( Viñeta I)

/🔞 Advertencia contenido erótico🔞/

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Fueron milésimas de segundos en donde  sus miradas conectaron diciendose todo lo que sus bocas no podían expresar en ese momento.
Sus besos se tornaron más pasionales, más demandantes. Sus labios se desgastaron de tanto saborearse durante largos días y noches.
La necesidad de devorarse sin piedad ganó, dejándose consumir por aquella pasión incontrolable que con el correr del tiempo se fue incrementando más y más.

Sus largos cabellos azabaches, yacían agraciadamente, esparciados como si fuese una bella cortina nocturna.  Adornando ,sensualmente, el rebuscado futón donde su delicado cuerpo posaba recostado esperando a ser explorado por las traviesas y fuertes manos.

Las yemas de sus dedos recorierron suavemente la geometría de la perfección de su cuerpo.
Memorizando la suave textura, cual seda de la nivea piel de quién ya hace un tiempo atrás, se había convertido en su mujer, " suya".

Su humana, su amante, su esposa...

"Su hembra"

Sus besos fueron tatuados en cada añorado recóndito rincón.
Primeramente, adorando lo que en un futuro no muy lejano, serían el alimento de su creación.

Tan perfectos, redondos y firmes que parecían haber sido creados justo a la medida de sus manos.
Ni que hablar que dentro de su boca se convertían en la fruta más dulce y deliciosa que había tenido el honor de alguna vez, probar.

Acarició, mordisqueó, jaló y chupó con vehemencia, tan hambriento, tan necesitado de todo su ser.

Sus manos firmes se perdían más abajo de su ombligo preparándola para una pronta simbiosis de ambos cuerpos y convertirse finalmente en un solo ser como tanto lo ansiaba.

Bajó, dejando un rastro de húmedos besos, lamiendo en el proceso de su recorrido para finalmente abrir sus piernas sin pizca de miramiento.

__ Ah.. __

Un gemido ahogado, que terminó opacado por el rechinar de la vieja madera y el golpe de las pequeñas manos de la mujer en esta cuando  curvó su cuerpo ,espasmodicamente, ante el semejante placer de sentir la suave lengua, invasora en lo profundo de su valle prohibido. El mismo, que solo había sido explorado por el demonio que tenía sujeto con sus muslos.

Sus manos se enredaron en el interior de sus plateadas hebras dándole más profundidad a aquello que sabía hacer tan bien.

Devorarla....

Su respiración agitada, observando cual morboso, el acto que la estaba arrastrando a lo más bajo del inframundo carnal.

La nariz de su demonio aspirando del dulce aroma de su preciada flor. Su esencia de mujer, se habia vuelto su perfume favorito.
Sus pétalos rosados, adquiriendo más tibieza, regalo de esa majestual danza que ejercía sobre su codiciado botón, ese mismo botón que era encendido solo por su dueño.

No fue un grito. Fue un llanto de alegría por haber alcanzado el cielo sin haber llegado a el, la tan ansiada cúspide.
Una cascada de miel cayó a borbotones sobre la boca del Lord quien gustoso recibió todo, sin dejar caer ni una sola gota de su elixir personal.

Besó con sumo amor el interior de su muslo y con lentitud subió su cabeza para nuevamente observarla embelesado. Nunca entendería como su mujer podría haberse fijado en un ser tan despiado como lo era él, en su esplendor y ello...

Solo lo volvía más loco.

Ladeó su rostro, dejando mostrar aquellas magentas líneas desiguales en sus mejillas y ese tinte rojizo en sus ojos, amenazantes de lujuria.

La boca de su Azabache mostró la sorpresa aún, tratando de recuperar el aliento.

Su seductora bestia le regaló una pequeña sonrisa, mostrando levemente sus colmillos.

__ S.. Sesshomaru... __

__ Prepárate..  Humana... Que esto recién comienza.. __

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Holis mi gente linda ¿cómo están?🥰

Esto es un mini regalo mientras termino de escribir el capítulo de Simplemente tú y mis otros fics.

Espero que anden súper bien y les mando un fuerte abrazo de 🐻 para que no se olviden de esta fiel servidora 🫡