-Espérame afuera, recogeré unas cosas de mi cuarto y voy contigo -le indico el castaño besando de manera rápida su mejilla.

Cuando el alpha desapareció, su madre se acerco con el y le abrazo cariñosamente.

-Cuidalo bien Hinata, él es un tonto distraído, pero si te hace algo debes golpearlo ok?

-No se preocupe... creo que estaremos bien.

-Confío en que si cariño. Espero me mandes mensajes del embarazo y los visitare después, si necesitas algo no dudes en llamarme.

-Si, gracias...

-Y... tus padres ya saben?

-Bueno... planeamos visitar a mi madre después- respondió nervioso.

-Aun no se te nota, pero puede que si esperas mucho, tu aroma es el que cambie... deberías ir pronto... me dolería mucho como madre, no ser parte de esto.

-Si, probablemente la próxima semana, la verdad todo esta pasando muy rápido.

-Tener hijos es algo extraño. Hay días que te parecerán eternos, pero cuando los veas tomar sus cosas para irse... pensaras que todo fue muy rápido.

-Yo... no quisiera pensar en eso todavía- había tenido un nudo en la garganta al imaginar aquello, tal vez eran las hormonas, pero si se sintió algo vulnerable.

-No lo estréses mamá -regaño Oikawa- todavía no nace y ya quieres que se vaya- refunfuño.

-Son cosas que tendrán que pasar.

-Si, claro... de aquí en 20 años- susurro y aquello provoco una risa en el omega. Tenía razón, tenían mucho tiempo.

-Nos vamos, gracias por todo- se despidió Hinata y se puso en marcha. La visita salió mucho mejor de lo que creían.

-Adiós mamá...

-Cuidalo, no lo dejes ir...

Ya no hubo respuesta, ambos salieron riendo y con algo de vergüenza, pero con una buena experiencia.

-Iremos con tu madre mañana...-susurro el castaño, ya estando en el auto.

-Pensé que sería hasta la próxima semana.

-Mi madre tiene razón, ella necesita saberlo y si algo te sucede, saber que tengo su apoyo también.

-No hables de cosas horribles.

-No pienses solo en eso, recuerda que no sabemos nada de embarazos... ellas claramente pueden ayudar y estoy seguro que tendrás más confianza con tu mamá que con la mía.

-Si... creo que tienes razón.

-Siempre la tengo chibi.

-Rey egolatra....- murmuro.

-Que dijiste?

-Nada...

-Eso creí- sonrió con descaro.

-Entonces... me lleve el premio mayor al quedar embarazado? -quería burlarse un poco, le agrado conocer más del alpha y no quería dejar ir la oportunidad.

-No, sabes que no estoy aquí solo porque estes embarazo.

-Bueno no... pero es la razón por la que esto funciono, no me afecta saber que nuestro hijo es razón suficiente para saber que hay algo mas entre nosotros.

-Adoro como suena...

-Que cosa?

-Nuestro hijo- suspiro- la realidad es esa, estaba muy lejos de pensar formar una familia, así que si Shoyo, lograste algo increíble.

El pequeño se rió, se sentía feliz y pasar por toda esa nueva experiencia, junto con alguien tan abierto con él, para con sus sentimientos le encantaba. No eran iguales, hablando de sus personalidades, pero hablando de su familia parecían coincidir demasiado con lo que deseaban.

Llegando a su departamento, Oikawa salio a comprar unas donas rellenas de manzana y canela, que en el camino a el omega se le antojo.

Por mientras Hinata que estaba volando del buen humor. Se sentía querido y consentido... se sentó un momento en el sofá a apreciar su vientre que todavía no se notaba, pero el lo sentía. Se sentía diferente, su omega ronroneaba por la idea del cachorro y entonces una incomodidad regreso a él.

Algo que había evitado...

Él había hecho dos nidos desde que se entero de su embarazo y le agobiaba un poco el hecho de que tuvo que destruirlos, así que no quería hacer uno... pero lo deseaba...

Sus ojos se posaron en el balón de voleibol con el que había estado jugando en la mañana y lo volvió a tomar, para no olvidar la sensación de tenerlo en sus manos. Necesitaba algo en lo que distraerse mientras resolvía su problema.

Era buena idea hacer un nido?

Tenia una relación con Oikawa, la casa era más habitada por él, que por el alpha... pero era entendible, el castaño tenia entrenamiento y necesitaba irse mas veces de las que él lo hacía,  ahora solo iba a los entrenamientoscon su equipo a revisar las rutinas y ayudar con estratégicas... talvez de ahí venia de nuevo su necesidad, pero no... porque esta vez estaban más cercanos que cuando estaban en diferentes países.

Entonces?

"Quiero un lugar para anidar" "Deseo... que el alpha entre en ese lugar..."

Mierda...

Sus necesidades como omega lo estaban sobrepasando. Aun viviendo en la misma casa, no duermen juntos, pero ahora... talvez ahora lo necesitaba...

Tenía que hablar y sugerir avanzar en su relación. Estaba cómodo? Si... pero necesitaba más y era algo que estaba consiente... mucho más ahora que tenia repentinos calores, producto de sus hormonas alteradas.

No lo había pensado, pero la última y única vez que se había acostado con Tooru... fue en la que quedo embarazado. Ahora los sueños húmedos habían empezado hace unos días y lo había evitado por los nervios de conocer a la familia del castaño, pero ahora...

Podía pedir algo más?

Podía pedirle al alpha satisfacerlo? Que tanto se le tenía eran abiertos para pedirse estas cosas? Tenían un bebé en común, pero su relación era casi el inició de un noviazgo... entonces? Podría?

Su única base para saber esto es con Kageyama, pero él fue sus primeras veces en todo, entre ellos todo paso como un sueño y era adorable. Solo que todo era natural...

Ahora era diferente, Oikawa era diferente y le gustaba. Era una nueva experiencia, pero como decirlo... como decir que empezaba a calentarse y que deseaba algo mas que pequeñas caricias?

-Chibi? Traigo tu antojo- escuchó la voz alegre del alpha y se relajo.

Olvidaría el tema por ahora, pero tendría que llegar el momento...