Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Parte única.

Serendipia: Una serendipia es un descubrimiento o un hallazgo afortunado, valioso e inesperado que se produce de manera accidental, casual o por destino, o cuando se está buscando una cosa distinta.

Nunca me había sentido especialmente atraído por alguien.

Tonterías como el amor verdadero, los finales felices y el "juntos por siempre" no estaban diseñados para mí.

Así que no, nunca me había enamorado y no creía en la remota posibilidad de hacerlo.

Claro, no iba a negarlo, aquellos temas me causaban curiosidad. ¿De verdad enamorarse se sentía como estar en un cuento de hadas? ¿Realmente el primer beso de amor te causaba la sensación de tener millones de mariposas en el estómago?

Suspiré mientras un conjunto de preguntas curiosas acerca del tema se arremolinaban en mi cabeza.

Las horas pasaron volando, todas y cada una de ellas, a excepción de la última hora clase del día, la cual transcurrió demasiado lenta a mi parecer, yo trataba de mantener mis pensamientos alejados de la aburrida clase de probabilidad y estadística que el profesor Siwon impartía, mientras él explicaba el tema correspondiente al día de hoy y respondía algunas dudas que tenían mis —para nada listos— compañeros de clase.

—Pero es que no lo entiendo...—Habló Jeon Jungkook, desde el fondo de la clase.

Puse mis ojos en blanco. Sí me pagaran por cada vez que le he escuchado decir eso entre clases, ahora sería millonario.

Levanté mi mirada de aquella hoja en la que llevaba garabateando dibujitos desde que comenzó la clase, justo en el momento en que el profesor me llamó.

—Taehyung, muchacho... —Mostré una de mis mejores sonrisas a mi superior ante su llamado, para hacerle saber que tenía mi atención— ¿Te molestaría si te pido que seas tutor del joven Jeon? —Nada más escuchar aquellas palabras, mi sonrisa se desvaneció, tan rápido como había llegado.

Mi subconsciente me pedía a gritos que me negara a aquella propuesta, ¿yo? ¿Siendo tutor de Jeon Jungkook? já, ni pensarlo. Él era el típico chico popular e idiota que tenía en sus garras a todo el instituto, y yo era simplemente el típico nerd come libros, apasionado por el aprendizaje y la literatura. ¿Cómo podía el señor Siwon siquiera pensar en que juntarnos sería una buena idea? Por Dios, éramos polos opuestos, no congeniábamos en lo absoluto.

Forcé una sonrisa, mientras daba una pequeña y rápida mirada a Jeon Jungkook. Y volví a mirar a mi superior. Tragué duro, asintiendo con la cabeza.

—Claro que no es molestia alguna, profesor, ayudaré a Jungkook con lo que no comprenda.

Con el rabillo del ojo, al otro extremo del aula, pude observar como Jeon Jungkook sonreía victorioso. Me golpeé mentalmente en la frente por haber aceptado. ¿En que me beneficiaba a mí el hecho de ayudar a Jeon Jungkook?

Quería que la tierra me tragara y me escupiera en México, al otro lado del mundo y a miles de kilómetros de ese castaño irritable.

Las semanas pasaban con demasiada lentitud.

Lo peor de todo es que pasaba de verte en el instituto a verte también en mi casa o en la tuya, y eso de alguna manera me irritaba.

Sólo me pasaba rogando internamente porque pronto acabara el periodo de clases para no tener que ayudarte más con las asignaturas que no entendías, y no es que me cayeras mal o algo parecido, simplemente no me sentía cómodo contigo tan cerca de mí.

—¿Por qué me tienes tanto miedo, Kim? —Interrogaste con una pequeña sonrisa burlona. Yo rodeé los ojos. Ese gesto se me había hecho tan habitual al estar cerca de ti, pero es que me sacas tanto de mis casillas, que incluso temo quedarme bizco de tanto que hago esa mueca.

—No te tengo miedo, idiota. —Dejaste de garabatear las respuestas a los ejercicios que te había indicado, dejaste tu lápiz de madera sobre tu cuaderno e hiciste ademán de querer acercarte a mí, pero por instinto me alejé. Una sonrisa traviesa se dibujó en tu rostro y nuevamente te acercaste, logrando que yo hiciera de nueva cuenta lo contrario, alejarme de ti. Te acercaste nuevamente, vaya que eres necio.

Tu sonrisa se ensanchaba con el pasar de los segundos, te acercaste aún más a mí y pude ver como tus ojos brillaron con malicia. Ahogué un pequeño grito al verme acorralado entre la pared y tus brazos, los cuales colocaste a mis costados. Me sentí como entre la espada y la pared. La única diferencia es que tú eras como una caja de sorpresas; no sabía cuáles eran tus intenciones.

Mis lentes resbalaron sobre el puente de mi nariz ante la ligera capa de sudor que se formó en la zona. Sonreíste y cuando creí que serías servicial y me los acomodarías, me ví engañado, ya que me los quitaste en un rápido movimiento, dejando a tu vista mis ojos azules, haciendo contacto visual conmigo. Me sentí expuesto, sentí como si sólo con mirar mis ojos pudieses escarbar en mi alma, saber todos mis pensamientos.

Cerré los ojos por instinto, el contacto visual siempre me había incomodado. Maldije internamente al sentirte mucho más cerca, invadiendo mi espacio personal.

Mi respiración se aceleró, al igual que mi corazón. ¿Qué sucedía conmigo? ¿Por qué de pronto estaba tan nervioso?... sentía tu cálida respiración mezclarse con la mía, me sentí asfixiar. Y cuando estiré mis brazos para proporcionarte un empujón, tus labios se estamparon contra los míos. Y mi corazón latió desbocado. Mil y un pensamientos se arremolinaron en mi cabeza, me sentí como un demente por corresponder a tu beso ¿qué demonios habías hecho conmigo? Me tenías en tus garras, y no me importó en lo absoluto, solo dejé el momento pasar, porque se sentía tan malditamente bien la sensación de tus labios acariciando los míos con suavidad. Sentía como si estos encajaran a la perfección y hubiesen sido solo hechos para besar los tuyos.

Y fue ahí, mientras rodeaba tu cuello con mis brazos e intensificaba ese perfecto beso, que caí en cuenta de lo que por semanas estuve ignorando, Jeon Jungkook, me había enamorado de ti.

Jungkook's POV.

Me sentía como el único hijo del universo; hasta que te encontré. Tu personalidad y carisma te hacen brillar cual piedra preciosa. Y si me pongo a pensar, tú eres como el sol y yo soy sólo los planetas girando a tu alrededor, tan enamorado estoy de tí que incluso siento que eres el centro del universo, mi universo.

Kim Taehyung, eres demasiado bueno para ser verdad, tu hermosura, está cubierta en oro. Pero, ¿qué hay en tu interior?

Miro directamente a tus ojos y un escalofrío me hace estremecer. Sujeto tu barbilla y tú me devuelves la mirada sin decir palabra, y me siento expuesto, siento como si con solo mirarme pudieses saber todo lo que pienso, como si pudieses saber todos y cada uno de mis secretos. Cierras tus ojos y observo como tus largas pestañas caen sobre tus parpados. Abro y cierro la boca, maravillado ante tu belleza. Me siento como el ser más afortunado en la Tierra por tenerte a mí lado.

Sé que la maldita ciudad cree que te necesita, pero no tanto como lo hago yo, de eso estoy completamente seguro. Eres el centro del universo, mi universo, el sol que ilumina mis días, la razón por la cual me mantengo en pie y no me rindo ante las dificultades. Y Dios mío, estoy tan loco e intensamente enamorado de ti; y soy tan privilegiado de que estés conmigo, porque tú eres la última de una especie en extinción. Irradias luz y derramas miel por cada uno de tus poros. Y tengo tanto miedo de que esa luz que te rodea se extinga. Porque ¿qué haré sin esa luz que me motiva a querer seguir adelante?

Acaricio tu mejilla con delicadeza, como si el más mínimo toque fuese a romperte. Nuestras respiraciones se mezclan mientras siento como mi pulso se acelera, eres tan irreal, todo esto es tan irreal. Porque antes no creía en el amor; hasta que llegaste tú y cambiaste mi perspectiva, cambiaste mi manera de ver las cosas, le diste sentido a mi vida.

Me pregunto si tu terapeuta sabe todo acerca de mí. Porque quiero que sepas que estoy aquí sólo en busca de tu gloria, de tu bienestar emocional, busco cuidarte; así como lo haces tú conmigo. Y sé que pudieron haber miles antes de mí. Pero, ¿te harían el bien que te hago yo?

El amor nuestro es uno único, un amor ultra tipo. De ese tipo de amor que todos buscan, del tipo de amor del que jamás te alejas.

Porque, Kim Taehyung, simplemente eres la última de las personas realmente autenticas, el tipo de persona que todo el mundo querría a su lado.

Eres la última persona autentica.

En tus labios se forma una sonrisa al abrir tus ojos y mirarme, tan absorto en tu belleza. Rodeas mi cuello con tus brazos y te acercas más a mi rostro, quedando a milímetros de mis labios. Luego de unos segundos, siento como tus labios acarician los míos, fundiéndonos en un beso, un beso que me hace sentir como en el paraíso.

Soy una supernova con visión de túnel, pero sólo por ti. Y tú eres como la galaxia en la que yo habito.

Mi cabeza está estropeada, justo como un tornillo que ha sido apretado demasiadas veces.

Cuando pienso en ti, todos mis problemas se disipan, como si el cálido viento se los estuviese llevando. Como si con solo tu toque, te deshicieras de todas y cada una de mis preocupaciones.

Y es por ello que me prometo que en medio de la avalancha, en medio de las dificultades te protegeré, de todas y cada una de ellas. Te daré esperanza, así como tú me la devolviste a mí.

Tus labios se mueven con parsimonia sobre los míos. Y lo único que necesito saber es que soy el único en tu vida, incluso si no es cierto. Necesito oírlo de ti. Porque sin ti no sé qué haría, eres mi sustento, quién camina junto a mí en este mundo perdido. Eres el único motivo de mi felicidad. La última de una especie en extinción, alguien tan hermoso e inocente, la última persona autentica.

Incluso, mientras estás en mis brazos me pregunto si es que en realidad te merezco, porque eres tan puro, inocente y bello. Irradias luz; y me pregunto, ¿qué es lo que hice para merecerte?, no tengo una respuesta clara para ello, pero sea cual sea la razón por la que estemos juntos, estoy tan agradecido por ella.

Tal vez no soy la mejor persona que ha pisado la Tierra, no soy un santo ni mucho menos, he hecho cosas malas en el pasado, fui malagradecido con el prójimo y lo he sido siempre ante todo bien que he conseguido, he sido un mentiroso también, un mal hijo, un mal hermano, un mal amigo, tanto que muchos a quienes amé se alejaron de mí, pero por alguna razón te tengo aquí, junto a mí. Y te juro que di, doy y daré todo de mí por hacerte feliz.

Estoy aquí, en el comienzo del final, el final de un infinito contigo. Y ya me cansé de tener sueños acerca de las cosas en las que creo, soñé y creí en un infinito a tu lado, y sí; tuve miedo de no lograrlo, pero tú me diste calma, esperanza y calidez. Consumiste todo el miedo que había dentro de mí.

Te separas de mí y me sonríes, logrando que mi corazón lata acelerado, todo aquello produces en mí, mis sentimientos por ti aumentan a medida en que los segundos transcurren, y es ahí, mientras me abrazas y observamos juntos el atardecer, que extiendes tus manos y me tomas por las mejillas, robándome otro pequeño beso.

—Jeon Jungkook... —Hablas tú, el dueño de mis suspiros. — Estoy tan enamorado de tí, tan intensamente que con sólo una mirada pones mi mundo de cabeza. Siento como si hubiese esperado mi vida entera por esto, por un nosotros, y estoy seguro de que esperaría un millón de años más sólo por ti.

Las palabras que pronuncias me transmiten calidez, me reconfortan. Y es en ese preciso momento que caigo en la cuenta de que nada me había preparado para el privilegio de ser tuyo.

Sí tan solo hubiera sentido el calor a través de tu toque. Sí tan solo hubiera visto como sonríes cuando te sonrojas. O como frunces los labios cuando te concentras lo suficiente. Bueno, yo hubiera sabido para lo que estaba viviendo todo este tiempo. Tu amor es mi vuelta de página; en donde solo las palabras más dulces quedan.

Cada beso es una línea en cursiva. Cada toque es una frase de re definición. Me rindo a quién he sido, por quién eres tú, porque nada me hace más fuerte que tu frágil corazón.

Si tan sólo hubiera sentido como se siente ser tuyo; yo hubiese sabido cuál era mi propósito de vivir todo este tiempo. Y por mi mente cruzan unas palabras "Qué extraño y hermoso es que existamos".

No pude evitar pedirte que lo dijeras de nuevo, intenté escribirlo, pero nunca pude encontrar un bolígrafo. Daría todo por escucharte decir una vez más que el universo fue creado sólo para ser visto por nuestros ojos.

Con falta de aliento, te acercaste a mí, tus ojos brillaban mientras explicabas el infinito.

Qué extraño y hermoso, Kim Taehyung, es realmente que existamos.

Taehyung's POV.

Hoy hace un mes de nuestra ruptura.

Quisiera poder decir que todo está bien, que te he superado, pero significaría estar mintiéndome a mí mismo; tu ausencia me hace daño. Cada segundo que transcurre, te extraño como desde la última vez que te vi. ¿Por qué si éramos tan felices tuviste que dejarme?

Verte cada maldito día en el instituto tampoco ayuda mucho, pero verte sonreír, de alguna manera me reconforta.

Mis amigos me preguntan "¿Por qué no luchas por su amor?" Pero yo simplemente pienso... ¿Vale realmente la pena luchar por alguien que sabes que ya no siente lo mismo por ti?

Los hombres sabios dicen que solo los tontos se enamoran, pero yo me cegué. Tomé tu mano y caminé junto a ti a pesar de las dificultades. Quise escribir nuestra historia juntos... pero al parecer yo fui para ti sólo una diversión. Supongo que ahora he aprendido realmente que toda acción tiene una consecuencia.

Me siento en una mesa de la cafetería, completamente solo. Mis ojos bajan a mi bandeja de comida, la cual está casi llena. Hago una mueca mientras me cuestiono: ¿Por qué se me ha quitado el apetito? Lo admito, he bajado un poco de peso porque no he estado comiendo.

Mis ojos se aguadan mientras me sumo en mis pensamientos, y sin darme cuenta, nuevamente estoy observándote. Luces tan feliz sin mí.

Tan sonriente, tan lleno de vida.

Y ahora estoy aún más seguro de que lo que siento por ti en verdad debe ser amor, debe ser amor, o no dolería tanto. Y no pensaría tanto en ti, podría simplemente darme por vencido y dejarte ir.

Y sí, caí muy bajo, así es como soy. Y me puedo doblar y romper, como si fuera una banda elástica. Mi mirada se encuentra con la tuya, ¿eso reflejado en tus ojos, es pena? Por favor no me mires así... porque siento que en cualquier momento podría romper en llanto.

¿Recuerdas todas las cosas que queríamos?

No querías que nos consumiéramos, yo... sé que no viniste a herirme. Sólo quiero que sepas, que no importa el camino que tomemos. Sé que no pudiste haberme amado mejor.

Verte hace todo más difícil, pero no te preocupes, yo sé que seré fácil de superar, y que encontrarás a alguien mejor, de verdad lo espero, espero que puedas ser feliz con alguien más.

Lo nuestro comenzó con el beso perfecto, lástima que la perfección no pudo mantener nuestro amor...

Ah, Jeon Jungkook, quiero que sepas que te amo, que te amo lo suficiente como para dejarte partir.

Un mes atrás.

Estamos cumpliendo tres meses juntos.

Y me siento como el chico más afortunado en la Tierra. Para celebrarlo, luego del instituto, pasamos el resto de la tarde juntos.

Se hizo demasiado tarde, el sol está saliendo, y tú estás justo a mi lado, acostados ambos en tu cama; la película está comenzando, pero sé que no la veremos ésta noche.

Me sonríes mientras te acercas más a mi, brindándome tu calor y protección, haciéndome sentir amado.

Cada mirada, cada caricia, hacen que quiera darte mi corazón. Me estoy enamorando de ti Jeon Jungkook, así que quédate así como eres.

Y estoy tan enamorado de ti, que nunca imaginé que podrías tener luz de luna en tus manos, hasta esta noche en que te sostuve.

Beso las yemas de tus dedos, mientras internamente deseo que seas mío. Posas tus labios en mi cuello, y un pequeño escalofrío me hace desear entregarte mi cuerpo, porque estoy enamorado de ti, y no puedo parar de caer cada vez más y más enamorado. ¿Me lanzaste algún tipo de hechizo? Porque, mírame, estoy loco por ti, Jeon Jungkook.

Mis traviesos dedos se pasean por sobre tu camisa. Tú instintivamente cierras tus ojos y muerdes tu labio con suavidad, siento como tiemblas bajo mi cuerpo ante mi toque.

Me inclino, colocando mis piernas a tus costados y acercándome a besar tu cuello con suavidad. Un pequeño suspiro abandona tus labios, mientras te remueves nervioso bajo mi cuerpo. Yo beso tus labios con delicadeza para tratar de darte calma y una vez que tu respiración se relaja, procedo a desabotonar tu camisa; acaricio tu torso con lentitud y llevo mis besos de tu cuello a tu torso, deteniéndome sobre uno de tus pequeños botoncitos rosados, el cual acaricio con mi lengua para estimularte. Pequeños gemiditos abandonan tus labios y sonrío de oreja a oreja, bajando mis manos a tu cremallera, la cual abro para luego bajar tu pantalón y bóxer en el proceso.

Sueltas una risita nerviosa y yo sonrío para ti y me acerco a besarte, tratando de proporcionarte calma y seguridad entre mis brazos. Tomo tu erección entre mis manos y la acaricio en un lento vaivén mientras tú gimes y jadeas contra mi oído, sonrío satisfecho al saber que lo estás disfrutando tanto como yo.

—H-hyung haz-hazme tuyo...—Suplicas con la respiración entrecortada. Y sólo esas palabras bastan para dar inicio a una noche inolvidable, donde solo tú, yo y la noche estrellada acompañada de la luz de la luna, seríamos testigos de nuestro de amor.

Actualidad.

Siempre estoy mirando detrás de mis cercas, siempre me sentí solo, aislado, y me cuestiono ¿por qué cuando nos conocimos siempre estaba a la defensiva? No lo sé... no tengo una respuesta clara a esa pregunta aún después de han pasado tantos meses de ello, pero encontré la manera de dejarte entrar a mi vida, sentía que moriría si no te lo permitía.

Y, aún me pregunto ¿eso fue real? pero lo más importante, ¿eso fue lo correcto?, tal vez si hubiese sabido que me harías tanto daño, me hubiese empeñado en alejarme de ti... pero ya no hay vuelta atrás.

Nunca antes había estado enamorado, nunca lo sentí todo hasta ahora.

Mientras estoy acostado en mi cama, te necesito recostado en mi pecho, para que me calientes todo el tiempo, para quitarte el aliento siempre al saborear tus labios.

Y lo sé, no hay nada en común entre nosotros, pero es exactamente eso lo que me hace amarte cada vez más.

Conduje por todos y cada uno de los lugares donde solíamos pasar el rato hasta perdernos en nuestras miradas. Pensé en nuestro último beso, en cómo se sintió. Incluso a veces me pregunto ¿fue nuestro amor una mentira?; si lo que tuvimos fue real, ¿cómo puedes aparentar estar tan bien? Porque yo no estoy para nada bien.

Recuerdo el último día que estuvimos juntos, el día que me dijiste que te irías de mi lado, sin explicaciones, sin excusas. Simplemente te marchaste. Ese día mis lágrimas resbalaron sin parar desde mis orbes hasta mis mejillas, lloré como ningún otro día, porque no pude soportarlo y rompí en llanto, porque fuiste mi primer amor, y aquella fue mi primera ruptura amorosa. Sentía como el oxígeno comenzaba a hacerme falta, y como el corazón me dolía tan intensamente, porque aún si había sido tan poco tiempo había llegado a amarte con total sinceridad.

Y los sueños que dejaste atrás, no los necesitabas. Como cada deseo que pedimos. Desearía que todo lo que vivimos juntos fuera sólo un sueño, desearía poder olvidarme de todas las pequeñas y estúpidas cosas que hicimos. Como la forma en que se sintió dormir junto a ti y los recuerdos que me persiguen y continúan latentes en mi memoria, son recuerdos de los que nunca podré escapar, porque mientras yo pienso en ti a cada segundo que transcurre y me hago daño con tus recuerdos, sé que tú ni siquiera has pensado en mí... que tú estás perfectamente bien, solo ignorando lo que tuvimos y que yo... bueno que yo no estoy para nada bien.

Y todas las fotos que me enviaste, todos los mensajes que me escribiste, admito que sigo mirándolos. Admito que me siento sólo también, siento que me falta una pieza para ser feliz y esa pieza eres tú, me haces demasiada falta...

Y mis amigos me preguntan ¿por qué ya no salgo?, ¿por qué ya no sonrío?, ¿por qué ya no me divierto?, bueno, es porque tengo miedo a salir y encontrarme contigo, temo verte y derrumbarme, temo romper en llanto si te veo con alguien más, porque me duele saber que tú saliste adelante, me duele saber que tú eres feliz sin mí, y que yo estoy arruinado. Porque incluso me es difícil escuchar tu nombre cuando no te he visto desde hace tanto tiempo.

Es como si nunca hubiéramos pasado, ¿lo nuestro fue solo una mentira? Si lo que tuvimos fue real... ¿cómo puedes estar tan bien y fingir que nada ocurrió después de todo lo que vivimos juntos?

Tal vez yo fui para ti sólo un juego, pero tú para mí, Jeon Jungkook, fuiste mi primer amor, la primera persona que logró entrar en mi corazón.

Si hoy despertara contigo a mi lado, como si esto fuera solo un sueño retorcido; te sostendría con todas mis fuerzas y nunca escaparías de mi lado y nunca me escucharías decir "te necesito".

Porque realmente no estoy para nada bien, así que dime por favor que esto sólo es un sueño.

Porque las únicas palabras que me repito a diario una y otra vez son dos: te necesito, te necesito para sobrevivir, te necesito a mi lado, amándome tan intensamente como decías que lo hacías.

Y justo cuando creí que estaba logrando olvidarte, llegaste nuevamente a mi vida. Parecías tan relajado mientras me mirabas a los ojos y me pedías que fuera tu cita para el baile de graduación.

Y debo admitirlo, estuve realmente tentado a decirte que no, pero tu mirada de súplica y ese tierno puchero formado en tus labios fueron mi perdición.

—Pasaré por ti a las 7 el viernes. —Afirmaste, dedicándome una de tus más perfectas y sinceras sonrisas, para luego darte media vuelta y alejarte a paso lento hacia la cafetería, yendo hacia donde tus amigos.

Suelto un pequeño suspiro, arrepintiéndome al instante de la decisión que tomé. Jeon Jungkook, ¿por qué tengo que tener una debilidad por ti?

Me miro por última vez en el espejo, admirando mi reflejo con lentitud, en busca de alguna imperfección. Suspiro derrotado. ¿Por qué acepté ir al baile de graduación contigo? Ya lo había hecho y no había vuelta atrás, lo peor de todo era que mi decisión y lo que conllevaría a ella me emocionaba y disgustaba al mismo tiempo.

Justo como dijiste, a las 7 en punto tocaste el timbre de mi departamento. Mordí mi labio con suavidad mientras sentía como mis manos se iban llenando de una ligera capa de sudor. Apagué la luz y bajé las escaleras de dos en dos.

Al estar en la planta baja, casi caí al correr hacia la puerta debido a tu insistencia.

— ¡Ya voy! —Exclamé irritado. Resoplé con lentitud y lleve mis manos hacia mi pantalón de vestir, restregándolas contra este para eliminar cualquier rastro de sudor.

Forcé una sonrisa.

El hecho de que hubiese aceptado asistir al baile de graduación contigo, no significaba que te hubiese dado mi perdón.

Tus ojos brillaron al encontrarse con los míos.

Sonreíste y se me revolvió el estómago, me sentía como un tonto al seguir siendo débil ante tus sonrisas, ante el sonido de tu voz, y me sentía como un completo idiota al ver lo que causabas en mí con sólo una sonrisa: lograbas que mi corazón latiera acelerado, me tenías a tus pies y te odiaba por eso, pero me odiaba más a mí mismo por reaccionar así, por no tener la fuerza de voluntad para apartarme de ti.

Porque sé que suelo decir que no te necesito cerca de mí, pero lo hago.

Estoy perdido. Dios, te veías demasiado bien, y yo quise abofetearme mentalmente por no poder desviar mi vista hacia otro lado.

—Taehyung —Una sonrisa se curvó en tus labios, mientras me recorrías con la mirada. De pronto me sentí incómodo— Te miras precioso. —Admitiste y no lo sentí como una mentira, pero... ¿y si lo era? Lo acepté como un cumplido y simplemente lo dejé pasar.

Una sonrisa se dibujó en mis labios al observarte, con tu esponjoso cabello castaño frente a mí. Te admiré con lentitud y estuve cien por ciento seguro de que mis ojos brillaban, con ese brillo peculiar que se hace presente al admirar a la persona de quién estás enamorado. Observé tus facciones con detenimiento, te veías precioso, como un ángel, no, realmente estaba seguro de tener a un verdadero ángel frente a mí. Los segundos pasaron y de repente me sentí como un tonto por no haber mencionado palabra, pero es que Dios, me había perdido en tu hermosura, en tu hermosa sonrisa y bonitas facciones.

Y tú Jungkook, me mirabas, como esperando a que dijera algo. Aclaré mi garganta y sonreí de nueva cuenta.

—Sí... H-Hola; también te ves precioso... —Admití, aunque sentía que esa palabra quedaba corta— Perfecto... —Susurré mientras relamía mis labios, no podía entender como antes era tan afortunado de que te hubieses fijado en mí. Mi mirada bajó a tus lindos y rosados labios y reprimí las ganas de robarte un beso. Me enojé conmigo mismo por estar nuevamente actuando como un ingenuo adolescente enamorado.

—¿Estás listo? —Cuestionaste, tendiéndome la mano.

—Eso creo... no me decepciones, por favor. —Hablé sin pensar, y al mirar como tu expresión alegre cambió de manera radical a una mueca, quise que la tierra me tragara.

Veinte minutos más tarde, atravesamos las puertas del salón donde se llevaba a cabo el baile. Nos hicieron detenernos para fotografiarnos. Nos acomodamos para la foto y unos segundos más tarde el flash nos cayó encima. Éste me cegó por unos momentos, pero no fue nada grave.

Caminamos hacia la pista, donde una gran masa de estudiantes bailaba al ritmo de la música. Me sentí fuera del lugar, nunca me habían gustado los espacios cerrados invadidos de gente.

Me tensé y tú lo notaste. Así que me sugeriste salir al exterior, donde algunas parejas bailaban música lenta.

— ¿Bailamos? —Me sugeriste, y a pesar de que sí quería hacerlo, me negué... tú no eras abiertamente homosexual, y no quería ser yo quien arruinara tu reputación, por mucho que deseara bailar contigo en esa noche estrellada, bajo la luz de la luna. Un escenario demasiado romántico... ¿esto significaba que habíamos vuelto? No lo creía así, aún necesitaba una explicación.

Nuestras miradas se cruzaron y quise huir.

—Vamos, Taehyung ¿Vas a rechazarme después de que ya aceptaste venir conmigo? —Preguntaste de una manera amarga, como si no pudieses creértelo. Mordí mi labio con suavidad y me negué, no iba a quitarte el gusto, porque yo también lo quería.

Una pequeña sonrisa de victoria se dibujó en tu rostro.

Tomé tu mano y nos encaminé a la pequeña pista de baile. Algunos estudiantes nos miraron con curiosidad, y quise echarme para atrás, pero a ti pareció no importarte y sujetaste mi mano con fuerza para evitar que me alejara. Me sonreíste, lanzándome una mirada que parecía expresar un claro "está bien, esto es lo que yo quiero".

Relamí mis labios con nerviosismo, abrazándote por el cuello mientras tu sujetabas mi cintura con delicadeza. Y comenzamos a movernos al ritmo de la música.

Me miraste, haciendo contacto visual conmigo de nueva cuenta. Y estuve seguro de que en mis ojos se expresaban todas y cada una de las preguntas que me estuve haciendo luego de tu partida.

—Taehyung yo... a decir verdad; no sé cómo es que tuve la fuerza para alejarme de ti, y sé que quieres explicaciones, pero sinceramente es algo difícil de explicar. —Inhalaste profundamente, tomando tu tiempo para continuar hablando.

—...Papá se enteró, sobre nosotros... no sabes cómo se puso, lo nuestro no le agradó en absoluto e incluso amenazó con echarme de la casa si no te dejaba... sé que no suena a excusa y no lo es, es la realidad y es que él realmente me asusta... incluso, por descabellado que parezca, amenazó con hacerte daño a ti y yo... lo desconozco, nunca le creí capaz de herir a alguien, p-pero él la tomó contra mamá, enfureció y, y la golpeó, diciendo que era culpa de ella por haberme dejado hacer lo que quise y no haberme impuesto ninguna exigencia o castigo... y siendo sincero yo no me puedo perdonar por eso, así como tampoco puedo perdonarme por haberte dejado. De verdad lo siento, pero lo hice por mamá. — Mi corazón dolió ante lo que ibas contándome, te veías tan frágil, indefenso y desprotegido y por fin pude comprender lo tonto que fui al haberme puesto en tu contra. —Metimos demanda contra él por maltrato intrafamiliar y fue condenado a seis meses de prisión con libertad condicional... sinceramente me parece muy poco, porque lo que hizo no tiene perdón. —Pequeñas lágrimas brotaron de tus orbes y sentí como mi corazón se quebraba. Así que las limpié con rapidez y acuné tu rostro en mis manos, besando tus mejillas con delicadeza.

—Todo está bien ahora... ¿sí? Por favor no llores. —Pedí, con la voz entrecortada, podía comprender tu dolor. No era que hubiese pasado por ello, pero tenía empatía. Y de ninguna manera podía compararlo con el dolor de la ruptura; había sido un tonto ignorante.

—Te necesito, te necesito para que arregles todas y cada una de mis heridas, te necesito Kim Taehyung, te necesito para sobrevivir, para tener otro motivo por el cual seguir luchando...—Te abrazaste a mí y hundiste tu rostro en la curvatura de mi cuello, sollozando como un pequeño niño que necesita ser protegido. Yo acaricié tus cabellos y deposité un besito en la cima de tu cabeza mientras acariciaba tu espalda, buscando darte consuelo.

—Y yo también te necesito; y te prometo que estaré contigo a través de las dificultades. Te prometo que con mi amor sanaré todas tus heridas, porque te amo y nunca dejé de hacerlo, te amo y es una promesa, y quiero que lo tengas siempre presente, te amo por la maravillosa persona que eres, Jeon Jungkook. Porque has sabido salir adelante a pesar de todo, y admiro eso.

Sin decir palabra, te alejaste y me miraste a los ojos, cerraste tus ojos y yo supe lo que estabas esperando, un beso. Así que te besé, después de tanto tiempo sin hacerlo, tus labios me transmitieron calidez, te transmitieron todo lo que siento por ti. Todos y cada uno de los sentimientos que tengo hacia ti.

Y supe que el sentimiento era mutuo. Y que nunca más te dejaría ir de mi lado, porque habías llegado mi vida sin yo estar buscándote, pero habías llegado para quedarte. Y me sentí tan feliz como nunca antes. Supe que nuestro amor sería invencible si luchábamos por mantenerlo y quería que así permaneciera siempre.

Jeon Jungkook, estoy completamente seguro de que eres y serás mi primer y único amor.

5,318 palabras, me siento productiva.

Muchas gracias por haber leído esto, espero haya sido de su agrado.

© shameless-devil ; 2019

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro