Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

15

— Sr. Wang, está muy pálido. ¿Le gustaría un vaso con agua?

—Por favor. —Mi voz apenas era audible. Mi mente estaba acelerada.

¿Embarazado? ¿Cuando?

—Lo interpreto como que está sorprendido.

Asiento en silencio a la buena doctora mientras me alcanza un vaso de agua de su fuente de agua convenientemente ubicada. Tomo un leve sorbo.

—Asombrado —murmuro.

—Podríamos hacer un ultrasonido para ver cuán avanzado está el embarazo. Juzgando por su reacción sospecho que sólo tiene pocas semanas de concepción, cuatro o cinco semanas de embarazo. ¿Supongo que no está sufriendo de ningún otro síntoma?

Niego con la cabeza. ¿Síntomas? No lo creo, ni tan siquiera estoy seguro.

—Pensé… pensé que esta era una forma fiable de anticonceptivos.

La Dra. Qinling alza una ceja.

—Normalmente lo es, cuando te acuerdas de la inyección —dice fríamente.

—Debo haber perdido la noción del tiempo. —Yibo va a enloquecer. Lo sé.

— Vamos a hacer un ultrasonido ¿bien? Tengo tiempo.

Asiento, desconcertado, y la Dra. Qinling me dirige hacia una mesa de cuero negro detrás de la pantalla.

—Si sólo se quita el pantalón, la ropa interior, y se cubre con la manta sobre la mesa, vamos a partir de allí —dice rápidamente.

¿Ropa interior? Estaba esperando un escaneo de ultrasonido por encima del vientre. ¿Por qué necesito quitarme mi ropa interior? Me encojo de hombros en consternación luego rápidamente hago lo que dice y me acuesto por debajo de la blanca y suave manta.

—Así es. —La Dra. Qinling aparece al final de la mesa, empujando la máquina de ultrasonido más cerca. Se trata de una pila de ordenadores de alta tecnología. Sentándose, posiciona la pantalla para que las dos la podamos ver y corre el trackball del teclado.

La pantalla vuelve a la vida.

—Si pudiese levantar y doblar las rodillas, luego abrirlas —dice con la mayor naturalidad.

Frunzo el ceño con recelo.

—Este es un ultrasonido vaginal, anal en su caso. Si estás embarazado, deberíamos ser capaces de encontrar al bebé con él. —Ella sostiene una sonda larga y blanca.

Oh, ¡tienes que estar bromeando! Puta madre.

—Bien —murmuro, mortificado, y hago como dice. Qinling pone un condón sobre el tubo y lo lubrica con gel transparente.

—Sr. Wang, si pudiese relajarse.

¿Relajarme? Estoy embarazado, ¡maldición! ¿Cómo espera que me relaje?

Me sonrojo, y trato de encontrar mi lugar feliz… el cual estaba relocalizado en algún lugar cerca de la perdida isla de Atlantis.

Lenta y gentilmente inserta la sonda.

¡Maldita sea!

Todo lo que puedo ver es el equivalente visual al ruido blanco, a pesar de que es más que todo sepia. Lentamente, la Dra. Qinling mueve la sonda alrededor, y es muy desconcertante e incómodo.

—Allí —murmura. Presiona un botón congelado la imagen en la pantalla, y señala un Pequeño Bao en la tormenta sepia. Es un Pequeño Bao.

Hay un Pequeño Bao en mi vientre. Guao. Olvido mi incomodidad mientras miro aturdida el Bao.

—Es demasiado pronto para escuchar los latidos, pero sí, definitivamente está embarazado. Cuatro o cinco semanas, diría. —Frunce el ceño—. Parece que la inyección se acabó antes. Bueno, eso pasa a veces.

Estoy demasiado sorprendido para decir nada. El Pequeño Bao es un bebé. Un bebé de verdad. El bebé de Yibo. Mi bebé. Santo Dios. ¡Un bebé!

—¿Le gustaría que imprimiera una foto para usted?

Asiento, incapaz de hablar, y la Dra. Qin presiona un botón. Luego gentilmente remueve la sonda y me alcanza una toalla de papel para limpiarme.

—Felicidades, Sr. Wang —dice mientras me siento—. Necesitaremos hacer otra cita. Sugiero en cuatro semanas. Entonces podemos determinar la edad exacta de su bebé y establecer una fecha de parto probable. Puede vestirse ahora.

—Bien. —Estoy dando tumbos y me visto a toda prisa. Tengo un A-Bao, un Pequeño Bao. Cuando salgo detrás de la pantalla, la Dra. Qin está de vuelta en su escritorio.

—Mientras tanto, me gustaría que comenzara a tomar ácido fólico y vitaminas prenatales. Aquí hay un folleto de lo que debe hacer y lo que no. —Mientras me entrega un paquete de píldoras y un folleto, continua hablándome, pero no estoy escuchando.


Le doy a la Dra. Qin un cortés adiós y me dirijo en un nuevo aturdimiento hacia la salida y afuera en la tarde fría de otoño.

Me invade de repente un frío creciente un y un profundo sentimiento de aprensión Yibo va a enloquecer, lo sé, pero cuánto y hasta dónde, no tengo idea.

Sus palabras me siguen.

No estoy preparado para compartirte todavía. —Presiono mi chaqueta a mi alrededor, tratando de sacudirme el frío.

Saw salta de la camioneta y mantiene abierta la puerta. Frunce el ceño cuando ve mi cara, pero no hago caso a su expresión de preocupación.

—¿A donde, Sr. Wang? —pregunta gentilmente.

—Editorial. — Me instalo en el asiento trasero del coche, cierro los ojos y la cabeza apoyada en el reposacabezas.

Debería estar feliz. Sé que debo ser feliz. Pero no lo estoy. Esto es muy pronto. Demasiado pronto. ¿Qué pasa con mi trabajo? ¿Qué pasa con la editorial? ¿Qué pasa con Yibo y conmigo? No. No. No. Estaremos bien. Él estará bien. Él amó a Jia de bebé, recuerdo a Hyan diciéndomelo, la ama ahora.

Tal vez debería advertirle a A-Zi… Tal vez no debería decirle a Yibo.

Tal vez… tal vez debería poner fin a esto. Me detengo mis pensamientos en ese camino oscuro, alarmados por el rumbo que están tomando.

Instintivamente pongo mi mano a descansar protectoramente sobre mi vientre. No. Mi Pequeño A-Bao. Las lágrimas brotan de mis ojos. ¿Qué voy a hacer?

¿Que es lo que voy hacer ahora?

¿Que va a pasar?


Yibo…

Me despierto de un tirón. No. Él va a enloquecer.

Cuando Saw se estaciona afuera de la editorial, salgo y me dirijo al edificio.

—Zhan, es genial verte. ¿Cómo esta tu padre? —pregunta Hanna tan pronto llego a mi oficina.

La reconozco con frialdad.

—Esta mejor, gracias. ¿Puedo verte en mi oficina?

—Seguro. —Luce sorprendida mientras me sigue adentro— ¿Todo está bien?

—Necesito saber si has movido o cancelado alguna cita con la Dra. Qinling.

—¿La Dra. Qinling? Si, lo he hecho. Como dos o tres de ella. La mayoría de las veces porque tenía otras reuniones o llegabas tarde. ¿Por qué?

¡Porque ahora estoy embarazado, maldición! le grito en mi cabeza. Tomo una profunda, estabilizadora respiración.

—Si cambias alguna cita, ¿te podrías asegurar de que lo sepa? No siempre compruebo mi calendario.

—Seguro —dice Hanna tranquilamente—. Lo siento. ¿He hecho algo mal?

Niego con la cabeza y suspiro ruidosamente.

—¿Puede hacerme un té? Luego discutamos que ha pasado mientras he estado ausente.

—Seguro. Iré por él. —Alegremente sale de la oficina.

Miro la figura alejándose.

—¿Ves a esa mujer? —digo calladamente a A-Bao—. Quizá sea la razón de que estés aquí. —Palmo mi vientre y luego me siento un completo idiota, porque le estoy hablando a Bao.

Mi pequeñito A-Bao. Niego con la cabeza, exasperado conmigo y con Hanna… aunque muy en lo profundo sé que no puedo culparla realmente.

Después de todo un bebé no se hace solo, ni por arte de magia.


Ahhhh, perdón la demora pero sin dinero no hay internet.

No se olviden de votar y comentar que os pareció este cap.

Uy uy uy las cosas ya van entrando UwU

Nos seguiremos leyendo~

MinMin💕

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro