Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 3

Las oficinas de los Kim, ocupaban varios pisos de aquel enorme edificio. Pero Namjoon le había indicado que debía ir al piso 22. Ahí estaban las oficinas del directorio y la gerencia. Su padre lo dejó a la entrada y Jungkook movió su silla de ruedas, para entrar al edificio y tomar el ascensor.

Seokjin estaba en su oficina, ultimando los detalles de la última parte de la presentación que Yoongi, el gerente comercial de Inversiones Kim, presentaría a un selecto grupo de inversores extranjeros que buscaban una empresa. La competencia sería contra los Kang, naturalmente.

Sintió el aroma del alfa, que discutía con Taehyung, afuera de su oficina. Algo no estaba bien, lo podía percibir. Y tuvo la confirmación cuando ambos alfas entraron muy serios a su oficina.

—Seokjin, tenemos un problema grave—Yoongi, venía con su rostro caído. Sabía lo que vendría. El día anterior, le había asegurado a su jefe que todo estaba bien y se había ido de fiesta.

—¿Qué sucede? —Seokjin pudo notar la mirada demasiado tensa de ambos alfas, además su olor se estaba volviendo acido.

—Hoy, al llevar las fórmulas y cifras para la presentación al simulador, éste arroja un error. He revisado una y otra vez que sucede, pero no logro descubrirlo y Tae tampoco—. Yoongi estaba muy nervioso. Era su responsabilidad tener las cifras correctas, pero no se había tomado el tiempo para revisar y confiado se había ido a tomar esos tragos.

—¿Por qué esperaste hasta ahora para revisarlo? ¡Eres un maldito irresponsable Min Yoongi! Tae llama a Namjoon, y tú —se dirigió otra vez a Min—,muéstrame el archivo con las cifras.

Seokjin miraba una y otra vez los datos, pero tampoco lograba entender dónde estaba el error. Namjoon había entrado y tampoco podía descifrarlo. Era muy inteligente, pero las inversiones bursátiles no eran su especialidad.

La desesperación se apoderó de ellos. No podrían presentarse a la reunión y los Kang se llevarían a esos importantes inversionistas extranjeros.

Mientras todos discutían, un intenso aroma a flores de cerezo, comenzó a inundar la oficina de Seokjin, que sentía como su lobo se alertaba y comenzaba a moverse de un lado a otro. Era un olor muy agradable, intenso y que hacía galopar su corazón.

—¿Qué es ese olor? —interrumpió Jin, dejando a un lado la pantalla.

—¿De qué hablas hyung? —Tae lo quedó mirando asombrado.

En ese momento la puerta se abrió y el aroma golpeó todavía más las fosas nasales de Seokjin. Un sentimiento profundo lo embargó. Su alfa se había vuelto loco.

—Lamento interrumpir señor—la secretaria de Seokjin había entrado, pero estaba seguro que Sue-Lyn no tenía ese aroma. Era una alfa —, pero un joven dice que tiene una entrevista con usted...

—¡Es Jungkook! —gritó Namjoon y antes que cualquiera reaccionara, salió de la oficina y se encontró con el omega. Apenas lo saludó y lo empujó hacia la oficina de Seokjin.

—Jungkook, lamento no darte una apropiada bienvenida, pero tenemos un tremendo problema y estoy seguro que tú puedes ayudarnos.

Todos se voltearon a la entrada. Tae y Yoongi, miraban sorprendidos al chico que había entrado. Estaba en una silla de ruedas...un beta seguro, pues no tenía olor.

Seokjin, miraba incrédulo al omega. Ahora entendía, ese muchacho era el que olía a flores de cerezo. Ese aroma que había vuelto loco a su alfa y que despertaba en él sentimientos que nunca imaginó podría sentir. Lo supo enseguida. Ese omega, varón e inválido era su pareja destinada.

—Seokjin-hyung, él es Jeon Jungkook, el joven del cual te hablé. Estoy seguro que nos puede ayudar, si tú lo permites.

Jungkook seguía sin entender y se sentía muy incómodo al estar sólo rodeado de alfas. Sabía que ninguno podía percibir su aroma, pero podía percibir sus reacciones. El alfa bajito con ojos de gato lo miraba con hostilidad, el alfa de ojos grandes, con curiosidad, Namjoon con una sonrisa y el último alfa...Seokjin lo miraba... realmente no podía descifrar su mirada. Era como si pudiera leer tantas emociones al mismo tiempo en sus ojos. Realmente era un hombre hermoso, pensó, y su nerviosismo aumentó.

—¡Hyung, Jungkook nos puede ayudar!

—L-lo siento—. Todos miraban extrañados a Seokjin. Estaba titubeando y nervioso. Seguro era por el problema que tenían-Soy Kim Seokjin, mi hermano me habló de ti —trató de al menos en ese momento olvidar lo que había descubierto— ¿Nos podrías ayudar con algo? —le extendió la laptop y le explicó el problema—un cúmulo de sentimientos se agolpaban en ese momento en su interior. Su alfa olfateaba desesperado el dulce aroma del omega, pero algo lo inquietaba. Seokjin trató de calmarlo y calmarse.

Jungkook miró los datos, por varios minutos, hasta que una sonrisa asomó en su rostro. Había encontrado el error.

—Ya sé lo que está mal—se alimentaron mal las estadísticas de intereses en el simulador. Si lo corriges así y cambias esto—tecleaba rápidamente—se arreglará—devolvió la laptop hacia Seokjin—. Ingrese de nuevo sus datos al simulador.

Seokjin y todos se mantenían expectantes, cuando el alfa hizo lo que el omega le había pedido y ¡Sí! La información estaba perfecta. Estaba realmente asombrado. Ninguno de ellos había visto el problema y el joven en unos minutos lo había resuelto. Vaya que si era inteligente.

Toda esa sorpresa fue interrumpida por Taehyung, quien indicó que aún tenían media hora para llegar a la reunión con los inversionistas y competir de igual a igual con los Kang.

—Vete Yoongi. Llévate esta información y consigue ese negocio, si quieres seguir siendo parte de este. A tu regreso conversaremos.

Yoongi hizo un gesto de molestia, especialmente porque Seokjin le hablaba así, delante de ese beta inválido. Porque podría haber tenido un poco de suerte con haber encontrado la solución que él tanto había buscado, pero no dejaba de ser un ser inferior.

—¡Jungkook!, vaya manera de empezar...no sabes cómo te agradecemos tu ayuda. Ahora quiero presentarte—apuntó a Seokjin que no lograba sacar la vista del omega, mientras trataba de calmar a través de sus pensamientos a su alfa que seguía oliendo ese encantador aroma a flores.

—Mi hermano y socio de Kim Inversiones, Kim Seokjin—Jungkook miró a Jin e inclinó su cuerpo para saludar.

—Es un honor conocerlo, me llamo Jeon Jungkook.

Seokjin quería salir huyendo. No podía creer lo que le estaba sucediendo. No podía creer que el destino le jugaba así. Por años había alejado toda posibilidad de encontrarse frente a ese omega. Y ahora..., lo tenía ante sus ojos. Se preguntaba si Jungkook también lo había reconocido. Parecía que no, porque estaba demasiado calmado.

Recordó entonces que su hermano le había dicho que su lobo no estaba bien. Eso era un alivio.

Taehyung, al ver que Seokjin había entrado en una especie de trance, del cual al parecer no pretendía volver, intervino.

—Mucho gusto Jungkook. Mi nombre es Kim Taehyung—al ver de cerca el rostro del omega, lo entendió, pero al igual que su amigo, intentó ocultar su sorpresa —. Soy el asistente de Seokjin. Realmente fue impresionante eso que hiciste hace un momento. Me alegro que vayas a trabajar con Namjoon-hyung.

El alfa iba a intervenir, pues se daba cuenta que Seokjin no diría nada más y que a pesar de lo que había ocurrido recién, no iba a darle una oportunidad al joven omega. Así es que se lo llevaría a su sección. Pero antes que pudiera decir algo, Seokjin habló.

—No Taehyung, Jungkook viene a trabajar con nosotros, sólo...sólo les pido que me dejen a solas con él un momento. Haré la entrevista que prometí.

Ambos alfas se mostraron sorprendidos, pero sin más salieron de la oficina. Namjoon le indicó a Jungkook que luego fuera a su oficina, para conversar un rato. Seokjin no supo por qué o más bien lo sabía perfectamente, pero lanzó un gruñido a su hermano, quien frente a esa reacción sólo sonrió. Él conocía ese sonido. También lo hacía cuando algún alfa se acercaba demasiado a Chi Yeol. Taehyung también lo percibió y miró con sorpresa a su amigo, pero entendía su reacción.

Seokjin se sonrojó e internamente reprendió a su lobo.

Una vez que quedaron solos, Seokjin llamó a su secretaria y le pidió un café, además de preguntarle a Jungkook si deseaba algo, aceptando también un café. Luego de eso y al sentir que su lobo no se calmaba, le pidió al omega que lo disculpara un minuto. Entró a su baño privado y se miró al espejo.

Jungkook agradeció el café que la secretaria le había traído y mientras esperaba al alfa su corazón no dejaba de bombear aceleradamente.

Pudo sentir cómo su lobo se había estremecido, aun cuando seguía dormido. Pero había temblado un poco al escuchar la voz de Seokjin. Probablemente se debía al rechazo que éste tenía hacia los omegas. Tal vez su lobo inconsciente lo había percibido. Estaba nervioso. Había sido muy afortunado al llegar en el momento correcto y haber podido demostrar de lo que era capaz. Tal vez con un poco de suerte podría quedarse a trabajar con él y no ir con Namjoon.

Seokjin seguía mirando su rostro en el espejo. Se sentía confundido. No podía creer lo que le estaba pasando. Se había confiado cuando Namjoon le dijo que el omega estaba inválido. Eso no encajaba en la descripción...sin querer su mente volvió a revivir aquel horrible día.







Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro