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Suga suspiró gustoso cuando al despertar sintió los brazos de Hoseok rodear su cintura, una sonrisa se dibujó en sus labios ante la proximidad entre sus cuerpos y lentamente se giró para poder encarar al menor. Sintió su pecho cálido al mirar el rostro sereno de Hoseok al dormir, sus ojos cerrados y su boca ligeramente abierta mientras las pestañas le hacían sombras sobre los pómulos, realmente era una belleza. Sus dedos picaron en necesidad por tocarle el rostro y con timidez alzó una de sus tatuadas manos para delinear con delicadeza la bonita nariz del azabache.

Sonrió al ver como Hoseok arrugaba su naricita ante el toque y bajó sus caricias a los labios del menor, delineando con suavidad el contorno de aquella boca tan pomposa en forma de corazón.

"Mhm hyung" murmuro Hoseok entre sueños y Suga quitó rápidamente su mano del rostro del menor, no quería despertarle aún.

"Shhh, sigue durmiendo" arrulló el pelimenta antes de acercarse más para ocultar el rostro en el cuello de Hoseok.

Escuchó a Hoseok murmurar algo inentendible antes de sentir como lo rodeaba con los brazos en un apretado abrazo, Suga se dejó hacer gustoso, acomodando mejor su rostro sobre las clavículas del menor y decidiendo que dormiría un poco más.

Pero sus ojos se volvieron a abrir rápidamente cuando se dió cuenta de algo.

Jimin no estaba allí con ellos.

Fruncio el ceño y miró por encima del hombro de Hoseok con la esperanza de que estuviese recostado al otro lado de la cama pero no, Jimin no estaba ocupando un lugar junto a ellos en el colchón.

Desconcertado trató de levantarse de la cama pero el agarre de Hoseok alrededor de su cintura se intensificó impidiéndole moverse.

"Hobi-" trató de decir pero fue interrumpido por la voz ronca del menor.

"Si buscas a Jiminie no está en casa" murmuro flojo y modorro aún sin abrir los ojos. "Hace media hora despertó y me dijo que iba a salir con Taehyung-ssi de compras" informó adormilado y Suga se relajó sobre el colchón.

El pelimenta acomodó su rostro de nuevo contra el pecho de Hoseok, sus ojitos cerrados y la nariz pegada a la piel sensible de las clavículas ajenas y sus manos rodeando la cintura del otro. Suspiro contento, sintiéndose cálido y protegido entre los brazos de Hoseok, a veces le gustaba olvidarse de que era el mayor y más fuerte de los tres, le gustaba sentirse pequeño y que lo sostuvieran.

Y Hoseok cumplía muy bien con esos deseos, el cuerpo más alto del azabache lo cubría y le brindaba una calidez que reconfortaba su alma. Sin dudas adoraba estar así con Hoseok, pues a pesar de que normalmente no eran muy mimosos entre ellos (pues Jimin era el cursi de la relación entre ellos tres) siempre podían hacer una excepción una vez.

"¿Seguirá durmiendo, hyung?" murmuro Hoseok, sus dedos acariciando el muslo del pálido con suavidad y lentitud.

"Mhm, no, tengo hambre" respondió con la voz ronca gracias al sueño.

"Yo también, deberíamos bajar a desayunar" sugirió pero sin moverse ni un solo centímetro de su cómoda posición. "Pero primero deme un besito de buenos días" pidió con voz quejumbrosa mientras estiraba sus labios en un piquito.

Suga rodó los ojos para disimular las ganas que tenía de chillar de ternura por lo adorable que Hoseok se veía haciendo boquita de pato, más aún así solo se acercó para darle un beso en la frente y salir de la cama rápidamente.

"¡Hyung! ¡Yo quería un beso en la boca!" se quejó Jung con su ceño fruncido y un tono infantil.

"No voy a besarte recién levantado, primero vamos a cepillarnos" sentenció el mayor con una mueca disconforme en sus labios.

Oh no, él amaba la higiene y ni los pucheros de Hoseok iban a hacerle cambiar de opinión.

Así que ambos procedieron a caminar hacia el baño, Suga riendo a medio camino al notar a Hoseok haciendo puchero y con los brazos cruzados sobre el pecho en un berrinche que le hacia lucir jodidamente adorable.

Mierda, Jung Hoseok podía ser realmente tierno si se lo proponía.

Cuando llegaron al cuarto de baño Suga no tardó en comenzar a cepillar sus dientes, sus labios sintiéndose frescos gracias al aroma mentolado de la pasta dental y sus ojos fijamente clavados en el reflejo del espejo frente a él. Podía sentir también a Hoseok apoyado contra su espalda, el pecho amplio del más alto rozando sus omóplatos mientras se lavaba los dientes de igual forma.

Una vez terminó, Suga enjuagó su boca y secó su rostro con la toalla de al lado, dió un paso tratando de esquivar a Hoseok para salir del baño pero las manos de éste le apresaron de las caderas impidiéndole moverse.

"¡Ey! Quiero salir a desayunar" se quejó Suga con una expresión falsamente irritada.

"No, ahora quiero mi beso" exigió arrugando el entrecejo antes de inclinar un poco su cuerpo para que Suga pudiese alcanzar sus labios.

El pelimenta suspiro cuando los bonitos labios de Hoseok acariciaron los suyos con suavidad, sus manos rápidamente subieron hasta los hombros del más alto para aferrarse a ellos y así evitar caer pues tenía que ponerse de puntitas para poder besar a Hoseok con facilidad. Jadeo gustoso cuando la lengua del menor acarició su labio inferior y lo recibió gustoso dentro de su boca, disfrutando del sabor mentolado que sus lenguas compartían al danzar juntas en un beso un poco más intenso. Las manos del azabache se aferraron a sus caderas y pronto fue empotrado contra la pared, el cuerpo de Hoseok pegándose por completo al suyo de una manera que le hizo temblar entre sus brazos.

"Oh, hobi" suspiro, sintiendo como los labios del menor se paseaban sobre sus mejillas y mandíbulas dejando húmedos besos por la zona.

Mierda, ¿en que momento el inocente beso mañanero los había llevado a esa posición?

Suga jadeo y sin pensarlo mucho dió un pequeño salto para enredar las piernas alrededor de las caderas de Hoseok, sintiendo al instante como la entrepierna del menor se molía contra la suya sacándole un gemido. Sintió las manos del azabache posarse sobre su culo, las palmas grandes de Jung abarcando a la perfección sus nalgas e incluso se atrevió a apretar entre sus largos dedos la carne tierna.

"Hobi, oh dios, tocame más" pidió el pelimenta con un gemido ronco, sus manos apretando los cabellos de la nuca del menor.

Hoseok obedeció, acariciando los muslos del mayor con lentitud logrando que Suga se estremeciera por completo, los dedos largos de Jung delinearon el interior de los muslos del mayor descubriendo que éste era particularmente sensible en aquella zona.

Suga gimió al sentir las caricias sobre la parte interna de sus muslos que ocasionalmente también rozaban su erección por encima de su pantalón de pijama, se separó de la boca de Hoseok y le jaló de los cabellos haciendo que su cabeza se hiciera atrás y su cuello quedará a su disposición. Relamió sus labios con deseo ante la vista y sin más lamió una larga extensión de la piel de la garganta ajena.

"Hyung" gruño Hoseok sintiendo el húmedo tacto del mayor recorrer su cuello dejándole una sensación de escalofríos por todo el cuerpo.

Soltó aire por la nariz con fuerza y apretó el culo de Suga entre sus manos, moliendo sus erecciones juntas para crear una fricción que inmediatamente les sacó gemidos. Sus durezas se restregaron por encima de la ropa sin pudor en un vaivén que Hoseok se encargó de marcar, deshaciéndose en gemidos ante la sensación tan placentera.

"¿Hyung?" llamó, su aliento errático chocando contra la oreja del mayor haciéndole estremecer.

"¿S-si?" murmuro Suga en respuesta, su voz temblorosa apenas saliendo de su garganta decentemente.

"¿Puedo chuparle la polla?"

Y la simple pregunta envió un escalofrío por toda la espina dorsal del mayor, gimiendo necesitado ante la imagen mental que se creó en su cabeza y asintió rápidamente, mirando con ojos brillosos al menor.

Hoseok no perdió el tiempo después de obtener el permiso, dejó a Suga sobre el suelo de nuevo con cuidado y lo tomó por las caderas, pegándolo a la pared por completo para que el pelimenta pudiese apoyarse fácilmente y evitara caerse. Le miró intenso antes de dejarse caer de rodillas frente a Suga, su boca sintiéndose salivar en cuanto tuvo enfrente el enorme bulto que los pantalones ajenos formaban. Sus manos no dudaron en subir para engancharse sobre el elástico de los pantalones de pijama y los bajó con lentitud y, oh sorpresa, Suga no vestía ropa interior.

Tan oportuno.

Levantó la mirada para mirar a la cara a Min y sonrió con picardía al descubrir la falta de ropa interior, Suga le devolvió la mirada con un leve rubor sobre sus pálidas mejillas claramente avergonzado. Dejó un beso sobre la cadera ajena y regresó su atención al miembro erecto frente a él y no pudo evitar acariciar con devoción los blanquecinos y delgados muslos del mayor, los cuales temblaron ante el contacto.

"Eres tan precioso" murmuro Hoseok con su mirada fijamente clavada en el cuerpo semidesnudo del pelimenta.

Sin más tomó entre su palma la erección del mayor, envolviendo con delicadeza la longitud y acariciándola suavemente mientras escuchaba el jadeo casi instantáneo del mayor. El miembro era considerablemente largo y grueso, la punta hinchada y rosada le tentaba a dejar un beso allí así que no se contuvo y lo hizo, oyendo el gemido ronco que se escapó de la garganta de Suga ante el contacto. Sonrió con un poco de sorna y sin más sacó su lengua, lanzando una mirada provocativa a Min antes de lamer desde la base hasta punta, deleitándose internamente por la sensación cálida contra su lengua.

Suga gimió tímidamente y se apoyó contra la pared al sentir sus piernas temblar, tomó una profunda respiración y dejó que jadeos y gemidos abandonaran su garganta libremente cuando los labios de Hoseok envolvieron su glande ágilmente, chupando con cuidado y logrando que miles de sensaciones le recorrieran su tembloroso cuerpo.

Pronto Hoseok se encargó de envolver lo más que pudo del miembro de Suga con la boca y cubriendo con su mano lo que no lograba tragar. Inició un vaivén lento con su cabeza oyendo los quejidos y gemidos que Suga emitía con cada roce de su lengua a su alrededor, lamió y succionó la punta con devoción, sintiendo pronto como las manos del pálido se enredaban en sus cabellos para comenzar a dirigir la velocidad de sus movimientos. Sintió su mandíbula doler cuando Suga folló su boca a su gusto pero no se quejó, en cambio gimió complacido por el duro agarre sobre sus cabellos y aquello mandó vibraciones sobre el miembro entre su boca logrando que Suga se estremeciera visiblemente.

Hoseok apretó los labios alrededor de la polla ajena, dando una sensación de mayor estrechez y relajó su garganta antes de hundir la polla de Suga hasta que su nariz rozó la cadera del mayor. Sus ojos se cristalizaron pero no se apartó, en cambio intensificó sus movimientos sintiendo como los muslos de Suga se tensaban y supo que faltaba poco para que se corriera.

La polla de Suga se sentía pesada y cálida contra sus labios, era una sensación jodidamente caliente que le tenía duro entre sus propios pantalones. Deslizó sus manos dentro de su pantalón y masajeo su erección mientras seguía atento al trabajo oral que realizaba.

Fue cuestión de envolver su lengua sobre el glande con sensualidad para que, sin aviso, Suga se viniera sobre su boca con un grito ahogado. Hoseok gimió también, abrumado por la sensación y se corrió sobre su propia mano segundos después.

"O-oh, mierda" gimoteo Suga, sus piernas temblando tanto que daba la impresión de que se desplomaría sobre el suelo en cualquier momento.

Hoseok le miró y sonrió orgulloso al pensar que él había provocado aquello, pues lo que sus ojos veían era simplemente precioso. Suga lucia destrozado, con las mejillas completamente rojas como un par de cerezas, el cabello verde revuelto contra su frente y el pecho delgado subiendo y bajando en un ritmo errático. Ayudó a Suga a acomodar de nuevo su pantalón de pijama y se levantó del suelo ignorando el ligero dolor sobre sus rodillas.

Sin dudarlo envolvió a Suga entre sus brazos y le obligó a envolver sus piernas alrededor de su cadera para llevarlo a la habitación pues temía que con dar un paso el pobre cayera sobre el suelo. Lo dejó con cuidado sobre el colchón y trató de dar la vuelta para regresar al baño pero la mano de Suga le jaló impidiéndole irse.

"Hobi, no te vayas" pidió bajo y con tono flojo, el menor sonrió enternecido.

Era adorable ver como el sarcástico Min Yoongi se volvía tan dócil y suavecito, parecía ser que Min era de los que se volvían perezosos o hipersensibles después de un orgasmo.

"Solo iré a cepillar mis dientes y cambiar mi ropa interior, no tardare" prometió, acariciando la mejilla del mayor con cuidado.

Suga suspiró y asintió, dejándole ir mientras se acomodaba mejor sobre el colchón. Esperó por Hoseok con el cuerpo flojo, la verdad era que su cuerpo solía relajarse demasiado después del sexo y aunque le daba algo de vergüenza no iba a privarse de querer acurrucarse. Varios minutos después Hoseok ingresó de nuevo a la habitación y con lentitud se acostó a su lado, pasando un brazo alrededor del pelimenta para atraerlo a su pecho.

"Dame mimos Hobi Hobi" pidió Suga mientras ocultaba el rostro contra el pecho del más alto.

Hoseok rió enternecido y obedeció, acariciando los cabellos suaves del mayor y dejando suaves besos en los cachetitos abultados.

"Hyung usted es demasiado tierno" suspiro Hoseok ganándose un gruñido de queja por parte de Suga.

"Cierra la boca, no soy tierno, mocoso" se quejó el pelimenta de mala gana.

"Tienes razón, claro que no" se burló Hoseok colando sus manos bajo la camiseta del mayor y acariciando con dulzura su blanda pancita.

Suga se estremeció ante el contacto y arrugó la nariz con disgusto al pensar en que definitivamente se volvía adorable después del sexo, rodó los ojos tratando de ignorar ese pequeño dato y estiró su cuello para dejar suaves besos pausados sobre los labios de Hoseok, simplemente disfrutando de la sensación de sus labios juntos en un toque sin dobles intenciones.

Se la pasaron en esa misma posición por mucho tiempo, incluso olvidando que había querido bajar a desayunar en primer lugar pero no les importó ya que la sensación de acurrucarse era mejor. De todos modos no tuvieron que preocuparse pues cuando Jimin llegó se encargó de subirles el desayuno y alimentarlos como si fuesen sus bebés.

"Te extrañe Jiminie" ronroneo Suga, rodeando la cintura del pelinaranja para subirlo sobre su regazo.

El menor rió y dejó un corto beso sobre los labios del pálido antes de repetir el mismo gesto pero con Hoseok, quien estaba sentado frente a los dos más bajitos. Jimin se acomodó mejor sobre el regazo de Suga y se encargó de darles pequeños bocados de fruta picada y pancakes que Jungkook preparó para el desayuno.

"He de confesar que tardé más de lo planeaba" comentó el pelinaranja, sus brazos rodeando el cuello de Suga cuando terminó de alimentar a sus novios. "Pero es que pasé al médico y-"

"¿Estas enfermo, mimi?" preguntó Hoseok preocupado, Jimin negó.

"No, no es eso hyung" dijo, su voz bajando y sus mejillas ruborizándose un poco. "Fui a hacerme un chequeo" informó, encogiendo uno de sus hombros para restarle importancia.

Suga le miró curioso mientras acariciaba la espalda baja del menor pero esperó pacientemente a que Jimin continuara hablando, pues era fácil darse cuenta de que el tema avergonzaba a Jimin.

"Fui a hacerme los chequeos correspondientes para confirmar que estoy limpio" murmuro apenado, sus mejillas e incluso la punta de sus orejas totalmente rojas de la vergüenza.

Hoseok y Suga no entendieron a la primera pero después de unos segundos analizando las palabras de Jimin lograron comprender. Oh, Jimin había ido a hacerse exámenes para saber si estaba libre de enfermedades de transmisión sexual.

"Oh, ¿y qué pasó?" preguntó Suga tratando de aparentar tranquilidad, aunque por dentro su corazón se oprimió un poco.

¿Y cómo evitarlo? Jimin debía haber temido estar contagiado de algo al haber estado en un ambiente tan asqueroso como lo era la zona roja. De solo recordar que su precioso novio había sido víctima de aquella red se le apretaba el estómago en un nudo doloroso.

"Estoy sano" suspiro Jimin, apoyando su mejilla contra el hombro de Suga para acurrucarse mejor contra su cuerpo.

A Jimin le gustaba sentirse protegido por su hyung. Ellos dos tenían un cuerpo relativamente similar en cuanto a tamaños y aunque Jimin era más fornido en cuanto a musculatura, Suga emanaba un aura de protección a pesar de ser pequeño y delgado. Le gustaba mucho, los brazos delgados de Suga rodeándolo era reconfortante y a pesar de que a veces Jimin cubría por completo al mayor se sentía bien que Suga le hiciera sentir chiquito con tan solo una mirada.

Porque Jimin podría ser más musculoso pero Suga era más maduro y le protegía de todo. Su hyung realmente usaba su mayor experiencia para recompensar que no era tan alto o fornido.

"Eso es bueno, cielo" murmuro Hoseok, sacándole de sus pensamientos mientras acariciaba su espalda baja con dulzura.

Jimin le sonrió y asintió, jalando el cuello de la camiseta del azabache para acercarlo a su rostro y besarle aún desde su posición sobre Suga.

También le gustaba la diferencia de cuerpos entre él y Hoseok, pues si con Suga se sentía pequeño, entre los brazos de Jung se sentía diminuto y frágil, totalmente a la disposición de sus hyungs.

Era un bonito sentimiento por fin tener a alguien que le cuidara, él siempre había tenido que cuidar de si mismo pues no siempre Taehyung podía protegerle.

"Los quiero mucho, ¿sabían?" murmuro Park, cerrando sus ojos al concluir el beso con Hoseok y restregando su mejilla contra el pecho de Suga de forma mimosa.

"Nosotros a ti" aseguró Hoseok, besando la frente del menor antes de sonreír enternecido.

Era sumamente adorable ver a sus novios abrazaditos, sus cuerpos pequeños encajaban tan bien ante su vista y no podía evitar sentir su corazón derretirse al ver como Min intentaba con mucho esfuerzo contener el cuerpo de Jimin contra su pecho.

Definitivamente estaba muy enamorado.

"Estuve pensando y quiero que nuestra segunda cita sea en un club" murmuro Jimin, sus manitas acariciando el pecho de Suga con timidez.

Hoseok y Suga enarcaron una ceja sorprendidos pues Jimin antes había dicho que quería citas clichés.

"¿Un club?" preguntó Suga con curiosidad, Jimin asintió.

"Sé que dije que quería citas en lugares clichés, pero la última vez que fuimos a un bar no pudimos bailar los tres juntos" murmuro Jimin con un puchero.

"De hecho si lo hicimos" interfirió Hoseok con una sonrisa ladina. "Bailamos los tres, contigo en medio de nosotros dos" dijo, apuntando al pelinaranja con picardía. "Nos comimos la boca en medio de la pista como si fuésemos adolescentes hormonados" se río observando como Suga y Jimin se ruborizaban.

"Pues no lo recuerdo así que no cuenta" se quejó Jimin con una mueca que intentaba disimular su bochorno.

"Jimin tiene razón, nosotros no recordamos" suspiro Suga, y era verdad, habían estado tan ebrios que seguían sin recuperar las memorias de esa noche.

"Entonces iremos a un club a besarnos y restregarnos como adolescentes hormonales, me agrada la idea" aceptó Hoseok y Jimin sonrió contento.

"Y no te olvides de drogarnos, necesito fumar un porro antes de irme de este país" dijo Suga a lo que Hoseok asintió en acuerdo.

Parecía lejana la última vez que se había descontrolado en un bar, usualmente solía hacerlo cada fin de semana después del trabajo pero desde que conoció a Jimin y Suga aquellos hábitos habían frenado. Y quizás era bueno haber dejado aquellos hábitos pues no era sano pero una probada de vez en cuando no le haría mal, ¿cierto?

"Bien, pónganse guapos que esta noche volveremos a salir" chillo Jimin con entusiasmo.

Aquella sería una noche interesante, joder que si.

HELLO, IT'S MEEE (boeh re viejo el chiste)

bueeeeeeeeeno señoras y señores, he aquí nuevo capítulo y otra vez sin comentarios sobre la escena, soy pésima así que entiendo si piensan que mi smUT ES CACA AH en fin, a pesar de mi fracaso espero les haya gustado y aviso que a nuestra historia le quedan menos de diez capítulos, q triste

no se olviden de votar y comentar xq lloro si no los veo en mis notis ;((

sin más que decir, les deseo bonito fin de semana ;)

⌗ shyoongichi.