Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 42: 🔞Reconciliación🔞

— ¿Eh?

—Perdóname por no decirte antes Eli, tu papá y el mío son solo buenos amigos.

—O sea.... ¿Qué me dejaste hacer el ridículo?

—No lo mires así, si pudiste demostrar tus sentimientos no fue en vano.

—Jeon dime que estas jugando conmigo y que todo este papelazo que hice fue con una razón.

Había enmudecido, ya no sé cuál sería la respuesta correcta... Ella yacía frente a mí con la cara de un color rojo algo peligroso. Mi instinto de supervivencia me decía que ese calor en sus cachetes no era de vergüenza.

—Amor yo...

No pude terminar la frase ya que casi soy golpeado por su pequeño bolso en la cara. Gracias al cielo que me dio estos reflejos dignos de envidiar pude esquivar el golpe.

—Jeon... Solo déjame preguntarte algo... ¿Lo hiciste adrede?

— N... no Eli— Dios por qué siento que tendré que rogar por mi vida— Es solo que no me diste tiempo.

— ¿Tiempo? ¿De qué tiempo hablas?

—A decírtelo amor.

— ¿A no? Mira Jeon— Suspiró haciendo una pausa. ¿A caso será una buena señal?— Si tu intención es divertirte a costa mía te aviso que estás jodido.

Empujó mi hombro y fue a recoger la cartera en el piso a unos centímetros de mí. Luego se dispuso a seguir caminando pero no dejaré que se vaya, necesito que me perdone primero.

— ¿Qué haces Eli?

—Esta payasa de aquí se retira de tu espectáculo Jeon. Esto se acabó oíste.

Su rostro reflejaba a la perfección la gravedad de sus palabras, sé que no está bromeando. ¿Por qué me metí en esto? ¿Por qué no hice caso a lo que Mel me dijo? Coño que la he jodido.

— Eli no digas eso, pensar con la cabeza caliente no es bueno— Me dispuse a seguir su paso.

—Jeon vete al carajo.

— Elizabeth— Tomé su muñeca para detener su paso e intentar convencerla de que se quede.

— ¿A caso eres sordo? Te dije que...

— Elizabeth no actúes como una cría— Creo que no debí decir eso.

—Ja, no mereces que siga hablando contigo. Es bueno saber que me vez como una niña y para el colmo, payasa. Ahí te ves Kook.

Se soltó de mi agarre y continuó con lo que hacía. Ya no sé que hacer, la situación se ha ido de mis manos... Me mantengo estático revolviendo mi pelo con rabia. Solo desearía que algo pasara y le impidiese alejarse.

El chirrido de una goma contra el pavimento me sacó de mis pensamientos. Es claro que se trata del frenazo brusco de algún vehículo, miro a donde provino el sonido y lo que veo me hace querer estallar de los nervios.

Unos focos brillantes iluminan la silueta de Eli que se encuentra sentada en el suelo. Sin más que analizar me lancé a la calle, necesitaba comprobar su estado. Si algo le sucedió, tan solo un rasguño, no me lo perdonaré.

— ¡Eli!— Comencé a recorrer su cuerpo con la vista mientras agarraba sus hombros con horror.

—Estoy bien.

Me tranquilizo al ver que todo fue una simple mala impresión. Tras comprobar por mí mismo lo que me dijo con sus palabras, dejo escapar un amplio suspiro.

— ¡Perdona señorita! ¿Se encuentra bien?

Un señor algo mayor, que al parecer era el que manejaba el auto, salió a socorrernos.

— Todo está bien señor— Me puse de pie para dirigirle la palabra.

— Perdone, fue mi culpa.— Agrega Eli.

—No se preocupe, lo que importa es que está bien.

— Gracias señor— Mi chica hizo una notable reverencia y comenzó a alejarse de nosotros.

—Gracias, muchas gracias. 

Le agradecía como si fuera un loco. ¿Quién actuaría así cuando casi terminan atropellando a su novia? Pero yo vi eso como la respuesta del universo a mi pedido. Está más que claro que no puedo dejarla ir. Corrí hasta poder estar frente a ella y la miré sonriente, aún un poco agitado por la corta persecución.

Se le notaba desorientada, imagino que esa mueca en sus labios debe ser porque no entiende mi notorio cambio de humor. Animado por las circunstancias me agaché un poco y tomándola por la sintura la cargue sobre mi hombro. No la dejaré escapar.

— ¡¿Ahora qué?!

— ¿Tú que crees?— Le propine una leve nalgada como regaño por haberme hecho pasar ese susto hace unos instantes.

Sin contestar a ninguna de sus preguntas y reclamaciones proseguí a caminar hasta llegar a mi casa. La puerta principal no tenía cerrojo, puesto a que cuando salí a buscarla no medí estos detalles. Subí a la segunda planta y la arrojé a mi cama acabando así con sus contundentes golpes en mi espalda. Fui a mi escritorio y tomé las llaves de la habitación. Me acerqué a la puerta y salí dejándola encerrada en la misma.

Es obvio que no pienso dejarla allá dentro, pero primero necesito asegurar unas cuantas cosas aquí en casa y dudo que ella lo permita si la dejo libre. Volví al primer piso para cerrar correctamente la puerta principal, agarré el celular que descansaba en el bolsillo de mi pantalón de pijama y le envié un mensaje a Mel para avisarle de que todo estaba bien entre Eli y yo. Luego fui a la cocina y tomé un pomo con agua para llevárselo a Eli, será bueno para que se calme. Antes de subir las escaleras me percato de que algo andaba mal con mi pullover, por lo que me lo retiro para ver mejor.

¡Diossss está chica es una verdadera fiera! Dejó pequeños rasgados en mi prenda de vestir. ¿Cómo diablos logró hacer eso? Tendrá que pagar por esto, es una niña realmente malcriada. Mantuve la camisa en mi mano y agarré la botella de agua con la otra.

Abrí la puerta de la habitación y dejé caer la parte dañada de mi pijama a uno de los costados de su cuerpo en la cama. Le di el agua y proseguí a asegurar la cerradura del cuarto. Si quiero ser perdonado debo aprovechar este incidente, volví junto a ella sentándome en la silla de mi escritorio, la cual coloqué frente a ella. La miraba serio, quería aparentar frialdad y molestia.

—Antes de que reclames cualquier cosa quiero que me digas que le hiciste a mi camisa.

—Hice lo que tenía que hacer. ¿Cómo esperabas que reaccionara ante tu acto de acosador?

Su actitud no se afloja fácilmente, creo que tendré que actuar más rudo.

— Ok— Relajé mi postura, arrecostandome al espaldar del asiento— Esa pijama era importante para mí, tendrás que pagarla.

—Está bien, pagaré este estúpido pedazo de tela. ¿Cuánto costó?

—100 000₩.

—Espera. ¡¿Qué?! ¡¿Cómo puede costar tanto algo que se usa para dormir?!

Simplemente me encogí de hombros y me dispuse a disfrutar del espectáculo... Bastaron solo unos minutos para verla hecha un lío, tratando de inculparme y lanzando análisis que pudiesen darle la razón. Pero inteligentemente permanecí callado, sé que si digo algo puede ser utilizado en mi contra y no estoy dispuesto a darle esa ventaja.

—Está bien, tú ganas... ¡Perdona! ¿Estás contento?

Negué ante su pregunta. La verdad no estaba satisfecho, verla así de alterada y dominante me ha puesto un poco imaginativo.

— ¿Qué más quieres que haga?

—Olvídalo, solo págame.

En realidad sí podía hacer algo por mí, pero no me arriesgaré a ser golpeado nuevamente por ella si le hago tal oferta. Necesito luchar fuertemente contra mis instintos.

—Ya te pedí perdón Jeon... Sabes que no cuento con esa cantidad en estos momentos, aún no he recibido nada de mi padre.... y la pensión que recibí este mes ya está llegando a su fin.

—En ese caso tu situación ha empeorado.

—Dije que haré lo que quieras, no soporto deber nada.

— ¿Estás segura?

— Dije que sí— Se le notaba rendida, su expresión facial y sus brazos cruzados sobre su pecho lo indican.

— Entonces....— Abandoné mi puesto para sentarme a su lado y mirarla más de cerca— Perdóname Eli.

— ¿Tan bajo haz caído Jeon?

— ¿Prefieres deberme dinero entonces?

— Ah— Suspira obstinada— Está bien, te perdono. ¿Feliz? Entonces ya me voy.

— No vas a ningún lado esta noche— Tomé su brazo deteniendo su acción en el aire y volví a atraerla a la cama.

Sin dejarla opinar la besé, sé que fue algo inesperado pero si la dejo ir terminaré arrepentido. Ocupé sus labios con un apasionado beso, debo admitir que he estado queriendo esto durante toda la pelea.

La deseaba y el intenso obrar de mi lengua en su boca me delata. Besarla se me hacía tan placentero. Un intenso calor recorre mi cuerpo, me estoy comenzando a excitar... ¿A caso será porque no obtuve resistencia de su parte? ¿Esa actitud de ella será la que me está haciendo sentir de esta manera?

Verdaderamente esperaba que presentara alguna oposición, pero todo fue muy por el contrario, me besó de manera firme y madura. Puedo hasta decir que es la que ha comenzado a liderar el beso. Su forma dominante está gustándome. ¿Esta es la Eli que conocía?

Cualquiera que sea la respuesta creo que me la dará en breve, pues no sé en qué momento hemos terminado en esta posición. Yo recostado en la cama y ella a horcajadas sobre mí. Nuestro beso, cada vez más intenso, muestra nuestras verdaderas intensiones hacia el otro. Una de sus lindas manos recorre mi torso desnudo cubierto por una fina capa de sudor, mientras las mías la agarran de la cintura.

Agitados finalizamos ese candente beso para mirarnos a los ojos, sus lindas pupilas me observan con lujuria, tal y como lo hacen las mías. Con mis manos aún en sus costados, intento incitarla a continuar con la acción. Tomé cada extremo de su blusa y los comencé a subir suavemente. Esperaba a que me detuviera o pusiese peros en lo que estábamos haciendo, pero no lo hizo sorprendiendome nuevamente. Vaya, esta Elizabeth está acabando con mi autocontrol, me gusta.

Me deshice de su blusa e hice un movimiento para dejarla bajo mi cuerpo. Comencé a esparcir besos coquetos en su cuello y los fui bajando lentamente hasta parar justo en su busto.

—Ko...Kookie espera.

— ¿Pasa algo amor?

—Es solo que... ¿Podemos apagar primero las luces?

— ¿Por qué amor?

—Es que me da un poco de vergüenza... ¿Sabes qué quiero decir?

—Pero amor, si tu cuerpo me encanta. Es más, mira como me pones.

Me quité de encima de ella para bajar mis pantalones y mostrarle cuán excitado me tenía. Se que lo que hice le pareció algo brusco, pero creo que esta es una clara prueba de cuánto me gusta.

—Ven aquí preciosa.

Me acerqué y la atraje hasta el borde de mi cama, tomé su mano y la coloqué sobre mi erección, hice que la acariciara en toda su longitud sobre mis boxers. Sus mejillas algo rosadas me indican que en el fondo está disfrutando de esto, tanto como yo.

— ¿Ahora haz cambiado de opinión?

Asiente disimulando una leve sonrisa y aprovecho para volver a besarla. Me arrodillé colocándome entre sus piernas, desabroché su short y entre besos la ayudo a pararse para retiraraselo. La abracé y besé con intensidad, ella realmente me gustaba y quería hacérselo saber.

Poco tiempo después la situación se puso más intensa, nuestra ropa interior descansaba en el suelo y nuestros cuerpos desnudos se alojaban en la cama. Ella sobre mí mantenía esa imagen que tanto me estremecía, su hermosa carita con aires dominantes. Eso me hacía querer introducirme en ella y hacerla sentir como la reina que es.

— ¿Estás lista?

—Sí Kookie.

Enterré mi miembro en su feminidad de un solo movimiento. Su gemido de placer obligó a que otro mucho más grave brotara de mis labios. Es estrecha, es exquisita. Sus caderas comenzaron a moverse y... Que bien se siente... Demasiado. Mis ojos comienzan a cerrarse ante tanta satisfacción. Diablos Eli, ¿qué es esto que me estas haciendo?

Impaciente comencé a moverme también, pero a diferencia de como ella lo ha hecho todo estos minutos, mis movimientos eran más potentes. Entraba y salía de ella a mi antojo, el impacto entre nuestras pieles hacía resonar un fuerte sonido contra las paredes de mi habitación. Sus tiernos jadeos me estaban volviendo una fiera, y que decir de su cuerpo totalmente sudado. Tener esta imagen frente a mis ojos era lo mejor que me podía pasar.

Su vagina comenzó a estrecharse más de lo normal, la fricción que aplicaba en mi polla tenía un efecto descomunal sobre mis sentidos. Estaba llegando a mi límite, podía sentirlo y al parecer Eli también.

Fueron pocos los minutos para que el clímax llegara. Tuve cuidado de venirme fuera de Eli, pero eso no impidió que disfrutaramos del momento de habernos corrido juntos. Sin duda esta ha sido la mejor noche que he tenido en mi vida, porque pude hacerlo con la única mujer que me gusta sobre la faz de esta tierra.

— Kookie...— Se le notaba tímida por lo que me atreví a completar la frase.

—Te amo.

Sus labios me sonrieron de la forma más dulce en la que alguien lo ha hecho antes. Esta es la Eli que tanto amo y que me dedicaré a conocer a fondo, aunque me tome 10000 horas o una vida completa.

+++Bonus💜+++

(Kookie quitándose la piyama)

(Kookie dándose cuenta de que está rota)

(Para liviekookie)

⚠️Advertencia⚠
Esta historia fue escrita originalmente en Whattpad, si la estás leyendo en otra plataforma es posible que seas víctima de un virus o un malware.
Si quieres saber más de esta historia te invito a visitar mi perfil https://truyen247.pro/tac-gia/WTata2305 en Whattpad. Es gratis y puedes leer sin problemas.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro