Al entrar al salón de encantamientos, todos esperan por el profesor Flitwick. El pequeño profesor está muy concentrado en uno de los libros de duelo que T/N le entregó ayer. 

Después de al menos 3 minutos, él sube la mirada y se da cuenta de que la clase espera en silencio.

Filius Flitwick - Hoy vamos a practicar el Encantamiento Confundus.

Es un hechizo fácil, uno que ya deberían saber.

Tiene varios propósitos. 

Puede ser usado para engañar, confundir o causar una distracción.

Cuando se trata de usar esto en duelos, es mejor usarlo mientras tu oponente se encuentra en un estado vulnerable, como distraído o desprevenido...

Un estallido rápido podría causar que pierdan el equilibrio, lo cual les da una ventaja en un duelo.

Esta es una clase de práctica, la mayoría de estudiantes ya conocen el Encantamiento Confundus, debido a que se aprendió en quinto año. Sin embargo, para algunos sigue siendo un tanto complejo.

Filius Flitwick - Todos, por favor formen un equipo.

Cada compañero realizará el encantamiento Confundus el uno al otro.

Si no saben cuál es la técnica de lanzamiento adecuada para este hechizo, ahora es el momento de averiguarlo.

Necesitarán lanzarlo sobre su compañero, y una vez que esté bajo el efecto, pregúntale cómo se siente... Entonces, será su turno de sentir los efectos.

Estaré observándolos. 

Después de dos horas de prácticas, la clase ha terminado. Todos parecen ser capaces de realizar el hechizo. Filius Flitwick despide a los estudiantes luciendo bastante satisfecho, aunque T/N decide quedarse un rato más.

Filius Flitwick - ¿Tienes algún problema, joven estudiante?

¿Estás aquí por puntos? Debes dejar un poco de tareas para los demás...

Él la mira con curiosidad, esperando a que ella diga el motivo de su estancia en el salón.

T/N - En realidad, es por otro motivo.

Flitwick asiente con la cabeza.

Filius Flitwick - Podemos hablar el tiempo que necesites...

No debes preocuparte por llegar tarde a tu próxima clase, te tengo cubierta en cuanto a tu horario.

Pero, ¿de qué necesitas hablar?

T/N - Quería pedirle ayuda, profesor Flitwick.

Con un par de hechizos.

T/N está inmóvil frente al profesor, ambas manos sostienen su libro de encantamientos.

Filius Flitwick - Ya veo...

¿Qué tipo de hechizos te están causando dificultad?

T/N - El... contrahechizos general.

Filius Flitwick - Oh... es bastante simple.

¿Quieres que te enseñe la técnica?

Él la mira con sus ojos bondadosos y una ligera sonrisa. El profesor Flitwick siempre está dispuesto a enseñar a los estudiantes que le pidan ayuda.

T/N - Si, justo eso.

Filius Flitwick - Bien, primero enséñame tu técnica.

Ahora voy a intentar cambiar el color de tu-

T/N - ¡No!

T/N no deja terminar la oración del profesor Flitwick y lo mira un tanto aterrorizada.

Él la observa confundido.

T/N - Digo... mejor otro encantamiento, profesor...

Filius Flitwick - Bueno, entonces.

El profesor enfoca su varita en el muñeco de prueba.

Filius Flitwick - Tarantallegra...

El muñeco comienza a realizar movimientos irregulares. T/N trata de revertir el hechizo pero sigue sin funcionarle.

Filius Flitwick - Creo que ya se cual es el problema.

El movimiento de tu mano no es del todo preciso.

T/N Corvus escucha las instrucciones que le da Flitwick. Después de algún rato de práctica, parece haberlo entendido.

Filius Flitwick - Ya estás lista... Intenta deshacerlo ahora.

T/N - Finite incantatem...

El muñeco de pruebas queda habitualmente inmóvil.

Filius Flitwick - Asombroso.

Así que ya sabes cómo hacerlo.

Él mira a T/N Corvus con orgullo.

Filius Flitwick - Sin embargo, me temo que no es lo único por lo que te quedaste después de clases, ¿no es así?

T/N - La verdad... quiero aprender el encantamiento desmemorizante.

Filius Flitwick - ¡Ah!

El encantamiento Obliviate... es usado para borrar recuerdos.

Debes saber que no es bueno abusar de él. 

Podría ser bastante contraproducente...

Es muy, muy peligroso, ¿hay algún motivo en particular por el cual quieras aprenderlo?

T/N - Ninguno... profesor Flitwick.

Pero todos en mi año de seguro ya lo conocen.

Filius Flitwick - Mmm, en parte tienes razón, ya deberías conocerlo.

Aunque lo único que enseñamos de ese hechizo es la teoría.

Puedo hacer una excepción si tu interés es mejorar tu técnica en esta clase.

Filius Flitwick le enseña el encantamiento desmemorizante. Esto le toma alrededor de una hora. Después de todo, T/N puede aprender las cosas bastante rápido. Luego le pide que se lo repita. 

Al quedar satisfecho con la forma en que T/N realizó la práctica, le dice que es libre de usarlo con él...

Filius Flitwick - Qué te parece si pruebas diciéndome algo...

Algo que yo olvidaré si lo haces adecuadamente.

T/N - De acuerdo, profesor.

Él espera con una sonrisa en su rostro. Quiere ayudar a T/N Corvus de cualquier manera posible. Incluso si eso significa darle parte de sus recuerdos para su beneficio personal.

T/N - Tigre, tigre...

Llama brillante, en los bosques de la noche.

¿Qué mano u ojo inmortal pudo enmarcar tu aterradora simetría?

El profesor Flitwick tiene una mirada de confusión una vez que T/N termina su frase.

Entonces, ella apunta su varita al pequeño profesor. Trata de recordar lo aprendido y de realizar el movimiento correcto de la mano. Una voz profunda y apagada sale desde su garganta.

T/N - Obliviate...

El encantamiento parece tener efecto sobre él. Puede sentirlo al instante. Sabe lo que significa...

Filius Flitwick - No te preocupes, Corvus...

No recordaré lo que me dijiste... ese es el precio a pagar para aprender a usar ese hechizo.

Hiciste un excelente trabajo realizándolo.

Él le regala una genuina sonrisa.

T/N - Gracias profesor... eso fue de mucha ayuda.

Filius Flitwick - Espero que le des un uso sensato, y si necesitas ayuda con hechizos complejos es mejor que vengas directamente conmigo.

Siempre es un placer enseñar a un estudiante entusiasta...

Al despedirse del profesor, T/N abandona el salón. Ahora tiene un hechizo más que puede usar en sus propósitos.

Parece demasiado tarde para intentar asistir a otra clase y demasiado temprano como para esperar la cena. Ella decide dar un paseo alrededor de los jardines de Hogwarts. Necesita un tiempo de descanso después de tantas emociones en un día.

Mientras camina por los jardines, T/N se acerca a los rosales trepadores copados de rosas. Sostiene una en sus manos, sin arrancarla. Observa detenidamente la rosa, es hermosa. Pasa sus dedos por los delicados pétalos. Está hipnotizada.

La admira y piensa. ¿Quién sabe en qué? Tal vez en los sucesos, tal vez en las notas, tal vez en Severus Snape o en su libro. Tal vez... en alguna otra cosa. Pero nada que le provoque incomodidad, eso está claro.

Comienza a sentir bastante frío. Normalmente el clima suele ser frío con algunas excepciones. No obstante, siente casi el mismo frío que hay durante las clases de pociones, o aún más. Poco a poco, una neblina oscura invade el lugar.

Algo está sucediendo, algo anda mal... 

Ella se observa sus manos, ve los pétalos marchitos de la flor cayendo al suelo. Levanta la vista, tiene un mal presentimiento...

¿Cómo es posible que la rosa haya muerto tan rápido?

T/N - ¿Q-qué pasó?

Yo... ¿hice esto?

Mira a los lados, completamente conmocionada. Sube su rostro hacia el cielo, está comenzando a nublarse... Se da una ligera idea, pero no quiere creer que sea eso. Siente escalofríos justo en su espalda. No pretende darse la vuelta, pero tampoco puede quedarse estática si sus sospechas son ciertas.

T/N Corvus no ve nada más y nada menos que un Dementor detrás de ella. Está ¿aterrorizada...? Recuerda haber oído hablar de los dementores hace unos años. Se dice que estas criaturas se alimentan de tu felicidad... Drenan a sus víctimas de toda positividad.

Sin embargo...

El Dementor se acerca directamente a ella. T/N no conoce ningún hechizo útil en esa situación. Aunque, por muy increíble que parezca, el Dementor no la ataca. Sólo la mira con sus ojos fríos, muertos y oscuros.

T/N - ¿Qué quieres de mí?

El Dementor se acerca más, T/N está envuelta en la neblina. Es como si no pudiera succionar nada de ella y a la vez no pueden apartar las miradas. Siente curiosidad, demasiada. Nunca había estado frente a una criatura que emanara tanta tristeza, tanta desolación.

¿Acaso disfruta de aquella sensación? Ambos parecen estar en una especie de trance. Lentamente, extienden sus manos el uno hacia el otro. T/N quiere sentir, quiere llegar al fondo de lo que está sintiendo.

Antes de que se toquen, alguien entra a la escena... es Severus Snape.

Aparta a T/N Corvus del camino justo a tiempo, ya que el Dementor intenta alcanzarla. La terrible criatura termina agarrando el aire.

Severus Snape lanza un hechizo increíblemente brillante al Dementor... Lo golpea, haciendo que desaparezca. No hubo pelea, fue como si el Dementor se hubiera esfumado tan pronto lo golpeó.

El profesor Snape se voltea hacia ella.

Severus Snape - ¡Corvus! ¿Qué se supone que estabas haciendo?

¿Por qué en la vida intentarías tocar a una de esas criaturas?

T/N - Y-yo...

T/N Corvus está muy conmocionada. No sabe cómo explicarle al profesor Snape lo que ha pasado. ¿Quería tocarlo?... Ahora que está pensando en ello, es casi como si sus brazos hubieran tratado de actuar por sí mismos.

T/N - ¿Por qué había un Dementor aquí en Hogwarts?

Él suspira profundamente, aún con su varita en la mano, mirando alrededor.

Severus Snape - Esas criaturas a veces se las arreglan para atravesar las protecciones. 

El hecho de que solo haya sido uno se trata de suerte...

El profesor Snape observa severamente a T/N Corvus.

Severus Snape - No se que demonios intentabas, Corvus. 

Bajo ninguna circunstancia debes tocar a un Dementor.

Podrías morir en el mejor de los casos, o quedarte vacío por el resto de tu vida.

T/N no dice palabra alguna. Se queda paralizada, observando al profesor Snape, mientras la neblina lentamente se disipa.

Él guarda su varita, en su rostro hay una mezcla de preocupación, enojo e incertidumbre.

Severus Snape - Bien, Corvus...

Eres demasiado imprudente, lo cual no es una novedad para mi. 

Aun así, esto no es del todo culpa tuya.

Iré a informarle al director Dumbledore ahora... es posible que él quiera interrogarte en estos días.

Severus Snape se aparta de ella y comienza a salir de los jardines... Mientras se aleja, le dice algo.

Severus Snape - Buenas noches, Corvus...

T/N aún no puede creer nada de aquel día. Ha tenido una racha completa de mala suerte. Solo se queda ahí, por otro rato pensando. Ya es hora de la cena, es mejor que vaya pronto al Gran Comedor. 

Cuando levanta la mirada hacia los pasillos ve una sombra detrás de los muros, la cual repentinamente desaparece, dejando atrás el rastro de una particular bufanda azul.