, aunque, creo que faltan otras dos chicas ¿cierto?

—Uraraka y Tsuyu no deben tardar en llegar —dijo Yaoyoruzu.

Sango soltó un largo suspiro.

—Siento no haberme presentado apropiadamente, Mina y Eijiro me monopolizaron todo el día, además estuve ocupada poniéndome al día con Yaoyoruzu —se excusó, haciendo sonrojar a Jirou al sentirse avergonzada por sus previas sospechas hacia ella.

—¡No te preocupes! Tendremos todo el año para conocernos —dijo Hakagure con emoción.

—Cierto —apoyó Kyoka.

El sonido de la puerta de los vestidores abriéndose hizo que las cinco chicas desviaran su atención.

—¡Oh! Uraraka, Tsuyu, vengan. Queremos que conozcan a Sango —exclamó Mina.

—No creo que esta sea la mejor situación para conocer a alguien, Kero —bromeó Tsuyu.

Sango sonrió.

—Eso fue lo mismo que dije yo.

—Soy Tsuyu Asui —se presentó la chica, observando cómo Sango sonreía.

—Un placer, Asui, soy Sango Ishiwaka.

—Por favor, llámame Tsuyu —dijo—, ya vuelvo. Iré a las duchas un momento. Kero.

Todas asistieron.

Mientras Tsuyu se alejaba, Ochako se acercaba a las aguas termales, adentrándose en ellas.

—Yo soy Uraraka Ochako, es un placer.

—Igualmente —dijo Sango.

—Realmente queríamos hablar contigo durante el almuerzo pero parecía que te estabas poniendo al día con Kirishima y Ashido —explicó rápidamente, realmente no quería que pensara que no la habían querido invitar a almorzar junto a ellas.

Sango sonrió tiernamente.

—Lo entiendo completamente, ambos estuvieron monopolizandome todo el día.

—¿Cómo te fue con tu mudanza? vi que cargabas varias cajas junto a Kirishima.

—Bastante bien, aunque terminé muy cansada, eran demasiadas cosas para guardar y acomodar —se quejó Sango—. Aunque gracias a Eijiro pude terminar rápidamente.

—¿Son muy cercanos? —preguntó Ochako.

—Somos buenos amigos —dijo ella con una sonrisa—, de hecho, estoy pensando en cocinarle algo para agradecerle.

—Oh, ¿te gusta cocinar? Yo no sé mucho de cocina pero me gustaría aprender —dijo Ochako—. Sabes, uno de nuestros compañeros también suele hacer unos postres deliciosos...

La conversación fluyó naturalmente, aunque por esta misma razón las siete chicas se mantuvieron demasiado tiempo en las aguas termales.

—Ah, debimos seguir hablando después del baño —se quejó Mina, mientras tomaba agua y se sentaba frente al gran ventilador que ayudaba a todas a disipar la gran sensación de calor que tenían.

Kirishima las observó con una sonrisa.

—Parece que Sango ya comenzó a hacer amigas —dijo, para luego devolver su vista hacia el video juego que jugaba con Denki.

Denki, quien estaba demasiado concentrado en tratar de ganar, solo respondió con un breve: "ajá".

El sol de la mañana se filtraba a través de las cortinas de la amplia sala, iluminando suavemente los rincones de la habitación. Sango respiró profundo, sintiendo ya el cansancio profundo debido a la extensa lectura que había comenzado desde tan temprana hora, tomó la taza de té que había preparado y se la llevó a los labios.

—Oh —exclamó alguien en un susurro, distrayéndola de su lectura.

En ese momento, sus miradas se cruzaron.

Los ojos dorados de la chica parecían querer perforar su ser, no obstante, el chico con heterocromía no se quedó atrás. Las miradas de ambos eran filosas pero al mismo tiempo había un vestigio de curiosidad en ellas.

—Buenos días —susurró ella, volviendo a su lectura.

—Buenos días —respondió él, cortésmente.

Ambos se quedaron en silencio mientras él se dirigía a la cocina a calentar algo de agua para su té, sin embargo, fue grata su sorpresa al encontrar el té ya preparado.

—¿Puedo tomar algo de té? —preguntó.

—Claro, lo preparé para quien quisiera —respondió.

—Gracias.

Shoto caminó silenciosamente hacia el sofá en donde se encontraba ella, sentándose a su lado con un puesto de distancia, respirando en puro aire de la mañana.

—Es un poco temprano para estudiar —Shoto la miró por el rabillo del ojo.

Ella suspiró, cerrando su libro para luego dejarlo sobre la pequeña mesita frente a ellos.

—Nunca es muy temprano o muy tarde para ejecutar una acción que a la larga te puede beneficiar —dijo, para luego tomar un poco de su té.

Shoto hizo una expresión de desagrado ante aquel dicho.

Antes de que él pudiera responder, el bullicio detrás de ellos lo detuvo, sus demás compañeros habían comenzado a despertar y se dirigían hacia donde ellos se encontraban. Ambos se quedaron en silencio, escuchando como las voces de sus compañeros cada vez se escuchaban más y más cerca.

Sango se levantó mientras Shoto la observaba.

—Iré a alistarme —anunció, haciendo una pequeña reverencia de despedida ante él y caminando hacia los baños, no sin antes llevar su taza de té a la cocina y lavarla.

Shoto la observó irse y, cuando se fue, observó el libro que ella había dejado sobre la mesa. Él frunció el ceño.

No pensaba ir tras ella para devolvérselo.

—¡Buenos días, Todoroki! —exclamó Izuku con efectividad—. Hoy despertaste más temprano de lo normal.

Shoto asintió:—Buenos días —respondió cortésmente—. Fui a trotar esta mañana.

—Eso lo explica todo —dijo Ochako, uniéndose a la conversación—. Vi que Sango pasó por aquí, nos saludó cuando iba pasando, ¿te la encontraste?

Shoto asintió.

—Ella preparó algo de té, estaba estudiando.

—¿Hablaste con ella? Es muy linda —dijo Ochako con ilusión.

Shoto negó:—No hablamos —aclaró—. Simplemente me dijo lo del té.

—Oh, entiendo —Ochako lo miró con confusión.

La castaña se dirigió a la cocina y se sirvió algo de té, bebiendo de este mientras caminaba hacia el sofá en donde se encontraban sus amigos conversando.

—Está delicioso —susurró, sonriendo.

Izuku, quien conversaba animadamente con Shoto, observó el libro sobre la mesa:—¿Es tuyo, Todoroki?

Él negó con la cabeza:—Ishiwaka debió haberlo dejado.

Ochako tomó el libro para luego tomar tu último sorbo de té:—Yo se lo llevaré.

—Pareces llevarte realmente bien con la chica nueva —dijo Izuku.

Ochako sonrió ampliamente.

—Es realmente agradable estar con ella, hay algo refrescante que hace que no puedas evitar querer hablar con ella de nuevo, además es muy divertida.

Shoto simplemente se limitó a observarla desvariar de Sango como si la conociera de toda la vida, mientras, Izuku sonreía al escuchar aquellas cosas.

—Espero poder conocerla pronto —Izuku sonrió ampliamente, retomando su conversación con Shoto mientras Ochako se dirigía hacia el dormitorio de Sango.

Ochako, quien se encontraba frente a la puerta de la habitación de Sango, tocó la puerta.

—Adelante —se escuchó desde el interior.

Al abrir la puerta, ochako sintió como un delicioso aroma de lavanda y vainilla golpeaba su nariz, aquella habitación no era para nada como la había imaginado. La atracción principal era un escritorio con una computadora bastante modera, este estaba decorado con figuras de lo que Ochako especulaba eran caricaturas y junto a este había un pequeño horno puesto sobre una mesita, en la pared contraria había un pequeño librero repleto de libros junto a un espejo de cuerpo completo. La cama era grande, aunque no tanto como la de Momo, y estaba decorada con un peluche de una serpiente negra.

"Pensé que su habitación sería como la de Yaoyoruzu". Pensó Ochako.

—Ishiwaka, dejaste este libro en la sala común —la mencionada sonrió, tomando el libro y ubicándolo en su librero.

—Gracias, Uraraka —sonrió—. Tengo unas galletas en el horno. ¿Quieres algunas? Salen en dos minutos.

Uraraka asintió repetidas veces.

—¡Claro! —exclamó efusiva.

Sango sonrió mientras secaba su cabello.

Ochako la detalló en esos dos minutos. Fue allí cuando se dio cuenta que Sango era realmente hermosa, casi devastadora, mientras las gotas de agua escurrían por su cabello ella creyó ver una sirena.

—El uniforme es lindo —comentó Sango, rompiendo el silencio.

—La verdad siempre creí que el de Shiketsu era mejor —comentó Ochako—. El sombrero que llevan siempre me ha parecido un detalle muy lindo.

Sango sonrió ampliamente:—¿Verdad que sí? Aunque obstaculizaba para hacerse algunos peinados lindos.

—¿Te gusta hacerte peinados para la escuela?

Sango se encogió de hombros.

—De vez en cuando, solo para variar un poco.

—Yo no suelo hacerlo, siempre estamos en entrenamientos y mi cabello es muy corto —comentó cabizbaja.

Sango la observó, ladeando la cabeza:—¿De qué hablas? Tu cabello es precioso, además, creo que podría hacerte un peinado que resista los entrenamientos.

Ochako la observó con ilusión.

—¿En serio?

Sango asintió.

El sonido de una campana las interrumpió:—Las galletas están listas.

Delicadamente sacó las galletas del horno y tomó un pequeño plato de plástico para poner un par de ellas y dárselas a Ochako.

—Desayuna, alístate y buscame, te haré un peinado muy lindo cuando termines —dijo, sonriente.

Ochako sonrió.

—¡Si! —exclamó felizmente.

Eijiro, quien pasaba por allí y observó la escena, no pudo evitar quedarse ensimismado al observarlas. Su corazón se aceleró mientras observaba a Sango sonreír.

—¿Qué ves? —preguntó Sero detrás de él, mirando hacia la misma dirección de Kirishima—. Parece que Kaminari tenía razón.

—Claro que no —negó, sonrojado, caminando hacia el área común mientras Sero se burlaba de él.

Ishikawa miró como todos sus compañeros se encontraban enfocados en realizar su entrenamiento, sin embargo, también sentía que de alguna manera era observada.

El entrenamiento consistía en pelear contra los clones de Ectoplasm, era un entrenamiento bastante sencillo para practicar habilidades especiales, pero realmente se sentía un poco incómoda ante aquel sentimiento de ser constantemente monitoreada.

—¿Por qué no entrena? —susurró Izuku para sí mismo, destruyendo su quinto clon.

Fue entonces cuando de repente él clon de Ectoplasm fue tragado por la tierra.

Literalmente.

Izuku frunció el ceño, confundido.

—¡Profesor! Necesito otro —exclamó Sango, levantando su mano.

El peliverde se sentó por un momento, la observó mientras ella tomaba una botella grande de agua que llevaba en su cinturón de utilidad y la dejaba destapada en el suelo.

Cuando el clon estuvo frente a ella, la aspirante a héroe no vaciló antes de hacer levitar una corriente de agua, congelarla y enviarla volando al objetivo para atravesarlo.

—¡Oh! —exclamó Izuku—. ¿Control de elementos?

Mientras la observaba acabar con otros dos clones, Izuku se percató que su teoría era incorrecta, Sango no parecía poder manipular fuego ni viento ya que nunca utilizó ninguno de esos dos elementos.

Sango, quien ya había destruido cinco clones, observó a Izuku al percatarse de su insistente mirada. Fue entonces cuando ella señaló a Shoto y luego se señaló a sí misma mientras lo observaba.

Izuku se sonrojó, avergonzado:—Mitad mitad —susurró.

"Dios, qué vergüenza". Pensó, realmente no quería ser encontrado espiando a Sango, sin embargo, su curiosidad y su pasión por los dones pudo más que su autocontrol.

Ella, por su parte, asintió mientras sonreía.

—Oh, vaya —exclamó Izuku, tapando su rostro sonrojado.

Katsuki, quien observó desde la distancia, bufó.

"Otro jodido mitad mitad". Pensó, mientras destruía su décimo clon. Realmente no le interesaba que hubiera o no un nuevo estudiante en Yūei, pero, si ella realmente ameritaba un peligro en cuanto a ser el mejor él no lo pasaría por alto.

—¡Ouch! —exclamó Eijiro.

Sango, quien se encontraba cerca de él, saltó hacia su columna de entrenamiento mientras sostenía su termo de agua.

—¿Estás bien, Kirishima? —dijo Aizawa, llegando hacia donde estaban ellos dos.

—Si, es solo que estoy practicando mi velocidad de endurecimiento localizado y sin querer no endurecí antes de golpear el pilar —explicó, mostrando sus nudillos.

—¿Quieres ir con recovery girl? —preguntó Aizawa.

—No quiero molestarla con algo tan pequeño, además, no creo que sea necesario —dijo, observando a Sango ir hacia donde él y tomar su mano.

Aizawa los observó.

Sango tomó la mano de Eijiro y colocó un pequeño globo de agua sobre la herida, curándola después de unos segundos.

Aizawa levantó las cejas, sorprendido.

—El cuerpo humano está constituido por un setenta por ciento de agua, puedo usar el agua como catalizador para curar heridas debido a esto, dado a que el agua restablece las propiedades de los cuerpos que están compuestos de esta —explicó.

Eijiro la miró con una sonrisa de orgullo.

—¡Kirishima! ¿Ya estás lastimándote otra vez para que Sango vaya a curarte? —gritó Mina desde la distancia.

Eijiro se sonrojó al ver cómo Sango reía ante aquel comentario.

—¡No fue apropósito! Herirse a sí mismo a propósito para ser curado no es nada varonil —exclamó, escuchando como Mina y Denki reían.

—¡Mírate, tu cara está casi tan roja como tu cabello! —exclamó Mina, para luego reírse.

Mientras algunos reían, Aizawa observó a Sango por unos segundos, mientras ella se aseguraba que Kirishima no tuviera alguna otra herida adicional mientras contenía una pequeña risa. El profesor suspiró, fatigado, las particularidades de control eran algo realmente problemático.

Después de media hora el entrenamiento terminó y todos partieron hacia los vestidores para prepararse para su siguiente clase, a pesar de esto, al ingresar al aula Sango fue rodeada por sus compañeros, quienes los bombardearon con preguntas

—Entonces, Ishiwaka es igual a Todoroki —dijo Denki.

—No realmente —respondió la mencionada.

—En términos de poder, ¿Quién crees que ganaría? —preguntó Mineta, imaginando una escena en donde ambos mitad mitad peleaban como Kaijus al estilo de Godzilla.

—Eso no sucederá —Sango descartó la idea de Mineta de inmediato, caminando hacia su escritorio mientras era seguida por sus compañeros.

—No deberías descartarlo por completo, podrían enfrentarse en el festival deportivo de este año —explicó Mina.

Sango soltó un largo suspiro de cansancio.

—Nuestras particularidades son similares, más no estamos en las mismas condiciones —explicó—, Todoroki es capaz de crear fuego y hielo de la nada. Yo no puedo hacer tal cosa.

—¿A qué te refieres? —preguntó Ojiro.

—Todoroki es capaz de crear y controlar, yo solo puedo controlar, si no tengo tierra o agua cerca mi particularidad es inútil —respondió—. Aunque son dos situaciones que nunca se me han presentado.

Izuku la observó por varios instantes para luego desviar su vista hacia su libreta.

En términos de ventaja, Todoroki poseía la ventaja al poder usar su particularidad en situaciones en las que Sango no podría, como estando en el aire o en un avión. Pero él no podía dejarse guiar solo por eso.

Midoriya aún no sabía la magnitud de su poder y que tan peligroso podría llegar a ser este si estuviera fuera de control.

—Midoriya, lo estás haciendo de nuevo —avisó Shoto, quien escuchaba como Izuku susurraba palabras con tanta rapidez que él no lograba comprender la mayoría.

—Lo siento —dijo, avergonzado—. Todoroki, ¿Qué opinas del don de Ishikawa?

El mitad mitad soltó un bufido y, por primera vez en mucho tiempo, Izuku logró ver aquella expresión de molestia que Shoto solía hacer antes del festival deportivo cuando estaban en primer año.

—No es nada impresionante, solo es un don del montón —comentó.

Izuku se sorprendió ante aquel frío comentario. Él solo hablaba de esa manera cuando hablaba sobre una sola persona.

En ese momento algo dentro del peliverde hizo: "click."

Ayer no lo había recordado, pero tanto el apellido como la apariencia de Sango se le hacían familiares, ahora con la muestra de su don no había dudas.

Sango Ishikawa era hija de héroes profesionales

Buenas buenas

Tardé un poco en subir el segundo capitulo, técnicamente estuvo listo la misma noche que el primero, sin embargo había algo en la tercera parte del capitulo que no me gustaba asi que me quedé mucho tiempo pensando en que escribir en esa parte. 

Finalmente hoy lo terminé, son las 11:16 pm en mi país y de repente lo pensé. 

En fin, espero les esté gustando la historia, siento que hoy se ataron algunos cabos. 

Espero poder leerles en los comentarios. 

Gracias por leer <3