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CINCO


CAPÍTULO 5
BULLSHIT

¿SOY basura?

Veronica apoyó su cabeza en la ventana del auto de Steve Harrington. Un cigarrillo encendido se encontraba entre dos dedos de su mano derecha y ella trataba lo más que podía de mantener sus ojos cerrados para evitar que la migraña se incrementara, aunque el repentino debate de Steve no estaba ayudando exactamente, y todo lo que quería era que su paseo en auto en las primeras horas de la mañana fuese dejado en silencio. No podía creer cómo había terminado su noche: dejada sola tras haber follado con el chico que la usó como cita por lástima. Quería gritarse a sí misma.

Levantó su cabeza apenas, mandándole una mirada confundida.

⏤No sé cómo responder a eso.

⏤Como ⏤Steve suspiró, sus manos apretando el volante fuertemente⏤. ¿Todo lo que hago es basura?

Veronica frotó sus sienes.

⏤No lo sé ⏤murmuró⏤. ¿Alguien te dijo eso? ¿Billy? ¿Tommy?

Steve tragó fuertemente antes de responder.

⏤Nancy.

De repente, se quedó callada. Le dio una calada a su cigarrillo antes de dejarlo salir por la ventana de pasajero. Estaba muy sorprendida de que Nancy Wheeler le dijera algo así a su novio, pero quizá no era tan buena como todo el mundo creía.

⏤Ella... probablemente estaba demasiado ebria. No lo sé ⏤Veronica se encogió de hombros, cerrando sus ojos cuando su cabeza comenzó a palpitar⏤. Pero, por otro lado, palabras ebrias son pensamientos sobrios.

Steve la observó antes de volver a la pista.

⏤No estás haciéndolo mejor ⏤dijo⏤. Soy basura, entonces.

⏤Harrington, ¡realmente no sé de qué va esto! ⏤Su exclamación lanzó una ola de dolor a sus sienes y las tuvo que frotar a causa de la sensación⏤. Ahora somos conocidos. No hemos pasado tiempo juntos por dos años. Las cosas son diferentes ahora. No conozco a este nuevo tú.

⏤Quizá podamos cambiar eso ⏤Steve le sonrió, pero los ojos de ella seguían cerrados⏤. Dado que ya no le agrado a la mayoría de mis amigos y mi novia dice que soy basura, ¿por qué simplemente no pasamos tiempo juntos?

Para entonces, Veronica ya lo estaba observando, lanzándole una mala mirada, casi. Señaló con su cigarrillo en su dirección.

⏤Eso suena como que solo quieres ser mi amigo porque estás solo ⏤se burló y se dejó caer su espalda en el asiento⏤. No, gracias.

Steve la observó terminar su cigarrillo y lanzarlo por la ventana. Negó con la cabeza, girando hacia la calle cerrada.

⏤No quería decir eso.

⏤Claro que sí ⏤replicó rápidamente, dejando su cabeza contra el vidrio.

Steve aparcó el auto cerca a la entrada, notando la camioneta del padre de Veronica estacionada aún más cerca de la casa. Ella no se movió en absoluto, dejando que Steve saliera del auto y tratara de levantarla del lado del pasajero.

⏤Puedo levantarme sola ⏤murmuró mientras gruñía con dolor, aunque cuando él la soltó, sus rodillas casi cedieron. Steve tuvo que, prácticamente, arrastrarla por los hombros hacia la puerta, que estaba extrañamente sin seguro⏤. Siempre está así ⏤dijo con ojos cansados.

Él asomó su cabeza dentro de la casa, observando a un hombre en uniforme de policía que dormía en el mueble. Veronica murmuró con algo de duda dónde quedaba su cuarto y él la ayudó a entrar a la casa. Steve tiró de ella hacia el pasillo cerca de su cocina, sus zapatos sucios arrastrándose contra la alfombra. A la izquierda, finalmente encontró el cuarto pintado de púrpura de Verónica. Casi la dejó caer cuando observó las paredes del cuarto, que eran una completa imagen de lo que había sido su vida en los dos años que no había estado cerca de ella. Un pequeño cuadro se asentaba en su mesita de noche, conteniendo el último retrato de su hermano menor.

Steve acomodó a Veronica en las sábanas negras, jalando una sábana del final de la cama para colocarla sobre ella. Una de sus manos volvió a su frente, pero Steve la sacó y la dejó a un costado.

⏤Vas a querer descansar ⏤instruyó, a lo que ella solo gruñó otra vez.

⏤Sé honesto conmigo, Steve ⏤susurró. Steve estaba casi anonadado de no oír algún tono de molestia en su voz⏤. ¿Cuán horrible será el lunes para mí? ¿Cómo puedo sobrevivir con todos probablemente sabiendo que tuve sexo con el chico nuevo mientras estaba borracha?

Él rio levemente, causando que Veronica entrecerrara sus ojos.

⏤Solo ignóralos.

⏤No puedo creer que hiciera eso ⏤bostezó después de decirlo⏤. No puedo creer que me dejara en ese cuarto, malditamente desnuda.

Steve observó a Veronica con simpatía. Se maravilló por la manera en la que sus ondas azules se desperdigaban por la almohada, creando un contraste entre los colores oscuros. Ella se movió ligeramente para acurrucarse dentro de la sábana que él había colocado sobre ella y sus ojos se cerraron con facilidad.

⏤Algún día ⏤suspiró Steve⏤, algún día alguien te tratará de la manera en la que quieres ser tratada, Veronica Moreda. Lo mereces.

Veronica dejó salir un ronquido. Ya se había quedado dormida.

⁕ ⁕ ⁕


⏤Entonces, ¿qué pasó en la fiesta?

⏤No quiero hablar de eso.

Veronica estaba de pie en medio de la cocina, observando el horrible y amarillento papel que se estaba pelando de la pared. Una taza con café caliente estaba entre sus manos y su desaliñado cabello azul sugería que necesitaba toda la energía que pudiese obtener. La noche tras la fiesta, un domingo, se despertó para no encontrar a su padre allí. Él se había ido a la estación de nuevo y en ese momento, ya que era lunes (el peor día de todos), él estaba en la mesa, observándola en espera de una respuesta que no quería dar. Edward se sentía sudar bajo el uniforme.

⏤Tú... ⏤pausó, queriendo que la frase salga correctamente⏤. Tú ya no vas a fiestas de secundaria. ¿Por qué el cambio?

⏤Alguien me pidió que vaya ⏤se encogió de hombros.

⏤Aun así, tú no...

⏤Hey, ¿no fuiste tú el que decía que ya no hacía nada? ⏤Veronica alzó una ceja⏤. Estoy tratando de ser una adolescente normal otra vez. Especialmente en un día como Halloween, traté de olvidar lo de Louie y divertirme. Deberías de estar orgulloso.

Edward asintió mientras él y su hija daban un gran sorbo de sus cafés. Le tomó un momento a Veronica tomar todo el líquido negro, pero lo hizo de todas maneras. Colocó su taza en el lavadero antes de levantar su mochila del suelo.

⏤Bueno ⏤suspiró⏤. Debo avanzar si quiero llegar a la escuela.

Edward colgó su brazo sobre la silla, observando cómo se alejaba su hija.

⏤Oye, voy a hacerme tarde otra vez hoy. Tengo que investigar...

⏤Las calabazas contaminadas. Qué hay de nuevo ⏤murmuró. Veronica se dio media vuelta, pero tras pensarlo un segundo, giró de vuelta hacia su padre y se recostó sobre el marco de la puerta⏤. ¿Qué pasa con estas... calabazas, de todas maneras?

⏤Información clasificada.

Veronica arrugó la nariz.

⏤Solo siento que es algo raro que pases todo este tiempo en calabazas podridas.

⏤No puedo explicar mucho, Ronnie ⏤dijo Edward, parándose de su asiento y acercándose hacia el lavadero de su cocina⏤. Hopper dijo algo sobre el lugar bajo contaminación y luego estaba... una especie de agujero... que debo encontrar. No lo sé.

Veronica asintió con la cabeza, dando una patada para abrir la puerta.

⏤Diviértete con tus calabazas, sheriff.

⁕ ⁕ ⁕

Parecía que todo el mundo estaba mirando a Veronica Moreda esa mañana mientras fumaba su cigarrillo antes de las clases. La muchacha de cabellos azules se sintió momentáneamente consciente de los ojos chismosos, lo que causó que tirara su cigarrillo temprano para evitar las miradas. Sabía que ese día iba a ser terrible, pero no esperaba que todos supieran lo que había hecho. Lo mejor para ella era evitar a cualquiera, incluso a Steve Harrington.

Quería que el resto del día se sintiera como una ráfaga, pero terminó alargándose interminablemente. Oía a las personas hablando sobre ella en los corredores. No podía evitar notar las miradas. Veronica sentía que se estaba volviendo loca. Era la única, la única vez que quiso hacer algo fuera de lo ordinario para ella y para olvidar a su hermano y de repente terminó siendo el tema de la escuela. Quizá incluso escribirían sobre ella en el periódico escolar. Ya podía visualizar el encabezado: VERONICA MOREDA FOLLA CON EL CHICO NUEVO DE CALIFORNIA.

No había rastro de Billy Hargrove. No se apareció por la clase de inglés, por lo que estaba agradecida, pero sentía la inmensa necesidad de confrontarlo y gritarle. Quería desatar toda su furia, decirle que era su culpa la que la había puesto en esa situación, aunque fuese equitativamente culpa de ambos. Quería patalear y pisotear como una niña, pero todo lo que podía hacer era esperar a que se asomara.

Al término del día, Veronica salió de la escuela para caminar a casa. Sacó un cigarrillo del paquete que Billy le había conseguido y, cuando pensaba en golpearlo en su mente, observó hacia el estacionamiento para encontrar su brillante y negro Camaro en su lugar usual. También atrapó a una pequeña chica pelirroja esperando al costado, sosteniendo una patineta en sus cortos brazos. Los dientes de Veronica comenzaron a rechinar y se encaminó hacia el auto.

Observó el asiento del conductor y no vio a nadie dentro. La pequeña niña junto al carro estaba mirándola incómodamente y Veronica giró hacia ella.

¿Dónde está? ⏤exclamó con fuerza⏤. ¿Dónde está Billy Hargrove?

⏤¿Por qué te importa?

Veronica no tenía paciencia en ese momento.

⏤Porque necesito hablar con él ahora.

La pequeña negó con la cabeza.

⏤Deberías irte...

Ambas giraron sus cabezas para ver a Billy acercándose a ellas con pisadas fuertes, una mirada vacía en sus ojos mientras se alejaba de Carol, la novia de Tommy Hellos. Los ojos de Billy no se molestaron en cruzarse con los de ella y, en vez, estaba enviándole una mala mirada a la pelirroja junto a ella. Veronica se adelantó, señalando al rubio con un dedo.

⏤¿Quién carajos te crees...?

Y luego pasó de largo por su costado, como si fuera un fantasma. La boca de Veronica se abrió en shock.

⏤Métete al auto ⏤le ordenó Billy a Max, quien obedeció. Veronica corrió hacia Billy, quien ya estaba subiendo a su lado del carro.

Ya estaba dentro del vehículo, girando las llaves cuando Veronica comenzó a golpear la ventana del Camaro.

⏤¡Abre la maldita puerta! ⏤estalló⏤. ¡Ábrela, bastardo!

Siempre tan casual, Billy finalmente cruzó miradas con Veronica Moreda y simplemente le sonrió. Había conseguido lo que quería y había ganado. Veronica se alejó cuando la realización llegó hacia ella y observó cómo el Camaro se perdía fuera del estacionamiento de la escuela con una expresión de completo desconcierto plasmada en su rostro.

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