Cuatro meses.

— Cielo, ven. — lo llama su madre, es mayo y es el cumpleaños de su padre.

Su padre Kai esta en la sala recostado en un sillón, él hombre bebé una cerveza y aún lado está Minho el cual también esta bebiendo. Los dos miran un partido televisado.

— Se que lo odias, así que para ti tengo un pie de limón te diría que le lleves a Minho pero el también adora mí pastel de coco. — Jennie señaló el pie y el pastel perfectamente colocados en la barra. — Puedes poner una reacción para cada quien, yo llevaré el té.

Jisung asiente y coloca perfectamente tres rebanadas de pastel y una de pay para él. Jisung detesta el coco, simplemente no puede con eso. No agua, no leche, no galletas y no pastel.

No coco. Pero aquel pastel se ve tan jodidamente delicioso, el coco rallado por arriba provoca que Jisung salive. Dios se ve tan delicioso.

Tomando los platos en una bandeja, los lleva a la sala donde está su mamá y sonríe para comenzar a comer, ellos terminaron de comer y Jisung ni siquiera tuvo ganas de probar el pie, el solo deseaba ese pastel de coco.

El día transcurrido normal, le obsequio a su padre unos nuevos tenis y Minho un reloj, ellos se fueron a dormir a la antigua habitación de Jisung, y por más que intentaba conciliar el sueño no podía.

Mañana debían viajar muy temprano, debía dormir.

Eso no pasó y media hora después se levantó. — ¿A dónde vas? — pregunta Minho adormilado con sus ojos entre abiertos.

— Al baño. — responde Jisung y le da una mirada rápida al reloj de mesa 3:30 am.

No lo piensa mucho, baja a la cocina y saca el pastel. Cuando lo prueba incluso suelta un vergonzoso gemido, Jisung come hasta que casi queda vacío el recipiente.

Con el estómago lleno Jisung sube a su recámara y duerme tranquilamente.

Al día siguiente, no lo despierta la preciosa voz de su novio, una arcada atraviesa su garganta.

Rápidamente corre al baño y comienza vomitar, siente la mano de Minho en su espalda susurrando palabras dulces y después de tranquilizarse ellos se despiden de su mamá.

Sí ella vio que el pastel se acabo y Jisung vomito no dice nada pero sus ojos brillan de una manera diferente.

Aversiones alimentarias. Cuando estás embarazada, podrías volverte más sensible a ciertos olores y tu sentido del gusto podría cambiar. Como la mayoría de los demás síntomas del embarazo, estas preferencias alimentarias pueden atribuirse a cambios hormonales.

Decidí que las actualizaciones de este fic serán diaria!