Seokjin bajó de su automóvil deportivo y caminó hacia el interior de la comisaría, donde rápidamente fue atendido por una de las recepcionistas.

—Buena tardes, Señor, ¿cuál es su emergencia?.

—Oh, solamente busco al Detective Namjoon. ¿Sabe si aún se encuentra en su oficina?...—Mordió su labio inferior nervioso, pues había tardado más de lo esperado, todo gracias a que Jimin había hecho un gran berrinche, si no había postre no comería y él no es él tipo de Padre que les dice que no a todo, así que fue en busca de uno.

—Si, su hora de comida comienza en dos horas. ¿Quiere que le avise de su llegada?

—No, no, así está perfecto. Él sabe que vendré.

—De acuerdo, entonces puede pasar directamente hasta su oficina. ¿Sabe dónde está ubicada?

—Si, si, un día tuve una situación y memorice muy bien el camino, Ja, Ja.—La secretaria rio un poco, para después asentir.

—Que tenga buen día, Señor...

—Gracias, igualmente...—Correspondió al saludo, para después comenzar a caminar hasta la oficina de Namjoon, pero en uno de los pasillos se detuvo en seco al toparse con alguien que iba en el celular y no estaba prestando atención en que estaba a nada de chocar con él.

—¡Ey, fijate por dónde vas!—Bufo Seokjin, a lo que él contrario levantó su vista de su móvil, para después sonreír maliciosamente.

—Vaya, vaya, pero mira a quien tenemos aquí...SeokJin...

—Lee...—Respondió seco y cortante, queriendo continuar con su camino, pero la curiosidad le estaba ganando y quería saber que había pasado con él Idiota después de  prácticamente abandonar a su Hijo.

—¿Que haces por aquí? ¿Acaso Yoongi volvió a meterse en problemas o te enteraste que trabajaba aquí y viniste a rogarme por una segunda oportunidad?—Cruzando sus brazos, mientras mostraba una sonrisa narcisista, la cual Jin odiaba tanto.

—No te ilusiones, Lee, lo menos que quiero ver es tu sombra. Y no Yoongi no está metido en problemas...

—Ah...—Soltando un suspiro. —lastima, ya me había ilusionado, ese Chico cada día se parece más a mí...

—Si te refieres a holgazán, egocéntrico, borracho, grosero y sarcástico, entonces si, no cabe duda que de tal palo tal astilla.

—Ja, Ja tú si que sabes como hacerme reír, SeokJin...—Comenzando a invadir el espacio personal de Jin.

—Ni se te ocurra tocarme...

—¿Que pasara si lo hago?—Arqueando su ceja, mientras se acercaba cada vez más.

—Mi puño irá directamente a tu odiosa cara.—Tensando su mandíbula, dándole a entender que no era un juego y no debía dar un paso más si no quería ser golpeado enfrente de todos.

—Oh, pero que miedo, estoy temblando...—Alzando sus manos en forma de burla. Jin sabía lo inmaduro que era y por eso mismo rodó los ojos para después intentar seguir con su camino, si no fuera por las manos del contrario, que agarraron su cintura y lo obligó a caminar con él.

—¡¡¡Sueltame Lee!!!—A SeokJin no le importo si llamaba la atención, solamente quería liberarse de ese Idiota.

—Calla, o te irá mal...—Le susurro en su oído, lo cual le enfureció más a Jin, y comenzó a moverse para lograr zafarse, pero para su suerte estaban en la oficina del odiado.

—¡¡¡Te odio!!!—Gritó una vez que lo soltó y se dirigió a él, dispuesto a golpearlo, pero Lee era demasiado hábil que en un abrir y cerrar de ojos lo tenía sobre el escritorio, debajo de él.

—L-lee, sueltame, por favor déjame ir...—Estaba sin escapatoria pues tenía sus manos y piernas retenidas. Lo que más temia era que Namjoon llegara y lo viera en esa posición tan comprometedora, más aún que pensara que él solo había jugado con su corazón, cuando no era así...

—Oh, me encanta cuando ruegas...—Sonriendo pícaramente, mientras lo miraba debajo de él con deseo.

—Lee, no es un juego, dejame ir o juro que me quejare con tu Jefe.

—Oh, vamos, Cariño, no vengas a decirle eso a un Inspector...

—¿Qué?—Entonces entendió todo.—¡Asi que tu eres el Imbécil que le ha hecho la vida imposible a Namjoon!, sabía que no podía existir alguien más hijo de perra que tú.

—Cuidado con lo que hablas, SeokJin...—Forzando su amarre en las muñecas de Jin, causando que le doliera e hiciera muecas.

—S-sueltame...

—¿De dónde conoces a ese imbécil?

—¿¡Qué te importa!?—Le contestó lleno de ira, pues por más fuerza que hiciera no lograba zafarse.

—¡Dímelo!—Acercándose peligrosamente hasta su rostro.

—¡Es Mi Novio y nos conocimos en una de esas veces que abusas de tu poder de autoridad y lo pones en un puesto que no le pertenece!—Lee tenso su mandíbula, pues gracias a él, su enemigo se había encontrado con su ex, que por cierto aún se moría por él, solo que tenia demasiado orgullo y solamente lo quería para un encuentro.

—Eres un Idiota, Ken, muy pronto todo esto se desmoronara frente a tus ojos cuando Namjoon decide renunciar...—

—Oh, no creo que eso pase...—Sonrió ladinamente.

—Por supuesto que pasará.

—No por qué Kim necesita el dinero para su boda, la cual es pronto...—Dijo mientras lo soltaba y se alejaba para ver bien su expresión, Jin estaba sorprendido, pues sabía que Namjoon tenía pareja, mas no sabía que se casaría, pero aún así no mostraría sus debilidades frente a Ken.

Se levantó y se dirigió hacia la entrada, pero no sin antes decirle...

—Eres un cobarde, Lee, y Namjoon es lo contrario a ti, por eso me he enamorado de él y te aseguro que él no me va a fallar como lo hiciste tú.—Entonces cerró la puerta con fuerza, para después salir "corriendo" hacia la oficina de Namjoon.

Cuando llamó a la puerta, Namjoon no tardó ni un segundo en abrir y abrazarlo.

—¡Ven!—Con gran entusiasmo lo tomó de la mano y lo adentro a la oficina para después cerrar detrás de ellos.—¡Gracias por haber venido!—SeokJin aún continúaba pensando en lo que había dicho Ken, pero aún así mantuvo una sonrisa frente a Namjoon.

—No te iba a dejar esperando... —Correspondiendo nuevamente al abrazo.

—Pero siéntate, siéntate...—Le ofreció, para después sentarse frente a él.

—¿Que tal va todo?

—Mmh, pues...bien, bien...—Mordiendo su labio, nervioso de mentir pues recordó la tremenda regañiza que le había dado su Prometida.

Al parecer ella tenía la sospecha de que la engañaba, por más que esté se lo negara.  Aún así ella ya había tomado la decisión de adelantar la boda y Namjoon no podía oponerse.

Le habían puesto los pies en la tierra, pero aún así el no podía esconder lo que sentía por SeokJin.

—¿Que tal tu mañana?

—Oh, pues bastante agotadora...

—Me imagino...

—Amh, Namjoon, quiero hacer una pregunta...

—Si, claro.

—¿Cuántas parejas has tenido en tu vida?—Mordiendo nerviosamente su labio, pues solamente quería comprobar que Namjoon no era un rompe corazones.

—Amh, pues desde que tengo memoria solo ha sido una.

—¡¿Una?!

—Si, nos conocimos en preparatoria. Al momento que reuní mis fuerzas para declararme, ella aceptó inmediatamente, pero cada día que pasa me sigo preguntando si hay amor entre nosotros o solamente es costumbre...

—Oh, entiendo...

—¿Por qué la pregunta?

—Por nada...—Negó con una sonrisa.

—Bien.—Se levantó de su asiento.—¿Te gustaría ir a comer?, ha sido una larga mañana para ambos, creo que hay que distraernos.

—Y sirve que me cuentas tu brillante plan.

—Si.—Entonces SeokJin se puso de pie al igual que Namjoon y ambos avanzaron hacia la salida para abandonar la oficina, sino hubiera sido por que Namjoon no se controló y tomó la cintura de Jin en un abrir y cerrar de ojos para después pegarlo a él y besarlo.

—Te extrañe, Jinnie...—SeokJin estaba en shock pero con una gran sonrisa, pues aunque fueran Amigos eso es lo que más deseaba en lo profundo de su corazón.

—Yo también, Nammie...—Le susurró cerca de los labios, para después alejarse y salir de la oficina, haciendo que un Namjoon muy sonriente saliera detrás de él.

SeokJin no sabía si Namjoon solamente estaba jugando con su corazón, pero si fuera así solamente se dejaría llevar y haría lo mismo...

En cambio, Namjoon tenía que tomar una decisión inmediatamente, pues a ser realistas se estaba encariñado bastante con SeokJin y no lo quería perder...

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