— No. Eso es lo que quería decirte Mel, hoy vine a tu casa a encontrarme— Traga en seco mientras da un paso al frente— Con mi hermano.

Un incómodo silencio inunda la sala abrigándonos a todos a su paso. Cynthia y yo simplemente miramos a nuestra amiga con los ojos agolpados por la sorpresiva noticia y sé que luchamos por evitar que nuestras mandíbulas pierdan su fuerza dejando nuestras bocas abiertas. Los demás solo observan. Suga mira las expresiones en el lugar sin entender el por qué de las mismas.

Esa es la única información que han podido captar mis ojos, ya que la lógica está trabajando fuertemente en mi cabeza. Es verdad que Eli porta rasgos asiáticos pero pensaba que era extranjera, su cabellera rubia y su perfecto español me engañaron por completo. Es verdad que su coreano es bastante bueno, pero pensé que lo había desarrollado durante el tiempo de escuela junto a nosotras.

Ella nunca nos habló de su familia, ni de sus padres y nosotras nunca la forzamos a que nos dijera nada... Solo había mencionado que habían fallecido y que no tenía ningún otro familiar. Pero juntando las versiones, lo que sabía ella y lo que HoSeok nos dijo a mí y a Tae ayer en la tarde, puedo afirmar lo doloroso que tuvo que haber sido para ella enterarse del pasado que nunca buscó ni deseó saber.

— ¿Q...qué...?— Tartamudea Cynthia atónita.

— ¿Amor pasa algo?— Tae se acerca mirando mi rostro con cuidado.

— Ah— Vuelvo a la realidad— No, nada. Solo es la sorpresa del momento.

— ¿A caso se conocían?— Cuestiona Min Suga dirigiéndose a nosotras.

— Sí, somos amigas— Responde Sofi.

— Vaya coincidencia— Opina HoSeok portando un rostro incrédulo.

Luego de esos minutos incómodos llenos de cortas interrogantes, decidimos tomar asiento y aclarar las cosas. Suga presentó a Eli y a Tae correctamente. Por lo visto ambos se lo tomaron bien, por parte de Eli puedo deducir que es porque ella lo ha conocido a través de los comentarios que he hecho de él y siempre ha tenido buena opinión del chico. En cuanto a Tae imagino que se siente más tranquilo al saber que ella es mi amiga... Sabe que si tiene alguna duda acerca de ella puede recibir mi ayuda. En cuanto a los demás presentes solo presenciaban ese primer encuentro, la única actitud resaltante era la de Kook. Su mirada recorría cada centímetro de Elizabeth, si ella lo notara estaría hecha un manojo de nervios.

— Me gustaría conversar un poco contigo en privado si es posible— Todos entendemos dicha petición y yo reacciono rápidamente para que nadie tuviese que abandonar el salón.

— Pueden subir a mi habitación si lo desean— Sugiero amablemente.

— Gracias amor— Dedica una tierna sonrisa en mi dirección.

— Los demás esperaremos aquí— Concluyo

Ambos asienten y suben al piso de arriba, sin embargo la tensión que existía hasta hace unos instantes en el salón ha desaparecido a los pocos segundos. Las conversaciones comienzan a fluir en el pequeño grupo de amigos que permanecemos en la sala.

— Mel iré a por más sodas— Anuncia Cynthia.

—Claro, puedes buscarlas en el frío.

—Yo prepararé más bocadillos.

— Gracias Jimin— La parejita se dirige a la cocina.

— Yo debo irme ya— Habla Suga mirando a su reloj nuevamente y abandona su asiento estirándose un poco.

— ¿Por qué tan rápido?— Intenta retenerle HoSeok.

—Mañana tengo una reunión a primera hora.

— Es cierto. Fue un placer compartir con todos ustedes— Esa adorable sonrisa de Sofi remueve el corazón de todos.

— En ese caso los acompaño a la salida— Avanzo con ambos chicos y una vez salieran por la puerta intercambiamos saludos por última vez.

—Mel mantente pendiente a Tae esta noche, ha sido una noticia algo fuerte y no es saludable que lo asimile solo.

—No te preocupes Sofi. Mantendré mi atención solo en él.

— Espero nos veamos pronto— Menciona Min Suga y ambos bajan la pequeña escalerita que guía a la acera.

Me impresionó oír tal cosa de Min, no creí que le gustase compartir espacios con muchas personas. Pero al parecer lo juzgué mal y me alegro mucho de eso. Yo también espero que estas reuniones se repitan, verdaderamente me agradan mucho todos los que estuvieron presentes en esta reunión. Los considero buenos amigos.

Cierro la puerta pintando una agradable sonrisa en mi rostro. Intento volver con los demás pero el agarre de Kook lo impide, detuvo mi paso en medio del pequeño pasillo.

—Mel, ¿podemos hablar?

—Claro. ¿Pasa algo?

—Verás... Es con respecto a Elizabeth. Es que llevo tiempo pensando en esto pero aún me siento inseguro.

— ¿De qué se trata?

—Creo que está empezando a gustarme, pero no creo que esté bien.

— ¿A qué te refieres? Taehyung y tú no son primos de sangre, lo que significa que ella tampoco lo es.

—No es eso lo que me preocupa... Es que no sé cómo llevar una relación y no quiero hacerla sentir incómoda... Yo no he tenido novias, ni relaciones serias antes. Solo he compartido algunas noches con alguna que otra chica.

— ¿Eso es lo que te preocupa?— Asiente con su cabeza dirigida hacia abajo mientras juega con sus deditos a la altura de su pantalón— Eso no es ningún problema. Solo debes dejarte llevar.

—Es que no puedo, las veces que me he dejado llevar han sido las peores.

— ¿A qué te refieres?

—Es que nuestros acercamientos no han tenido buenos resultados. Una vez retiré un arroz de su comisura ya que se había embarrado y aunque no reaccionó al instante terminó enojándose conmigo y no sé por qué lo hizo. Luego de eso intenté besarla y ella casi me pega.

—Ya veo

Los recuerdos de aquella conversación que tuvimos las chicas y yo en aquella cafetería reviven en mi mente y evito soltar alguna carcajada. Eli nos había contado de esos sucesos pero no nos dijo de su reacción tan "poco profesional". Pobre chico, le paga por su trabajo y ella casi le deja moretones. Clásico de ella... Pero eso no es lo más importante, será mejor que me concentre en darle algún consejo al pobre.

— No te preocupes por eso, significa que le gustas— Pongo mi mano sobre uno de sus hombros.

— ¿Tú crees?

—La conozco y sé que así es.

— ¿Entonces como crees que debo confesármele? ¿O no debería?

—Claro que debes. ¿Cuándo debe ir a tu casa a trabajar?

— Mañana viernes debe ir a supervisar su trabajo, digamos que mañana luego de revisar los detalles finales dejará de ir a mi casa— Baja su carita nuevamente algo triste.

—En ese caso debes aprovechar esa oportunidad al máximo. Aprovecha y prepárale una bonita sorpresa.

—Gracias Mel, me pondré manos a la obra una vez me despida de los demás y de ella.

—Entonces volvamos con los demás.

Tan pronto llegamos al salón notamos a los nuevos hermanos descender los escalones. Ambos portaban leves sonrisas lo que significa que todo fue bastante bien.

— Bueno ha sido un rato agradable, pero es hora de despedirme. Mañana tengo clase a primera hora— Se despide cortésmente.

— Déjame acompañarte.— Interviene Kook.

—No es nece...

— Vámonos entonces— Ambos chicos dicen su último adiós y abandonan el apartamento.

— Será mejor que Jimin y yo también nos vallamos— Luego de despedirlos vuelvo con HoSeok y Tae, los cuales hablaban de algo.

— ¿Amor crees que puedas esperarme arriba?— Asiento algo dudosa.

Subo los escalones y me adentro en el cuarto. ¿Qué habrá pasado que lo ha hecho pedirme que suba? ¿HoSeok tendrá algo que ver? Camino hacia mi cama pero una rara bolsa sobre la misma hace desaparecer mis preguntas... ¿Qué es esto? ¿Será mío? Me siento a uno de sus lados y la cojo entre manos para mirarla por fuera. Hay una pequeña tarjeta colgando de una de sus asas, la abro para leer su contenido...

[Cuando dices que me amas se siente como si estuviera caminando a través del cielo. Eres todo en este mundo para mí. Espero no lo olvides, eres mía. Incluso si no lo sabes, tienes lo mejor de mí.

♡Tu Tae♡]

Era un escrito de Tae, y lo amé al leer esas palabras. Es increíble como sabe sorprenderme en cualquier momento.

Luego de leer la nota prosigo a abrir la bolsa. Dentro había un hermoso abrigo de color gris, lo tomo en mis manos y saco de su envoltorio para luego abrirlo. La parte interior del mismo estaba cubierta por una capa de suave pelaje. Dejo descansar la prenda sobre mis muslos y me detengo a tocar su afelpado interior. En menos de dos semanas el frío volverá a reinar Seúl ya que a partir de mañana llega el otoño y este suele ser muy frío cuando está llegando a su etapa final.

— ¿Te gustó mi regalo?— La presencia de Tae interviene en la habitación.

— Sí, es un abrigo muy bonito— A decir verdad me gustó mucho, pero lo que más ame fueron sus palabras en la pequeña nota.

—Estaba comprando unas cosas hace unos días y lo vi. Me pareció muy bonito así que compré uno para cada uno.

—Muchas gracias Tae. No debiste molestarte.

—Es que en ese momento quería tener algo en pareja contigo y pensé que se vería muy lindo en ti.

—Estoy ansiosa porque llegue el invierno entonces.

— Yo también pequeña, para estar abrasándote todo el tiempo— Unas sonrisas acaloran nuestras mejillas— Será mejor que regrese a mi casa.

— ¿No quieres quedarte?— Me mira algo sorprendido, es que no quería dejarlo solo luego del acontecimiento de hoy.

— Es que no tengo ropa para cambiarme, y dudo que puedas prestarme una tuya— Ríe divertido mientras pasa una de sus manos por su nuca.

—Ah, ya veo. En ese caso, ¿crees sentirte bien estando solo en casa?

—Mmm... La verdad planeaba preguntarte si queridas pasar la noche conmigo allá.

— Es solo que...— Al mirar ese rostro tan adorable que intenta convencerme con la mirada me hace querer aceptar y ya— Está bien.

Siempre caigo derrotada ante sus caprichos, solo que hoy comprendo que necesite de compañía.

—Solo dame unos minutos para empacar alguna ropa para mañana.

Él asiente y sale de la habitación. Yo tomo algo presentable de mi closet y lo hecho en un bolso para alcanzarlo a los pocos minutos en la planta baja. Una vez listos salimos del apartamento y cerramos bien la puerta. Montamos su carro y emprendemos camino hacia su casa que está a unos 30min más o menos de la mía en auto.

El viaje se me hizo largo y no sé por qué. Todo el tiempo miraba de reojo a Tae para contemplar su figura. Es increíble lo lindo que es su rostro y lo masculina que son sus facciones de perfil. Puedo sentir como mi boca comienza salivar al ver como traga tan sonoramente. Eso me ha parecido tan sexy... Dios que estoy pensando, aparto mi vista de él y me concentro en la carretera. Creo que esto es efecto de lo que ayer no pudimos concluir.

Mi vista divaga en su dirección involuntariamente, ahora observo su postura al conducir. Es tan perfecto que me hace sentir algo nerviosa, y al mismo tiempo es tan varonil. Sus manos sostienen firme el volante y sus largos dedos rodean su grosor. Los dedos que me iban a hacer sentir la gloria, muero por sentirlos... ¡Ya basta de pensar tonterías! Necesito llegar de una vez, estar en espacios cerrados con él no me hace bien. Y como si fuera adivina estábamos a unos metros de la entrada de su lujosa casa.

Una vez dentro Tae fue directo a bañarse y yo me quedé en la planta baja esperándolo en la sala de estar. Aproveché para hablar con las chicas he intentar arreglar una cita para poder hablar con todas sobre lo que sucedió hace unas horas, en especial con Eli. A los minutos Tae baja y me sorprende con un tierno beso en la frente.

—Ya puedes usar el baño amor. ¿Podrías por favor usar lo que dejé sobre la cama para ti?

—Está bien Tae, entonces subiré a bañarme.

Asciendo las escaleras y busco la puerta de su cuarto para atravesarla. Al entrar veo sobre su cama una caja de color blanco, me aproximo y lo único que veo en su portada es el nombre de la marca GUCCI. Acerco mis manos a la tapa para descubrir de qué se trataba...

¿Qué creen que había dentro? Comenten lo que se imaginan😅😅
Bueno y hasta aquí el capítulo. Nos leemos el viernes, disfruten su semana♡♡.

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Y por supuesto el Bonus😉💜
Este es el abrigo que Tae compró en pareja para él y Mel.
♡.♡