ESTE CAPITULO VA DEDICADO A PETRINANA , A VICKY-76 , GABDI 24,LETMAR 14, ASUNROSELLGOMEZ, LENA66, KIMBERLY-MARIEE Y A PATRICIAGUZMAN.

GRACIAS CHICAS POR LEERME Y POR SUS VOTOS, APRECIO MUCHO POR ELLO.

Esa noche en la suite, Barbie, Caro y Nate conversan sobre los acontecimientos del día, de la muerte de esa joven, del susto terrible y de la amistad entre ellos.

-Mi conversación con la psicóloga me ha ayudado mucho, es increíble como el desahogarte con alguien te quita un peso de encima, aparte de que la señorita O'Neal es muy buena....todo fluye rápido y no te das cuenta de que está ejerciendo una especie como decirlo «magia», si es una buena palabra para describirlo, hasta que acaba con la charla.

-Entonces yo debo de darle las gracias por tu nombre Caro.

-Si Barbie, ahora quiero hablar sobre ti.

-Yo sólo quiero decirles que estoy bien, después de todo me tomé con Adam un café y panes.

-¿Y ahora qué has comido?.-pregunta Nate.

-Papi soy culpable de no comer nada ahora.

-Entonces vamos a pedirte algo para comer.

-No. Miren les voy a confesar que la comida de aquí no me gusta, tiene mucho condimento y especies.

Los dos jóvenes se miran extrañados ante el comentario de Barbara.

-Nena la comida es muy sabrosa, yo muero por comer cualquier plato que me sirvan.

-Nate tu siempre mueres por cualquier comida.

-Si eres un glotón de primera aunque no entiendo donde te metes la comida.- comenta Caro.-Por otra parte el detective D'Holdan me saco de quicio, aunque es un hombre increíble y la cara que puso cuando le dije que rescatara los panecillos, no tuvo precio.

-Jajaja, tienes tanta razón pagaría por volver a verla.

-De que me perdí.

-Cierto Nate tu no estabas presente; ven para que te cuente, el churro del detective...

-Ohh el churro del detective...

-Cállate si quieres que te cuente.

-Prosigue como ibas diciendo el churro del detective..

-Ay eres imposible pero no importa así te quiero.

Caro le cuenta sobre su pequeña interrogación a Nate bajo la mirada risueña de su jefa.

-Sabes que me apena el haberte enviando a esa pastelería y que tuvieras que vivir ese episodio.

-Nate tu no tienes la culpa, cualquiera la hubiera encontrado y Barbara tú tampoco la tienes sabes que te queremos, como sea te íbamos a comprar de comer.

-Sabes que escucharte decir eso me quitas un peso del corazón, ¿verdad Barbie?.

-Si.

-Bien no hablemos más sobre esto...-se interrumpe al recibir un mensaje a su celular, lo lee y sonríe guarda el teléfono en su bolsillo.-bueno chicas me tengo que ir, tengo una reunión.

Cuando el joven salió de la suite Caro interroga a Barbara con una ceja levantada.

-No estoy muy segura pero creo que es ella.

-¿Ella?, ELLA!....Guao, pero esto debes contarmelo.

El sonido del toque en la puerta les tomó por sorpresa, Caro fue a abrir la puerta y en esta se encontraba Adam.

-Buenas noches señoritas.

-Buenas señor.

-Caro, ¿cierto?.

-Si.

-¿Como ha seguido, ya se encuentra mejor?.

-Si ya estoy mejor la verdad y los voy a dejar un momento... voy a pedir la cena dejaré la instrucciones para tus noches Barbie, me disculpan regreso enseguida.

Al quedar solos Barbara le indica que se siente en el mueble y ella lo acompaña.

-Dígame en que le puedo ayudar señor Quinn.

-Venía a ver como se encontraban ustedes dos.

-Como verás Caro está bien, la charla que tuvo con O'Neal le fue de mucha ayuda.

-¿Y usted?.

-Yo estoy bien.

-No es cierto, se le ve cansada y hasta pálida si me permite decírselo.

-Ya lo ha dicho.

El sonríe y se le formó un hoyuelo en su mejilla que momentáneamente embobo a Barbara.

-Si.... se que he sido difícil con usted Barbara y quisiera enmendar las cosas, ¿podemos empezar de nuevo?.

-No lo sé.

-No seas así Barbara-Se le acerca a ella y le respira prácticamente en su cara fascinado por las pecas de su rostro.

Barbie se emborracha con su aroma y no se entiende ella misma al acercarse a el también, el tiempo se detiene mientras sus ojos se encuentran la atracción se hace presente.

Adam no se explica que lo llevó a juntar sus labios a los labios carnosos de la joven pero apenas los rozó se apoderó de ellos y se entregaron mutuamente al beso ardiente cada uno explorando al otro, los leves pellizcos que daba Barbie le estaba nublando el juicio al hombre, su miembro se endurecio en sus pantalones que amenazaba con romper las costuras.

La puerta se abrió al mismo instante en que la voz de Nathan anunciaba su llegada lo que los hizo separarse antes de ser pillados por el hombre.

-Barbie amor mío....¿me puedes decir donde he dejado mis llaves?

Adam frunce el ceño ante el apelativo cariñoso con que se ha dirigido a Barbara y se levanta del mueble molesto consigo mismo.

En ese momento entra Caro con una bandeja y la deposita en la mesa.

-Bobo aquí la has dejado en la mesa toma.

-Gracias Caro, y cariño nos vemos....-se ve interrumpido por el gruñido de Adam.-Adam no le había visto.

-De ello me he dado cuenta, los dejo tranquilos que pasen buenas noches-salió de la habitación cerrando la puerta y al estar afuera se lamentó de su acción anterior,-que estupido soy, cuando voy a aprender.

..............Al día siguiente Miércoles...............

En la construcción todo marcha tranquilamente y a tiempo, lo acontecido del día de ayer lo tenían en la mente cada trabajador y lamentaban el hecho pero no impedían su labor había que seguir con un horario y una fecha de entrega, ese día se echaría la Brea.

Era un trabajo tedioso y complicado ya que implicaba una fuerte concentración y un extremo cuidado ya que era altamente inflamable.

Barbara decidió echar la Brea en esta etapa así sellaba los materiales e impermeabilizaba de cualquier liqueo y evitaba futuros daños con las lluvias.

Tenía que realizarlo un experto ya que se requería utilizar un soplete a gas para que el material se adhiera correctamente.

Había tenido más temprano en la mañana una pequeña discusión con el capataz, definitivamente ese hombre no la tragaba, cualquier movimiento que debía planear era un tremendo inconveniente.

Siempre refutaba su autoridad y eso francamente la estaba cansando, ya que Adam estaba en mejores términos con ella le hablaría al respecto de ese hombre, por lo menos que ayudará con los roces constantes que tendía a tornarse en discusiones.

Por otra parte el beso que se habían dado esa noche había sido increíble y no sabía hasta donde llegaría sino fuera por la interrupción de su querido amigo Nate, ya que había notado la incipiente erección en sus pantalones, de verdad que necesitaba de un buen revolcón para aliviar las tensiones que le acusaban desde que llegó a Galway.

Diviso al capataz y se acercó hasta el.

-Gleen, ya es buen momento para que trabajen con la Brea, no entiendo que espera.

El hombre la mira furioso y asiente.

-Como usted diga señorita, pero le hago saber que no estoy de acuerdo.

-Anotado señor Gleen, nada más siga mis instrucciones por favor.

Al irse Barbara de su lado exclamó todo furioso-Maldita perra me la vas a pagar, te lo juro.

Media hora después inicia la aplicación de la Brea, Barbara supervisa y al cabo de un buen rato asiente satisfecha del logro obtenido.

Como es medio día decide entrar en la oficina a tomar agua y a refrescarse.

Encuentra a Caro enterrada en su computadora portátil ultimando los detalles de la boda, a Nathan y Adam conversando sobre las obras de construcción.

Sin levantar la vista Nathan le habla.

-Barbie cariño, hay he traído unas rosquillas dulces y unos panecillos para que comas.

Adam alza la vista y sonríe al ver el gesto de fastidio en la joven.

-Bien no hay más remedio.

-Al parecer su amigo no le da otra opción señorita Barbara.

-Ahh usted también, lo digo no es justo.

-Lo justo es que te conozco y sin chistar te vas a comer, también hay chocolate caliente con vainilla y caramelo.

-Humm mi favorito.

Tres pares de ojos la ven comer a gusto y se dan por satisfechos.

Suena un ruido muy fuerte y luego un grito desgarrador, la alarma empieza a sonar fuertemente.

Barbara se levanta de la silla y junto con el resto salen de la oficina.

Los gritos resonaban por toda la construcción pero no impedían que se escucharán los gritos de terror y el ruego de ayuda de un solo hombre....el hombre que estaba prendido en llamas.

-Caro llama a emergencia....maldita sea no creo que lleguen a tiempo-Exclama furioso Adam.

Gleen trata de llegar al siniestro pero las llamas están por todo el piso.

-Él fuego se ha apoderado de todo no puedo llegar hasta el.

-En esa pared hay un equipo contra fuego que mande a instalar puede rosearle a su compañero-Instruye Barbara.

-Si señora.

Varios obreros se acercaron a ayudar y apagaron las llamas del cuerpo pero no podían alcanzarlo, se pusieron a la tarea de apagar las llamas del sitio y así los encontró el cuerpo de bomberos, batallaron por espacio de media hora hasta que al fin alcanzaron al obrero herido, pero fue demasiado tarde.

Lo que sería el rescate de un herido se convirtió en el levantamiento de un cadáver.

Luego de apagar el fuego se quedaron a hacer el peritaje.

Nathan se llevó a una visible Caro enferma hasta el hotel.

Barbara y Adam se quedaron respondiendo a las preguntas del jefe de bomberos.

Se tomaron toda la tarde haciendo pruebas e investigaciones sobre el siniestro, los obreros se fueron a sus casas hasta nuevo aviso.

Los únicos presentes en la obra esa tarde fueron Gleen, Adam y Barbara poniéndose de acuerdo para los trabajos de limpieza antes de que el personal regresaran, ya resuelto todo se dirigieron a pasar la noche en sus respectivo lugar de descanso.

Esa noche en la ciudad el accidente en la construcción fue tema de conversación en todos los establecimientos y muchos de los obreros en el Pub de Griselda culpaban a la ingeniera, la calificaban de inepta y no apta para dirigirle, sentían que por su culpa su compañero estaba muerto y ellos tenían que prepararse para un funeral de un joven en la plenitud de su vida.

...................Jueves......................

Faltaban dos días para que su hermano y su mejor amiga regresaran de su viaje y encontrarán la sorpresa que les tenía preparada, y un solo día para que sus padres llegarán.

Estaba muy triste por lo que sucedió en la obra, sentía que debía haber hecho algo más pero ¿Qué?, en sus otras obras había hecho lo mismo y todo quedaba perfectamente, no había ocurrido ningún incidente.

Ella repetía el mismo protocolo en cada obra, que pudo haber salido mal.

Necesitaba averiguar por la familia de su obrero para ver en qué los podía ayudar; anoche no había comido nada, no le apetecía absolutamente nada se sentía terrible y si ahora alguno de sus dos colaboradores venían a exigirle que comiera los mandaría al demonio no estaba de ánimo para nada, la bendita comida no la pasaba y eso era todo, aunque la ensalada estaba bien.

Se levantó y se dio una ducha, se pronosticaba lluvia para el día de hoy, el cielo tenía el mismo ánimo que la ciudad, lloraba a su habitante; decidió ponerse una falda oscura por respecto a la muerte , una camisa color crema y una chaqueta a juego.

Entró a la sala de la suite y encontró en una discusión acalorada entre Nathan y Caro, que callaron a medida de que se dieron cuenta de su presencia.

-Alguno de los dos me puede decir que está pasando-exigió Barbara.

-Verás Barbie encontré esta carta en mi bandeja de quejas-respondió Nate-sé que no te va a gustar nada, lo siento.

La joven tomó de las manos de Nathan el papel que sostenía y se dispuso a leerlo.

Corporación Quinn.

Galway-Irlanda

Att,Adam Quinn.

La presente es para informarle de nuestra decisión tomada con base a los acontecimientos del día de ayer, espero que se tomen medidas y acepten con seriedad nuestro pedido.

Es nuestro derecho laboral tener condiciones seguras en nuestros puestos de trabajo y para ello necesitamos líderes competentes para evitar futuras órdenes que incurra en peligrosas situaciones, por lo tanto hemos decido no regresar a trabajar hasta que la ingeniera Barbara Mae sea despedida.

Apelamos a la seriedad que tome a nuestros derechos.

Atentamente,

Grupo de trabajadores

del Resort Quinn.

«No puede ser, no pueden creer que lo que pasó fue mi culpa» era el único pensamiento de Barbara.

-Barbie, no fue tu culpa.

-Cierto jefa, siempre se ha realizado este tipo de trabajo a esta altura de la construcción sus decisiones son correctas y yo como ayudante tuyo puedo corroborar tus acciones. Debes hablar con Quinn y resolver lo de esta carta juntos.

-Si eso es lo que haré, llamaré a recepción para averiguar donde se encuentra Quinn.

Ya era más del mediodía cuando Nathan llevo a Barbara al sitio de la construcción porque fue el lugar donde le informaron que podía encontrar a Adam.

-Mira ahí está su auto, quédate tranquilo regresare con el.

-Cualquier cosa me avisas por favor.

-Lo haré compañero veremos que nos deparará está reunión.

-Tranquila se que lo lograrás, tu puedes.

Adam estaba molesto por la situación en que lo habían puesto, estaba completamente de acuerdo de que era el momento de utilizar la Brea en la obra debería tener manos y tacto suave para resolver el pedido.

«Maldición que debía a hacer para resolver esta situación» y estampó su mano en la mesa y se hizo daño, así lo encontró Barbara.

-Siento que tus trabajadores te hayan puesto en una difícil decisión Quinn, pero yo he realizado obras antes y no me he equivocado era el momento lo sé.

se instaló un silencio en la oficina, Adam sólo se limitaba a verla, la muchacha de pronto retrocedió.

-También piensas que es mi culpa,.... como he podido creer que pudieras ponerte de mi parte, si desde el momento que llegue fui para ti una incomodidad, alguien que pudieras despreciar, una piedra en tus zapatos.

-Eres todo eso, pero no te veo culpable del accidente, aún no me han entregado el informe los bomberos, con ese informe se que podré convencerlos, maldición Barbara no veo como ellos no pueden ver la calidad de trabajadora y líder que eres, a quien se le ocurre instalar una alarma para indicar peligros o accidentes, o incluso un equipo contra el fuego; Dios perdimos a un buen hombre y también se evitaron daños mayores, en todas obras hay accidentes a veces pérdidas humanas, nos tocó esa parte lo único que puedo hacer es indemnizar a su familia y ayudar con los gastos que requieran.

-Gracias, yo también había pensado en dar algo de dinero a su familia.

-Bien....ouch-Barbara vio su mano ensangrentada y busco el botiquín de primeros auxilio y se acercó a la mesa frente a él y tomó su mano para curarla.

Utilizó desinfectante en el corte, aplicó un antibiótico y soplo la herida como a cualquier niño pequeño, sus caras quedaron juntas con la acción, luego le puso una curita y beso la herida.

Adam colocó su mano libre en la cabeza de Barbara y la acercó a la suya le dio un beso tentativo.

-Que voy a hacer contigo.

-Lo que quieras.

Lo tomo como una invitación y la beso fuertemente, mientras le quitaba la chaqueta y su blusa a juego.

Su sostén tenía el broche frontal y lo abrió para tener acceso a sus pezones que devoró con ansias, mientras la joven emitía pequeños gemidos de placer.

Barbara agarró el zipper del pantalón, lo abrió busco su pene y lo sacó por el orificio de su boxer, el pene palpitaba en su mano mientras lo acariciaba de arriba a abajo.

Le subió la falda hasta sus cadera y le quitó expertamente su tanga.

-No puedo aguantar más, me tienes loco de hace bastante rato.

-Hazlo...hazlo de una vez.

-Dios....

La penetró con fuerza hasta el fondo mientras la arrecostaba encima de la mesa, estaba tan apretada y caliente que no sabía cuanto tiempo podría durar, era tan ardiente que sus caderas se encontraba con cada embate de la suya.

Adam se sentía que tocaba el cielo, no pensaba en nada su mente estaba concentrada en las sensaciones de su cuerpo, se movió en otro ángulo para darle más placer a la joven y la sintió extremecerse aprentando su falo.

La besó explorando su boca y llegando al lóbulo de su oreja.

Barbara se sentía en el paraíso, nunca había experimentado tanto placer como con Adam, este hombre sabía moverse su vagina se lo agradecía, el puso un dedo en su botón hinchado y empezó a moverlo de arriba a abajo y de lado a lado hasta sentir las palpitaciones bajo sus yemas y la chica gritaba de placer, pegó sus labios en uno de sus pezones y lo mordió con fuerza mientras Barbara tenía otro orgasmo.

Se separó de su cuerpo haciendo que su verga rozara su punto dulce y los embates se tornaron más rápido ambos gemian fuertemente y sus respiraciones eran entrecortadas.

Adam se volvió loco por el placer que sentía, las terminaciones en su cabeza roja palpitante le indicaba su eminente orgasmo.

Apretó el paso mientras gritaba y expulsaba su semen dentro de ella, hasta que sintió un líquido caliente caer intermitentemente en su miembro, Barbara había llegado al orgasmo y por la fuerza de este se había orinado de placer.

Cuando las palpitaciones terminaron en ambos Adam se puso rígido de momento.

Barbara al sentir el cambio operado en el le preguntó.

-¿Qué pasa?.

-No hemos usado protección Barbara.

-Ahh eso, no te preocupes esta resuelto.

-Está resuelto así no más, que... tienes más amantes a parte de mi.

-Como puedes pensar en eso.

-Como lo puedo pensar, en realidad no te conozco.

-Y me lo vienes a decir ahora después de que hicimos el amor.

-Follar fue lo que hicimos, no lo confundas, amor ya no está en mi vocabulario.

-Siento oirte decir eso.

-No lo sientas, y cambiate ya me incomoda tu presencia.

La joven acusó la grosería de sus palabras y se avergonzo de si misma por la estupidez que había cometido le dio la espalda para cambiarse, la verdad era que ella estaba medio desnuda y el follo con ella totalmente vestido, si definitivamente su estupidez no tenía límite y tampoco tenía suerte con los hombres.

Al darse la vuelta nuevamente se encontró sola en la oficina la puerta estaba abierta, en ningún momento sintió cuando Adam se marchó....un momento se marchó, no podía ser y como regresaba a la ciudad.

Camino hasta el portón efectivamente se había marchado y la había dejado sola, busco en su bolso su teléfono para encontrarlo descargado, maldición con la tragedia de ayer no lo puso a cargar y ahora que iba a hacer, tendría que caminar y la realidad era que nunca se había fijado en el camino cuando llegara hasta arriba que dirección debía tomar, definitivamente su estupidez había llegado a cuotas muy altas.

Sólo esperaría no perderse.