Termino de lavar los trastes sucios y sacudio sus manos para desprenderse de gotas de agua, para después limpiarse en el tierno mandil de koala que traia puesto.

Camino hacia la sala y se recostó sobre el sofá para descansar; después de haber regresado de la comisaría se puso a limpiar el departamento para cuando tuviera que recibir al detective, quien vendria a dejar a Suga.

Cerro los ojos y suspiro debido al cansancio, segundos después el timbre del departamento sonó, cortando su tiempo de descanso.

Se levantó y se dirigió hacia la puerta para abrirla y se encontro con el chico hormonal que había criado, mismo que traia una cara de fastidio, miro a un costado de el y dio con el sexy detective de piel acaramelada, sonriendo tan dulcemente mientras sus hoyuelos se asomaban por sus mejillas; cada quien traia en sus manos una caja de rosquillas, y también dos cafés cada quien.

—Ah hola...—Dijo el doctor una vez que abrio la puerta.

—Hola Jinnie...—Saludo animadamente, para después conectar sus ojos con los de Jin y quedarse asi unos cuantos segundos.

—El menor rodó los ojos.—Esta guerra de miradas nunca va a terminar.—Entró al departamento sin importarle y camino hasta las escaleras.

—¡Suga!—Jin reacción y llamó a Suga antes de que llegara a la planta alta.

—¿Que?—Respondió de mala gana.

—Dale las gracias a Namjoon por traerte.

—Bien.—Rodó los ojos.—Gracias... —Dijo entre dientes y después siguió su camino.

—Lo siento mucho, es demasiado mal educado, pero es buen chico.

—Je, je no te preocupes, debe estar un poco fastidiado por el cuestionario.

—Si.—Suspiro y continuó mirándolo, perdiéndose en cada una de las facciones del moreno.

—A-ahm traje rosquillas y café.—Corto con aquellas miradas y le mostró lo que tenía en sus manos.

—Oh, otra vez café...—Dijo con una sonrisa.

—Oh, lo siento, se que ya habiamos tomado café pero me detuve para traer rosquillas y creí que estaría bien acompañarlas con café.—Dijo  cabizbajo, pues estaba apenado.

—No, no te preocupes.—Tomó el café que Namjoon tenía en sus manos, para evitar que se sintiera mal.—Me gusta mucho el café, no importa que ya hayamos tomado antes, más bien pienso que es un tierno detalle que te hayas acordado de mi.

—No hay de que, es imposible no acordarme de ti.—Levanto su cabeza y se encontró con la tímida sonrisa del doctor.

—¿A-ah te gustaría pasar?—Se hizo a un lado para que pudiera entrar al departamento.

—Si, gracias...—Entro y quito sus zapatos con ayuda de sus propios pies, por que sus manos estaban ocupadas.

—¿Quieres que te ayude con eso?—Jin se acercó hasta el.

—Si, por favor...—Le sonrió dulcemente y le entregó las rosquillas y su café.

—De acuerdo.—Las tomo y desapareció en algún lugar del apartamento, mientras que el detective se quedó en el mismo lugar, esperando a que regresará el doctor.

—Dijo Jin en cuanto regresó.—Puedes sentarte en el sofá.—Camino hacia el sofá y se sento en el, después palmo a su costado, invitando al moreno a tomar asiento.

—Gracias...—Camino hacia el sofá y se sento a un lado de Jin.

—¿Y como te fue con Yoongi?—Pregunto Jin en cuanto tomo asiento.

—Ah, bien, obtuve alguna información...

—¿Y es para alguno de los casos que apostaste con tu jefe?

—No, es para un caso aparte que me asignó...

—Con todo ese trabajo jamás podrás ganarle...

—Si,tienes razón, pero no puedo negarme, son ordenes de el.

—Amh, yo también tengo mucho trabajo, pero no tanto como para...—Mordió su labio inferior.—Ayudarte...

—¿¡Encerio?!—Abrio grandemente sus ojos.

—Si, me encantaría, bueno solo si no soy un estorbo para ti...

—Por supuesto que no, dos cabezas son mejor que una y aparte...—Tímidamente tomó las manos de Jin entre las suyas.—Me encantaría poder convivir más contigo...

—A-ah...—Miro las manos que sostenían las suyas y sintió como sus mejillas ardían.

—Y-yo lo siento...—Retiro rápidamente sus manos arrepentido.

—No, no, no pasó nada, es sólo que...

—No, no yo lo siento mucho, fui muy apresurado.—Hizo una pequeña pausa.—Otra vez...

—Ah, mejor ire por los cafés, antes de que se enfríen.—Se levantó del sofá y camino hacia la cocina.

—Ah.—Suspiro, sintiéndose arrepentido.—Si, buena idea...

Por otro lado Jin estando en la cocina se golpeaba mentalmente, pues el realmente deseaba corresponderle esas muestras de afecto, por que le gustaba tanto aquel detective tan sexy, pero había muchas razones para no aceptarlas, otras aparte de que Namjoon ya tenía pareja.

Tomó los cafés y los puso encima de la caja de donas, para luego dirigirse nuevamente hasta la sala.

—Ah, creo que se han enfriado un poco.

—Para mi esta bien.—Tomó su café y después le dio un sorbo.

—Namjoon, yo quiero pedirte una disculpa por que...-

—No, no Jinnie, el que lo siente soy yo, no debi haber hecho eso, no se si tienes pareja o no quieres una por el momento, sea lo que sea no debi ser  inapropiado.

—No tienes que disculparte en verdad, no hiciste nada malo...

—Bueno es que tengo miedo de que tu ya no quieras seguir en contacto conmigo...

—No pienses eso, me encantaría seguir en contacto contigo y también ayudarte en tu proyecto.

—Amh pero ¿que ganarías tu?, ¿te gustaría que yo te ayudara en el tuyo?

—No, simplemente ganaría tu compañía, estos niños se la pasan encerrados o fuera de casa y la mayoría del tiempo estoy solo haciendo trabajo o simplemente viendo la televisión, algo que es demasiado aburrido para mi.

—Ja, ja.—Sonrió.—Bien, entonces cuenta con mi compañia, a mi también me vendría bien una amistad con quien pasar mi tiempo libre.

—Me alegra haberte conocido Namjoon...

—Lo mismo digo Seok Jin...—Se levantó y le ofreció la mano,quien este extrañado la estrecho con la suya.—Estoy pasándomela muy bien, pero lamentablemente tengo que regresar a casa.

—Oh.—Mostró una cara sorprendída, pues pensó que se quedaría más tiempo, el también estaba muy cómodo con su presencia que no quería que se fuera.

—No me quiero ir, pero tengo algo de trabajo pendiente.

—Si, entiendo...—De igual manera se levantó.

—Gracias por todo.

—Ah, no gracias a ti por sacar a estos niños inmaduros de la comisaría y por el café y las rosquillas.

—No hay nada que agradecer...—Camino hacia la puerta del departamento, siendo seguido por Jin.—¿Ah, mañana podríamos empezar?

—¿Te refieres a los casos?—El moreno asintió.—Si gustas mañana puedes venir a las 10 de la mañana por mi.

—Bien, asi será.—Llegó hasta la puerta, para después abrirla y salir.

—¡Espera!—Lo detuvo, aunque sólo llevaba la mitad del pasillo.

—¿Si?—Se detuvo ante el llamado del doctor.

—Gracias...—Tímidamente le dio un abrazo, el cual Namjoon respondió gustosamente.

—Hasta luego Jinnie...—Dijo cuando se separaron del abrazo y tuvo que seguir su camino, y es que cuando estaba con Jin se sentía vivo, de pies a cabeza y no quería dejar de sentirse así, pero lamentablemente aunque se sintiera atraído por el doctor este no respondía de misma manera y eso lo frustraba