Créditos a María
Mari, antes que nada, muchísimas gracias nuevamente por darme el permiso de publicar tu hermosa y perfecta historia *-* ya tú sabes lo que opino de esta historia y de la otra, sin dudas son sensacionales. Felicidades por crear estas historias, cada vez me sorprendes más :D
Chicas pido una disculpa por la tardanza, tenía cosillas que hacer pero espero que le haya gustado tanto como a mí me gustó y me gusta ^-^
Att: Vane.

~Capitulo 30 (Parte 2)~

Narra Jack:

Y ahí estaba yo. Sin poder defenderme nuevamente, como si mi cuerpo no funcionará en ese momento. El miedo me invadía, me había convertido en alguien muy fácil de asechar. En un completo cobarde. No se me ocurría cómo defenderme.

Aquella vez que defendí a Rapunzel, me sentía bien por ella. Solo quería que estuviera bien, pero esta vez es sorprendente notar que no puedo ni defender mi propia vida. Soy un estupido.

-¿Que tal si recordamos viejos tiempos? ¿Eh?

En ese instante puso cadenas en mis manos como lo hacía antes. Con el metal en mis muñecas sin tener salida. Las cadenas unidas a la pared. Estaba desesperado, me sentía tan mal.

Olvide mi herida al notar que el sufrimiento podia volver a repetirse. El coraje y la impotencia del no poder hacer nada me mataba.

-Basta- grite acompañado de mis lagrimas

Me sentía tan débil, me sentía como parte de su diversión. Recuerdo muy bien las veces que llore y grite solo pediendo un poco de piedad, pero a cambio, el solo se reía en mi cara. Me aterra volver a vivirlo.

Se arrodilló a mi altura y pasó su mano por mi mejilla.

-El hombre tatuado tenía razón, ¿te acuerdas? El hombre que dijo que eras lindo, solo que olvidó mencionar lo estupido que te miras suplicando ayuda

Gruñí de coraje al sentirme tan vulnerable. Todo era cierto, no podía defenderme por mí mismo, alguien más tenía que hacerlo. Que débil soy.

-Déjalo en paz

El rodó los ojos y se puso de pie al escuchar la voz.

-¿Y si no lo hago, que ocurre?

-Acabarás muerto

Pitch se rió a carcajadas.

-¿Muerto? Te equivocas, cariño- dijo sarcásticamente. - Soy Pitch Black, nada ni nadie puede contra mi. Y mucho menos un idiota como tú

Mi hermano sonrío con un toque de burla pegado en su rostro.

-Veremos qué tan idiota crees que soy

-¿Enserio, Jackson? De verdad me siento muy asustado, debería sentirme débil ante ti

-El sarcasmo lo dejaremos para otra ocasión

Y todo empezó en pelea.

Miraba como peleaban, con una flecha cada uno. Me estaba muriendo de pánico al ver a mi hermano peleando contra Pitch Black. Y yo ahí encadenado, sin poder hacer nada, sin poder defenderlo.

-Basta, Jackson- grite repetidas veces

Las cadenas no me permitían el movimiento, más aún así trataba con mis inútiles intentos.

-Fue suficiente, no lo volverás a tocar. ¡Está claro!- grito Jackson

Los dos estaban furiosos, lo miraba en sus miradas.

Mis gritos eran desgarradores, deseaba ver a Jackson fuera de esa pelea. Sentía terror y miedo por lo que pudiera hacer Pitch, pero ninguno de los dos atendió a mis suplicas.

De pronto los dos se detuvieron, demasiado cerca uno del otro. No comprendía lo que había pasado. Hasta que vi la sonrisa burlona de Pitch y mi hermano solo sonreía incómodamente, con una mano en su estómago. El estaba herido.

Grite su nombre al verlo así.

En ese momento, Jackson se puso un poco de pie y vio a Pitch con una sonrisa. El solo lo vio con burla, y sin darse cuenta, mi hermano le clavo una flecha por detrás de la espalda. De modo que logró atravesarlo.

Pitch cayó lentamente confundido y totalmente derrotado.

De él empezó a salir un líquido negro, podría decirse su sangre. Tan oscura como la noche, se estaba ahogando en ella.

Finalmente el dejo de existir. Mis cadenas desaparecieron al instante que él dio su último respiro.

Corrí con dificultad hasta Jackson desesperado. El no dejaba de sangrar, entre en pánico al verlo así. Tenía miedo, y no por mi, sino por el.

-Eres muy estupido

-Mate a Pitch- dice el tratando de sonreír en modo de victoria

-No te preocupes, vas a estar bien

El niega con la cabeza.

-No lo creo, Jack. La herida es demasiado profunda, casi me atraviesa

-Estarás bien

Me aferro a la idea de que todo estará bien. Ser positivo era lo primero, yo no dejaría que él me dejara, definitivamente no.

-Lo sé, al fin conoceré a mama. Y quizá me encuentre con la señora Olga, le diré que le envías saludos

Lo volteó a ver con las lágrimas corriendo por mis mejillas. Aquel comentario me había incomodado, hacía que mi corazón se partiera en dos. Eso me ponía furioso.

-Deja de decir tonterías, idiota- respondo molesto

El sonríe mientras baja un poco la mirada para después verme de nuevo.

-Las personas no son eternas, Jack. Tarde o temprano llega la hora, y debes entenderlo

-Pero tú hora aún no llega, Jackson

Mis lagrimas habían desaparecido, ya no me permitía llorar. Yo estaba aferrado a la esperanza, ser negativo no servia de nada.

-Aveces uno debe sacrificarse por los que más quiere, sin importar las consecuencias.

-Estarás bien ¿de acuerdo?

-No puedo morir sabiendo que me odias

Lo miro con lágrimas en los ojos intentando quitar un nudo en mi garganta.

-No te odio, Jackson. Al final comprendí que porque más que sufra, por más que me lastimen...mi amor por ti siempre existirá. ¿Y sabes porque?- dije mientras mis lagrimas salían sin control y mi voz se rompía- porque te amo, Jackson. Eres mi hermano, y quiero que siempre sea así

-Siempre seremos hermanos, Jack

Sus ojos se llenaron de lágrimas mientras sonreía.

-Gracias Jack, gracias por haber sido el mejor hermano que pude haber tenido. Yo siempre te envidie por ser tan alegre, por favor no permitas que nadie borre tu sonrisa. Prométemelo

-Lo prometo- respondo hecho un mar de lagrimas

El sonríe con dificultad, dado que cada vez tose con más frecuencia.

En ese momento llega Rapunzel, no me habia dado cuenta que habia curado a Merida. Jackson la miro y señalo mi herida. Sabia perfectamente lo que el queria.

-No, te curara a ti primero. Yo puedo esperar

-Jack quiero que tu estes bien- contesto algo irritable

-Lo mismo quiero, no me arriesgare a perder a mi hermano- respondi irritado- Rapunzel, curalo

Ella iba a colocar su cabello sobre la herida cuando Jackson se alejo un poco de ella.

-No, a el primero. No soporto verte sangrar sabiendo que todo lo que ha pasado ha sido mi culpa

-No seas idiota, Jackson. Yo estoy bien, te deben curar ahora, sino te vas a desangrar

-No me importa, quiero que tu estes bien

Me dedico una pequeña sonrisa y yo solo voltee los ojos. En ese momento y de forma inexplicable, cayo desmayado. De inmediato me asuste.

-Por Dios, no tolero tanta cursileria junta- respondio Merida

Ella le habia inyectado con una jeringa a mi hermano. Antes de que pudiera hacer algo, de igual manera cai dormido.

Mi vista se nublo y mi conciencia se perdio entre mis sueños. Lo ultimo que pense la angustia que sentia por Jackson.

¿Y si no pensaban salvarlo?

Antes de cerrar mis ojos una sombra de ojos amarillos me sonrio desde lejos.

Esto aun no habia acabado.