17.
— Y como te decía cuando uno se siente en las piernas de Tzuyu es como estar sentada en las piernas de una Diosa —No se a que quería llegar Momo con lo que me está diciendo, hace días que se mudaron pero ella sigue viniendo todos los días para saber cómo estoy y para que la ayude con eso del embarazo, enseñarle algunas cosas y sobre todo comprar en línea, se está volviendo adicta y me está preocupando bastante, porque yo también lo fui y no fue fácil salir de eso, es demasiado adorable y puedo ver en sus ojos ese brillo único que tienen las embarazadas.
Solo que ésta habla sobre tener sexo con su pareja como si nada, conmigo, que no me interesa en lo absoluto como Tzuyu mueve los dedos y la lengua, no me importa y la verdad es que quiero quitarme la imagen mental de la cabeza de eso porque no voy a poder dormir pensando en ello mientras escucho una canción triste y como helado, voy a tener que hablar con Joohyun sobre este nuevo trauma inducido por mi mejor amiga quién no se calla ni un solo segundo, está feliz y lo sé pero es tan ruidosa.
Miro a Chaeryeong quien también me mira, sus ojos me dicen que quiere salir corriendo de aquí pero no sabe así que debe aguantarse exactamente lo que yo porque tampoco puedo moverme de aquí, luego Momo se lo tomará como un rechazo y no la quiero escuchar llorar porque la verdad es que es bastante estresante, prefiero que esté feliz a triste porque no para de llorar o tratar de tocarme las tetas, bueno, eso siempre lo hace así que no novedad al estar triste.
Es entendible que este feliz por tener a alguien como Tzuyu a su lado, ya que ninguna de las chicas, incluyéndome, creía que iba a tener una pareja estable en su vida porque no puede ser más infiel o torpe para decir la peor cosa en el momento menos indicado, llega a ser bastante estúpida al enamorarse de alguien y eso lo hacía con bastante frecuencia hasta que conoció a la que nosotras llamamos "la salvación de Momo".
Alguien que logró aguantarla siento tan distinta, me encantaría tener la paciencia de ella, la envidio en ese aspecto, la tranquilidad de Tzuyu es tan grande que puede que Momo haga la peor estupidez del mundo, como la vez que quiso agarrar la última lata de atún que había en el estante más alto, hizo tanto esfuerzo que todo se vino abajo y tuvo que pagar absolutamente todo, cada cosa que se rompió o daño por la caída.
Aunque fue bastante gracioso, estuvo todo un día en el hospital por una cortada en la mano, otro gasto y un gran susto para todas— Supongo que es como tu trono —Me gusta seguirle el juego, al fin y al cabo es mi mejor amiga, una niña atrapada en el cuerpo de una mujer, debo cuidarla hasta que no sea un peligro para la sociedad y para sí misma.
Todavía tengo la esperanza de que eso pase pero obviamente es mentira y todas las ilusiones que me hago en días anteriores se acaban cuando dice una estupidez, algo típico de ella, demasiado, tengo que de la nada grita y ninguna de las dos nos asustamos, seguimos como si nada porque es así, Nayeon y Sana tampoco se quedan atrás, son idénticas.
— Efectivamente —Chocamos los cinco y justo cuando está a punto de hablar, suena la puerta, pequeños golpecitos se escuchan por toda ésta, confundida, ya que nadie me visita tan seguido, camino y la abro, me sorprendo al ver a Chaeyoung llena de bolsas tanto que apenas se puede ver su rostro, no sé si dejarla pasar o quedarme como boba viendo cómo se queja porque le pesa.
— ¿Podrías dejarme pasar? —Se escucha cansada así que dejó que pase, solo es ella, tampoco es que la siento como una amenaza, está cerca de mi y no tengo ningún problema con ello ya que es la madre de mi hija, y sigue siendo mi esposa.
Tiene todo el derecho de venir, lo que quiero saber es todo lo que trae ahí, los deja en el suelo y va directo a buscar a la bebé, al cerrar la puerta veo como Momo se cruza de brazos y me mira con una ceja alzada, no estábamos esperando que viniera, obviamente, pero si la ignoro parece que no está así que puedo seguir hablando de lo cómodas que son las piernas de Tzuyu, no tengo ni la menor idea, pero me imagino que si, hasta Jeongyeon sabe que lo son.
— Hola Momo —Sonríe y nos mira a ambas, está esperando que la saludemos— Hola amor —Me mira intensamente, desvío la mirada a Momo quien está roja, se exactamente lo que significa, se está guardando lo que piensa y quiere decir, tiene mérito porque a ella siempre se le escapa todo y arruina un momento tranquilo, serio, molesto, lo que sea, con tan solo abrir esa boca que prefiero que se mantenga así de cerrada.
— Hola Chaeyoung —Decimos al unísono, ella nos mira con una ceja alzada, estamos actuando como si estuviéramos conectadas pero eso pasa siempre, desde que nos conocemos.
— ¿Como se ha portado? —No se de quién está hablando, si de la bebé o de Momo porque tienen los mimos comportamientos, hasta Chaeryeong se comporta mejor.
— Bien —La bebé sonríe y se acurruca en su pecho, tal vez la extrañaba y eso es un pinchazo directo en mi corazón, no le gusta cuando eso pasa porque se que hago cosas por impulso o más bien lo que él me diga, debo ignorarlo, un poco más, se que podremos solucionar nuestros problemas pronto.
— Le traje juguetes, pañales, la fórmula y algunas cosas más para decorar su habitación —Me estoy derritiendo de amor, sé que Momo igual porque como mira a Chaeyoung, una mezcla entre desprecio y ternura— Si me permites voy a decorar la habitación hoy —Y ahora tendré que lidiar con tres bebés.
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