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Capitulo 4

-Comiste bien?

-Si, pero han empezado a ser más intensas las náuseas... y duermo demasiado.

-Apenas va semana y media, se que puedes con esto, pero... no tengas miedo en pedir mi ayuda.

Hubo un silenció y Oikawa se preocupo, pensó que había dicho algo incomodo o que talvez Hinata se sintió mal, estaba algo ansioso desde que se separaron y a veces era más intenso.

-Te extraño...- contestó en apenas un susurro.

El alpha quedo sorprendido ante las palabras del menor, le escucho casi indefenso y se sintió horrible. Quería estar con él lo antes posible, es como si el embarazo hubiera cambiado algo en él, Hinata había pasado a ser su prioridad.

Era cierto que le tenia apreció y que claramente le atraía físicamente, pero sentimentalmente? No se lo había planteado, pero ahora con todo esto, es como si se hubiera saltado un gran paso y ahora todo llegaba de golpe.

-Estare ahí pronto- fue lo único que pudo contestar y aunque no era lo que el omega esperaba, estaba satisfecho.

-No te preocupes, en serio estamos bien.

El castaño se sonrojo al escuchar al omega hablar en conjunto de su bebé, se sentía tan conmovido y complacido. Hinata sería un gran omega, estaba orgulloso porque sabia que estaba protegiendo a su cachorro... como alpha se sentía en un sueño.

-Aun estas bien con la ropa que te di?

-Si... tu aroma sigue en ellas.

-Si necesitas algo más, puedo llamarle a mi madre y que te de algo de lo que queda en su casa...

-Y que se supone que le dirás?- escuche su risa y sonreí por inercia- que un omega quiere su ropa? No sospecharia algo?

-Puedo decir que estoy regalando mis cosas o algo así... o quieres que le de la noticia desde el telefono?

-Le diras?- se sorprendió.

-Pues claro... es mi madre y va a ser abuela- se burlo un poco de la reacción de Hinata y siguió- o quieres que se enteré por las noticias?

-Sólo... no me lo esperaba- se escucho mucho mas tranquilo.

Ninguno dijo nada, ese tema aun no había llegado, pero sabían que era importante. Decirles a su familia que iban a tener un bebé... y que no son pareja. Era difícil, tal vez una mentira piadosa no haga daño en ese momento. Hinata se empezó a sentir incómodo con el silenció y soltó algo para molestar al alpha, que resulto todo lo contrario.

-Entonces cuando vengas conocere a mi suegra?

Silenció. Oikawa se había quedado en shock al escuchar aquello... aquel tema era ya algo mucho mas serio. Como se iban a presentar con las familias?

Hinata había soltado de manera inocente el resultado, pero no era fácil de procesar, un embarazo resultado de un accidente, terminaría en un... "Hola mamá, te presento a Hinata, mi omega embarazado" aunque escuchándolo, al alpha no le desagradaba la idea.

-Si Shoyo, te presentare a tu suegra...- respondió con total tranquilidad que logro sonrojar de vuelta al pelirojo.

-Tam... también iremos a mi casa?

Hinata tenía un poco de miedo de dar la noticia. Su madre... lo tuvo difícil con ellos, ella se convirtió en el sustento de la casa cuando su padre la abandono. No hubo arrepentimiento porque a su madre nunca la marcaron, por lo que no tuvo un shock al ser dejada, pero claro que sufrió al ser omega y mantener a dos cachorros.

Siempre fue bien educado sobre su casta y como cuidarse, nunca le prohibió tener pareja o relaciones sexuales. Siempre se aseguro de enseñarle que todo lo que su pareja le hiciera, tenia que ser consensuado y aceptado por él, que si algo le incomodaba debía de hablarlo y si no funcionaba, le pidiera ayuda.

Siempre hubo mucha confianza con ella y se sentía un poco culpable, que después de todas enseñanzas estuviera en esa situación.
Embarazado a los 21 años, de un alpha que no lo marco y ni siquiera tenían sentimientos mutuos...

Quería ir a casa con la cabeza en alto y hablar de su cachorro, pero tenía miedo, su madre teníaproblemascon los alphas y ahora esto. Él se aseguró a si mismo seguir con su embarazo aun sin un alpha, pero al recordar el esfuerzo de su madre, se sintió incapaz por un momento.

Que pasaba si el no lograba sacar a su cachorro adelante? Él era un jugador de voleibol, era bueno en eso... pero era suficiente?

Su bebé requería atención y si por ello no lograba jugar? Con que pagaría las cuentas? El medico? Los pañales, la ropa... la escuela...

En que era útil?

-Shoyo!!- escucho un grito que le hizo regresar su atención al teléfono.

-Perdón... que decías?

-Dije que claro que te acompañaré, estamos en esto juntos no?

El omega no pudo contener la sorpresa y sus emociones se desbordaron. Comenzó a llorar y trataba de no hacer ruido, pero se vio descubierto muy rápido.

-Que sucede? Te sientes mal? Dije algo que no debía- escucho la preocupación de Oikawa y sonrió feliz de aquel alpha.

-Estoy algo sensible- respondió- gracias por acompañarme a casa.

-Que dices... ninguno esta haciendo ningún favor, solo hacemos lo que creemos es correcto, digo... somos padres primerizos...

-Suena demasiado lindo si lo dices así...- toco su vientre de forma inconsciente.

-Es la verdad Shoyo...

-Es hora de dormir Gran Rey... mañana tengo trabajo- trato de cambiar de tema, cuando sintió un pequeño calorsito alojándose en su pecho.

-Estaras como mánager mientras pasa el embarazo verdad?

-Si papá... -se quejo por la forma en la que le sobreprotegia de unas cosas- ya te dije que solo me hicieron la prueba para saber si podía ingresar al equipo, no he vuelto a hacer esfuerzos o ejercicios.

-Esta bien... y... alguien ya lo sabe?

-Del embarazo? No... solo mi entrenador, pero pienso decirle a algunos antes de que llegues.

-Cuantos son algunos Hinata?- le conocía y sabia que por lo menos todo su equipo de Karasuno estaría enterado.

-Por ahora solo 4... los demás no están en Tokio entonces me costara un poco más avisarles...

-Quieres decirles a todos la noticia de frente?

-Claro! Hablamos de nuestro bebé... es importante, no dare la noticia por mensaje.

El castaño sintió mariposas en el estomago, era increíble como el omega amaba al bebé y ni siquiera lo conocía y tenia que admitir que la forma de decir "nuestro" empezaba a encantarle.

-Esta bien, puedes dar la noticia como quieras...

-Gracias- se sonrojo al sentir que el alpha cedía a sus caprichos.

-Ve a dormir chibi, hablamos mañana...

-Buena suerte en tu partido Gran Rey...

-Gracias enano... -hizo un puchero por el apodo, pero no reclamo- mándame mensaje si necesitas algo.

-Lo se... no te preocupes.

-Bien, descansen...

Y con esa despedida colgaron, ambos quedaron con una gran satisfacción y una pequeña duda en su corazón. Solo estaban juntos por el embarazo verdad?

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