Las cuatro chicas más cuestionables de Hogwarts se dirigen a desayunar. Pansy Parkinson, el terror de muchos estudiantes fuera de Slytherin; las gemelas Carrow, tan tranquilas como peligrosas; y la chica nueva, T/N Corvus. Nadie sabe lo suficiente acerca de ella pero por sus amistades se puede deducir que no es nada fácil.

Pansy Parkinson - Ahora lo entiendo. 

Es porque estás en Slytherin y el profesor Snape es el jefe de Slytherin.

Por eso te dejó ir.

Flora de repente suelta una carcajada.

Hestia Carrow - Pansy,  ¿es enserio? 

Que lento tu razonamiento...

Flora Carrow - Me alegro de que el profesor Snape te haya dejado ir.

Draco Malfoy siente interés por la conversación y se les aproxima.

Pansy Parkinson - ¿Te unirás a nosotras para el desayuno, Draco?

Draco Malfoy - Si, si no te importa.

Su tono es un tanto irritado, pero así suele ser normalmente.

Hestia Carrow - No tienes por qué que estar nuestro grupo, ¿sabes?

Todos lucen sorprendidos de ver a Draco entre ellas. Él pone los ojos en blanco y mira hacia otro lado.

Draco Malfoy - Sí, bueno.

Tengo hambre.

Cada estudiante toma su desayuno. T/N Corvus solo escucha la conversación entre sus compañeras y Draco Malfoy.

Pansy Parkinson - ¡Ay, me acabo de dar cuenta de que tu túnica está tan limpia!

¿Estás usando túnicas nuevas?

Draco Malfoy - Claro.

Gracias por notarlo.

Bien, ¿de qué están hablando todas hoy?

Es algo entretenido o...

Parece que intenta bromear. No le importaban sus conversaciones la mayor parte del tiempo.

Flora Carrow - Nada tan entretenido como que nos acompañes, seguro.

Entonces, Draco mira a la chica con un lazo rojo en el cabello.

Draco Malfoy - Tomaré eso como un cumplido.

Su voz suena sarcástica. Él suele ser un chico bastante intolerante.

Pansy Parkinson - Te agradeceríamos que te unieras a nuestras charlas de vez en cuando.

Nos encanta escuchar tu punto de vista.

Él mira a Pansy, levanta la ceja izquierda y rueda los ojos una vez más. Ese es el comportamiento natural de Draco Malfoy.

Después del desayuno, las cuatro chicas caminan fuera del Gran Comedor mientras deciden a qué clase deberían ir.

T/N - Creo que nos toca Defensa contra las Artes Oscuras.

Pansy Parkinson - Odio esa clase. 

El profesor Moody es tan malo...

Hestia Carrow - No sería tan malo si no fuera tan condescendiente con los estudiantes.

Flora Carrow - Odio cómo siempre me elige para ser el ejemplo.

Me han golpeado la cara con tantos hechizos que es vergonzoso. 

Realmente espero que me arreglen la cara este año.

Para entonces, llegan al salón y los demás también comienzan a entrar.

El profesor Moody tiene una mirada severa. Parece estar enojado desde el primer momento.

Alastor Moody - Muy bien, continuaremos lo que estábamos haciendo ayer.

Pero antes de traer a los maniquíes, me gustaría tener un voluntario.

Parkinson, pasa al frente para que puedas demostrar este hechizo al resto.

Pansy camina al frente de la clase. Hestia y Flora le dan ánimos desde sus asientos.

Alastor Moody - Usa ese maniquí de ahí y golpéalo con el hechizo.

Hagámoslo rápido porque tengo lugares donde estar.

Pansy sostiene su varita, lanza el hechizo y golpea al maniquí.

Alastor Moody - Buen trabajo Parkinson, de hecho hiciste un muy buen trabajo en eso.

¡Y en realidad le diste al muñeco!

¡La mayoría de las brujas y los magos de tu clase ni siquiera pueden golpear a un muñeco!

Él se ríe de su pequeño chiste al resto de los estudiantes. Algunos ponen los ojos en blanco ante su insulto y lo miran con desagrado.

El profesor camina hacia su escritorio y de repente se da la vuelta, como si hubiera recordado algo.

Alastor Moody - ¡Ah!

Ya que Parkinson fue lo suficientemente buena para obtener un éxito, ¡supongo que podemos terminar la clase temprano!

Cada estudiante sale del salón. El lugar parece aclararse una vez que termina.

T/N - Eso fue... rápido.

T/N Corvus continúa con sus clases hasta el final de la jornada académica. Todos están regresando de vuelta a las salas comunes.

Escucha a sus compañeras quejarse de la horrible lección del profesor Moody y sin que ninguna de ellas la note, toma un camino diferente.

Llega a una habitación solitaria en una de las torres del castillo. Todavía es tarde, cerca del anochecer.

Aprovecha para contemplar el paisaje desde una de las ventanas, se siente muy pacífico. Desde su punto tiene una vista panorámica de una parte del castillo de Hogwarts.

Luego, alguien más llega. Es el profesor Snape con un montón de libros en sus brazos.

Coloca los libros sobre el escritorio. No son grandes, por lo que no tarda mucho en hacerlo. Comienza a apilarlos uno encima del otro. Se sienta a escribir sin darse cuenta de que T/N Corvus estaba justo ahí.

Ella se queda mirándolo sin decir palabra. Esto hace que él caiga en cuenta de que no está solo. Deja el libro mientras levanta sus ojos.

Severus Snape - ¿Qué haces aquí, Corvus?

Claramente quería algo de privacidad, por lo que buscó una habitación bastante desolada.

Su tono de voz suena molesto.

Severus Snape - Deberías volver a tu dormitorio ahora.

No se supone que estés aquí.

T/N - Pero... aún es temprano.

No sabía que venía aquí, profesor Snape.

Severus Snape - Que sea temprano no importa.

No debes andar dando vueltas por la escuela sin razón.

Vuelve ahora a tu dormitorio. 

No te daré una segunda advertencia.

Él todavía la está mirando. Es evidente que su presencia le está causando bastante enfado.

T/N no dice nada en respuesta, se pregunta por qué el profesor Snape odia cualquier tipo de compañía.

T/N - Podemos compartir este lugar por unos minutos más... ¿quizás?

Él suspira y mira hacia otro lado.

Severus Snape - Bien. 

Pero tengo mucho trabajo por hacer. 

Así que callada.

Parece relajarse y no de una forma agradable, sino para dejarla estar ahí.

Ella continúa mirando por la ventana, pero a veces viéndole hacer su trabajo. Se ve tan increíble y... atractivo...  Es un hecho que el profesor trabaja muy, muy duro.

Él no necesita apartar la mirada del libro para saber que está siendo observado.

Severus Snape - ¿Hay algo que quieras?

T/N - Me preguntaba...

Severus Snape - ¿Qué?

Su tono poco condescendiente. Luce agitado por el hecho de que ella lo este mirando.

T/N - ¿Por qué siempre está tan solo, profesor Snape?

Severus Snape no realiza ningún movimiento, pero esa pregunta le tocó un nervio.

T/N - Me refiero a... ¿no tiene compañía?

Como una pareja.

Él se queda en silencio, no responde. Está completamente sorprendido de que le haya hecho esa pregunta.

Va hacia una estantería al lado de T/N Corvus y toma un libro de ahí. Enfoca su mirada en ella con total ira en sus ojos.

Severus Snape - Sal ahora...

Nunca vuelvas a cuestionar mi vida personal o habrá consecuencias.  

¡Largo!

T/N no sabe cómo actuar, no tiene miedo pero... luce desilusionada, porque tenía muchas ganas de quedarse en el lugar.

Camina hacia la puerta y una vez que abandona la oficina aún puede escucharlo maldiciendo en voz alta.

Severus Snape - ¿Cómo pudo preguntarme eso?

Se supone que es una estudiante.

¡Tal pregunta es inaceptable!

Pero esperar que alguien use el sentido común sería como que llovieran manzanas.

¡Increíble!