Al llegar aquel aislado y remoto lugar se mantuvo en silencio tan solo unos segundos apreciando cada detalle, cada zona urbana que la perturbaba y hacía sentar cabeza acerca de la descisión que había tomado, tal vez no era muy tarde para escapar de la sombría ciudadela para regresar a casa donde luego de que destrocen su altanería podría dormir con tranquilidad, ¿En verdad era lo que quería?

—Me asusta que estés tan callada, a penas te conozco y se que no escuchar tu parlanchina voz es advertencia de algo.—Un adolorido Finn la miró de reojo esperando alguna respuesta.

—¿El sueño de cualquier motociclista?—Dudó un poco de sus solemnes palabras.

—Es más que un sueño, es el paraíso mismo.—Aclaró la garganta. Finn se bajó de la maquina que los había llevado hasta ahí seguido de Alessia.

—¿Qué es este lugar?—Preguntó la Pelletier asombrada.

—Tiene muchos nombres; Cittadella, Vecchia cittadella...—Miró a su curiosa coetánea.

—Presiento que eres el único que la llama así.

—Hey, que tu no seas poliglota es algo muy diferente.—Vaciló antes de encogerse de hombros doblandose momentáneamente por el dolor.—La mayoría le llama "La vieja ciudadela" ¿Lindo nombre verdad?

—Debí suponerlo... ¡Hey! ¿Aún te duele?—Lo ayudó a ponerse firme con cuidado de no colocar sus manos en un lugar incorrecto.

—¡Finn!—Lo llamo uno de los chicos que se encontraba cerca de ellos.—¿Que te pasó?

—El grupo de Nicholas, esos hijos de puta creen que pueden quedarse con La Ciudadela.—Tosió un poco antes de presentar a la tan curiosa Pelletier.—Ella es Alessia Pelletier.

—Hola.—Saludó nerviosa sintiéndose cada vez más pequeña a comparación del resto de personas ahí presentes.

Todos se silenciaron mientras la apreciaban, Alessia no era una chica para nada fea y las manchas más conocidas como pecas que sobresalían en su rostro la hacía ver mucho más tierna, Finn pensaba en lo similar que era aquella chica con las ardillas; Parda, de piel levemente bronceada, lunares, cachetes un poco sobresalientes y ni hablar de sus dientes perfectamente alineados pero con los dos de en frente alargados.

—Parecen mudos, entonces los presentaré.—Habló Finn notando la fascinación que tenian sus amigos con la chica, sin mucho animo continuó la presentación.—El es Wyatt.—Apuntó haciendo un leve movimiento de mandibula, un muchacho de rubia cabellera.

—Y yo soy Jack.—Se acercó extendiéndole la mano haciendo más que obvia la diferencia de estatura, está vez Alessia era la más alta.—¿Eres la nueva novia de Finn? Por que si es así tendremos muchos problemas, no suelo compartir a mi novio.

El grupo de chicos soltó una carcajada al ver el pálido rostro de Alessia, pero pronto Wyatt intervino.

—Tranquila, es una broma.—Buscó algo en sus bolsillos, una cajetilla de cigarrillos salió de estos y la abrió extendiéndole una a Jack.

—¿Fumas?—Pregunto Jack a Alessia encendiendo el cigarrillo con una fosforera.

—No sé fumar...—Habló con una mueca en su rostro, por alguna razón no parecían malos.

—Yo te enseño.—Un chico se coló en el grupo y al instante Finn le tiro una mala mirada.

—Josh, aléjate de ella.—Habló el azabache con firmeza.

—Vamos amigo, ya tienes a Iris ¿Qué más quieres?—Se quejó mirándole de igual manera.

—Ok creo que es momento de que ella venga conmigo, Finn tiene un muy mal carácter.—Una castaña de muy baja estatura se acercó mientras Josh y Finn se miraban el uno al otro como si fueran a pelear.—¿Que te parece si te presento a Sophia?

—¿Se van a pelear?—Cuestionó Alessia a la agradable chica.

—No lo creo pero en caso de que si, no quieres quedarte a verlo.—Tomó su mano mientras se alejaban de los muchachos.

Pronto llegaron a una de las antiguas casas, sin seguro ni perilla, un poco sucias pero no se podía pedir mucho a jóvenes de entre 15 hasta 20 años y quien sabe si había de más edad.

—No seas tímida, te encantarán.—Habló con mucho ánimo.

—Tal vez yo no le encante.

—¡Tonterías!

Levantó un poco más la voz cuando en uno de los cuartos se escuchó la canción de "Bubblegum Bitch" siendo coreada por dos voces de al parecer una chica de su edad y una voz masculina, risas y pasos de escuchaban ahí hasta que finalmente entraron.

—Oh, dear diary, I met a boy he made my doll heart light up with joy...—Cantó una.

—Oh, dear diary, we fell apart welcome to the life of Electra Heart.—Gritó un chico antes de notar la presencia de las dos castañas.—Oh, Millie... ¡No es lo que parece!—Rió el muchacho con una botella de alcohol en su mano y un sombrero de bufón que pronto fue arrebatado.

—¡Tarde! ¡Ya nos bebimos todo!—Otra bermeja se tambaleó con una boa de plumas rosada enredada en sus brazos y unas gafas de estrellas que estaba puesta al revés.

—Bien, te los presento... Ella es Sophia y Noah, mi novio además de mano derecha del líder.—Señaló a la pelirroja de corte pixie y luego su pareja.—Y como escuchaste, me llamo Millie.

—¿Tu como te llamas?—La de corte pixie se acercó curiosa para darle empujones hasta la cama y así sentarse todas en un círculo.

—Alessia, Alessia Pelletier.—Relamió sus labios nerviosa.

—¿Como llegaste aquí?—Noah preguntó sentado como indio.

—Finn me trajo.—Sonrió.—Lo apuñalaron y lo ayudé.

—¡¿Apuñalaron a Finn?!—La borracha Sophia gritó y en su intento de levantarse de la cama se cayó al suelo.

—¡Sophia!—Millie habló sorprendida al ver a su amiga quien esta vez se levantó sin los lentes de estrella.

—¿Entonces que sucedió? ¿Donde está?—Noah un poco más serio habló.

—Con Josh... Creo que ese era su nombre.

—Iris estará muy molesta cuando se entere.—Habló Sophia como si estuviera aburrida, pero al contrario estaba más que emocionada por ver cómo sería la pelea.

—Vale, vale. Dejemos de hablar de Iris, Josh y Finn.—Su mirada fue dirigida a la nueva integrada al circulo.—Si quieres saber algo solo pregúntalo.

Claro que Alessia no tardó en saciar su curiosidad respecto a las personas que a penas había conocido, su lengua ya bailaba por comenzar a cotillear.

—¿Hace cuánto viven aquí?

—No vivimos aquí o bueno la mayoría no lo hace, vienen aquí los viernes por la tarde, todo un fin de semana entre amigos.

—¿Y sus padres?

—Mientras lleguemos a tiempo para las clases les importa una mierda donde estemos.—Aseguró esta vez Sophia.—Es la ventaja de vivir en las partes pobres de la ciudad, hay padres muy jóvenes o simplemente niños abandonados que luchan por no morir aunque sabes que siendo indefensos no les quedan muchas opciones, hemos acogido a muchos de ellos aquí, somos como una familia.

—¿Y los demás? ¿Cómo llegaron aqui?

—Wyatt desde hace muchos años. Sus padres lo abandonaron, Nick, el hermano de Finn lo cuido al igual que a Jack quien también escapó de casa.

—Su padre lo golpeaba.—Continuó Millie.—El día en que asesinaron a su madre fue la gota que derramó el vaso.

—¡Yo!—Habló Noah.—Soy el menos querido de todos mis hermanos en mi familia de mierda, nadie sabe cuando me escapo o me voy, quizás lo saben pero no les importa.

—Eso da igual.—Millie lo miró con el ceño fruncido.—Me tienes a mi y a mi me importas mucho.

—Ay, no frente a la nueva.—Sophia bufó.

—Ok ok.—Millie fingió inocencia.—Antes el hermano de Finn cuidaba mucho de nosotros pero... No vino más, sabes a lo que me refiero.

—¿Murió?

—Si, pero te no recomiendo hacerle preguntas de su vida personal... Son temas muy duros para el, su madre y Nick murieron hace dos años más o menos.

—Es muy reservado, lo más personal que sabemos es su apellido.

—¿Quien es Iris?—La voz de Alessia dominó la habitación otra vez.

—La novia de Finn por así decirlo, es muy especial para nosotras cuando los chicos se tatúan algo en relación a nosotras, Wyatt se tatuó un fuego por Sophia.—Millie explicó.

—¿Finn ya se tatuó algo para ella?

Todos negaron mientras reían haciendo sentir a Alessia insegura de eso, ¿Finn ya se había tatuado entonces? Trató de recordar si en algún momento vio algún tatuaje en el.

—¿Wolfhard?—Noah carcajeo.—Jamás se tatuaría algo por Iris, ¡Es un virgen!

Exclamó provocando el silencio de sus contrarias, o al menos el de Alessia y Millie pues Sophia estaba haciendo un esfuerzo sobre humano para no reír de lo mal que eso había sonado.

—...De tinta.—Aclaró Noah refiriéndose a los tatuajes.

La cabeza de Alessia fue a otro lugar en ese momento, ¿Por qué no? Si estás con alguien es porque lo amas, Wyatt ama a Sophia y por eso lo hizo a pesar de qué tal vez no era un para siempre. Tal vez Finn se tatuaría en algún momento y de alguna manera le alegraba estar ahí para verlo.