Estaba apenas escuchando al profesor y su explicación de no sé qué guerra mundial. Mi padre me obligó a ver con él los últimos capítulos de "Breaking Bad" y luego estuve otra media hora consolándolo por el final. Con suerte pude dormir tres horas.

- Disculpe profesor. -Un chico entra a la sala con un papel.- Necesito a la alumna Morgan, ¿puede salir de la sala?
- Morgan, puedes salir, y despierta. -Dice el profesor a lo que todos ríen.-

Me levanto como puedo y sigo a los chicos.

- Hola, me presento soy...
- Si, si, si sé. Del grupo de química. ¿Eres el nuevo presidente?
- No, el presidente está hablando con un invitado.
- Ah claro.

Todos los años era lo mismo. El primer año me invitaron a incluirme al grupo de química, pero prefería hacer mis cosas. Luego me sobornaban para que mi padre les hiciera clases, creo que estaban algo enamorados de él.

Cuando llego al laboratorio de química, mi mente se queda en blanco.
¿Que hacía el horrendo, idiota, egoísta e hijo de puta de mi ex ahí?

- ¿Que hace el ahí? -Pregunto rápidamente.-
- Hola. -Andrés sonríe.- Ha pasado tiempo Julieta ah, ¿como estás?
- ¿Para que me llamaron?
- Bueno, hola. -Un chico aparece y me sorprende que sea lindo y esté en este grupo.- Soy el nuevo presidente del grupo de química. Bueno... Andrés quiso estar en este nuevo proyecto y...
- No me digan, ¿quieren una cita con mi padre?
- Si. -Dicen todos y se arrodillan, excepto el presidente y el idiota ese.-
- Una palabra. ¡No!

Me cruzo de brazos y sonrío, esto es tan satisfactorio.

- Pero... ¿Por qué no? -Dice el chico lindo, algo triste.-
- Por el simple hecho de que Él. -Indico a Andrés.- Esté aquí.

Todos miran a Andrés y él se acerca un poco a mi.

- Vamos Julieta... Separa las cosas.
- No es por eso. Pero digo... Si eres tan inteligente, ¿porque necesitas la ayuda de mi padre?

Todos miran nuevamente a Andrés y él me mira algo molesto.

- Recién estoy empezando.
- Si, pero ya te crees el dios del mundo. -Miro a los demás chicos.- Mi respuesta es NO. O lo sacan, o él es su mente maestra. Volveré a clases.

Me voy mas que feliz luego de verle la cara a ese idiota, pero antes de entrar a clases, alguien toma mi brazo. Era el chico presidente.

- ¿Que pasa? -Le digo.-
- No me presenté, lo siento.
- Ah... Mmm no te preocupes.
- No. Soy Peter.
- Mucho gusto, soy...
- Julieta, lo sé. Admiro mucho el trabajo de tu padre y ... A ti.
- ¿A mi? -Pregunto extrañada.-
- Sí, sé que eres muy inteligente, y lo siento mucho por lo de Andrés, mis compañeros insistían.
- No te preocupes, el chico sabe lavar bien los cerebros.
- Prefiero el apoyo de tu padre, que el de él. Hablaré con ellos.
- Está bien.

Le sonrío y él se pone nervioso. Es una ternura, ¿acaso alguien en estos días se sonroja cuando le sonríe una mujer?
El chico me mira a los ojos, toma mi mano y la besa suavemente.

- Que tengas un lindo día.

El chico se va y yo quedo con la boca abierta. ¿Enserio? ¿Un beso en la mano?

Cuando vuelvo a clases, ya están por salir a hora de almuerzo. Ahí les cuento todo a Mia y Mateo.

- Ese idiota de Andrés... -Dice mi amigo mientras se ve las uñas.-
- ¿Estás bien? -Me pregunta Mia.- Te veo algo extraña.
- Solo tengo un poco de enojo, pero lo que me tiene mas extrañada, es el nuevo presidente del club de química.
- ¿Por qué? ¿Es guapo? -Pregunta Mateo.-
- Pues...sí, y eso es algo extraño, aparte dijo que me admiraba y se despidió con un beso en la mano. ¡En la mano!
- ¡Le gustas! -Dicen ambos.-
- Ay vamos... Creo que se llama Peter, si eso me dijo.
- Pfff, a ese chico le gustas desde que llegamos. -Dice Mia, mientras come su almuerzo.-
- ¿Qué? -Pregunto sorprendida.-
- Si, recuerdo que me había gustado su amigo, y en unas cuantas de las veces que lo perseguía, escuche que a Peter le gustabas tú. Es un muy buen chico.
- Pero ya ha pasado tiempo...
- ¡Ay por favor niña! -Mateo me mira.- Ese tipo de chicos siempre estarán enamorados en secreto de la misma persona, milagro que te pudo hablar.-
- Que adorable...

La verdad es que si parecía un buen chico, pero aún tenía pequeños rastros de odio por Andrés y eso tal vez significa que aún no estaba del todo superado, y por lo mismo, no podía estar con otra persona.

Nunca le tuve miedo a las relaciones, pero cuando estuve con Andrés, todo cambió y una se vuelve miedosa, celosa y cuantas cosas más. Lo bueno después de tener una relación larga, es que aprendes mucho y la siguiente relación va mas lenta, es mas inteligente y creo que se disfruta más, ya que no te ilusionas tanto.

Después del colegio, me voy al trabajo. Hoy no hay tanta gente, pero siempre hay trabajo, los adolescentes no le dan descaso a este pobre lugar.

- Lo conseguiste eh.

Me doy vuelta y veo a Andrés bastante molesto.

- ¿Que conseguí qué?
- El estupido de ese nerd me sacó del proyecto. Era obvio, te ama desde que empezamos de novios.
- Pues el chico es bastante inteligente...
- ¡Eres tan odiosa!
- Si quieres pelear, hazlo solo. Estoy trabajando.
- ¡Egoísta!
- ¡Ja! ¿Egoísta yo? No me provoques idiota.

Estaba respirando profundamente y de la nada aparece Peter y se pone delante mío.

- No es necesario pelear.
- Mejor me voy de aquí.

Andrés sale furioso y Peter se da vuelta.

- ¿Estas bien?
- Si, gracias. ¿Que haces aquí?
- Venia a darte la noticia... Pero creo que él se me adelantó.
- Te dije que era un idiota.
- Lo es...
- Mmm ¿te sirves algo?
- Mmm claro, ¿tienes cerveza de miel?
- Tú... ¿Bebes?
- Si. -Él se ríe.- No soy un nerd, solo me gusta lo que hago.
- Eso es bueno, la traeré enseguida.

Después que le entrego la cerveza a Peter, veo como alguien se sienta en frente de éste y Peter lo mira extraño. Era Adam.

- Hola ojitos.
- ¿Que haces aquí?
- ¿Así atiendes a todos tus clientes?
- Solo a los idiotas. Peter, solo échalo.
- ¡Ey! Solo vine agradecerte por la hora con tu padre.
- Recuerda que no es gratis.
- Lo recuerdo muy bien. -Me guiña el ojo y luego se dirige a Peter.- Dime, ¿desde cuando te gusta ojitos?
- ¡Que! -Peter tose por la cerveza y luego mira a Adam.-
- Vamos... Es cosa de ver como la miras. Ojitos, no tenía idea de que tenías fans.
- ¡Cierra la boca!
- Debes tener una paciencia infinita eh. -Adam se dirige a Peter.- Ojitos no es nada agradable.
- Soy agradable con quien quiero, Adam ya vete.
- Ok, ok.

Adam levanta sus manos en forma de rendición. Luego se acerca a mi y pone un mechón de cabello detrás de mi oreja. Lo miro algo extraño, ya que sentí...algo extraño.

- Tienes loco al chico, se le nota. Bueno, nos vemos.

Le mueve la mano a Peter, luego de beber un poco de su cerveza sin permiso y luego me guiña el ojo. Idiota.

- ¿Quién era el? -Pregunta Peter.-
- Un drogadicto al que ayuda mi papá. -Peter abre sus ojos por mi sinceridad.-
- Parecen ser amigos.
- Si claro...

Pongo los ojos en blanco y sigo trabajando. De lejos veo un grupo de chicos universitarios y un castaño llama mi atención, es guapo.
A las dos horas después, mi madre me manda un mensaje y me avisa que le lleve chocolate, unos de sus cuantos antojos.

Salgo del trabajo y Peter me estaba esperando.

- Es que... No quiero que te vayas sola.
- ¿Que tienen los hombres con eso? Puedo caminar...
- Oh... Lo siento.
- No te preocupes, suelo ser así con toda la gente. Digamos...algo sincera y sin filtro.
- Me gusta. -El chico sonríe.-
- Dime Peter, ¿yo te gusto?
- ¡Que! -El abre sus ojos y noto que se pone nervioso.-
- Si, eso.
- Bueno...
- Tranquilo, solo dilo. No seré pesada.
- Pues sí, me gustas.

Lo miro un poco y suspiro.

- Debes tenerme paciencia, soy pesada, no muy señorita, impulsiva y a veces bastante enojona.
- Lo sé, te conozco. Al menos desde afuera y... Solo dices las cosas negativas y no me molestan.
- Hablaré con mi padre.
- Gracias, y ¡oye!
- ¿Si?
- ¿Podríamos salir algún día?
- Puede ser.

Le sonrío y me voy a mi casa. Creo que no estará nada de mal en conocer a un chico nuevo. Soy joven y libre.
Además... Andres idiota.