RESUMEN DEL CAPITULO (como antes hacia,creo, voy a poner casi siempre un mini resumen de cada capitulo, espero sea de su agrado)

Izaya Orihara se encuentra con un bebé chillón pero pequeño en el callejón. Por alguna razón, no puede simplemente dejarlo allí solo.

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hola- hablar

hola- pensar

(comentarios de su autora)

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"Puede parecer de sangre fría, pero es más humano y su corazón más frágil que cualquier otra persona". Tanto que si lo llenas de amor o traición, se romperá fácilmente. Por eso decidió evitarlo desde el principio ... ¿Entiendes?

-Durarara Volumen 13

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La lluvia golpeaba violentamente contra su paraguas, cayendo sobre la acera y el concreto a su alrededor también. Izaya escuchaba los sonidos en silencio, su capucha difusa cubría su cabeza y su chaqueta se abrochaba lo más que podía, protegiéndola del aire frío. Orihara Izaya resopló molesta, cansada de un largo y agotador día de trabajo para Shiki. Por supuesto, su jefe tuvo que elegir el día más frío del mundo para hacerla caminar de ida y vuelta.

Incluso con la lluvia fría, algunas personas todavía estaban fuera de todos modos. Aunque la mayoría de ellos parecían estar haciendo lo mismo que Izaya, yendo a casa lo más rápido que pudieron. Eso era lo que quería hacer también, afortunadamente, ya casi había llegado. Ah, qué tan frenéticos serían los humanos cuando cambiara algo que no les gustaba.

Izaya se rió levemente, una sonrisa forzada apareció en su rostro. Ah, sus humanos eran tan divertidos ... Izaya no pudo evitar escuchar los gruñidos que parecían escaparse de tantos de ellos.

Pero fue entonces cuando un ruido diferente capto su atención. No era el ruido de la lluvia, los pasos de las personas o las voces enojadas de los adultos. Era algo mucho más pequeño, mucho más estridente. Captó las sensibles orejas de Izaya, y envió su curiosidad en espiral.

Izaya se movió más cerca de los edificios, caminando más despacio mientras se encontraba siguiendo el ruido. Los agudos sollozos la llevaron frente a un callejón, donde parecía hacerse más ruidoso y más frenético. Los ojos rojos de Izaya se entrecerraron sospechosamente, sus ojos buscando cualquier cosa fuera de lugar. Al principio, no vio nada.

Pero luego, algo se movió.

Era un trapo sucio y empapado en el suelo. Parecía estar cubriendo algo voluminoso, que luchaba por liberarse de la manta. Izaya miró por un momento, antes de cruzar hacia el callejón y sostener el paraguas sobre ese bulto.

La cuerva (siempre pensé que Izaya también puede ser representado como cuervo) se arrodilló, lista para cualquier cosa, mientras levantaba la manta húmeda para mirar debajo. Lo que vio la hizo dudar por un momento, antes de tirar la manta a un lado. Cayó al suelo con un chapoteo mojado, y los agudos gritos se detuvieron.

Fue un bebé. Una cosa pequeña con el cabello mojado y oscuro en un viejo y desgarrado camisón que estaba tan empapado como la caja en la que el bebé estaba acostado. Su pequeño cuerpo parecía tener algunos moretones también. Su llanto se había detenido, y sus llamativos ojos azules parecían mirar directamente al alma de Izaya. Pero el niño no olfateó, ni siquiera gimió, simplemente continuó mirando a Izaya con curiosidad.

Izaya miró al bebé, inclinando la cabeza hacia un lado. No había identificación en el bebé, ni siquiera un nombre. El niño probablemente fue abandonado en este callejón por alguien, posiblemente hace unos días, posiblemente hace unas horas.

-Qué voluble puede ser la raza humana- dijo Izaya al bebé, que le devolvió la mirada en silencio- No has hecho nada malo, pero pareces ser el único castigado. Es la extraña forma en que la sociedad funciona, siempre es bastante interesante ver quién terminará siendo el chivo expiatorio.

El niño no respondió, e Izaya continuó- Verás, los humanos que están desesperados siempre parecen estar dispuestos a hacer cualquier cosa para obtener lo que quieren o piensan que necesitan. Algunos de ellos incluso lastimarán a seres inocentes como animales o bebés como tu. Criaturas que no han hecho nada para merecer tal dolor, sino que simplemente obtienen el extremo más corto porque son vistos como más débiles, fácilmente manipulables y fáciles de eliminar. Es triste decirlo, es bastante cierto en la mayoría de los casos.

Las pequeñas manos del bebé parecían cerrarse en puños, se relajó en la caja en la que estaba y lentamente cerró los ojos. Izaya simplemente lo miró.

-Veo las marcas en tus brazos, probablemente también en otras partes. Creo que tu madre probablemente era una tonta humana, que deseaba disfrutar de los placeres antes de darse cuenta de sus errores. Los humanos hacemos eso todo el tiempo, realmente hilarante de verdad. Ella no pudo abortar, entonces ella te tuvo y luego te dejó. Es extraño ver a una madre ignorar tan fácilmente a una persona de su propia carne y sangre. Pero, de nuevo, ningún humano puede vivir una vida honesta- dedujo Izaya

Izaya se puso de pie, notando cómo los ojos del niño parecían abrirse, mirándola con confusión.

-Parece que el destino te ha dado una mano cruel, y aunque normalmente me meto con el destino, pero parece que ahora no me importa, tal vez sería mejor que una criatura inocente como tú siguiera adelante, en lugar de ser como todos esos otros humanos tontos. Los quiero mucho, pero todos están hastiados. Tal vez si hay un cielo, terminarás allí- dijo Izaya al bebé, quien comenzó a soltar ruidos frenéticos.

Izaya no le prestó atención. El bebé no era su problema, no era su bebé. Si el mundo quisiera que el bebé muriera, ¿por qué debería importarle?

El llanto violento y estridente del bebé explotó repentinamente otra vez. Nadie estaba en la calle para escucharlo, sin embargo, todo pareció disminuir para Izaya. Con las piernas detenidas, no parecía poder moverse. Era como si el llanto del niño la estuviera bloqueando para que no se fuera.

A Izaya nunca le habían importado los niños, pero este chillido estridente arañaba su pequeño corazón negro y le recordaba a sus hermanitas. Pero eso no era lo único que la llamaba. Era algo profundo, algo interno, algo muy profundo dentro de ella que parecía incapaz de alcanzar.

La sensación era extraña, pero le decía ... no, exigió que no se fuera. Izaya volvió la cabeza, mirando la lluvia que caía sobre el lloroso bebé. Cuando sus ojos azules vieron a Izaya mirándolo, soltó un sollozo borbotado y extendió una pequeña mano para ella.

Esa sensación arañó su corazón otra vez, e Izaya no pudo detenerla. Dio media vuelta, caminando rápidamente hacia el bebé. Una vez que regresó, la respiración del bebé se calmó, y dejó escapar un gorgoteo tranquilo.

Izaya lo miró fijamente, antes de dar una sonrisa torcida.

-Creo que si supieras quién soy en realidad, cariño, no estarías tan aliviado de que regrese- dijo Izaya con cariño maternal, antes de extender la mano para recoger al bebé

El niño estaba empapado y temblaba violentamente. Izaya frunció el ceño, notando sus labios ligeramente azules. Luego, la cuerva retiró su mano, haciendo que el bebé gimiera nuevamente y extendiera la mano.

-En un momento- declaró Izaya- te pondré mi chaqueta, luego puedo llevarte a servicios para niños, ellos pueden cuidarte desde allí....

Un súbito y violento estallido de trueno y trueno causó que Izaya y el bebé saltaran, y la pequeña cosa en la caja chilló de miedo con los aulladores vientos. Izaya repentinamente tuvo una segunda idea de caminar en este clima.

Con un suspiro exagerado, Izaya abrió la cremallera de su chaqueta, dejando el paraguas por un momento antes de levantar al bebé con ambas manos. Colocó al pequeño y demasiado ligero bebé en su chaqueta.

(Bueno olvide mencionar que Izaya usa unos vendajes para ocultar su pecho y un corcel para evitar que se note abultado, por lo que se los quita cuando no tiene nada que hacer, también con unas pequeñas binchas negras oculta el largo de su cabello el cual le llega hasta la cintura, esa apariencia es la que tiene ahorita que recogió al bebe)

Apoyó al bebé con una mano, se subió la chaqueta y recogió su paraguas otra vez.

Ahora su paraguas se había ido.

-Genial, esto es simplemente genial- gruñó Izaya, encontrando que su enojo estaba creciendo. Suspiró, usando su mano libre para tirar de la capucha hacia abajo antes de ponerse de pie. Usó ambas manos para sostener al bebé, y caminó tan rápido como pudo hacia su penthouse.(creo que después escribo mejor solo departamento)

Cada golpe de rayo y trueno envió al bebé a otro ataque de llanto, e Izaya le palmeó la espalda tan suavemente como pudo. Se dijo a sí mismo que la sensación de enojo en su pecho se debía a los fuertes ruidos de los relámpagos y los gemidos del bebé, y no al hecho de que estaban asustando al bebé. Eso no fue todo, en absoluto.

Izaya finalmente llegó a su casa, su propia chaqueta ahora empapada, con una agradable mancha húmeda del bebé empapado. Gracias a Dios Namie no estaba aquí, no necesitaba escuchar sus comentarios sarcásticos en este momento.

Cerrando la puerta, Izaya bajó la cremallera de su chamarra mientras subía las escaleras. Usando una mano, sostuvo al bebé cerca y se quitó la chaqueta con habilidad. El bebé todavía estaba temblando, e Izaya suspiró.

-Está bien, no puedes quedarte en ese ropas viejas y andrajoso, me preocupa que ...- dijo Izaya dándose cuenta que parecía una madre cuidando de su bebe, se aclaro rápidamente- No quiero despertar con un bebé muerto.

El bebé simplemente la miró, sin dar la impresión de haber lloraro antes, mientras extendía sus pequeñas manos y soltaba algunos ruidos de gorgoritos.

Izaya lo ignoró, colocando al bebé en la cama y quitándole el mono. Debajo había muchos hematomas, lo que le devolvió la emoción a su corazón. Izaya frunció el ceño ante el cuerpo del bebé por un momento, antes de sacudirse la sensación. No, ella no sintió nada en absoluto.

Después de eso, la nariz de Izaya de repente captó el olor del pañal.

-¡Oh Dios, eso es rancio!- exclamó, tropezando hacia atrás y levantándose la camisa sobre la nariz. Los ojos azules del bebé lo miraron fijamente, antes de reírse de la reacción de Izaya.

-No te rías, es repugnante, ¡no gracioso!- exclamó Izaya, intentando deshacer el pañal. Le tomó varios intentos dolorosos, y fuertes gemidos tanto de Izaya como del bebé. Pero una vez que el desagradable y desbordante pañal fue quitado y tirado en el cesto más cercano, Izaya pudo ver el desagradable sarpullido en el inferior del niño.

Izaya frunció el ceño y dijo- Eso necesita aire, seguro.Pero al menos ahora sé con certeza que eres un niño- el niño tembloroso la miró, e Izaya frunció el ceño, sin saber realmente qué hacer- ¿Qué? ¡No tengo ninguna ropa de bebé!

El bebé comenzó a arrastrarse sobre la cama, gimoteando de nuevo.

-¡Bueno! ¡De acuerdo!- exclamó Izaya- ¡pensaré en algo!

Refunfuñando, Izaya recogió al bebé y caminó hacia la cómoda. Luego sacó dos de sus camisas negras de manga larga. Tomó uno, y lo colocó alrededor del bebé. El niño parecía que se estaba ahogando en la tela, pero al menos ya no estaba desnudo ni frío. Izaya se puso su propia camisa y arrojó la otra al suelo. Estaba demasiado cansada para preocuparse de eso.

Izaya observó al bebé bostezar, frotándose los ojos. Mierda, ¿dónde pondría al bebé a dormir? Ella no quería compartir la cama, eso no podría funcionar ...

Izaya regresó al tocador, revolviendo toda su ropa para hacer un pequeño nido, usando dos camisas como manta. Esto podría funcionar por una noche, ¿verdad? Sí, por supuesto que podría.

Izaya fue a dejar al bebé, pero sus pequeñas manos se aferraron a la camisa de Izaya y se negaron a soltarla. Izaya no quería lastimar al niño, pero trató de usar un poco más de fuerza. El bebé dejó escapar un fuerte ruido de rechazo, lloriqueando y apretando más fuerte.

-Escucha, tengo trabajo que hacer, no puedo abrazarte contra mi pecho, ¡necesito trabajar con ambas manos esta noche!- declaró, tomando su camisa en sus manos y tirándola de la del bebé.

El bebé dejó escapar un grito estridente y agudo, y frenéticamente agarró la camisa de Izaya otra vez. Izaya entró en pánico por el fuerte ruido y retrocedió tambaleándose, sentándose en la cama.

-Woa whoa, hey, shhh- susurró Izaya rápidamente- Por Dios, bien, puedes quedarte. Todavía tengo que trabajar, no estoy cansada- tirando del bebé hacia adelante y dejándolo agarrar su camisa. El bebé luego enterró su rostro contra el pecho de Izaya, con los ojos cerrados. Después de unos minutos, el cuerpo del bebé se desplomó contra ella, completamente dormido.

Izaya se encontró bostezando también. No estaba cansada hace unos minutos ... Tal vez fue por todo lo que acaba de pasar. Por lo general, Izaya simplemente ignoraba su falta de sueño o pretendía que no estaba allí. Pero mirando al bebé dormido contra su pecho, Izaya sintió que su agotamiento se arrastraba hacia arriba.

Tal vez podría dormir ... De esa forma no estaría tan cansada mañana, y también podría vigilar al bebé.

-Mañana ... iremos a los servicios para niños. Y me desharé de ti, y puedo volver a mi vida normal- farfulló mientras dormía. Luego dormía sobre sus sábanas, con las piernas colgando, y un bebé agarrado a su pecho.

Poco sabía Izaya, que gracias a este pequeño bebé, su nombre nunca volvería a ser el mismo y su secreto sera revelado.

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Tarō Tanaka se unió al chat

Setton: ¡Hola Tanaka!

Sakia: Hola

Bakyura: ¡Por fin! ¡Te estábamos esperando!

Tanaka: ¡Lo siento! Estaba leyendo sobre la tormenta que se supone que golpea

Tanaka: ¡ Se supone que es la mayor tormenta de nieve que Tokio haya visto!

Bakyura: Espero que nadie tenga planes importantes, ¡todo estará cerrado!

Saika: Bakyura tiene razón, espero que nadie lo haya hecho

Bakyura: Oh, hablando de planificación. ¿Ha estado Kanra hoy?

Setton: ¿No era ella la que quería charlar esta noche?

Bakyura: ¡ Heh, probablemente fuera difundiendo chismes o causando problemas!

Tanaka: ¡ Bakyura-kun, eso no es bueno!

Saika: Probablemente sea cierto ...

-Modo privado-

Bakyura: Mikado, ¿sabes si Izaya está tratando de comenzar algo?

Tanaka: Um ... No lo sé en realidad.

Tanaka: Ha estado fuera por casi una semana, nadie lo ha visto

Bakyura: ¡ Ese bastartdo! ¡Él va a hacer algo otra vez! Lo juro-

Tanaka: Masomi-kun, la nieve apagará los trenes

Tanaka: La única forma en que podría llegar a Ikebukuro es caminar, ni siquiera Izaya está tan loco

Bakyura: ...

Bakyura: Bien, pero si hace algo, no dudaré en detenerlo

- Bakyura ha dejado la conversación -

- Salir del modo privado -

Bakyura: Bueno, me tengo que ir, esta noche tenemos una olla caliente

Setton: ¡ Qué gracioso, yo y Saika también! ¡Que te diviertas! Debería ir a prepararme

- Setton dejó la sala de chat -

Saika: voy a cenar con Setton, adiós chicos

- Saika ha salido de la sala de chat -

Bakyura: Recuerda lo que te dije, están tramando algo, algo peligroso. No podemos dejar que se salgan con la suya, lastimarán a más personas

Tanaka: Lo sé, lo haremos

Bakyura: Será mejor, o lo haré yo mismo. Ten una buena noche

- Bakyura ha salido de la sala de chat -

- Taro Tanaka ha salido de la sala de chat -

- La sala de chat está vacía -

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Mikado miró su pantalla con el ceño fruncido. ¿Masomi estaba en lo cierto? ¿Podría Izaya hacer algo? Tal vez, él (recuerden no saben que es mujer) había estado realmente callado, y cada vez que Ikebukuro estaba en paz, algo malo iba a suceder.

-Quizás debería investigar un poco, solo para estar seguro. Después de todo, cada vez que Izaya-san estaba callado, siempre tramaba algo oscuro y peligroso- dijo en voz alta

Mikado resolvió preocuparse por eso mañana, apagando la pantalla de la computadora y gateando hacia su futón. Se enterró profundamente en las sábanas, sabiendo que necesitaría toda la calidez que tendría si la tormenta de nieve era tan mala como las noticias predijeron.

Él seguramente esperaba que nadie tuviera planes importantes mañana ...

LISTO PRIMER CAPITULO ESPERO LES GUSTEN AQUÍ ESTA NO SE CUANDO ACTUALIZARE PERO DEJEMOLOS ASÍ.

COMO MUJER

COMO HOMBRE

IZAYA ES HERMOS@