Las carcajadas chillantes de los cell junior se podía escuchar por todo el lugar. Sus risas malignas, demostraban lo hambrientos de batalla y sangre contra los guerreros z. estas pequeñas criaturas solo habían nacido con solo un objetivo y este fue dado por su padre, el androide perfecto. La meta de estos seres azules se comenzaba a llevar a cabo.

-estúpidos enanos, no le ganaran al gran ¡vegetaaaa!- grito el príncipe del orgullo y de la raza sayayin, quien con un grito a viva voz, encendió su ki y comenzó su pelea.

-yo te ayudare papá- dijo el peli lavanda, preparándose para la pelea transformándose en súper sayayin. Los demás también se preparaban, aunque Goku se encontraba en pésimas condiciones, al igual que los demás, su espíritu de batalla se volvía a prender como con cell.

-no se confíen muchachos, estas sabandijas tienen un poder un poco mas bajo que cell- decía piccolo encendiendo su ki blanco. Yamcha estaba asustado y sudando, pero tenshinhan a su lado lo apoyaba, mientras que krillin aterrado solo podía luchar.

Las peleas comenzaron, vegeta empezaba su ataque con una lluvia de golpes, pero el cell en miniatura lo esquivaba sin perder su sonrisa maligna. Esto hasta el momento en que vegeta le dio un golpe de palma abierta en el cuello del enano, pero este lo detuvo en pleno vuelo.

-maldita basura- entre risas el cell junior se agacho e impacto con el puño en el estómago al príncipe de los sayayin. Sin aire en sus pulmones pero con un gran coraje, vegeta le devolvió el golpe al enano azul, dándole una patada en su rostro enviándolo a la tierra.

Por otro lado, el namek también hacia lo suyo, pero con la cabeza más fría, mantenía la distancia con su enemigo. El hijo de cell no soporto más y comenzó a embestir al ser verde, pero el este lograba esquivar sus ataques, una y otra vez, lo cual molestaba al pequeño cell. Mientras que el maestro de Gabriel esquivaba a su rival, comenzó a recordar el entrenamiento con la chica, la cual siempre se abalanzaba a él en busca de un abrazo pero este siempre lo esquivaba.

-te lo agradezco mocosa molesta, al entrenar contigo he generado mejores reflejos- decía el namek, volviendo a esquivar a su oponentes, aunque esta vez, alargo su brazo derecho y agarro el cuerpo del cell junior. Lo que sucedió a continuación, fue que el antiguo maestro de Gohan, se lanzo de picada al suelo y dejo caer pesadamente el cuerpo de su rival.

Por otro lado, tenshinhan junto al ex ladrón del desierto, hacían una combinación de terror contra uno de los cell. Mientras que el calvo de tres ojos le daba un golpe en la cara, yamcha le sostenía el brazo. Lo que sigue fue un doble rodillazo en el estómago del enano, para luego terminarlo con un golpe de mazo por parte del amigo de chaoz.

-bien hecho tenshinhan- felicito el hombre de la cicatriz al otro de tres ojos, mientras que levantaba su pulgar a este.

-lo mismo digo yamcha- respondió ten haciendo el mismo ademan que su amigo. Pero como ellos peleaban con valor, otros recibían la peor paliza y humillación por parte de los enanos azules.

Goku era golpeado de un lado a otro, con golpes de puño que loa hacían retroceder con cada embate del cell junior, quien con una carcajada chirriante, le daba una lección al padre de Gohan. Esto fue notado por piccolo el cual sentía en su cuerpo, como el ki de Goku descendía de poco a poco tras cada golpe por parte de su rival.

-yamcha, tenshinhan, ayuden a Goku, la batalla con cell lo dejo muy agotado para defenderse- decía piccolo, bloqueando el ataque de su rival. El namek se hacía cargo de su oponente con un golpe de puño que lo mantenía a raya.

El par de artistas marciales, acudieron en la ayuda del guerrero sayayin, cayendo ambos en picada con sus pies por delante contra el cell junior, enterrándolo en la tierra. Yamcha se apresuró a ayudar a Goku, quien le daba las gracias mientras era levantado por el antiguo novio de bulma, lo que no comprendían estos, era que solo empezaban a ver la fuerza de los hijos del androide perfecto.

-agh, agh, agh- gemía repetidas veces el calvo amigo de Goku, quien era abofeteado con una gran velocidad por uno de los cell enanos. Este ultimo sonrió malévolamente antes de darle un ultimo golpe a krillin, pero esta vez con su puño.

-kikikikiki- reía el pequeño monstruo mientras veía al pelon caerr contra la tierra. De entre las rocas, el calvo de puntos en la frente, emergía con el ceño fruncido.

-mal nacidos, son demasiado rápidos- decía krillin apoyándose con las rocas, por otro lado, su enemigo se reía escandalosamente mientras apuntaba a la cara del hombre sin pelo.

-¿de qué rayos te ríes?- pregunto molesto el pelon, pero en ese momento, se dio cuenta que su voz estaba algo distorsionada, a lo que comenzó a tocarse la cara, descubriendo que sus mejillas estaban hinchadas.

-kikikiki- seguía carcajeándose el cell junior. Krillin sin más paciencia, se lanzó a lo loco contra su enemigo, lo cual fue una estúpida decisión por parte del artista marcial de baja estatura.

No pudo ni siquiera tocar al cell junior, ya que este solo con un movimiento de su pequeño puño, impacto de lleno el rostro de krillin, hundiéndolo con el impacto. Sin perder tiempo y entre risas, el enano siguió su ataque con un par de derechazos al plexo del calvo, terminándolo con una patada de hacha que lo envió al suelo una vez más.

-¡krillin!- grito tenshinhan al ver a su amigo caído, a lo que decidió ir a intervenir, pero antes de eso, el cell junior que había derrotado con yamcha o eso pensaba, emergió de la tierra y lo acabo con una patada en su rostro.

-tenshinahan- respondió el hombre de la cicatriz, pero él tenia sus propios problemas, a la vez que otro cell junior hacia su aparición.

-¡cuidado yamcha!- pero la advertencia de Goku llego demasiado tarde, ya que el enemigo impacto de lleno una patada al rostro del lobo del desierto, -maldición- pensó Goku frustrado. El guerrero sayayin quería hacer algo, pero sus fuerzas eran nulas y el cansancio le ganaba, tanto para no notar que su enemigo emergia detrás de él.

-kikikikiki- reía burlescamente el ser de color azul, quien le daba un rodillazo en la espalda del padre de Gohan. Entre un grito agónico, Goku fue mandando a volar contra una roca, quedando estampado de pie en esta.

El ataque del cell junior no termino ahí, este comenzó a darle un lluvia de golpes a Goku sin ninguna contemplación. El cuerpo del sayayin de raza pura se contorsionaba como si fuera un muñeco de trapo, pero una mejor referencia sería, que Goku se transformó en el saco de boxeo de este ser.

-¡Goku!- grito el namek, con las intenciones de ayudar a su amigo, pero su oponente no lo permitía al colocarse frente a él, -quítate de mi camino sabandija- piccolo con un golpe de karate, intento darle en el cuello al cell en miniatura, pero este con el antebrazo lo bloqueo.

-kikikiki- rio el enano, mientras posaba su palma frente al guerrero namek. Una gran cantidad de energía ennovio al antiguo maestro der Gohan, siendo absorbido por el ataque de ki, dejándolo con el cuerpo humeante, cayendo al suelo.

-¡aaahhhh!- grito krillin quien era impactado por la rodilla de uno de los cell. El pequeño de sonrisa maligna se puso a un lado del calvo y comenzó a darle de patadas siniestras en su costado.

-ya basta- decía Gohan, viendo como sus amigos sufrían con cada ataque de los hijos de cell. El cabello del pequeño se movía de arriba abajo y su poder se incrementaba de poco a poco.

-eso es, sigue así- pensaba con malicia el androide perfecto cruzado de brazos. Ya era la hora de darle el toque final a su malvado plan, -¡bien mis queridos cell junior, ahora pueden usar sus máximas fuerzas, maten a sus rivales sin misericordia!- ordeno cell con una gran curva de maldad en sus labios purpura.

-aaaahhh- grito Gohan ante las palabras del androide, mientras que los cell junior reían por las órdenes de su padre y creador.

-kikikiki- uno de los cell enanos se dirgio con todo contra el pobre lobo del desierto, quien intento bloquear el ataque de su rival, pero la fuerza del puño del cell junior fue de tal magnitud, que destrozo el antebrazo de yamcha.

-¡ggaahhhh!- grito de dolor el guerrero de la cicatriz tomándose el aria afectada, mientras que a su rival le gustaba como se contorsionaba de dolor su oponente.

En otra batalla, uno de los hijos de cell tomaba por el cuello de la ropa a tenshinhan, quien apenas y lograba mantener sus ojos abiertos. El estado del calvo de tres ojos era lamentable, pero poco y nada le importo al cell junior, quien sin piedad, comenzó a golpear en la cara repetidamente con el puño cerrado, sacando sangre de la cara de ten.

Trunks y vegeta, a lo menos ellos podían mantener a sus rivales a raya, pero esto no era suficiente para el príncipe de los sayayin. Él siendo humillado por estos enanos, era un golpe bajo para su orgullo, así que opto por la opción más apresurada y llevada por la ira contra estos pequeños seres. El príncipe de los sayayin ya harto, se elevó por los aires mientras su ki aumentaba al máximo.

-ya me harte de estos insectos insolentes- decía vegeta con las venas en su rostro, palpitando de la ira. El príncipe de la raza sayayin comenzó a llevar sus manos al costado, mientras que su aura resonaba como la electricidad, rodeándolo por completo.

-¿Qué rayos haces vegeta?, si lanzas un poder de tal fuerza, destruirás el planeta por completo- decía en voz alta piccolo, pero su voz no llego al orgulloso guerrero, es más se reía burlescamente ante las palabras del namek.

-mueran de una vez insectos- decía vegeta colocando sus palmas por delante de su persona. El cell junior rival del sayayin solo reía como siempre, lo cual sacaba aún mas de las casillas al esposo de bulma, -¡resplandor final!- grito vegeta, lanzando una ráfaga de ki dorada tan gran como las olas provocadas por un tsunami.

-kiii- rio el cel junior, quien levantó los brazos y con un chillido molesto que destrozaría los oídos de cualquiera, detuvo el ataque dejándolo como una masa de ki que se movía en el aire. Vegeta estupefacto veía como su mejor ataque era detenido con suma facilidad. El enano no demoro en darle una patada al resplandor final y lanzarlo al espacio donde estallo en un espectáculo de luces doradas.

Las batallas continuaron. Los guerreros z hacían lo imposible para defenderse, mientras que los espectadores veían con impotencia en sus rostros, como masacraban a los artistas marciales terrícolas y los sayayin. Aunque en el inframundo, se notaban algunas expresiones encontradas y pensamientos diferentes en cada miembro del sequito gremory.

(inframundo. Mansión gremory)

La nobleza de venelana, sus hijos, sirvientes y ella misma no daban cabida a lo que estaba pasando. Pequeños seres creados por el monstruo le estaban dando una paliza a los súper guerreros de quienes confiaban. Pero algunos no mostraban mucha tristeza por ello y solo por una razón.

-se lo merecen, ahora sufren lo que el pequeño Gohan con ese monstruo- decía freya con un rostro serio, como si no le importase y se creyese sus palabras.

-frreya, no digas eso- decía la alfil de cabello verde. Freya solo encogio sus hombros, -olga- hera intento ser apoyada por la reina, pero este mantenía su boca cerrada en estos momentos, sus sentimientos encontrados no le permitían emitir palabra alguna.

-me gustaría decir lo mismo que freya, pero....- hablo beowulf cerrando sus puños. Los guerreros estaban con el orgullo en el piso tras ser derrotados por los enanos y el hombre podía sentir los sentimientos de estos a lo lejos.

-no podemos ver como los masacran de esa forma- termino de decir el hijo mayor de venelana. Este joven mostraba una mueca seria en su rostro, pensando si ya era hora de ayudar o solo serían un estorbo en la pelea.

-mi señora- dijo la reina, buscando la opinión de la matriarca gremory. La peli castaña, con sus ojos siendo cubiertos por su cabello, comenzó a acercarse al televisor, bajo la atenta mirada de su sequito y los demás.

-solo un poco mas- dijo la madre de Rias. Sus ojos mostraban un resplandor de esperanza nunca antes visto y estos estaban centrados en una sola persona. Son Gohan.

-mamá, también lo puede sentir- decía una extraña Rias serena, ya que hace poco estaba llorando a mares por el sayayin mestizo.

-¿Qué es lo que pude sentir señorita Rias?- pregunto grayfia con una mueca neutra sin emociones, pero por dentro la comía la intriga de las mujeres gremory.

-es la sensación de una especie de energía que te llena el corazón, no sabría explicarlo- respondió la pequeña de cabellos rojos, mientras colocaba su mano en el pecho y una curva de alegría aparecía en sus labios.

-la energía de Gohan está a punto de estallar- interrumpió venelana hablando en voz alta. Todos se miraban confundidos, tal vez habían juzgado a son Goku antes de lo esperado, -vamos Gohan, todo el inframundo confía en ti- hablaba la mujer de corazón, acentuando su pose con su mano en el pecho.

-¡tú puede Gohan, da lo mejor de ti!- gritaba animadamente la pequeña pelirroja. Todos se miraron el uno con el otro, para luego dirigir sus ojos al televisor.

(Montaña paoz)

Madre e hija estaban pendientes en la televisión. Shuri y Akeno las dos preocupadas por sus hombres, pero sus rostro algo humedecidos por las lágrimas, mostraban una extraña pequeña sonrisa. No solo venelana y Rias podían sentir el incremento de ki del sayayin mestizo, estas dos también lo podían sentir.

-mamá- dijo Akeno mirando a su madre, la cual le asentía con la cabeza.

-¡tú puedes Gohan!- gritaron ambas a todo pulmón.

(En el palacio de kami-sama)

-no puedo creerlo, ese pequeño puede ser...- decía Michael con los ojos abiertos. Su corazón palpitaba tan fuerte que golpeaba su pecho, los cabellos de su cuerpo se erizaban. Ese sentimiento de estar esperando algo por mucho tiempo recorría su cuerpo, pero no solo él, su hermana estaba en el mismo estado, aunque sus mejillas estaban algo rojas quien sabe porque.

-el poder de Gohan aumenta en cada segundo, pero siento como si una barrera no dejara fluir todo su poder por completo- comento el pequeño dende con el ceño fruncido.

-tienes razón kamis-samas- apoyo mister popo al namek.

Cada uno apoyaba al pequeño en sus pensamientos. Todos esperando el milagro que pudiera terminar con la amenaza de cell a la tierra y el universo. Nadie sabría que el empujón llegaría de la persona menos esperada. Del hombre que se autodominio como el más fuerte del mundo, tal vez no en fuerza pero si en valentía.

(Volviendo al campo de batalla)

-estas seguro de esto- exclamo el artista marcial de gran afro, quien tenía la cabeza de número 16 en sus manos. Ustedes conocen la historia, la cabeza del robot cayó cerca del grupo de mister satan. Luego de un par de cambios de palabras y por las suplicas de 16, el campeón del mundo decidió ayudarlo.

-confío en ti campeón, es por el bien del planeta- decía la cabeza cercenada del robot del mohicano. Satan con un rostro valiente comenzó a correr hacia el campo de pelea.

Las bolas de ki caían como si fueran meteoros, esto por las secuelas de la batalla de los guerreros z contra los cell junior. Aunque estuviera llorando y gimoteando, mister satan mantenía su compostura y sobre todo, la promesa que le hizo a 16, esto hasta llegar detrás de unas rocas, tal vez a una decena de metros del androide perfecto y el pequeño sayayin mestizo.

-esa hora héroe, lánzame lo más cerca de esos dos- exclamo dieciséis al guerrero terrícola. Mister satan asintió con la cabeza y se preparó para su lanzamiento. Con su mano extendida hacia atrás y con los dientes apretados, satan se preparó para lanzar.

-¡aquí vas!- grito el campeón del mundo, enviando con fuerza la cabeza del robot entre el androide perfecto y el guerrero sayayin. Gohan quedo anonadado y cell confundido por la aparición del robot que solo unos minutos atrás fue hecho chatarra.

-número 16- decía un sorprendido Gohan, mientras que mister satan pensaba que lo había lanzado más de lo que esperaba.

-Gohan escúchame- hablo el robot, sacando una mueca de impresión del pequeño, -no es pecado pelear por la justicia, al contrario es una buena obra, recuerda que existen oponentes que jamás entenderán con las palabras, solamente tienes que soltar la furia que se encuentra en tu espíritu, entiendo cómo te sientes pero ya no tienes por qué seguir soportándolo- hablaba el amante de la naturaleza con voz decidida.

-ag, agh, ahg- gimoteaba el sorprendido sayayin mestizo, escuchando cada palabra del robot de cabello rojo.

-jajaja, ese fue un buen consejo, pero déjame decirte que lo estoy haciendo a mi manera entendiste- el androide perfecto intervino en la conversación de 16 con el hijo de Goku, acercándose amenazadoramente a la cabeza.

-hum, Gohan, protege a los seres vivos, y a las plantas de este mundo que tanto ame, te lo encargo- las últimas palabras de dieciséis con todo el sentimiento en el mundo y una sonrisa en sus labios, antes de ser aplastado por el pie de cell.

-no tenias por que meterte en esto, siempre fuiste un inútil- las frías palabras de cell y la muerte del bueno de numero 16, llegaron al alma de Gohan..., el silencio reino por unos segundos mientras que los ojos del pequeño estaban abiertos en shock mientras veía la cabeza aplastada del robot por cell y eso fue suficiente para.....

-¡aaaaaahhh AAAAAAAAAHHHHHH!- el ki de Gohan estallo en furia, la tierra se levantó destrozándose debajo de él, causando que todos sintieran el incremento descomunal del sayayin mestizo, hasta la lucha con los cell junior se detuvo en el acto.

-Gohan- piccolo exclamo. El hijo de Goku irradiaba su aura con tal fuerza que provocaba ventiscas a su alrededor, mientras que la cortina de polvo se disipaba, dejando ver al súper sayayin con el cabello erizado, una mirada fría con lágrimas en sus ojos, a la vez que un mechón de cabello se contoneaba en la frente del mestizo.

-hummm- gimió el androide perfecto al sentir la energía de su rival. En su interior la preocupación comenzó a aflorar pero su orgullo y las ganas de pelear contra un oponente fuerte eran mayores. Además su plan había funcionado gracias a 16.

Gohan movió su cabeza para dejar que las lágrimas fueran un recuerdo en el viento. Él estaba listo para pelear y un viento frio como el de aun asesino sin sentimiento alguno comenzó a sentirse en el alrededor, mientras que en los distintos lugares tenia diferentes reacciones al nuevo estado, que digo, la nueva transformación de un súper sayayin, el súper sayayin fase 2.

(Templo de kami-sama)

-ah, ah, ah, esto es asombroso, tal fuerza está más allá de este mundo o el otro- decía el ángel de rubios cabellos mientras dejaba caer su báculo. Las pupilas de este estaban contraídas y su boca ligeramente abierta, era un milagro que pudiera mantenerse en pie.

-Gohan... Gohan lo puede lograr, ahora es superior a cell- decía con alegría el pequeño namek, apoyando a su mejor amigo sayayin.

-¿Qué me.... Pasa?, porque me siento así- pensaba la pelirrubia de mirada inocente, con las mejillas rojas y su pecho golpeteando como si fuera un tambor. Su cuerpo no lo resistió mas y esta cayo de bruces al suelo.

-Gabriel- exclamo algo preocupado su hermano, pero la bella ángel solo negaba con la cabeza.

-me siento bien, solo es.... La fuerza de Gohan que me hace tambalear- respondía Gabriel con sus piernas juntas y su mano en el pecho. Sudor caía de la cara de la chica además de estar algo agitada sin siquiera a ver estado haciendo ejercicio físico.

-tienes razón, ese chico es verdaderamente sorprendente- decía Michael con una sonrisa en su rostro, un poco más recompuesto.

(En la montaña paoz)

-lo puedo sentir, puedo sentir el poder de Gohan dentro de mí- decía la pequeña Akeno con las mejillas coloradas. Su madre estaba en shock al ver el cambio del pequeño dulce niño a un guerrero frio y de un poder abrumador.

-mi pequeño Gohan, ya es todo un guerrero como su padre, no, es más fuerte que él- pensaba shuri con una leve sonrisa en su rostro, a la vez que acariciaba la pantalla de televisión que enfocaba el rostro furioso del mestizo.

-hazlo Gohan, derrota al monstruo y vuelve a mí- pensó Akeno con un rostro de chica enamorada. Ya era seguro, Akeno estaba completamente bajo el sentimiento del amor por el hijo de Goku, solo tuvo que confirmarlo después de todo esto.

-ahora solo me preocupa una cosa, que la furia nuble su juicio y corazón- pensaba la madre de Akeno, ya que podía sentir el rencor del mestizo luego de esta transformación.

(En el inframundo)

En la casa sitri, los integrantes de la familia, bueno los padres y sona estaban impresionados, con las bocas abiertas y los ojos abiertos, preguntándose como un chico de la edad de sona, podía tener todo ese poder escondido en su interior. Serafall era otro caso, la chica mágica estaba maravillada por lo apuesto que se veía el joven y la mirada seria en su rostro.

-querido- dijo lady sitri a su esposo. El señor de la casa asintió a su señora, confirmando las sospechas de esta.

-si querida, ese joven es el ser más poderoso en este y el otro mundo, sin duda alguna- respondió lord sitri a la vez que se acomodaba los anteojos, -solo esperemos que use su poder para el bien, su mirada es la de un asesino de sangre fría- pensó el hombre atento a los ojos del mestizo.

-son Gohan, ya veo Rias, comprendo tu interés por él, pero no perderé contra ti, él será mi reina a como dé lugar- pensó la menor de los sitri arreglándose los anteojos mientras una sonrisa aparecía en sus labios.

-madre, creo que ya me he decidido-repentinamente la próxima líder y una de las cuatro reyes demonios del inframundo hablo. La familia le puso atención a las palabras de la chica mágica, pero no esperaban lo que diría esta, -¡son Gohan será mi marido!- grito a los cuatro vientos la hermana de sona, quien levantaba sus pompones y hacia su típico bailoteo feliz.

-eehhhhh??- fue lo que exclamaron los sorprendidos y anonadados padres de serfall, mientras que sona se daba una palmada en su cabeza, al ver como su hermana también tenia un gran interés por el mestizo sayayin.

(En la mansión gremory)

La sonrisa de venelana era de esperanza pura, ya que esta veía como el pequeño había explotado su espíritu, liberado todo el potencial en su cuerpo. Los demás no podían creer que la fuerza de este chico, fuera más allá del planeta tierra, llegando incluso hasta las profundidades del inframundo.

-ahora lo puedo decir, ni el poder de los cuatro reyes demonios podrían compararse con la raza guerrera de los sayayin- decía olga con una mueca de sorpresa reflejada en su cara.

-y con eso te quedas corta olga, ni con el poder de cada una de las familias del infierno podríamos con él- exclamo freya con una leve sonrisa en su rostro, pero esta era una de nerviosismo más que de otra cosa o sentimiento.

-no, no es así freya, el poder que posee ahora el pequeño Gohan es incomparable- intervino venelana negando con la cabeza. La madre de Rias tenia una enorme sonrisa de satisfacción en sus labios, -ahora todos te comprenden Goku, tu hijo es el ser más fuerte del mundo y el salvador de ambos- dictamino la mujer. Su sequito la apoyaba, sus hijos y sirvientes también.

-¡tú puedes Gohan, derrota a los malos!- gritaba la pequeña Rias al televisor, con las mejillas coloradas y un gran ánimo, pero no solo ella.

-¡hazlo Gohan, extermina a esas enanos!- ahora era sirzechs que gritaba en apoyo al mestizo. El pelirrojo daba un salto con el puño al aire de emoción y en señal de estar con Gohan.

-¡Gohan, Gohan, Gohan, Gohan!- gritaba la amazona con una gran sonrisa y una voz redundante que se escuchaba por toda la mansión. A ella se le unio Rias, luego su hermano y en menos de unos segundos, todo el sequito coreaba el nombre del pequeño mestizo, hasta la matriarca de la familia cantaba junto a ellos.

Al inframundo apoyaba al hijo de Goku, cada familia estaba al pendiente del súper sayayin fase dos. La emoción y la algarabía se podían escuchar en cada una de las familias del infierno, mientras que el joven de la esperanza estaba inamovible con su mirada fría frente al androide perfecto, esperando para hacer su movimiento.

[En el campo de batalla]

-jajajaja, con que ese es tu poder escondido, puedo decir que me sorprende mucho que un niño tenga tal fuerza- decía entre risas cell a Gohan, pero este último no estaba pendiente a las palabras del androide, -ahora pongámoslo a prueba- decía el confiado ser perfecto, pero este sin siquiera notarlo, le fue arrebatado las semillas del ermitaño de las manos.

La mueca de impresión del androide perfecto era sublime, ya que en un segundo ya no tenía los frijoles verdes. La rapidez del mestizo superaba a la de cualquiera y más cuando este despego a un lado de cell, dirigiéndose a donde se encontraban sus compañeros siendo masacrados por los cell junior.

-kiaaaa- grito el enano que peleaba con vegeta, yendo con todo contra el joven Gohan. El peor error que cometió el hijo de cell, fue abalanzarse contra el súper sayayin fase dos, ya que en solo un movimiento de su brazo, le dio un golpe directo a la mejilla de este, decapitándolo en el proceso.

-hum?- fue el gemido de impresión del androide perfecto, este viendo como su creación explotaba en mil pedazos al ser derrotada por Gohan, además de que lo hizo con suma facilidad.

-no puede ser, ese chiquillo acabo con el enano con solo un puñetazo y a nosotros nos costó mucho pelear con ellos- decía el asombrado vegeta. El cell junior rival de Trunks, hizo lo mismo que su antecesor, pero con resultados inevitables.

El hijo de Goku desapareció de la vista de su rival, dejando al contuso y confundido el pequeño de color azul. Este miraba a todas partes de un lado a otro, sin darse cuenta que Gohan aparecía detrás de su persona y con una patada en su espalda, lo partió en dos, causando que ambas partes estallaran.

-ejejeje, ahora morirán malditos- decía Goku con su típica risa. Los pequeños androides les llamo la atención esto y dejaron de lado sus oponentes para ir contra el mestizo.

Gohan al ver esto, comenzó a volar por los aires, llevando a sus rivales lejos de sus amigos, quedando cerca de que alguna vez fue la plataforma donde peleo Goku y cell, ahora era solo un enorme agujero cubierto de tierra. La pelea comenzó con los cuatro cell junior acorralando al súper sayayin fase dos. Gohan los miro a todos para luego lanzar la bolsa de semillas del ermitaño al aire.

El guerrero hibrido con una velocidad impresionante, golpeo a uno de los cell enviándolo a tierra. Luego paso con otro dándole un golpe de puño en el pecho enviándolo igualmente al suelo, los otros dos fueron lanzados por los aires al Gohan incrementar de golpe su ki. De un momento a otro, el hijo de Goku acabo con los enanos además de volver a desaparecer en el aire, pero ahora apareciendo frente a Trunks.

-reparte las semillas- exclamo con voz gélida el súper sayayin dos, mientras le entregaba el saco de estas en las manos del joven del futuro.

-lo hare, no te preocupes Gohan- respondió el hijo de vegeta mirando el saco y luego a Gohan, pero este ya no estaba ahí.

-es demasiado veloz- exclamo vegeta con los brazos cruzados y el ceño fruncido. En el fondo estaba celoso y frustrado que este mocoso llegara a un nivel mas alto que el propio príncipe de los sayayin.

Mientras con el hijo de Goku, volvía al ataque contra los cell junior. Pareciera que el mestizo guerrero atacara de frente, pero como una imagen residual se desvaneció en el viento, dejando asombrados a los hijos del androide perfecto. Pero no por mucho tiempo y esto lo conocería su próxima víctima.

-solo son unas malditas sabandijas- de atrás del cell junior apareció el guerrero sayayin, hablando con suavidad y tajante, tanto que podía cortar el aire con solo el aliento que exhalaba su voz.

-kiiii- fue el último gemido del cell junior antes de ser pateado con tal fuerza en el estómago, que fue partido en dos al igual que el cell anterior. Los demás al ver esto, tomaron posiciones en el aire con intenciones de lanzar ataques de energía.

Dos en los cielos lanzaban de sus frentes el ataque característico de piccolo, mientras que uno en la tierra, enviaba un kamehameha contra el mestizo. los tres ataques impactaron de lleno al hijo de Goku, lo que hacía sonreír a los malvados enanos, pero al dispersarse la nube de humo dejada por los ataques, Gohan ya no estaba en ese lugar. Ahora el guerrero marcial sayayin, se posaba frente al cell junior en la tierra.

-muere- susurro el mestizo, a la vez que enterraba su pie en la tierra y destrozando esta, la volvía a poner en circulación cuando mataba otro cell junior como los anteriores. Por un segundo Gohan miro a su víctima y al otro, ya estaba dando un gancho al cielo, partiendo nuevamente en dos partes a otro hijo de cell.

Solo quedaba uno de los cell junior, pero este al verse en tal peligro comenzó a volar en dirección contraria a Gohan. Con todas sus fuerzas e instintos de supervivencia el hijo del androide perfecto volaba por los aires, pero no llego muy lejos, ya que Gohan no tardo nada en aparecer frente a él con su palma abierta.

-ha- con un ligero grito, el sayayin mestizo lanzo una ráfaga de ki que consumió por completo al cell junior. El enano fue hecho cenizas con solo un simple ataque del súper sayayin fase dos.

El hijo de Goku había terminado con la basura en miniatura de cell, ahora quería una presa más grande, el mismísimo padre de los malvados enanos. El androide perfecto estaba con los brazos cruzados y una mirada iracunda en sus ojos, ya que el hijo de Goku se había lucido más allá de la cuenta con su performance, derrotando a sus hijos.

-bien Gohan, enséñame ese nuevo poder que posees ahora- decía el androide perfecto0, cambiando su actitud en un giro de 180 grados. El hijo de Goku comenzó a descender al suelo, manteniendo una mirada fría en sus ojos.

Caminando con suma lentitud, dejando un rastro de electricidad en su camino, el peleador mestizo, se acercaba a paso lento hacia su objetivo. La creación del doctor gero con una sonrisa arrogante estaba esperando impaciente para comprobar la fuerza de Gohan. Si hubiera sabido lo que ocurriría a continuación, jamás habría provocado al hijo de Goku de tal forma que lo hizo, por otro lado los guerreros z volvían a recomponerse tras comerse las ultimas semillas del ermitaño.

-¿comenzamos?- pregunto sarcásticamente cell, ya que Gohan estaba frente a él. El androide perfecto no recibió respuesta alguna, bueno no es palabras, pero si en forma de patada circular a su cabeza. Los ojos del ser perfecto casi salían de sus cuencas al sentir el pie de Gohan en antebrazo, ya que a tiempo pudo bloquear el golpe del sayayin mestizo.

-pelea basura- dijo finalmente el hijo de Goku. Cell sin perder el tiempo comenzó con el ataque, con golpes de puños a toda velocidad.

-¿Qué es esto?- se preguntó el ser perfecto, manteniendo el ritmo de sus golpes pero en su cara se reflejaba el asombro, -está esquivando todos mis golpes- pensó furioso el rival de Gohan, mientras este último esquivaba los golpes de cell con suma facilidad.

Luego de un par de minutos, Gohan obtuvo lo que quería y comenzó su contrataque veloz, girando y dando golpes con combinaciones de patadas contra cell. El objetivo del súper sayayin dos era leer el estilo de pelea del androide y planear una ofensiva que lo arrinconara, y funciona ya que cell ahora era quien estaba retrocediendo ante los golpes del hijo de Goku.

-chiquillo insolente, nadie es más fuerte que yo- decía mientras esquivaba los golpes cell, pero sus amenazas eran nada para el sayayin mestizo, quien seguía su ataque.

-¡haaa!- grito Gohan lanzando un puñetazo en la cara del androide perfecto, pero este con dificultad logro detener con la palma, pero solo estuvo a un par de milímetros de golpear directamente la nariz de este.

-¡insolente!- grito el guerrero hecho perfección, quien lanzaba un golpe potente que le dio de lleno al hijo de Goku, quien gimió o eso pareciera ser cuando fue conectado por el puño delo androide.

La confianza y alegría del guerrero del doctor maki, se elevó hasta las nubes al haber conectado un golpe en Gohan. La sonrisa brillaba en la boca de labios purpuras de cell, pero en el momento de quitar su mano, Gohan volvió su cabeza sin mostrar alguna mueca de dolor o herida, corte o contusión en su cara. Los instintos del androide hicieron aparición y dio un par de pasos atrás.

-jujuju, bien chico, puedo ver que tus habilidades y resistencia también cambiaron, pero no es suficiente contra mí- exclamo el androide perfecto volviendo a la pelea.

Un par de golpes izquierda derecha lanzo cell, pero Gohan los esquivo moviendo su cabeza. Este último contrarresto con un gancho de izquierdo, pero el androide se inclinó hacia atrás para esquivar, para luego intentar una patada alta, pero Gohan con la rodilla bloqueo el ataque. El impacto provoco una ráfaga de aire y gran presión en el viento.

-si eso es lo que quieres- pensó el androide, antes de comenzar con una batalla aérea, donde los impactos, choques de puños y piernas, se podían ver el cielo, donde ni las nubes se salvaban de estos dos, que provocaban estas ondas de choque por culpa de sus golpes.

-es impresionante, hace unos minutos Gohan no podía resistir un intercambio de golpes con cell, pero ahora pelea a la par de este- decía el guerrero namek, sin perder de vista a su antiguo pupilo.

-¿eso es lo que crees piccolo?, observa bien- intervino el padre de Gohan, quien se colocaba a un lado del namek. El extraterrestre de piel verde hizo lo que dijo Goku y no tardo en abrir sus ojos de la sorpresa que veían estos.

-cell está siendo presionando, mientras que Gohan se mantiene tranquilo- decía piccolo con una voz de sorpresa, -lee cada uno de sus movimientos- seguía con los comentarios el namekusei.

-así es piccolo, pronto cell no podrá resistir el nuevo poder de Gohan- decía con una mirada seria en su cara Goku. las palabras del guerrero de clase baja, no tardaron en cumplirse, ya que en un intercambio de golpes, Gohan impacto de lleno con su talón la cabeza del androide perfecto.

-grrrhh- gimió de molestia cell, cayendo estrepitosamente en la tierra, logrando caer de pie como un gato.

-eres solo basura- hablo el sayayin mestizo, quien aparecía delante del androide perfecto. La sorpresa se reflejaba en el rostro de cell, pero ahora combinaba con un nuevo sentimiento, y este era el miedo y terror de encontrar quien pudiera hacerle frente, no más que eso, derrotarlo con solo un movimiento de su brazo.

-¡insecto insolente!, ahora ya no me importa nada de este planeta, me canse de jugar contigo- decía entre gritos el androide perfecto, elevando su energía, quemando su aura dorada, -te derrotare con mi máximo poder- con una mueca de desespero, cell comenzó a subir en cada segundo su energía.

La tierra comenzó a temblar sin control, más que solo temblores, era un terremoto continuo en todo el mundo, las nubes blancas como la nieva, ahora estaban negras y rugían en relámpagos y truenos. En las costas y océanos, los mares se embravecían y se agitaban como si un vaso de agua fuera movido de un lado a otro, huracanes en medio del océano y volcanes se reactivaban a causa del androide perfecto.

-¡aaaahhhhh!- gritaba el androide con sus puños a los costados sin dejar de elevar todo su ki, lo cual dejaba anonadados a los guerreros z, el inframundo, el cielo y cada espectador de esta pelea. Cabe decir que la cámara que transmitía a los terrícolas se había descompuesto después de esto.

"es el final" pensaba la gente de la tierra, todos resguardándose en donde podían, tratando de no ser las víctimas de la ira de cell, hasta los guerreros z se lanzaban al suelo tras estos temblores. El espectáculo dado por la creación del doctor era simplemente maravillosamente destructivo, pero este contaba con una cosa. Gohan no mostraba ni una pisca de miedo tras su aumento de poder es más, hizo algo que jamás hubiera pensado.

-aaaagghhaagh- todo se detuvo en un segundo. Los índices del apocalipsis fueren detenidos por solo una cosa. Gohan impacto de lleno su puño en el estómago de su rival, pero este no fue un golpe común y corriente. La fuerza del puñetazo fue de tal magnitud que deformo el rostro del androide perfecto.

-lo detuvo con un solo golpe- pensó impresionado piccolo, viendo con los ojos abiertos de la impresión a su antiguo pupilo. Este último desencajo su brazo del estómago del androide y dejo que este cayera al suelo con las manos en el lugar afectado.

-uuuaaaghh, aaghh, uaaghhh- cell intentaba con todas sus fuerzas respirar con normalidad, pero el aire no entraba en sus pulmones y el dolor se hacía más fuerte cada segundo que pasaba. El androide miro hacia arriba y vio como Gohan lo miraba con desdén, como si no fuera nada más que un insecto que debiera ser pisoteado en el suelo.

El odio comenzó a invadir el cuerpo del guerrero perfecto, esos ojos los odiaba con tal ira que empezó a respirar cada vez de mejor manera. Escupiendo algo de sangre verde, luego limpiarse la boca, el androide con todas sus fuerzas se ponía de pie una vez más frente. Con un jadea incesante y un rostro bastante cabreado, cell lanzo una patada al nivel de la cabeza del sayayin mestizo.

-inútil- pensó el hijo de Goku, agachándose en el último instante y con un paso adelante se acerco a su rival. Empuño una vez más su mano y con un gancho elevado, le dio de lleno contra la barbilla al androide perfecto.

-ughhhh- gimió de dolor cell mientras era elevado por el aire. Este se desplomo súbitamente al suelo, con un dolor gigantesco en la mandíbula, como si esta estuviera rota.

-con solo dos golpes, eso fue suficiente para lastimar a cell de gravedad- exclamo impresionado y celoso el príncipe de lo sayayin. Los demás guerreros mostraban muecas de impresión reflejados en sus rostros.

-levántate basura, aún no he acabado contigo- decía el hijo de Goku en un tono frio y algo arrogante, mientras se caminaba hacia su oponente con lentitud. Cell sin permitir que lo subestimaran de tal forma, se lanzó una vez más. Ahora era una patada en su rostro que lo enviaba a volar por los aires, hasta estrellarse contra una roca, quedando hundido en ellas.

En todas partes del mundo, celebraban la paliza que le estaban al guerrero máximo, por parte del mestizo. En el inframundo Rias y su familia seguían coreando el nombre del hijo de Goku, serafall canturreaba y bailaba de un lado a otro mientras decía el nombre del sayayin mestizo, aunque sus padres y hermana aun trataban de digerir lo que había dicho la pelinegra chica mágica.

En el cielo Gabriel sonríe de oreja a oreja al ver como ese monstruo que había tocado a su Gohan, sufriera lo que había sufrido él. Mientras que Michael presentía que el nuevo nivel del mestizo, había cambiado mucho al mestizo, y no solo su poder y habilidades.

En la montaña paoz, la peliengra Akeno tenía ojos soñadores al ver como su sayayin derrotaba al androide y más le daba una cucharada de su propia medicina, era más causaba cosquillas en su entrepierna. El lado sádico de la pequeña comenzaba a emerger de poco a poquito en ella. Shuri por su lado estaba bastante orgullosa de lo conseguido por su hijastro.

(Entrada al otro mundo)

Hay algo que se debe decir en estos momento, otra facción también estaba pendiente de esta pelea. Ellos eran los ángeles caídos, ayudantes del juez del mas allá enma-sama, los cuales junto al demonio rojo veían en un enorme televisor la conclusión de este combate, aunque estuvieron siguiendo desde el principio del torneo.

-¿Qué dices azazel?, estaba en lo correcto con el hijo de Goku- decía el juez del otro mundo con una sonrisa ladeada, por su lado un hombre de gabardina color vino, cabello de colores rubios y negros, además de una pequeña barba. Veía con una mirada soberbia la pelea.

-la mezcla de la raza guerrera sayayin y la terrícola ha dado a luz al guerrero definitivo- comento el hombre mientras se frotaba la barbilla. Su rostro era muy analítico, -me pregunto si se mezclaran ángeles con genes sayayin, ¿te apuntas raynare?- pregunto azazel mirando hacia su lado derecho, donde una joven de solo unos quince años se ponía roja de la vergüenza.

-q..q...quq..qu dice señor azazel, yo no podría- decía la sonrojada chica de cabello negro alto, piel blanca como la porcelana. La joven usaba una especia de bikini de cuero, una hombrera en su lado izquierdo y botas de tacón alto negros.

-jajajaja, bien, creo que la pelea está decidida, iré a ver a kokabiel antes de que se desespere al tener que guiar las demás almas al infierno- se despidió el hombre de colores dobles en su cabello, mientras que la joven se quedaba viendo la pelea con ojos brillantes y las mejillas coloradas. Enma-sama capto esto y miro con los entrecerrados a la joven.

-oooummm, no diga nada jefe- exclamo la chica cruzándose de brazos mientras inflaba sus mejillas.

(Devuelta al campo de batalla)

Cell gritaba furioso mientras destruía las rocas con su tremendo ki. Como una bestia salvaje respiraba este, exhalando e inhalando con desesperación. Su vista en su único objetivo, el hijo de Goku, quien lo miraba en menos. Con el crujir de sus dientes el androide perfecto volvió al ataque con gran desespero.

-estas muerto cell.....-...

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he vuelto de mis vacaciones mis amigos y ahora con todo a actualizar mis historias, las cuales espero estén disfrutando, recuerden de seguirme para saber de todas mis actualizaciones, de votar por mis fic y por supuesto, sus comentarios son lo mas importante, sin nada mas que decir, yo soy alucard77 diciendo.

                                                                  QUE VIVA EL HAREM