- ¡Milo bájate en este mismo instante de ese árbol! - Gritaba Deuteros tratando de evitarle un accidente a su inquieto hijo.

Degel los observaba recargado en la puerta con los brazos cruzados. Ese toque de travesuras le recordaba mucho a Kardia, tal pareciera que era su viva imagen.

- ¡No quiero! - Contestó el pequeño de escasos cuatro años intentando alcanzar una manzana de ese árbol que se encontraba en el patio de la mansión.

Al morir Unity por el supuesto accidente... Siendo la pareja aún de él, por ley heredó todos sus bienes.
Hades le prometió no hacerles daño si les entregaban todo lo que Unity guardaba bajo su sótano.
Ante esa petición Degel no se negó, lo que menos quería era problemas, incluso no se quería quedar en ese lugar que le traía malos recuerdos pero tampoco tenía la malicia de quitarle el empleo a cada uno de los trabajadores que dependían económicamente de ese lugar.

Es por ello que junto a su esposo Deuteros comenzaron a trabajar en conjunto invirtiendo en negocios, así fueron pasando el tiempo, unieron sus vidas ante las leyes del hombre y poco después nació esa pequeña manzanita traviesa que era feliz corriendo por todas las áreas verdes de la mansión.

Como ese lugar era muy espacioso, se llevaron al gemelo mayor a vivir con ellos, poco después conoció a Chris y se casó con ella, teniendo unos hermosos gemelos que respondían al nombre de Saga y Kanon.

Deuteros tenía mucha paciencia con su hijo, a pesar de que el pequeño parecía no tener fin, lo cuidaba mucho.

- Vamos adentro... Es hora de comer - Llamó Degel a su pequeña familia - Los demás no tardan en venir.

- Ya vamos cariño - Respondió el gemelo menor intentando bajar a su hijo del árbol quien victorioso sostenía una manzana con sus pequeñas manitas.

- Cuando quieras una manzana... Sólo pídela por favor - Deuteros intentaba poner en orden a su travieso retoño pero solo miró como aquel pequeño corría para entrar a la casa pasando a un lado de su mami.

- Siempre tan cariñoso amor.

Deuteros tomó de la cintura a su pareja y lo atrajo más a él para robarle un beso - Y tu no pierdes el encanto - Halagó separándose lentamente para entrar a la casa.

El momento cambió repentinamente cuando llegó su hermano acompañado de su familia.
El momento exacto para pasar una comida en familia.

La casa donde antes albergaba tranquilidad y soledad ahora era inundada de risas y juegos entre los pequeños gemelos y Milo quienes subían y bajaban por las escaleras para jugar.

Esa misma noche cuando todos se habían ido a la cama, Deuteros se encontraba en la cama esperando impacientemente a su pareja, llevaba varios minutos en el baño.

El gemelo menor se quedó fascinado al darse cuenta que la puerta del baño se abría lentamente, Degel había salido envuelto en una bata y en sus manos sostenía una cajita.

- ¿Que pasa? ¿Estás bien? - Cuestionó Deuteros levantándose de la cama para ver que le pasaba a su pareja.

- Es tu sorpresa - Le respondió entregándole la cajita en sus manos.

El moreno no entendía que pasaba, se sentó en la orilla del colchón y Degel se quedó a lado de él.
Mientras la abría al principio se encontró algunas tiras de papel blancas y más abajo encontró una prueba... De embarazo y con resultado positivo.

- Degel... Esto es...

- Así es, seremos padres otra vez y... - Degel no terminó de hablar, el gemelo menor lo abrazó, era una noticia que no se esperaba.

- ¡Tendremos otro pequeño en nuestras vidas! Es lo mejor que nos puede pasar Degel.

Deuteros bajó sus manos a la cintura de su pareja y le dio una vuelta emocionado, después ambos se unieron en un beso tierno.

Después de varios meses, aquel pequeño nació y tal como lo había deseado Deuteros, a su pequeño hijo lo llamó Camus, era la viva imagen de Degel, mismos rasgos y facciones.
Ahora esa pequeña familia había aumentado más.

Hoy era el cumpleaños de los gemelos, los empleados de la mansión junto con Chris y Aspros se encontraban preparando todo los adornos y alimentos para la fiesta.
Los pequeños gemelos junto con Milo se encontraban jugando en el inflable que se encontraba en el jardín.

Mientras que Degel había aprovechado que su pequeño Camus se encontraba profundamente dormido en su cuna adornada de suaves telas en tonos azul claro.

Tomó las prendas que usaría para la fiesta y se llevó una toalla también.
Mientras se quitaba lentamente la ropa, la puerta del baño poco a poco se abría y él no se había dado cuenta.

- Te voy acompañar preciosura - Susurró Deuteros entrando y colocándole el seguro a la puerta.

Al escucharlo se asustó un poco tirando sus prendas al suelo - ¡Deuteros! - Exclamó asombrado al verlo dentro también - ¿No estabas ayudándole a tu hermano a colocar los adornos?

- Ya terminamos de adornar copito... Por eso vine a darme un baño también - Le susurró en un tono seductor mientras se retiraba la camisa que llevaba puesta y se acercaba de forma peligrosa a su pareja para acorralarlo justamente abajo de la regadera del baño.

- Aún tenemos parte de nuestra ropa puesta - Murmuró Degel sintiendo los labios de su pareja rozar con los suyos. Sus manos rodearon el cuello del contrario para sentir la calidez de sus cuerpos.

- No importa... De todos modos te la voy a quitar - Después de decir esto comenzó abrir la llave del agua caliente, al principio salía fría para ambos, aquellas ropas que aún llevaban se empapaban.

Mientras el agua se templaba, el gemelo menor le retiraba su pantalón a su pareja.
El agua recorría cada parte de su piel, sus cabellos se encontraban pegados a sus rostros.
Deuteros hizo lo mismo, terminó de quitarse su pantalón y su ropa interior, dejando ver todo su cuerpo en tonos canela.

Las prendas terminaron en el rincón del baño, el moreno se acercó nuevamente a su pareja y lo tomó de la cintura para recargarlo en la pared.
Degel enrolló sus piernas en la cintura de su pareja, mientras sentía la  calidez de sus besos en su cuello.
El agua cayendo de la regadera estaba en su punto exacto pero a ellos no les importaba, ese era el momento de ellos dos y nada más.

El miembro del gemelo menor rozaba con ese lugar cálido arrancando suspiros y gemidos en el contrario. De un momento repentino entró lentamente tratando de no lastimarlo, al sentir lleno su interior, Degel de manera inmediata araño la espalda de su pareja.

- ¡Deuteros!

Los movimientos comenzaban a ser lentos, el sonido del vaivén se escuchaba más escandaloso por el agua que caía sobre sus cuerpos recorriendo su piel, ambos sintiendo la desnudez, entre cada movimiento muriendo de placer...

Aspros se encontraba dentro de la mansión buscando a su gemelo para avisarle que el servicio de buffet había llegado y algunos de los invitados también.

-¡Deuteros! - Lo llamaba mientras caminaba por los largos pasillos, pero no tenía éxito, no veía a su gemelo ni a Degel.

Lentamente abrió  la puerta de la recámara y se dio cuenta que el pequeño Camus se encontraba profundo en su cuna.
Pero los ruidos provenientes del baño lo hicieron voltear rápidamente.

Entre más se acercaba, más se daba cuenta de lo que estaba pasando.

- No pues... Tú sigue durmiendo Camus que tus papás están muy ocupados - Susurró en voz burlona mirando a su sobrino y mejor decidió salir de la recámara de su hermano. No quería importunar ese momento.

Mientras bajaba las escaleras se encontró con Shion quien buscaba desesperadamente a Degel ó a Deuteros.
- ¿Qué pasa Shion?- Lo cuestionó mirándolo muy preocupado buscando con la mirada por toda la mansión.

- Señor Aspros... Afuera hay una señora que se dice llamar Garnet y quiere urgentemente ver a Degel.

En ese momento el gemelo menor recordó que alguna vez Degel les comentó que su madre era quien lo había entregado en ese lugar a Unity. Todo para fines de asegurar una buena suma de dinero para su familia, un arreglo entre ellos.
Chasqueó la lengua molesto - Descuida Shion, mi hermano y Degel están ocupados pero yo la atiendo, ve con los demás y disfruta de la fiesta.

El mencionado asintió y salió al jardín, mientras que Aspros se dirigía a la puerta. Lentamente abrió para poder hablar con esa molesta mujer.

- ¡Pedí ver a mi hijo, no a la servidumbre! - Exclamó molesta Garnet mirando con desprecio al gemelo mayor.

- Mire señora - Cruzó los brazos y se colocó justamente en medio de la puerta para no dejarla pasar - Degel está ocupado en estos momentos... Dudo que quiera verla, si no lo ha hecho desde hace años atrás , a estas alturas menos - Después de decirle esto entró pero fué detenido por la mujer.

- ¡Más te vale que le avises que estoy aquí... ó si no... - Garnert no terminó de hablar, fué interrumpida por Aspros.

- Señora, yo no soy su mensajero para dar recados... Su hijo está ocupado escribiéndole a la cigüeña y no pienso darle un recado suyo.

Rápidamente se soltó del agarre de esa mujer y cerró la puerta sin dejarle dar más explicaciones.
Sólo a lo lejos se escuchaban sus reclamos y los golpes en la puerta pero cuando llegó nuevamente al jardín les dio la orden a los demás que por nada del mundo dejaran pasar a esa molesta mujer.

El baño se había prolongado más, después de haber terminado de entregarse al placer y el deseo, los dos se dieron muchos mimos y caricias mientras terminaban de darse una ducha.
Mientras cerraban la llave de la regadera, tomaron cada uno sus batas de baño, sin embargo los llantos del pequeño Camus los alertaron.

- Es tu turno Deuteros... Me siento muy cansado - Susurró Degel convenciendo a su pareja mientras acariciaba su rostro.

- Lo haré... Pero en la noche seguiremos en lo que estábamos - Susurró Deuteros atrayéndolo más a su cuerpo y depositando un beso en sus labios.

- Me parece bien... - Le respondió mientras lo veía salir del baño para atender a su pequeño hijo.

Ya no le había podido decir a Deuteros que nuevamente otra sorpresa venía en camino, al menos en la noche le daría la noticia.
Después de todo lo que pasó, pudo conocer a alguien que le llenara de alegría su vida y estaba rodeado de personas que valían la pena...
Una vida tranquila y feliz es lo que tiene.

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Ahora si puedo decir ya lo acabé 😅

No tenía previsto esta historia tan larga, incluso yo tenía pensado cuatro capítulos y esto se tornó a diez.

Espero que les haya gustado, ahora que terminé, el tiempo que le dedicaba a esta, ahora pasará al Minos x Camus que subí hace poquito.

Espero que aunque sea corto les haya gustado, en pareja géminis x Acuario amo a este par, son mi adoración junto a los cubitos.
Sin más me despido y les mando un gran abrazo, muchas pero muchas gracias por su valioso tiempo 💖💖💖💖