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Capítulo 34: Pasado

Siete horas después, Harry comenzó a removerse y a despertar bruscamente, mientras lágrimas salían de sus ojos esmeralda.

-Me siguen doliendo los ojos

- ¿Qué te ocurre?- Se alertó Severus acercándose con rapidez.

-Mis ojos me duelen

Severus le examinó frunciendo el ceño.

-¿Desde hace cuando?

- No lo sé, cuando me dormí aún me escocía, pero se disipó al quedarme dormido por completo. Sin embargo, cuando he gueto a despertarme... Me duele más papá Severus, ¿qué me pasa?- Sollozó a punto de restregarse los ojos con sus manitas.

-No te restriegues o se te enrojeceran los ojos

- Es que me duelen y me escuecen mucho. Se está acercando al dolor de cuando me hicieron el hechizo...- Murmuró en un susurró sollozando y sintiendo que estaba en aquel andrajoso calabozo.

-¿Lo recuerdas?-e'l asiente-Eso me puede ayudar a crear una Poción para curarte antes

- No, no me hagas recordar, por favor- Suplicó Harry negando frenético y aterrorizado.

-Aun no ,es demasiado pronto

- No quiero, no quiero- Se encerró en sí mismo Harry sin escuchar lo que decía su papá Severus.

-Muy bien no lo haremos-Harry suspira aliviado

- Hijo... ¿Qué te ocurrió?- Murmuró su padre abrazándole.

- No me hagas recordar papá Severus, por favor. No quiero recordar.

-No todavia,por favor -añade empezando a sollozar

- Shhh calma pequeño, yo nunca dejaré que hagas nada de lo que no quieras hacer- Aseguró Severus con suavidad.

-¿Lo prometes?

- Te lo prometo tesoro. Sería valioso saber el hechizo que te hizo en los ojos, pero si el recordarlo, te va a dañar más, no lo haremos.

-¡Gracias, papa!

- De nada, tesoro. Lo que sea por mi ángel. Te daré una poción para intentar que se te pase el dolor.

-¿Sabe mal?

- Es la que sabía a naranja el otro día- Le acarició el cabello acurrucándole en su pecho. James se encargó de tapar a Sirius para que no se despertase.

-Entonces no sabrá tan mal

- No o eso espero al menos- Sonrió Severus.

- ¿Y mis hermanos?- Preguntó el más pequeño agarrándose a la bata de su padre.

-Están desayunando

- Vale, no lo sabía. Papá, tú me contarás la verdad, ¿cierto?

-Si,por supuesto

- ¿Papá Sirius esta bien?

-Durmiendo pero está mejor

- ¿Por qué no me queréis decir lo que le pasa?

-Si te he dicho la verdad está durmiendo

- Y lo he entendido, pero sé que él me ha mentido. Se que esta mal y no me lo queréis decir. Me estáis ocultando cosas continuamente.

¿Por qué lo hacéis?

-Harry a veces es necesario mentir para que los demás no sufran

-¿Pensaba que mentir era malo,papa?

- Y lo es, es malo, pero a veces hay que hacerlo, porque es lo mejor para esa persona.

-¿Cual es el límite de la verdad y la mentira?

- Según el caso que sea hijo.

-Supongo que es como la línea del bien y el mal, tio Remus dice que es muy fina

- Sí, así es pequeño. Pero te puedo asegurar, que tu papá Sirius ahora está muchísimo mejor, no te preocupes.

-¿De verdad?-ruge su estómago y se sonroja

- Sí, te lo aseguro. Ahora te toca comer, pequeño- Rió Severus haciendo cosquillas a su hijo.

-jejejjej

- Bien, ¿qué quieres comer? Recuerda que tiene que ser suave, que tú estómago no aguanta ciertos alimentos aún- Murmuró abrazando a su hijo, había pasado la mayor parte de su cautiverio sin apenas comida o se podría decir, que directamente sin comida.

-Un poco de caldo de pollo

- Bien pensado- Asintió Severus conforme.Besando la frente de su hijo- Iré a pedirlo.

-Gracias, realmente estoy hambriento

- Claro que sí, es normal.

-¡Siii sopa de pollo! ¡Sopa de pollo!

Severus le pasó a su hijo a James y fue a pedir la sopa.

-'Buenos días Harry

- Buenos días padre- Sonrió Harry contento.

-Severus fue a pedir tu sopa

- Lo sé, me lo he imaginado.

-¡Llega enseguida!

-Tampoco me estoy muriendo de hambre- Rió el más pequeño divertido.

James se rie con él.

- Tampoco vamos a permitir que lo tengas- Le hizó cosquillas su padre- Nos encanta verte reír, pequeño.

-Reír es sano

- Sí, claro que sí, hijo.

-Alarga la vida

- Te gusta tanto informarte y saber como tu papá Severus.

-Ni que tú fueras tonto,papa James

- No, yo no he dicho eso, es que... me recuerdas tanto a tu papá Severus...incluso más que Eileen.

-¿en todo?

- En gran parte, también tienes tu propia personalidad, pero me recuerdas a él cuando nos conocimos y se abrió a nosotros. Tan callado, tan calmado, tan bueno... con tantas ansias de aprender, observador...

-¿Algún día me contaréis vuestra adolescencia?

- Cuando quieras pequeño, cuando quieras. Aunque debido de decir, que quizás haya partes que no te gusten- Acarició su cabello con suavidad.

- Cuando quieras pequeño, cuando quieras. Aunque debo de decir, que quizás haya partes que no te gusten- Acarició su cabello con suavidad.*

- ¿Por qué dices eso, papá?

-No eramos amigos los tres desde el principio

- ¿Cómo? ¿Por qué padre?

-Porque en mi época estaba el prejuicio contra Slytherin

- ¿El prejuicio contra Slytherin?- Frunció el ceño Harry.

-Si, ahora lo veo una tontería

- ¿Os peleasteis? ¿Le hicisteis daño a papá Severus?

James tragó saliva, se debatía entre mentir o decir la verda,decidió ser sincero - Si

- ¿Cuanto? ¿Qué le hicisteis?

-Le hice la vida imposible

¿Queeeee?

- Sí, hijo, le tratábamos mal. No nos gustaba que estuviese cerca. Siempre estábamos fastidiándole y pinchándole.

-¿Y puedo saber la razón ?-se cruza de brazos

- Por...por...- Tragó saliva- Porque era un Slytherin.

-¿En serio? - dijo inc'redulo-¿Solo por eso? ¡Pues si que eras un inmaduro, papa!

- Lo sé, fui un completo estúpido, pero era joven, un creído y un inmaduro. No dejo de pensar en lo mal que trate a tu papá... No sé ni como me perdonó, no se como nos perdono. Fuimos unos auténticos capullos.

-Algo pasaría para eso, eras inmaduro pero has cambiado

- Conocí realmente a tu papá. Terminas conociendo como era realmente, tanto yo, como Sirius y... nos enamoramos.

-la tia Lily dice que le hicistéis mucho daño con quince años en los TIMOS

- ¿La tía Lily? ¿Cuando te lo ha contado?

-Hace unos meses, me dijo que papa Severus y ella ya eran grandes amigos cuando estaban en Hogwarts,incluso antes

- Fue... ¿fue antes de que te perdiesemos?- Cuestionó James con la vez estrangulada, sabía que la respuesta por parte de su hijo iba a ser afirmativa. Había pasado más de medio año en aquel calabozo y ellos no le habían podido encontrar antes. Se sentían frustrados e irritados. ¿Cómo no habían podido encontrar a su hijo antes?

-Si,antes de eso

- ¡Por Merlín, hijo! Fuimos las peores personas del mundo, no te imaginas cuanto.

-¡La gente cambia!

- Y lo sabemos, pero tratamos muy mal a tu papá Severus, no puedes llegar a creer cuanto.

-Cuando esten todos, quiero oir todas las versjiones -James le miro impresionado, jamás había conocido a nadie asi tan imparcial

- Hijo... ¿no me odias?

-¿Por que tengo que odiarte? -

- Por lo que le hice a tu papá Severus, deberías odiarme.

-Como dije quiero escuchar todas las versiones, seguro que hubo más- el ojiavellana estaba sorprendido.

- Desde luego eres un ángel, hijo- Le abrazó con amor y cariño.

-El odio solo hace daño, el perdón cura

- Eres muy sabio para ser tan pequeño, hijo.

-Tio Remus , dale gracias a él

- En realidad, le doy gracias a que hayas nacido y a que estés aquí, con nosotros- Besó mejilla acurrucándole en su pecho.

-Y yo de ser vuestro hijo

Severus llegó con el plato de sopa- Espero que sigas teniendo hambre, pequeñín.

-Mucha

- Bueno, pues creo que eso se va a arreglar- Se sentó en el sillón e indico a su marido que sentase a su hijo en su regazo para darle de comer.

Harry olfateo-Humm sopa

- Sí, pequeño, abre la boquita- Pidió su papá llevando una cucharada a su boca.

-Ah

Severus le fue dando la comida con calma, besando la mejilla de su hijo al finalizar- ¿Qué te parece la idea de que te trate en casa?

-Genial, odio el hospital

- Pues... ya casi tengo todos los papeles preparados para poder llevarte a casa. Eso sí, también estarás en reposo absoluto, ¿de acuerdo?

-Vale

- Bien. James, que tal si le cambias de ropa, mientras yo salvaguardo los últimos requisitos para que podamos irnos.

-Me parece perfecto

Severus besó a su hijo en el cabello, antes de dejarlo con su padre e irse.

-Estaba rica la sopa

- Seguro que tu papá Severus se ha encargado de hacerla- Rió James llevándole en sus brazos y dejándole sentado en la cama- Voy a buscarte de la ropa.

Abrió una maleta y sacó unos pantalones vaqueros junto con un jersey verde y unos zapatillas negras. Le empezó a quitar el pijama que llevaba y no pudo evitar entristecerse y sentir una creciente rabia en él, al ver las cicatrices que le habían dejado los cortes que le había provocado el que creía que era uno de sus amigos.

-Me duelen un poco

- Te las vamos a curar bien- Murmuró James abrazando a su hijo con puro dolor, al ver lo que había tenido que sufrir y aún seguía sufriendo, porque las heridas que tenía no se curaban de la noche a la mañana.

-Pero papa Severus las cura bien

- Por eso lo digo, vamos a hacer lo posible porque estés bien. Tú y tus hermanos lo sois todo para nosotros.

-'¡Lo sé ,papa!

- Deja que te vista- Besó su frente. Le pusó una camiseta de algodón y encima el jersey. Le quitó los pantalones con delicadeza y le pusó los vaqueros. Le ató los zapatos y le cogió en brazos- Ya está pequeñín, solo falta tu papá y nos podemos ir a casa. No me gustaría despertar a tu papá Sirius, así que tendremos que qué llevarle en brazos.

-¿Sigue dormido?

- Sí, estaba agotado y él ni siquiera se daba cuenta.

-¿Durmió bien?

- Le encanta estar contigo desde que te encontramos, eso no cambia, ni siquiera cuando duerme.

-Solo espero que haya dormido bien

- Te puedo asegurar que ha dormido bien y lo sigue haciendo. Eso demuestra lo cansado que estaba.

-¡Me alegro que esté mejor!

- Sí, a él también le vamos a curar hasta que se recupere lo antes posible.

-Nos curaremos los dos

- Así es pequeño y tú desde luego, serás su mejor cura.

-'¡ Y vosotros!

- Sí, nosotros también, pero... él está preocupado por ti, hijo.

-¡Lo siento!

- No tienes porqué disculparte por nada, hijo. Tú no tienes la culpa- Besó su mejilla suspirando con desaliento.

-De acuerdo, solo quiero que se ponga bien

- También tiene que venir de él, hijo, durante todo este tiempo, se ha estado refugiando en el dolor y ese hecho, le ha terminado perjudicando hasta este punto.

-Cierto,primero uno debe querer curarse o no servira de mucho

- Exacto hijo, pero a nosotros nos da igual lo que tengamos que hacer, pero volveremos a tener de vuelta a tu papá Sirius, el bromista y despreocupado.

-Ese es mi papa Sirius -sonrei

- Lo sé, todos le echamos de menos- Severus entró en la habitación en ese instante.

-¡Ya lo tengo todo listo, te han dado el alta!

- ¿¡De verdad!?- Exclamó Harry ilusionado.

-Si , es la suerte que uno de tus medimagos familiares sea uno de sus papas, señor Black Snape Potter-le guiña el ojo, los demás se rien

- Papá Sirius aún no se ha despertado- Hizó un puchero Harry.

-Lo hara enseguida-escuchan un sonoro bostezo

- ¿Donde esta, Harry?- Se preocupó Sirius al no verle tumbado en su pecho.

-Papa, estoy aquí

- Me has asustado, hijo- Se levantó con rapidez de la cama y cogió a su hijo de los brazos de James. A los segundos se sintió mareado.

-Tengo hambre -

- Normal que tengas hambre, has estado durmiendo más de 7 horas.

- Informó James besando sus labios con cariño, sin aplastar a su hijo.

-¡Pues darme de comer!

- Nos vamos ya a casa, creo que puedes esperar hasta que lleguemos allí- Rió Severus.

-¡Si nos vamos ya si!

- Sí, ya le he dado el alta a Harry. Me encargaré yo de su tratamiento y recuperación en casa. Se que le deprime estar en el hospital.

- ¡Eso es genial! ¿No, hijo?- Sonrió Sirius.

-Siiii

- Pues vámonos ya, ¿a qué estamos esperando?

-Si, nos vamos

Se desaparecieron y a los segundos estaban en su casa. Dorea y Charlus entraron en el salón cuanto notaron la aparición.

-Abuelos, estoy mejor-fue corriendo y como no veía se tropezo

Charlus fue hasta él y le cogió- Ten más cuidado hombrecito, podrías hacerte daño- Le dio un toquecito en la nariz.

-Si ,abuelo

Sus hermanos bajaron corriendo las escaleras- ¿¡Harry!?

¡Henry!¡Eileen!

- Hermanito, no sabíamos que tendrías a casa- Comentaron alegres- Los abuelos no quisieron llevarnos a verte.

-Ya estoy aquí,no temáis

- Fue porque Severus nos dijo que vuestro hermano vendría aquí, pero que sería una sorpresa.

-¡Nos ha encantado la sorpresa!-abrazan con fuerza a Harry

Harry rió devolviéndoles el abrazo- ¿De verdad os ha gustado tanto? No soy nada del otro mundo.

-Eres lo mejor, hermanito

- ¿Por qué?

-Por ser tú- Harry contuvo las lágrimas

- Vamos hermanito, ¿qué te ocurre? Sabes cuanto te queremos- Le dieron un beso en la mejilla.

-Y yo os quiero también

- Lo sabemos- Le sonrieron con cariño- Ven, hemos preparado chocolate con los abuelos, ahora sabemos el porqué- Le cogieron de la mano para llevarle hasta la cocina sin que se hiciese daño o se pudiese dar con algo.

-¿Hay chocolate?

- Sí, pequeño, ahora sabemos que también lo hemos hecho para ti. Sin embargo, papá Severus nos ha comentado que no puedes tomar ciertos alimentos y bebidas. Solo puedes tomar un poquito, sino te hará daño.

-Es para curarme -

- ¿El qué es para curarte?

-Ciertos alimentos que no puedo tomar

- Sí, es para curarte, pero seguro que puedes tomar un poquito de chocolate, ¿no, papá Severus?

-Si, un poco si

- Ves, papá Severus ha dicho que sí puedes.

-Siii,chocolate chocolate

Eileen le paso un vasito con chocolate para que se lo bebiese- Aquí está tu chocolate.

-Humm huele muy bien

- Hemos hecho lo posible para que salga muy bien.

-Que aproveche

Harry se bebió el chocolate sorbito a sorbito, no quería que acabase y por ello lo demoró todo lo que pudo.

-Rico

- Nos alegra que te haya gustado, hermanito- Sonrieron Eileen y Henry- Tenemos muchas ganas de que te recuperes, para no verte así. Queremos verte bien.

-Y yo quiero veros

- Ya verás como te recuperas, pequeño, tienes que ser paciente.

-¡Lo intentaré!

- Sabemos que lo harás- Aseguraron sus hermanos contentos de que su hermanito hubiese vuelto a casa.

-Dos meses después-

- Bien, Harry, ya te he ajustado las gafas. Mira a ver que tal ves y si no ves borroso- Le sonrió Severus pasándole las gafas a su hijo, posiblemente sería la primera vez que su hijo volvería a ver.

El pequeño ojiverde empezó a ver formas de manera clara-Papa Severus, hermanos

- Sí, hijo, ¿nos ves?

-Si papa

- Eso es genial, hijo- Le abrazó besando su mejilla.

-¡Podré volver a leer de manera normal!- estuvo un pequeño plazo de tiempo leyendo en Braille

- Así es, pequeño, pero no te preocupes, seguiré trabajando para que puedas volver a ver sin gafas.

-¿Si? Me encantaría -

- Voy a hacer lo posible.

Sirius bajó por las escaleras bostezando, aunque aún se sentía agotado.

-¿Te encuentras bien,papa?

-¿Por qué lo dices, pequeño? Estoy perfectamente- Mintió creyendo que no le veía.

-No te creo

-¡Ahora me llamas mentiroso!

- Lo estas siendo, me estas mintiendo.

-Ya voy comiendo mejor , cachorro

- Pasa algo, lo sé- Le reclamó el pequeño mirándole fijamente.

Sirius se sentó en el sofá más cercano con cansancio, pasando una de sus manos por la cara, intentando despejarse- De verdad no me ocurre nada. Tú no me ves, pero estoy bien.

-Dime la verdad,por favor.No te juzgare

- ¿¡Que quieres que te diga, Harry!?- Exclamó irritado Sirius el sueño y el dolor le podían y no media sus palabras- ¿¡Que fue todo mi culpa, que no ves, que tienes esas cicatrices por mí, que no me lo puedo quitar de la cabeza !?

-Papa no digas eso, por favor

- Entonces, ¿qué quieres que te diga? Me encuentro bien, Harry, no te preocupes por nada. Ya tienes bastante.

-La culpa es del hombre cara rata- los hombres gruñeron furiosos.-¿Lo conoceis?

- Por desgracia sí, hijo, le conocemos- Asintió James mirando reprobatoriamente a Sirius por como acababa de contestar a su hijo. Sabía que se había salido de papeles, pero quería que él mismo se diese cuenta.

- ¡Por Merlín! Soy un padre horrible- Sollozó Sirius tapándose la cara con las manos.

-No eres mal padre -le aseguran todos hasta sus hijos

- Sí, sí que lo soy- Determinó aferrándose a sí mismo- Te he gritado, tú no tienes la culpa de nada, Harry, la tengo yo.

-Papa Sirius, no es tu culpa de verdad

-¡Si lo es!

- No, se que hiciste lo que estuvo en tu mano para que no me dañasen.

-Me noquearon -se enfada consigo mismo

- Por eso mismo papá, se que hiciste lo posible, seguro que no te esperabas que viniesen a por mí. No te culpo- Le abrazó con fuerza intentándose sentar en su regazo.

-¿De verdad ?-se fue calmando poco a poco ,le miro a los ojos por det'ras de las gafas-Ahora mismo te pareces mucho a James

- Ya puedo ver, papá Severus me ha puesto las gafas y no veo borroso.

-Me alegro, es que Severus es de los mejores Medimagos

- Sí, papá Severus es un gran medimago. Papá Sirius, ¿te ocurre algo más?

-No - le asegura,Harry asiente

- No quiero que caigas malo por mí culpa, papá Sirius.

-Te estás recuperando,por lo que me siento mejor

- ¿¡Genial!?- Sonrió el pequeño ojiverde dándole un beso en la mejilla a su papá.

-Todos felices😊

- Sí, papá, deberías dormir un poco.

Se te nota cansado.

-¿Tu crees?

- Sí, pareces agotado.

-Quizá debería dormir mas

- Quizás sí, tienes mal aspecto. Se te nota muy cansado.

- Aseguró el pequeño acurrucándose en el pecho de su papá- Si quieres me duermo contigo.

-¿Si?

- Sí, claro, parece que necesito descansar un poco los ojos. Me lloran, supongo que por el uso repentino.

-Pues nos vamos a dormir los dos

- Vale- Asintió el pequeño contento aferrándose a su cuello, para sentirse más protegido cuando se levantó.

-Nos vamos, buenas noches -se despide Sirius

- Buenas noches. Aunque... ¿por qué no dormimos con vosotros?

-¡Siiii!-

- Venga, pues vamos a dormir- Cogieron James y Severus a sus hijos y fueron detrás de Sirius a la habitación.

-A dormir con Harry siii

En cuanto llegó, Sirius se tumbó en la cama y dejó a Harry descansar en su pecho- Siempre me ha gustado tumbarte en mi pecho, desde que eras un simple recién nacido.

-Es que eres muy calentito

- Parece que sí, porque desde el primer momento, te has querido dormir en mi pecho- Sonrió Sirius acariciando su cabello y quitándole las gafas con cuidado.

-Si,es cierto

- Bueno, pues a dormir- Besó su cabello con cariño y le arropó con las mantas, mientras sus maridos se acomodaban a su lado junto con Eileen y Henry.

-Buenas noches -respondieron los demás y se quedaron dormidos

James fue el primero en despertarse. Se levantó de la cama teniendo mucho cuidado de que nadie se despertase

-Bueno a mear-

Cuando volvió, miró a su familia con cariño. Eileen y Henry se habían terminado acercando todo lo que pudieron a su hermanito y le habían agarrado cada uno, una de sus manitas.

-Que tierno

Severus fue abriendo los ojos lentamente y miró a su marido- ¿Qué haces ahí? Tú nunca te despiertas pronto- Aseguró mientras acariciaba el cabello de su hija.

-Tenia que ir al baño

- Ya... pero sigues ahí- Rió levemente Severus para que sus hijos no se despertasen.

-Ya me iba a volver a dormri

- James... ¿te ocurre algo?- Preguntó Severus alzando la ceja y mirando fijamente a su marido.

-Solo pensaba en Colagusano, Peter, como ha podido volverse tan malvado?


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