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Jueves

¿Suran estaba mintiendo?

Creo que me han engañado...

¿Qué?

Mmm, no, nada.

PARK:

Beep....beep....beep....

Me pongo de lado y estiro mi brazo para poder apagar la alarma.

No quiero levantarme...

Desgraciadamente no tengo opción. Así que salgo de mi cama y me dirijo hacia el baño para lavarme la cara y terminar de despertar.

Una vez más... me tomé enserio su broma.

Guau, hoy tengo la cara rara.

~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.

¿Qué cara debería poner cuando me encuentre hoy con él?

Hacía mucho que no sentía esto...

¿Qué pasa si la actitud de Yoongi-san cambia?

Si sólo era una broma... Si así fuera... Incluso ser amigos sería...

Buenos días─dice alguien detrás de mí, haciendo que mi corazón se acelere un poco por el susto.

Cuando volteo, me doy cuenta de que solo era Yoongi-san.

Buenos días─le respondo algo tímido de repente.

¿Qué le pasa a tu cara?

¡¿Eh?! ¿Está rara?

Cuando me llamaste ayer estabas normal, sonabas animado. ¿Por qué estás tan callado ahora?No te entiendo. Oh... mejor no intentes nada, como un beso de buenos días o algo así, ¿entendido? El de ayer fue un accidente, y también fue tu culpa.

Me le quedo viendo fijamente antes de empezarme a reír. Realmente no pude evitarlo. Él también se me queda viendo como si fuera un bicho raro.

¿Qué es tan gracioso?

Lo de ayer no fue un accidente. ¡Fue una trampa!

No lo digas como si fuera mi culpa─se alejó un poco de mi, caminando hacia la salida del metro. Aún sonriendo, también comencé a caminar hasta alcanzarlo.

¿Quieres que adivine cuál es tu primera clase de hoy, Yoongi-san?

Claro, adelante.

Historia─le apunte con mi dedo, sonriendo aún más al verlo fruncir el ceño─. Historia Japonesa.

¿Cómo lo supiste?─me encogí de hombros.

Investigue.

~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.

Durante el almuerzo, decidimos sentarnos en unas escaleras en lugar de ir a la azotea. No corríamos riesgo, nadie pasaba por aquí. Por lo menos a esta hora.

Mierda...─voltee a ver a Yoongi-san, él bostezó─... tengo sueño.

¿Por qué no te echas una siesta? Aun falta para que empiece la quinta clase.

Hmm... la vez que fuimos al cine me quede dormido sobre ti, ¿recuerdas?

No me importa.

¿En serio?─asentí─entonces déjame tus rodillas, las usare como almohadas.

¡¿Qué?!─antes de que pudiera objetar algo, él ya había recostado su cabeza sobre mi regazo. Me tensé un poco ante el contacto de su mano sobre mi rodilla, sentí como el calor subía a mis mejillas.

Guau, eres huesudo.

Bueno... no soy una chica, ya lo sabes─solté, sin querer sonar molesto.

Sí, sería raro que tuvieras los muslos carnosos─giró su cabeza para mirarme, vi como me sonrió ligeramente. Casi inmediatamente se volvió a acomodar de lado y cerró sus ojos─Esto está bien.

Está bien para ti quizás... Pero para mi... es un poco...

Oh, cierto─casi doy un respingo al volverlo oír hablar. No cambia su posición, por lo que me ve por el rabillo de su ojo─. Hay una chica en mi clase con la que saliste. Shin Suran, ¿la recuerdas?

Frunzo el ceño tratando de recordarla. 

Sí, la recuerdo.

Lo sabía─dice bastante animado, se levanta de mi regazo para volver a sentarse a mi lado y mirarme sonriente─. Suran tiene una personalidad muy fuerte. Es genial tenerla como amiga, ¿no?─asiento ligeramente─¿Sigues viéndola?

No mantengo el contacto con las personas con las que he salido─digo de manera neutral, sin verlo directamente.

Pero, ¿no te llaman? lo hacen, ¿verdad?

No lo sé, no contesto las llamadas de números desconocidos.

Entonces, ¿eso significa que borras sus números de teléfono?─no le contesto. Continuo sin mirarle. 

Él me mira un rato en silencio hasta que también desvía la mirada. Los dos nos quedamos viendo un punto fijo en la pared en un silencio algo incómodo.

¿De verdad todo lo que hay es una semana? ¿No es eso un poco frío?

Entonces, ¿tú que? ¿Podrías soportar que la persona con la que estás saliendo siga recibiendo llamadas de alguien a quien no conoces?

Bueno, no me gustaría, pero...─giro mi cabeza hacia él, nuevamente, veo como agacha su cabeza, sin saber cómo terminar─En otras palabras, la semana que viene también borrarás mi número.

Ah, bueno...Eso no lo decido yo.

Cierto. No es como si estuviéramos en una relación seria así que no importa, ¿no? Ni siquiera estamos enamorados.

Desvió mi vista varias veces de él algo incómodo. Los dos escuchamos mi celular sonar.

Sí, supongo─le contestó. Él me mira entre triste y sorprendido─. Disculpa un momento, tengo que contestar─me levantó y subo unos cuantos escalones más para atender la llamada.

¿Diga..?

¿Puedes creerlo? ¡Taemin es un gilipollas! ¡Me moleste en llamarlo y sigue enfadado conmigo!¿Qué crees que debería hacer?

Bueno... ¿le has pedido perdón?

¿Por qué debería de disculparme? ¿Estás de su lado?

No es que este de su parte, ¡Min, lo engañaste!

¡No es mi culpa!

Lo siento Min, ahora no es un buen...

Justo cuando me volteo de nuevo hacia las escaleras, veo como Yoongi-san me arrebata bruscamente mi celular y cuelga la llamada. Se queda mirando la pantalla y su boca forma una línea recta. Mis ojos lo observan totalmente abiertos esperando a que diga algo.

Yoongi...

Min...─me interrumpe.

Por fin levanta su vista hacia mi y me arroja mi celular con fuerza haciendo que choque contra mi pecho. Me toma por sorpresa pero por suerte, mis reflejos son rápidos así que lo alcanzo a sostener antes de que caiga al suelo.

Así que...─continua, esta vez mirándome directamente a la cara con una notoria molestia en su voz─Puedes borrar los números de todas las chicas con las que saliste así como si nada ¿Pero sigues teniendo el número de la chica que a ti te gusta? Eso no es justo, ¿no lo crees?

 ─¿Por qué... por qué estas tan enfadado?─Pregunte algo avergonzado.

¿Por qué...? Bueno...─agachó la mirada pensando en un a respuesta, alcance a notar como un ligero rubor decoraba sus mejillas. Casi al instante, volvió a mirarme recuperando su postura molesta anterior ( aun con sus mejillas sonrojadas)─Porque... ¡Porque ahora el que esta saliendo contigo soy yo! ¿Algún problema?

Sus palabras me dejaron sin habla. El no espero una respuesta de mi parte y se fue bajando las escaleras los más rápido que pudo. Cerré mis ojos con fuerza mientras me recargaba en la pared y me deslizaba para sentarme en uno de los escalones, realmente me sentía como un idiota en ese momento.

Mi celular volvió a sonar entre mis manos, me quede observando el identificador por unos segundos antes de contestar y llevar el auricular lentamente a mi oreja. Lo primero que escuche fueron unos sollozos del otro lado de la línea.

¿Estás llorando?─un sollozo fue mi respuesta─¿Por qué no le perdonas? Él te ha engañado una vez y eso fue hace más de un año, ¿No has tenido tu venganza?─otro sollozo.

No importa cuantas veces me haya engañado. Una, diez, es lo mismo.

Si... supongo que es duro. Porque amas a mi hermano más que a nadie en el mundo, Min. Siempre le envidie por ser alguien importante para ti.

Jimin, tu debes ser masoquista, ¿cierto?

No lo soy─uno, dos, tres sollozos antes de que volviera a hablar.

...Oye... te quiero, Jimin.

No conteste al instante, aunque no tuve mucho que pensar.

Yo también te quiero.

~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~

¡Buen trabajo!

¿Porque no vamos a algún lugar de camino a casa....?

Oh, ¡buen trabajo!

Sí, tu también

Cosas como esas escuchaba conforme caminaba hacia la salida después de la práctica del club.

¡Hey!... buen trabajo.

Mentiría si dijera que no me sorprendí al ver a Yoongi-san recargado en la puerta esperándome, regalándome una sonrisa tranquila la cual le devolví con gusto. Me lanzo una botella de agua y yo la cogí.

No estuviste mal.

Lo sé ¿cierto?

Idiota, ¿Por qué presumes de ello? Se supone que debes asistir a las actividades del club, así es como funciona─dio media vuelta y comenzó a caminar, yo le seguí.

El camino no fue incómodo pero si silencioso. Llevábamos unos cinco minutos caminando, no estábamos tan lejos de la escuela todavía.

Siento lo que paso... a la hora del almuerzo. Ahora que lo pienso, ¿Realmente tenía que enfadarme? Ni yo lo entiendo, quiero decir...─frunció el ceño con la vista hacia el frente, después dejo de caminar y me miro─¿Por qué me enfade?─su cara confusa y la pregunta de por si me hicieron soltar un pequeña carcajada.

¿Cómo voy a saberlo?─le conteste sonriendo─Pero creo que no tienes porque disculparte─me mordí el labio inferior al verlo fruncir el ceño nuevamente─. Ven aquí─el se acerco con cautela hacia mi y lleve mi mano ahuecada hacia su oído─Soy...─le susurré─el tipo de persona que le gusta ser atado por su pareja, creo.

¿Que ha sido eso? ¿Qué se están susurrando?─habían varios alumnos caminando por dónde nosotros, unas chicas nos estaban viendo desde el otro lado de la calle lanzando corazones con los ojos.

¡Yo quiero saber!─dijo la otra chica.

Yoongi-san miro alternadamente entre las chicas y yo, finalmente, con una expresión bastante seria me apunto con el dedo con su vista sobre las chicas.

Este chico... es un masoquista─¡¿Qué?! 

Las chicas se sonrojaron lanzando pequeñas risitas que cubrían con sus manos. Uno de mis compañeros apareció detrás nuestro haciendo burla de lo que escuchó. Yoongi no tardó en soltar una carcajada al ve mi cara antes de que volviéramos a retomar nuestro camino. 

Que vergonzoso.

•~•~•~•~•~•~•~•~•~•

~Flashback:

Te quiero, Jimin.

Yo también te quiero. Pero...

¿Pero qué?

Pero, yo no voy a contestar más a tus llamadas, Min-Jun. Siempre antepusiste a mi hermano, yo también... al igual que tú, he encontrado a alguien a quien quiero, alguien más importante que tu, Min... Alguien a quien amo desde el fondo de mi corazón.


Fin del Flashback•~

~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~

Ahora si :3
Siguen 4 capitulos del viernes.
Bais~

¿Si les está gustando?

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