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Capítulo 25: El arrepentimiento de Walburga parte 1

- ¿Por qué no me lo has dicho antes?

-Porque apenas se ha enterado hace una semana

- Y qué pretendeis, ¿qué le perdone todo?

-No, solo habla con ella

-¡NUNCA, LA ODIO CON MI ALMA!

- Siri... si no hablas con ella, nunca te lo perdonarás- Comentó James acariciando una de las manos de su novio.

-¿Como quieres que la perdone ,James ?

- No he dicho que la perdones, he dicho que hables con ella. Quizás te lleves una sorpresa, Siri. Por favor, no dejes que se muera sin que hable contigo.

-No se si puedo, ya no siento cariño por ella

- Siri, no lo sabrás hasta que hables con ella- Le recordó Severus- ¿Qué pierdes si vas a verla? Nada, no pierdes nada, tal vez ganes algo.

- Tu hermano va a venir ha verte y quiere saber si irás a verla. Tienes ese plazo para pensarlo, Siri. Solo quiero lo mejor para ti y como te conozco sé que si no hablar con ella, nunca te lo perdonarás- Le acarició la mejilla James y cogió a su hija de los brazos de su madre- Gracias por cuidarlos, mamá.

- No tienes que agradecernos nada, hijo, lo hacemos con gusto y mucho más sabiendo que se trata de cuidar a los dos nietos más buenos de este mundo- Aseguró Dorea haciéndole carantoñas a Eileen y después girándose y realizándoselas a Henry, el cual aún se encontraba entre los brazos de su marido.

Unas horas después, llego Regulus con rapidez, acercándose a su hermano para cerciorarse él mismo de que estaba bien

- No me vuelvas a pegar estos sustos- Murmuró en cuanto estuvo a su lado abrazándole con fuerza.

-Si yo estoy bien Reg de verdad

- No me lo creo, Sirius, ¿Acaso te viste cuando te llevaron a San Mungo? ¿¡Estabas moribundo!? Me dijeron que si no llegamos a llamarles antes... estarías muerto- Terminó en un hilo de voz.

¿En serio ?

- ¿Crees que mentiría en algo así, hermano?

-No

- Pues entonces, no me vuelvas a hacer pasar por esto hermano- Dijo sin separarse de él, con verdadero terror en sus ojos.

-Me veras durante muuucho tiempo

- Más te vale- Le pegó un puñetazo amistoso con cuidado- ¿Qué tal están mis sobrinos?

-Jugando

- Miralos, pero que monos que son- Sonrió Regulus- ¿Puedo cogerlos?- Hizó un puchero.

-Si claro pero Henry es algo arrogante

- Bueno, algo tenía que sacar de James y de ti- Rió Regulus, aunque sabía que su hermano no era el verdadero padre del pequeño y de la pequeña, los trataba como si lo fuesen.

Cogió a los dos pequeños entre sus brazos y se sentó en el sofá al lado de su hermano- Sabéis, a mi este terco de al lado, no me va a hacer caso, pero a vosotros seguro que sí que os lo hace. Venga, decirle a vuestro papi Sirius que no vuelva a hacer más tonterías como esta. Es que el pobre tiene la cabeza tan dura que aún le cuesta entender que nos hace sufrir a los demás con sus imprudencias- Les explicó a los pequeños mientras miraban a su hermano con gran fijeza y lo que se podría interpretar como un leve enfado que guardaba mucho más en las profundidades.

Los pequeños también miraron a Sirius con el ceño fruncido.

- De acuerdo, intentaré no volverlo a hacer, pero no me miréis así, por favor.

Henry asintió con una sonrisa de satisfacción.

En ese instante apareció Remus en el comedor- Hola Sirius, me alegra saber que estés bien. Apenas me han dejado acercarme a ti, primero tus novios y después tu hermano- Rodó los ojos.

-Son unos exagerados , yo puedo con todo

- Sabemos que puedes con todo, pero tienes que tener más cuidado Sirius- Le recordó sentándose al lado Regulus y admirado la imagen de verlo cogiendo a los dos pequeños, sin poderlo evitar se imagino que los dos niños tenían los ojos grises como Reg y su pelo negro con reflejos castaños como el suyo.

Regulus le dirigió la mirada y le sonrió, expresándole con la mirada todo lo que no podía decirle en ese momento.

-Lo hará, tiene que cuidar a los niños

- Así es, mis pequeños sobrinitos- Rió Remus acariciándoles las mejillas a ambos- Cada vez se avecina más y más la guerra.

Hay que tener cuidado- Aseguró.

- Regulus, ¿has conseguido que tú hermano quiera ver a tu madre?

-Medio Rem, aun se resiste

- Sirius, tienes que ir a ver a tu madre, se está muriendo. No te lo vas a perdonar si no vas.

Al final Sirius terminó cediendo- De acuerdo, hablaré con ella, pero no voy a ir así para que se ría de mí. Me voy a duchar y vestir y después iremos a ver a mamá- Decretó Sirius levantándose con dificultad del sofá.

-De acuerdo , hermano

- Te ayudaremos, Sirius- Asintieron sus novios ayudándole a levantarse y llevándole hasta la habitación.

- Bueno, vamos a llevarnos a estos pequeños a comer- Comentó Dorea cogiendo a Eileen y Charlus cogió a Henry para llevarlos hasta la cocina. Dejando solos a Remus y Regulus.

- ¿Cuando se lo vas a decir a tu hermano, Reg?- Preguntó Remus con pesadez.

-Pronto Remus , pronto

- Yo no lo veo claro, Reg, ¿qué pasa? ¿Tienes miedo de su reacción o es que te da vergüenza estar conmigo?

- Preguntó Remus sintiendo que era por ser él, por lo que Regulus no quería decirle nada a su hermano. Sentía que sobraba y que no significaba nada realmente para el hermano pequeño de Sirius.

-¿Que ? No no , claro que no me da verguenza Remus-le besa la mejilla -Esta tarde se lo diremos los dos -El licántropo sonrió de nuevo

- ¿De verdad? Entonces... ¿no soy prescindible para ti, Reg?

-Para nada , eres una parte importante de mi vida

- Los siento, no estoy acostumbrado a que me digan eso- Comentó Remus acercándose a Regulus y acariciándole la cintura- Te quiero, Reg.

-Yo tsmbién , comprendo tu inseguridad Rem. Has sufrido y has sido despreciado muchas veces por tu PPP

- Sí... así es, pero no debería tenerla contigo... He sido un estúpido- Comentó Remus apoyando la cabeza en uno de los hombros de su novio.

-Todos alguna vez lo somos, cometer errores es de humanos

- Sí, pero yo se que tú me quieres y tú sabes que yo te quiero. Sin embrago... siempre lo estoy cuestionando...

-Si no fueras tan timido e inseguro no serías mi pareja . No cambies nunca , Rem

- Gracias- Aseguró Remus mirándole a los ojos- Eres el mejor- Besó sus labios con suavidad y cariño mientras le acariciaba la mejilla con ternura.

-¿Que quieres estudiar cuando te gradúes ?

- ¿Qué tal... como profesor de Defensa contra las artes oscuras? Es lo que más ganas tengo de ser, pero sé que nunca lo conseguiré- Murmuró con pesar besando la mejilla de Regulus- Tranquilo Reg, ya lo tengo más que asimilado.

Reg chasquea la lengua -olvidas una cosa , pronto yo junto a mi hermano seremos los herederos de la casa Black y nuestra familia tiene mucha influencia. Con esto quiero decir que haré lo que esté en mi mano por la existencia de leyes mas justas para los hombres lobos

- No es necesario que hagas algo así, Reg, tú ya has hecho demasiado por mí.

-Lo haré y nadie me detendrá -Lupin derramaba lágrims emocionado

- Muchas gracias Reg, me alegra haberte conocido- Susurró entre lágrimas Remus volviendo a apoyar la cabeza en el hombro de su novio- Aún no entiendo como puedo tener a alguien como tú.

- Porque me tienes y eres una de las mejores personas que hay en este mundo, Remus Lupin. Sabes perfectamente que tú me ayudaste a salir de mi depresión, después de que me intentasen matar y gracias a ti, pude volver a salir con tranquilidad por los pasillos de Hogwarts sin tener temor a que me hiciesen daño. Todo fue gracias a ti y eso no lo hace cualquiera, Rem- Sonrió el pequeño de los Black acariciando la mejilla del castaño.

Sin darle tiempo a que el hombre lobo replicase, beso sus labios con cariño, dejando entrever en ese beso lo mucho que le amaba.

De repente se oyó un ruido y los dos se giraron a mirar. Sirius se encontraba al otro extremo del Comedor estaba siendo sujetado por James y Severus. Se notaba en su rostro la sorpresa y parecía haber tenido un traspiés al haber visto la escena que se desarrollaba ante sus ojos.

-Hermanito te he pillado eh -dijo con picardia

- Un poco solo. Pero te lo iba a contar ahora después. Ahora ya lo sabes- Sonrió Regulus.

-Pues Felicidades

- Muchas gracias hermano, somos muy felices juntos.

- No podría pensar en nadie mejor para mí hermano.

-Hacéis buena pareja y ahora nuestro licántropo será feliz , espero que pronto me deis sobrinos -los dos se sonrojaron , James negaba con diversión mientras que Sirius se reía

- Dejales, no tienen que ser tan rápidos como nosotros Sirius, aún tienen tiempo de pensarlo.

-Que acabemos de iniciar nuestra relación chucho pulgoso -dice serio Remus

-¡ Lunático, que no tengo pulgas!

- Venga vamos, dadme otra alegría- Añadió Sirius haciendo un puchero.

-Pero si apenas llevamos un mes, todo a su tiempo , hermano

- Vale, vale, yo solo lo dejaba caer- Se encogió de hombros Sirius- ¿Lo sabe madre?

-No, ya sabes lo que opina de las relaciones homosexuales

- Como parecía que ya estábamos tan bien con ella, pensé que se lo habías dicho.

-No , eso no. Se lo diré cuando vaya contigo a verla.

- De acuerdo, pues... podemos irnos ya- Decretó Sirius.

-De acuerod -Regulus besa la mejilla de Remus - Volveré pronto, Rem

- No tardes, ¿vale? Te estaré esperando- Le sonrió abrazándole.

-No tardaré mucho -le devuelve el abrazo , luego se separa -Vamos Sirius

- Me vas a tener que ayudar un poco. Aún no puedo andar muy estable, hermanito.

- Claro- Le cogió y le sonrió- Nos vamos con mamá, hermano.

-Vale, adiós Remus

- Adiós, volved sanos y salvos- Dijo Remus antes de que desapareciesen.

Sirius vio la casa en la que había estado durante toda su infancia, parecía no haber cambiado en apariencia, pero había ciertos cambios en el ambiente, ya no parecía que hubiese malas vibraciones ni negatividad y era algo a lo que Sirius podía aferrarse.

-Parece que por fin ya no están esas espantosas cabezas de elfos

- Aunque te parezca mentira, las mando quitar mamá.

-¿En serio ?

- Totalmente en serio, hermano, lo creas o no, ha cambiado.

-¡Estoy impresionado!

- Ya veo, ven, vayamos a su habitación.

-Si, te sigo Reg

Reg se dirigió hasta la habitación de sus padres en la tercera planta, mientras Sirius le seguía los pasos.

- Madre... buenas tardes- Murmuró Regulus al abrir la puerta- Sirius esta aquí.

- Dile que entre- Respondió la voz de su madre, pero Sirius noto la debilidad esta, casi parecía que se le iría el aire con aquella frase.

-No parece ella, hermano

- Lo sé, entra Sirius y verás lo mucho que ha cambiado- Declaró el ojigris menor, apartándose y dándole paso a la habitación.

- No sé si podré hacerlo.

- Claro que podrás Sirius, siempre has podido con todo. Además, me tienes a mi- Le sonrió Regulus cogiendo una de sus manos como vuestra de apoyo fraternal.

Sirius se armó de valor y entró a la habitación de sus padres- Buenas tardes madre, ¿querías verme?

- Es bueno saber que te dignas a visitarme, hijo- Murmuró su madre con su dignidad y orgullo de siempre.

-Regulus me ha convecido

- Sí, como no, siempre te vales de los demás. No puedes hacer nada por ti mismo- Rió amargamente Walburga.

- Pues debo decirte algo, madre- Respondió con determinación y frialdad Sirius.

Ya no iba a callarse más, le daba igual lo que su madre le dijese.

Aunque tenía la esperanza de que fuese verdad lo que le había dicho su hermano. Ojalá su madre hubiese cambiado.

-Adelante, te escucho

- Y...¿Qué tendrías que decirme?- Cuestionó la mujer mirando a su hijo fijamente.

- Que me voy a casar, con dos hombres magníficos y he tenido un hijo y una hija maravillosos- Afirmó con firmeza y seguridad- Soy más feliz que nuca y tú no lograrás arrebatarme esa felicidad.

- Que me voy a casar, con dos hombres magníficos y he tenido un hijo y una hija maravillosos- Afirmó con firmeza y seguridad- Soy más feliz que nuca y tú no lograrás arrebatarme esa felicidad.*

- Que me voy a casar, con dos hombres magníficos y he tenido un hijo y una hija maravillosos- Afirmó con firmeza y seguridad- Soy más feliz que nunca y tú no lograrás arrebatarme esa felicidad.

-¿Eso está permitido? Lo de casarse con dos hombres

- No nos importa que no lo este, lo haremos igualmente. Nos amamos y nuestros hijos nos necesitan- Contesto Sirius- ¿Qué pasa madre? ¿No te gusta la idea? ¿No te parezco lo suficiente digno?

-Es que no he escuchado eso en mi vida

- Pues ya lo has escuchado. Al menos se que has madurado, porque de lo contrario, me estarías gritando como una loca psicópata por lo que te he dicho.

-No me queda mucho de vida y no tengo fuerzas para gritar

- Maravilloso entonces, así te perderemos de vista- Declaró Sirius con frialdad.

- ¿¡Sirius!? No digas eso- Le amonestó Regulus.

-¿Por que no? Ella no muestra signos de arrepentirse de todo el daño que nos ha causado

- Por favor, Siri, déjalo estar, se está muriendo...

-Podría estar fingiendo -Regulus no esperaba que su hermano tuviera tanto rencor acumulado hacia su propia madre

En ese momento, Orion, que hasta ese instante había estado callado, hablo.

- Hijo, por favor, ya esta bien. Tu madre está muy enferma y ha decidido verte. ¿No puedes dejar tu rencor a un lado durante unos segundos?

-Unos segundos si

- Perfecto, gracias por tu comprensión- Respondió su padre con cansancio sujetando una de las manos de su mujer- Habló de parte de ambos cuando digo, que... si te hace feliz el amor que tienes hacía esos dos hombres, te damos el consentimiento de casarte con ellos, hijo. Sin embargo, será con una condición.

-Ya empezamos con las condiciones -dijo rodando los ojos - A ver,¿cual es ?

- Nos gustaría conocer a nuestros nietos. Tu madre no quiere morir antes de conocer, aunque sea a alguno de vuestros retoños, hijos.

-Eso puedo cumplirlo si

- También... también queremos conocer a tus futuros maridos. Debemos saber con quien, digo con quienes te vas a casar.

-Llamalos, hermano

- Está bien- Suspiró el ojigris mayor. Lanzando su patronos que había cambiado a una serpiente y un ciervo que jugueteaban juntos- "Id a por Severus y James, decidles que vengan a mi casa junto a los niños y a Remus"- Miró a su hermano con una sonrisa traviesa, mientras veía como desaparecía su Patronus.

Los patronus se fueron.

- ¿¡Hermano!?- Hizó una rabieta Regulus- Necesitaba mi tiempo.

-Fuiste lento,Reg jejej

- Pues yo no me rio- Frunció el ceño Regulus.

-¿Y que culpa tengo que hayas sido lento?-se sigue riendo y Reg le da un codazo -'¡oYE!

- Te lo merecías, por creído- Declaró Regulus. Al segundo escucharon unos pasos subiendo las escaleras.

-¡Ya llegaron!

- Bien, por fin conoceremos a esos hombres tan magníficos- Comentó Walburga irguiéndose levemente en la cama.

-Ya estamos aquí, Sirius -se escucho la voz de James, Kreacher murmuro algo de ''traidor a la sangre ''pero lo ignoro

- Hola James- Sonrió Sirius con alegría y amor al verles allí- Hola Sev- Les abrazó teniendo cuidado con los bebés que portaban ambos- Os he echado de menos durante estos minutos.

-¡ASQUEROSO MESTIZO!-espeto indignado Kreacher

-Pírate elfo -dijo con frialdad Severus

- Callate Kreacher- Le miró mal Sirius y fulminándole con la mirada . Se volvió a girar hacía sus novios y les dio un beso a cada uno en la comisura de los labios.

-Menudo elfo tienes, Canuto -espeta James

- Lo sé, no le hagáis caso. Mis padres quieren veros- Suspiró Sirius con nerviosismo.

-Vale, ahora vamos

Sirius volvió a entrar en la habitación abrazando por la cintura a sus dos novios- Mamá, papá, estos son Severus y James, mis futuros maridos.

-Ah el heredero de los Potter

- Así es- Asintió Sirius- Y Severus Snape Prince, junto con nuestros dos hijos. Eileen- La señaló estando en los brazos de Severus- Y Henry- El cual se encontraba en los brazos de James.

-Eileen , es la mujer que se caso con un muggle -dice Walburga

- Sí, ¿tiene algún problema con mi madre, señora?- Cuestionó Severus abrazando a su hija contra sí con delicadeza.

-Con tu madre no, gran practicante de las Artes Oscuras y las Pociones, sino con tu padre. Menudo cerdo

- Sí, por desgracia yo no lo podría expresar mejor- Asintió el ojinegro con frialdad.

-¿No te llevas bien con él?

- No- Declaró sin un ápice de duda y sin sacar ni un solo sentimiento. Sirius le apretó más contra sí al verle y notarle tan tenso.

-No me sorprende, es un hijo de puta

- ¿Qué ocurre? ¿Le conoció?- Respondió Severus con una ceja alzada y una mueca de burla.

-Estuve en la boda de tu madre, tus abuelos maternos no podían creérselo cuando paso. Se caso con un asqueroso muggle bruto que era un borracho

- No creo que siempre fuese así- Salió en su defensa Severus, no sabía el porqué, pero lo hizo.

-Oh si, la cosa cambio cuando descubrió que Eileen era bruja

- Madre, no hemos venido aquí a hablar de ese tema- La fulminó con la mirada Sirius.

-Sirius tiene razón, cariño -dice Orion

- Es cierto- Tuvo que estar de acuerdo la mujer- ¿De verdad queréis a mi hijo o es solo por el poder de los Black?

-No es por el poder o el dinero, es por amor

- Claro, eso suelen decir todos- Los miro fijamente Walburga.

-¿Yo para que queiro dinero si no me hace feliz?pregunta James -A mi me hace feliz Sirius y Severus

- Está bien, os creo y bueno, ¿quienes son mis nietos?

-Eileen y Henry

- ¿Puedo?- Preguntó extendiendo su brazos.

-De acuerdo pero al minimo daño te los quito -le advierte Sirius

- No les voy a dañar- Aseguró Walburga viendo como ponían a sus nietos entre sus brazos- Son preciosos, pero... no sé parecen a ti, hijo.

-¿En nada verdad ?

- En nada, no se parecen en nada. Por una parte mejor, ¿te imaginas lo feos que habrían sido, Orion?- Preguntó bromeando Walburga.

-¡Hey, que yo soy muy guapo!

- Tienes toda la razón, Walburga, imagínatelo. Con lo guapos que son estos pequeñines así- Terminó riéndose Orion con sinceridad.

Sirius no creía ver lo que estaba viendo, ss padres se reian con sinceridad no con burla o sorna.

- Así que Henry y Eileen, nunca pensé que conocería a mis queridísimos nietos.

-La niña tiene la mirada de un Prince - comenta Orion

- Sí, Eileen se parece más a mí- Declaró Severus- La mayor parte del tiempo prefiere estar conmigo.

-¿Y el niño?

- El niño se parece a James- Aseguró Severus- Pero Sirius le ha pegado sus carácter, cada vez se le nota más.

-Ni que fuera algo malo, Sev -dice fingiendo estar ofendido el ojigris

- Yo no he dicho eso- Hizó un pequeño puchero Severus acercándose a Sirius y dándole un beso en la mejilla- Adoro que sea como tú.

-Si lo se, te estaba tomando el pelo -empieza a reírse y Henry le imito

- No me toméis el pelo- Murmuró Severus cruzándose de brazos y agachando la cabeza, tapando su cara con el pelo.

-Es una bromita, ¿verdad Henry?

El pequeño asintió sonriendo como Sirius.

- Sabes que no me gustan demasiado las bromas, Siri.

-¿No le gusta las bromas,?-se sorprendió Orion -

- No- Murmuró Sirius- Lo siento mucho amor, no me he dado cuenta de lo que hacía. ¿Me perdonas?

-Humm déjame que lo piense - se quedo pensativo -Si

- ¿De verdad?- Le sonrió mirándole a los ojos y acercándole más a él para besarle.

-Como no iba a hacerlo, te conozco y se como eres.

- Lo siento de verdad, Sev, no me he percatado- Delineó Sirius sus labios con uno de sus dedos.

-Repito,no pasa nada

- Sí que pasa, me siento mal- Le besó en los labios con suavidad- Yo no debería cometer estos errores.

-Pero cometer errores es de humanos -

-¡Siempre tan filosófico como Lunático!

- Si no lo fuese, ¿qué haríais vosotros?

Eileen balbuceo contenta estirando uno de los cabellos de su abuela.

-gugug

- Ten cuidado Eileen, no vayas a arrancarme los pelos- Le recordó Walburga besando su manita.

-Vaya que tierna -se sorprende Sirius

- Yo también se comportarme como es debido, hijo. Pensé... pensé que lo mejor era trataros como mi familia me trato a mí, pero me he dado cuenta de que esa no es la manera. Lo he hecho mal, hijo, espero que puedas perdonarme. Cuando te tuve entre mis brazos por primera vez, me sentó llena, entera... Eras un bebé risueño y precioso y me prometí que siempre te protegería, pero me temo... que no lo hice bien. Te hice daño y me arrepiento cada día que pasa.

-¿Lo dices en serio?

- Totalmente en serio, lo lamento hijo. Tienes unos hijos fantásticos.

-¿Lo dices en serio?

- Sí- Repitió riendo su madre mientras abrazaba a sus nietos- De verdad os amáis, lo he podido comprobar.

-Lo hacemos,señora Black

- Me alegra que mi hijo os tenga. Quiero más nietos... aunque quizás no pueda verlos...- Agachó la cabeza con tristeza.

-¿Cuál es su enfermedad? Puedo encontrar una cura -la señora niega mirando al ojinegro

- Tengo cáncer, Severus. ¿Lo puedes creer? Una enfermedad del mundo muggle.

-Hay muchos tipos de cancer , si es reciente puedo tener tiempo de investigar la enfermedad

- Los medimagos no están seguros... no entienden demasiado esta enfermedad- Suspiró Walburga acomodándose mejor en las almohadas agotada, pero son dejar de mirar a sus nietos.

-Faltan expertos en enfermedades muggles - asegura el ojnegro -Aún no es tarde, muy bien pues ya sé ,seré Medimago y aprendiz de Auror

- Tampoco te sobreesfuerces, si ves que no puedes con una de las dos, la dejas, ¿de acuerdo?- Le pidieron James y Sirius, no querían que llegase a su límite.

-Prometido, pero al menos tenog que intentarlo

- Lo sabemos- Sonrieron ambos abrazando y protegiendo al pelinegro. Querían dejarle fuera de cualquier maldad. Para ellos era su pequeño ojinegro, al que debían proteger costase lo que costase.

-Veo que los jóvenes cada vez son más tolerantes

- Bueno, nosotros ha somos mayores de edad, padre- Le sacó la lengua su hijo ofendido.

-En nuestra época te volverías loco, Sirius - dice Orion

- Bueno, nosotros ya somos mayores de edad, padre- Le sacó la lengua su hijo ofendido.

-En nuestra época te volverías loco, Sirius - dice Orion.

- ¿Y eso por qué, papá?

-Porque eran demasiados estrictos

- ¿Por qué íbamos a ser estrictos entre nosotros o con nuestros hijos? No han hecho, ni hemos hecho nada malo- Declaró el ojigris.

-Precisamente, antes las cosas eran mas injustas y habia muchas normas

-¡Aburrido!

- Ya te lo ha dicho tu padre, hijo, no habrías podido aceptar un entorno así. Yo te estaba educando, conforme lo hacían antes, con los mismos criterios- Aseguró Walburga.

-¡Llego a nacer en esa época y me vuelvo majareta!-

- Por eso te lo decimos, hijo. Solo quiero que me entiendas. No me gustaría morir sin tu perdón.

-Viendo que te has disculpado con sinceridad , te perdono

- Gracias- Sonrió levemente Walburga, pero con sinceridad- Necesito descansar Orion...

-Dulces sueños, cariño.

- Mamá, antes de que te duermas, quería contarte algo- Se armó de valor Regulus adelantándose unos pasos para que le viese.

-¿aH SI?

- Mm sí- Murmuró nervioso.

-Habla Reg

- Bueno... he conocido a alguien, madre.

-¿Hombre o mujer?


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