⚠ Mención de drogas y drogadicción en menores de edad. ⚠

Yoongi se encontraba mirando el techo de su habitación, pensativo, mientras Jimin dormía cómodamente, usando como almohada su brazo. No quería despertarlo, tampoco que se diera cuenta de su ausencia, por eso mismo retiró su brazo lentamente hasta obtener por completo que la cabeza del pelirosa se encontrara en la almohada.

Se vistió rápido y silenciosamente, para después abrigar con el cobertor a su novio y salir de la habitación.

Cuándo pasó a lado de la habitación de SeokJin pudo escuchar sollozos provenir de la habitación. Se sentía mal por Jin, pero no podía hacer nada y tampoco lo haría.

Tomó una copia de llaves del departamento y del automóvil de SeokJin, para después guardarlas en su chaqueta negra de cuero y cerrar la puerta, con cuidado de no hacer escándalo.

La noche era joven y él lo era aún más.

Había decidido conducir el automóvil hasta el bar donde los habían arrestado por causar una pelea, pero mentiría si dijera que no le encantó ver como él de mejillas abultadas lo reclamaba como suyo.

Estacionó el lamborghini aventador, justo enfrente del bar, para después bajar y ser recibido por muchas miradas, unas de envidia, otras de respeto y unas cuantas coquetas.

Se saludó con él cadenero como si fueran amigos desde hace años, todos los empleados lo conocían, todos sabían quien era su padre y también sabían quien era él...

Después de haber entrado sin ningún inconveniente, se dirigió hasta la mesa donde se encontraban sus amigos, los cuales lo saludaron con gusto.

—¡Suga!—Levantándose, para darle un abrazo varonil, seguido por unas cuantas palmadas.—Pero mira nada más como estas, ¡te hace falta más alcohol amigo!.

—Ja, Ja, ya no tomo, viejo.

—¿Por qué? ¿Acaso te pega tu novio?...—Intervino en la conversación otro de los que estaban reunidos en la mesa.

—¿Tiene novio?.—Preguntó un chico que se encontraba sentado sobre el regazo de un amigo de Suga.

—No es mi novio, simplemente es mi amigo con derechos.—Todos en la mesa se rieron, pues Suga no decía lo mismo cuando estaba con él pelirosa.

—¡Oh vamos, viejo!, ¿cuando vas a dejar de fingir que no son novios? ¿Que tiene de malo?...—Preguntó uno de sus amigos, Jay, mientras llevaba su bebida a sus labios para degustar su cóctel.—Si es así, entonces significa que está soltero y disponible, debería hacerle una visita, puede que acabe siendo mío.—Río descaradamente, a lo que  provocó que la sangre de su amigo hirviera y lo tomará bruscamente por el cuello de la camisa.

—¡Te acercas aunque sea un centímetro a él y te juro que te mató!—La amenaza para nada falsa de Suga llamó la atención de todos los que se encontraba en la mesa, inclusive de los que estaban al rededor.

—T-tranquilo amigo, sólo bromeaba. Vamos, viejo, sabes que nunca me metería con lo que es tuyo...—Habló con voz temblorosa, mientras intentaba que su amigo se relajara y así ser soltado.

—Vete a la mierda, Jay.—Lo soltó bruscamente, para después sentarse y tomar un trago de alcohol, buscando relajarse después de tan estresante escena.

Jimin podría ser su novio ó amigo con derecho, pero fuera lo que fuera era suyo y de nadie más...

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Eran las tres de la madrugada y continuaba en el bar. Accidentalmente se había pasado de copas y ahora no encontraba la manera de dejar la bebida.

Fue tanto alcohol que no podía diferenciar quien se encontraba sentado en su regazo mientras lo besaba intensamente. Pensó que era su novio pelirosa, aquel al que tanto quería, él único que le hacía olvidar sus miedos y temores, así que se dejó llevar.

Pasó así media hora más, para después decidir levantarse junto al chico que tenía en su regazo. Afortunadamente aún mantenía su equilibrio y podía caminar como si nada, pero no era muy consiente de lo que hacía.

Cuándo llegó hasta su automóvil, él chico soltó su mano y después desapareció, Suga no supo a dónde ni con quién, pero no le importaba, por qué estaba seguro de que no se trataba de su Jimin. Jimin era capaz de ponerlo duro con sólo sentarse en su regazo y ese chico ni siquiera con besos intensos lo había logrado.

Subió a su automóvil, prendió la radio, justo en la canción wiggle de Jackson Darulo y Snoop dog, para después arrancar a toda velocidad.

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Cuando llegó al edificio y estacionó el automóvil frente a este. Bajó y camino hasta el interior del edificio, que por suerte no estaba el guardia, por que sino se daría cuenta de su estado y le negaría el pase.
Subió difícilmente por las escaleras, ya que el elevador podría marearlo más de lo que ya estaba y eso lo sabía de sobra gracias a la borrachera que se había puesto la semana pasada.

Había entrado al departamento y con cuidado de no azotar la puerta, la cerró.

Avanzó lentamente hasta su habitación para después cerrar la puerta detrás de él y caer rendido sobre la cama, frente a Jimin, permitiéndole ver sus facciones.

—Fuck, creo que si te amo, Park.

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Jimin despertó del profundo sueño en el que había caído. Sintió el cálido cuerpo de su novio sobre la cama, dándole la espalda, pero por sus ronquidos supo que continuaba dormido.

Se levantó de la cama dispuesto a ir con su tío, pero se detuvo justo en el escritorio para mirar con curiosidad el sobresito con polvo blanco que estaba sobre el escritorio.

Jimin siempre se había preguntado que es lo que sentía su Hyung cuando lo inhalaba por su nariz, ¿por qué le gustaba tanto? ¿Acaso se sentía bien?...

La curiosidad lo llenó y buscó rápidamente un billete para después enrollarlo y formar un pequeño tubito, entonces colocó un poco del contenido sobre el escritorio para después acercarse hasta este, justo como su novio lo hacía, pero una mano sobre la muñeca que tenía el billete detuvo su acción.

—Ni siquiera se te ocurra, Park.—Suga lo había llamado por su apellido y eso solamente sucedía cuando este estaba muy enojado con él, pero no entendía la razón si solamente estaba haciendo lo mismo que él.

—¿H-hyung?—Habló con nerviosismo al ver su semblante sería y fría.

—Suelta ese billete y largate.

—P-pero, Hyung, solamente hago lo mismo que usted, me gustaría saber que se siente y por que a usted le gusta.

—¡Qué lo sueltes!—Comenzaba a exaltarse al ver que Jimin no soltaba el billete.

—H-hyung...—Se quejó, pues no quería hacer enojar a Suga, pero tampoco quería perder la oportunidad de probar.

—¡MALDITA SEA PARK, SUELTALO!—Al ver que Jimin no tenía intenciones de soltarlo, de un movimiento brusco se lo quitó de la mano, para después acorralarlo entre la pared.—¡LLEGAS A PROBAR ESA PORQUERÍA Y TE MATO, ESCUCHASTE!—Jimin comenzó a temblar. Nunca había visto así de enojado a Suga y eso le daba tanto miedo. Solamente le quedó asentir con sus ojos cerrados, temiendo que Suga fuera capaz de soltar un golpe sobre él, pero no llegó, sólo escuchó como este descargaba su ira contra el escritorio y varios muebles.—¡Esta mierda destruyó mi vida, Jimin! Me odiaría a cada minuto si te llegara a destruir a ti también...—Fue lo último que dijo para después salir de la habitación y sin darse cuenta azotó fuertemente la puerta.

Definitivamente necesitaba ayuda, estaba comenzando a contaminar a Jimin y eso nunca se lo perdonaría. Necesitaba la ayuda de SeokJin.

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Capítulo dedicado a:

Mojun_

Gracias por pedir actualización de esta historia. 😊✨