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XXIX. La diferencia

"¿Estás despierta?"

...

"Oh... ya estás despertando"

"Abre los ojos... T/N Corvus"

T/N abre los ojos, parpadea varias veces tratando de enfocar su vista. Se da cuenta de que está en la enfermería de Hogwarts, acostada sobre una cama limpia y cómoda.

El lugar está en penumbra, únicamente iluminado por una suave luz proveniente de la vela en la mesita de noche, al lado de su cama. El aire, impregnado de un aroma a hierbas medicinales, parecen haber sido utilizadas hace poco.

Madame Pomfrey - Quédate tranquila.

Tus signos vitales aún no son del todo estables.

Esta vez quedaste inconsciente por mucho más tiempo, ¿sabes?

T/N se frota los ojos con fuerza, intentando recordar cómo había llegado allí. No fue su mejor decisión. Cuando trata de hacer memoria también recuerda aquello... aquello que ahora se ve obligada a ocultar. Ella se impulsa hacia arriba queriendo salir del lugar pero, Madame Pomfrey la sostiene.

Madame Pomfrey - Ni siquiera intentes levantarte, T/N.

El profesor Snape me pidió exclusivamente no dejarte salir de aquí hasta que él mismo venga a evaluar tu estado.

T/N - El profesor Snape...

Madame Pomfrey - ¿Uhm?

Tienes suerte de que alguien te encontrase.

Nadie suele visitar aquella torre.

Excepto por ciertos estudiantes que les gusta rebasar la tolerancia de esta escuela.

¿Qué hacías ahí exactamente, T/N Corvus?

Madame Pomfrey permanece justo al lado de su cama pero, ella solo mira al frente. Su mente está perdida en aquel momento. Muchas escenas dan vueltas y vueltas en su cabeza. Casi quiere estallar, sin embargo, su propio autocontrol no se lo permite.

T/N - No lo recuerdo.

Madame Pomfrey - ¿Segura?

Entonces puedo añadir una leve amnesia a tu diagnóstico.

De todas formas intenta alegrarte, tu casa ganó el campeonato de Quidditch.

T/N realiza un gesto de inconformidad. Ya no quiere estar ahí. Quiere escapar lo más pronto posible. Necesita... aire fresco.

En un movimiento un tanto brusco, se impulsa fuera de la cama. Madame Pomfrey la sostiene del brazo. T/N intenta forcejear pero es regresada de vuelta con cierta facilidad. Una jeringa que la enfermera tenía para emergencias perfora el brazo de T/N Corvus.

T/N - ¡Ah!

¿Qué demonios?

Madame Pomfrey - Si eres un poco problemática.

Ahora vuelve a dormir hasta mañana.

No escaparás como la última vez.

Los ojos de T/N Corvus vuelven a cerrarse lentamente.

(...)

Pansy - ¡Muévete rápido T/N!

Flora - ¡Oye! Sé más gentil.

Recién salió de la enfermería.

Pansy - Es que tengo hambre.

No es tan fácil sobrevivir a las clases de transformaciones.

T/N Corvus camina detrás de sus compañeras. Se dirigen al Gran Comedor a la hora del almuerzo. Las gemelas se retroceden hacia ella y sutilmente tratan de hacer que vaya a su ritmo.

No puede decir palabra alguna. Su cabeza es un torbellino de pensamientos pero, su pecho está vacío. O casi vacío, ¿es posible que sea capaz de sentir algo a pesar de las circunstancias? Quién podría saberlo...

Hestia - T/N...

No has tocado tu plato de comida.

Flora - ¿Al menos nos has estado escuchando?

La fiesta fue realmente increíble.

Pansy - Pues si la señorita bella durmiente no hubiera decidido desmayarse justo el día de la competencia...

Hestia y Flora - ¡Pansy!

Pansy Parkinson rueda los ojos hacia arriba y continúa almorzando. 

Flora - ¿En verdad no sabes por qué te sucede eso?

Hestia - Ay Flora.

¿No crees que es un poco... delicado para preguntarle?

T/N intenta disimular y trata de comer algo. A pesar de que escucha atenta la conversación, se siente incapaz de intervenir. Incluso de expresar su desagrado como suele hacer normalmente. Ella ha estado dos días inconsciente en la enfermería, nadie parece dar con el verdadero motivo del suceso.

Blaise Zabini toma asiento entre las chicas. Su mirada dice que trae noticias. Coloca su plato sobre la mesa, acomodándose entre las gemelas, frente a Pansy y T/N.

Pansy - ¿Qué tal, Blaise?

Flora - Oh Blaise, sabes que te adoro.

Se podría decir que ganamos gracias a ti.

Blaise - ¿Qué tal?

T/N me alegro de que por fin hayas vuelto.

Fue una lástima no verte en las gradas apoyándome.

Pansy se impulsa hacia él y golpea suavemente su cabeza con una servilleta. Él sonríe, es la sonrisa pícara que le caracteriza.

Hestia - ¿Qué traes?

Tú no vienes a nosotras sólo porque sí.

Blaise - Bien... ¿a que no saben qué?

Flora - ¿Qué es?

Las chicas miran con curiosidad a Blaise pero, T/N Corvus permanece concentrada en su plato.

Blaise - Tengo una amiga de Ravenclaw que-

Pansy - ¿Amiga de Ravenclaw?

Blaise - Si bueno, déjame terminar.

Él se mueve inclinándose al centro de la mesa. Las chicas hacen lo mismo. Parece que se trata de algún rumor.

Blaise - ¿Conocen a aquel chico rarito?

El que tiene a toda su familia trabajando en el Ministerio de Magia...

Las pupilas de T/N vuelven a contraerse. Siente que su adrenalina corre a gran velocidad hacia su cerebro pero continúa inmóvil. Pansy y las gemelas se miran entre ellas, confundidas.

Blaise - Vamos...

El que siempre pasa solitario, como si no tuviera amigos.

Pansy - No tenemos idea de quién hablas, Blaise.

Hestia - Da igual, ¿qué hay con él?

Blaise acerca aún más su cabeza hacia la de ellas.

Blaise - Pues... nadie ha sabido de él desde hace dos días.

Conozco un poco a la prefecta de Ravenclaw y estuvimos conversando al respecto.

Hestia - ¿Hace dos días?

El día del partido final...

Pansy - ¿La conoces un poco?

Blaise - ...

Exacto.

Pansy rueda sus ojos hacia arriba.

Pansy - Tal vez no soportó que Slytherin ganara y-

Flora - ¡Shuush! ¿¡Pansy, que cosas dices!?

Blaise - Es lo curioso...

Nadie puede determinar si asistió o no al partido.

Es como si simplemente no existiera para el resto.

Las chicas vuelven a mirarse entre sí. Solo conocen el caso de un estudiante desaparecido en Hogwarts. Mucho antes de ellas estudiar ahí.

Blaise ve hacia los lados, verificando que no haya nadie muy cerca. Se vuelve a dirigir a las chicas, su voz se apaga al punto de susurrar.

Blaise - Esto es súper confidencial pero, la escuela no va a poder evitar que el Ministerio ponga las manos en esto.

Después de todo, la familia de ese chico...

Flora - ¿De verdad eso está pasando aquí?

¿En Hogwarts?

Hestia - Siendo sincera, no me sorprende.

Nunca creí esa propaganda barata de ser el lugar más seguro...

Muchos casi mueren durante nuestro segundo año, ya saben.

Flora - Ah, si.

Por aquello...

Pansy luce molesta, tiene los brazos cruzados. Permanece en silencio al igual que T/N Corvus. Las gemelas aún se miran entre ellas.

Blaise - Bueno, eso era todo.

Intenten descubrir algo más por ustedes mismas y me cuentan.

Él se levanta de la banca, con su plato vacío en la mano y otra de sus sonrisas pícaras.

Blaise - Como las mujeres son mejores manejando información...

Las chicas niegan con la cabeza. Siguen comiendo mientras Blaise Zabini se aleja.

(...)

El viento sopla enfurecido contra el rostro de T/N. El cielo se torna naranja con suaves pinceladas violetas. El ocaso deja ver los últimos rayos de sol.

Volvió a aquel lugar. Aquella torre desolada que le recuerda el desequilibrio, el desbalance mental al que estaba sometida.

Severus Snape - ¿Qué haces aquí, Corvus?

Ella se da la vuelta para encontrar a Severus Snape a unos metros detrás. No sabe con exactitud por cuánto tiempo él ha estado ahí, observándola.

No responde, solo ve su silueta ligeramente iluminada por los cálidos rayos de sol.

Él se acerca a T/N, pero mantiene una distancia prudente entre ambos.

Severus Snape - ¿Estás angustiada?

Ella desvía la cabeza. Es el típico gesto que realiza cuando no quiere admitir algo. El profesor Snape lo sabe.

T/N - No, profesor Snape.

Severus Snape - No me mientas.

Él busca la mirada de T/N, en su rostro a contraluz.

Severus Snape - Mírame, Corvus.

Aún sigues afectada por eso, ¿no es así?

Tal vez T/N Corvus se hubiera sentido incómoda por sus palabras, de no ser que oculta muy bien sus pensamientos. Puede ocultarlos de casi cualquier intruso que intentase ver dentro de su mente. Sin embargo, no puede ocultar lo que siente...

T/N - ¿Quién me encontró?

Severus Snape - Eso no es lo que importa.

No puedo creer que no se hayan presenciado los momentos previos a tu pérdida de consciencia.

La única persona que parecía haber visto algo...

El profesor Snape se corta y entrecierra sus ojos enfocando a T/N. Como si hubiera recordado un dato importante.

Ella tiene una expresión de desconcierto. Aún así mantiene el silencio.

Severus Snape - Estás más tranquila de lo que deberías.

¿Es por alguna cosa en especial?

T/N Corvus cae en cuenta de la situación. Le mira a los ojos, sus labios forman una ligera sonrisa. No es una sonrisa falsa, sino de tristeza, de pesar profundo. Él no puede interpretar el verdadero motivo de aquella sonrisa. ¿Cómo podría entender que ella haya cometido semejante atrocidad... solo por él?

En ocasiones, suele dudar de si tomó o no la decisión correcta pero, al final termina convenciéndose a si misma de que hizo lo que tenia que hacer. Sabe que debe aprender a vivir con esa decisión y evitar que afecte su leve relación con el profesor Snape.

Severus Snape - Bien, Corvus.

Ve a descansar.

Él la escolta fuera de aquella habitación en la torre. Antes de que se separen tomando rumbos diferentes, le dice una última cosa.

Severus Snape - Trataré de ocuparme de tu inexplicable condición por mi cuenta.

Esta vez... será porque yo así lo quise.

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