Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

ONE SHOT: "UN INOCENTE Y DULCE AMOR"

(Basada en la historia "Mi Verdad")


Un apuesto niño de aproximadamente 7 años estaba sentado sobre su cama con la mirada pensativa mirando fijamente hacia la pared cuando un recuerdo vino a su mente.

-.Recuerdo.-

Un par de niños entraban a su casa de la mano de una mujer de de uniforme.

Papá, dijeron los niños de aproximadamente 7 y 12 años corriendo a abrazar a su padre que estaba sentado en un sofá leyendo una revista.

Gokú, Raditz, ¿cómo han estado hijos?, decía el hombre abrazándolos.

Extrañándolos padres, ¿cómo les fue en su viaje a Fri pan?, decía el niño más grande.

Bien Raditz, fue un maravilloso viaje de aniversario de bodas, decía Bardock sonriendo.

Y mamá, ¿dónde está?, decía el más pequeño mirando a todos lados.

Tú madre está con la nueva integrante de la familia, dijo Bardock sonriendo.

¿Nueva integrante de la familia?, dijeron casi gritando el par de niños.

Así es hijos ya saben como es su madre de caritativa. En nuestro viaje a Fri pan pues nos encontramos con una pequeña que había perdido a sus padres hace pocos días atrás, la niña estaba huyendo de unas personas que la querían llevar a un orfanato pues no tenía ningún familiar más que los padres que perdió, tú madre se conmovió de su caso y decidimos adoptarla, al ser yo alguien reconocido en nuestro país pues me fue fácil que la niña quede bajo nuestra tutela en solo días y pues ahora ella está aquí con nosotros, decía Bardock con calma mirando a sus dos hijos.

Una hermanita, dijo Gokú sonriendo.

Una intrusa en la casa que ha llegado a quitarme el amor de mis padres, como si con Gokú no fuera suficiente, pensaba Raditz.

Si hijo una hermanita, dijo Bardock mirando a un pensativo Raditz.

¿Y qué edad tiene?, decía Gokú emocionado.

Tú edad hijo, decía Bardock.

Que emoción al fin tendré con quién jugar ya que Raditz ya no quiere jugar casi conmigo, decía Gokú sonriendo.

Eso no es cierto enano yo si juego contigo, decía Raditz con molestia.

Si pero juegas muy molesto, decía Gokú sonriendo.

Es que yo ya no soy un niño para jugar contigo como si lo fuera, yo ya cumplí 12 años hace 1 mes ya estoy en la adolescencia tengo otros intereses, decía Raditz quedándose callado repentinamente al ver llegar a su madre junto a una bella niña pelinegra que llevaba su cabello suelto y en el un pequeño lasito rosa que hacía juego con el vestido del mismo color que llevaba puesto.

Hijos, dijo Gine haciendo reaccionar a Raditz.

Mami, dijo Gokú corriendo a abrazar a su madre pero al llegar junto a ella quedo estático al notar la presencia de la bella niña de cabello negro.

¡Mamá¡ dijo Raditz caminando a abrazar a su madre.

Raditz, hijo, ¿cómo han estado?, decía Gine.

Bien mamá, bien, papá ya nos contó que disfrutaron su viaje y que hasta invitada nos trajeron, decía Raditz sonriendo mirando a la pequeña niña pelinegra haciendo que ella se colocara tras Gine pues sin saber porque sintió temor ante la mirada del niño de cabellera larga.

Pues me alegra que su padre ya les haya hablado de Milk, ella es la nueva integrante de nuestra familia aunque ella conservara los apellidos de sus padres biológicos ella será como si fuera una más de nuestros hijos, será como una hermanita para ustedes, decía Gine girando a ver a la pequeña pelinegra y tomándola de la manito para presentarla a sus hijos.

Ella es Milk Ox. Muñequita ellos son mis hijos, Raditz y Gokú, decía Gine con dulzura al tiempo que Raditz se acerco a la pelinegra a abrazarla y darle un beso en la mejilla mientras le decía: ¡Bienvenida a la familia¡.

¡Gracias¡ dijo Milk con temor.

Mucho gusto Milk, espero y seamos grandes amigos, decía Gokú acercándose a darle un tierno beso en la mejilla a la pequeña niña pelinegra que la hizo olvidarse del temor que sentía.

-.Fin del recuerdo: Tiempo actual.-

Ya va hacer una semana desde que llegaste a casa, una semana que te la haz pasado encerrada en tú habitación, apenas sales a comer, a las justas cruzamos palabras pues casi no hablas, solo si yo te pregunto algo me contestas, ni hemos jugado nada desde que llegaste y para colmo mamá aún no consigue inscribirte en la escuela a la que asisto, si estuvieras en la escuela te distraerías más con las tareas y jugando con otras niñas pues tal vez no quieras jugar conmigo por ser un niño aunque mamá dice que ello no tiene nada que ver y yo pienso igual. Te la pasas triste aunque en parte comprendo tú tristeza debe ser muy triste quedarte sin tus papitos y estar viviendo con personas extrañas, la tristeza de tu rostro me pone triste también a mi, yo quiero verte sonreír, quiero que seas feliz, si quiero que seas feliz, quiero que podamos jugar juntos, quiero oírte reír......., pensaba el apuesto niño mientras una idea se pasaba por su cabeza haciendo que en su rostro se plasmara una amplia sonrisa.

Claro como no me acorde de ello, pensó el niño.

Minutos después:

El apuesto niñito de cabello alborotado se encontraba buscando en su armario algo.

Esto, esto es lo que buscaba, si lo guardaba aún, estoy seguro que si me lo pongo y ella me lo ve pues sonreirá mucho como mami cada vez que me lo ve puesto y hago esos trucos con todo lo que guardo en el maletín, a mamá le fascinan mis trucos, dice que son muy divertidos, de seguro con ellos haré que Milk vuelva sonreír, pensaba el pequeño niño mientras tomaba una caja de su armario.

En tanto:

En otra habitación una pequeña niña pelinegra se limpiaba con sus pequeñas manitos las lágrimas que habían humedecido su rostro mientras pensaba: Papitos, papitos, lo extraño tanto, los señores que me adoptaron no me tratan mal pero no son ustedes, no son ustedes además de los dos señores quien parece tenerme más aprecio es la señora Gine, ella quería que la llame mamá pero su esposo el señor Bardock dijo que no era correcto que él solo había tenido dos hijos y que yo sería como una especie de pariente para él por ello la señora Gine sugirió que los llamara tíos y a mi me pareció lo mejor, no me hubiera gustado llamar papás a personas que no lo son, si bien el señor Bardock no me trata mal no es tan cariñoso conmigo como lo es la señora Gine y su hijo menor, Gokú, él ha sido tan gentil conmigo desde que me conoció siempre está tratando de hacer que participe en la platica familiar.....

El pensamiento de la pequeña niña fue interrumpido por el sonido de la puerta de su habitación.

Toc toc toc

Milk, ¿estás dentro?, escucho la pequeña niña pelinegra.

¡Gokú¡ dijo la pelinegra mientras se ponía de pie para ir a abrir la puerta al tiempo que parecía que su dolor se olvidaba en ese momento.

Si soy yo, ¿puedo entrar?, decía el niño de cabello alborotado.

Ahora abro, respondió la niña pelinegra mientras caminaba hacia la puerta.

Luego de algunos minutos la pelinegra abrió la puerta pero al hacerlo se quedo sorprendida al ver fuera de ella al pequeño niño que llevaba un sombrero puesto, estaba vestido como un mago y llevaba en la mano un pequeño maletín.

Vengo a mostrarte uno de mis talentos, a mamá le gusta mucho mis trucos de magia, ¿te gustaría verlos?, dijo el niño de cabello alborotado con una encantadora sonrisa.

Si, pero pasa, respondió la pelinegra con una dulce voz.

¿Estuviste llorando?, dijo con preocupación Gokú mientras la pequeña niña asentía.

Sí, extraños a mis papitos, no comprendo por que....., decía la niña pelinegra con voz quebrada.

No quiero que llores más, sé que mis padres no son tus papitos pero ellos te quieren mucho, todos te queremos mucho, tú eres un miembro más de nuestra familia, respondió Gokú soltando el pequeño maletín que llevaba en una de sus manos para poder abrazar a la pelinegra.

Tras un cálido abrazo que duro unos cuantos minutos el par de niños se separaron, la pelinegra se sentó en el piso de la habitación mientras el niño de cabello alborotado empezaba hacer su show de magia frente a la pequeña niña.

Minutos después:

¡Gracias¡ pero, ¿cómo lo hiciste?, decía con una dulce voz la pequeña niña pelinegra tras recibir una rosa que el pequeño niño de cabello alborotado había sacado de un pañuelo.

¿Quieres aprender trucos de magia?, ¿si gustas te enseño?, a mi me los enseño un amigo, decía Gokú sonriendo.

Si, si me gustaría aprender, respondió Milk mientras se formaba una ligera sonrisa en su rostro.

Su sonrisa es muy linda, pensaba el pequeño niño.

Entonces te enseñare,......, decía Gokú mientras empezaba a enseñarle a la pequeña pelinegra los trucos de magia que él había aprendido.

2 semanas después: "Comedor"

Milk, ya está registrada en la escuela, decía feliz Gokú.

Si hijo, está semana ira a la escuela contigo, por suerte pude lograr que le den un cupo para tu aula, decía Gine mientras el par de niños se miraban en complicidad.

¿Estudiaran juntos?, dijo Bardock con ligera molestia en su voz.

Si cariño, ¿es maravilloso verdad?, respondió Gine mirando a su esposo mientras su hijo mayor la observaba y observaba al par de niños.

Tiene sus ventajas que compartan aula pero eso no quiere decir que te vayas a relajar Gokú, dijo Bardock.

Relajar, respondió el niño de cabello alborotado.

Si enano, no puedes copiar de Milk las tareas, tienes que hacerlas tú, dijo Raditz sonriendo.

¡Ah¡ eso, no, no se preocupen papis yo seguiré siendo responsable de mis tareas solo, respondió Gokú sonriendo mientras la pequeña niña pelinegra lo miraba con dulzura.

Su sonrisa, su sonrisa es tan linda, pensaba la pequeña niña.

Que bueno, dijo Bardock mientras continuaba almorzando.

¡Ah cariño¡ se me olvido decirte que mañana tendremos la visita de nuestros socios y amigos, ellos vendrán con sus hijos, decía Gine.

Mamá ni pienses que seré niñero, yo mañana tengo planes con mis amigos,...., decía Raditz.

No te preocupes hijo, no serás niñero de nadie, dijo Bardock.

¡Gracias padre¡ respondió Raditz.

Al día siguiente:

Un grupo de niños jugaban en el jardín mientras los padres de estos platicaban dentro de la casa.

Yo quiero ser la princesa, ¿por qué ella tiene que serlo?, decía una niña peli azul mirando con desprecio a una pequeña pelinegra.

Si es cierto además ella ni nuestra amiga es, ella no debería estar aquí jugando con nosotros, aquí solo podemos ser tus princesas nosotras, decía una niña rubia mirando al apuesto niño de cabello alborotado haciendo que la niña pelinegra bajara la mirada.

Si Milk no juega, yo tampoco lo hago además ella puede ser su amiga si ustedes lo permitieran, respondió Gokú mientras se acercaba a abrazar a la pelinegra.

No discutas con tus amigos por mí, tal vez sea mejor que me vaya a mi habitación, dijo Milk con voz entrecortada.

No, claro que no, tú te quedas, los dos jugaremos solos, ellas que jueguen con los demás además hay más niños para que hagan de sus príncipes, respondió Gokú.

Hay Gokú, no seas así, no nos puedes cambiar por una huérfana, decía Marón mientras Lunch asentía y los demás niños miraban expectantes la respuesta del niño de cabello alborotado.
No vuelvan a llamar a Milk así, no lo vuelvan hacer, respondió Gokú furioso.

Pero si Marón solo dijo la verdad, dijo Lunch.

Ya basta chicas, dijo un niño de mirada ceñuda.

Es que no nos puede cambiar por ella, decían el par de berrinchudas niñas mientras el niño de cabello alborotado tomaba de la mano a la niña pelinegra y la llevaba hacia unos columpios que había en su jardín.

Pues ya las cambió, ella es más amiga de él que ustedes, decía otra niña peli azul sonriendo mientras miraba al par de pelinegros jugar en los columpios.

1 mes después:

Un par de niños hacían su tarea en la habitación de uno de ellos.

Creo que ya me salio, decía Gokú sonriendo mientras cerraba su libro.

¿Ya acabaste con la tarea?, pregunto Milk.

Si, ya la termine, ahora me tienes que dar lo que me prometiste si yo acababa primero, decía el pequeño niño de cabello alborotado.

Está bien, te lo daré pero no solo por que me ganaste en hacer la tarea sino también por lo de hoy en la escuela, dijo la pequeña pelinegra con cierta nostalgia en su voz mientras empezaba a buscar en su mochila algo.

No tienes que agradecer eso, yo lo volvería hacer, yo nunca voy a permitir que te lastimen, dijo Gokú.

¡Gracias¡ eres como mi ángel de la guarda, siempre estás cuidando de mí, respondió Milk mientras sus pequeñas mejillas se tenían de carmín pero el pequeño niño no pudo notar el sonrojo de su amiguita pues ella estaba buscando en su mochila algo.

Es que te quiero mucho, eres muy especial para mi Milk, dijo Gokú con una dulce sonrisa mientras sentía su rostro arder.

Tú también eres especial para mí, dijo Milk haciendo una pausa para decir: ¿Dónde lo abre puesto?, juraría que lo guarde en mi mochila.

Ya dámelo Milk, sabes que es mi preferido, no me niegues el placer de comerlo, decía quejumbroso Gokú.

Es que no lo encuentro, respondió la pelinegra con una dulce sonrisa en su rostro haciendo una pausa para decir: Aquí está, toma, te lo ganaste.

¡Gracias¡ dijo Gokú mientras recibía la barrita de chocolate pero ante el roce de sus manitos el par de niños se sonrojaron sin saber porque.

¡Disculpa¡ dijo Milk.

Gokú no dijo nada, solo sonrío mientras partía la barrita de chocolate en dos partes iguales.

Toma, dijo Gokú.

Es tuyo, respondió la pelinegra con dulzura.

Pero quiero compartirlo contigo, se que es tú preferido también, respondió Gokú con una encantadora sonrisa.

¡Gracias¡ dijo Milk mientras llevaba la mitad de su barrita a su boca al mismo tiempo que el niño de cabello alborotado mientras se miraban con dulzura e inocencia a la vez y sus mejillas se teñían de carmín.

¡Gokú, Milk¡ escucharon los niños.

Aquí estamos, dijeron a la vez los niños.

Bajen a cenar, mamá y papá los están esperando, dijo Raditz tras abrir la puerta de la habitación.

Si, si, dijeron el par de niños.

2 horas después: "Habitación de Gokú"

Un pequeño niño de cabello alborotado se encontraba acostado en su cama mirando al techo cuando un recuerdo vino a su cabeza.

-.Recuerdo.-

Un pequeño niño de cabello alborotado se encontraba caminando por un pasillo cuando de repente una imagen a algunos metros suyos hizo que detuviera sus pasos repentinamente al tiempo que sentía su sangre arder.

Déjenme, déjenme pasar, decía con voz quebrada la pelinegra.

La huerfanita esta hablando, dijo un joven.

Así, no, decía una niña de cabello morado.

Ya sabes que tienes que hacer para dejarte pasar, decía otra niña de cabello marrón.

Justo cuando la pelinegra iba a arrodillarse el niño de cabello alborotado llego tras de ella y la tomo del brazo para evitar que lo hiciera.

Que les pasa a ustedes, no tienen porque tratar así a Milk, decía Gokú con firmeza al tiempo que la pequeña niña se abrazo a él y empezó a sollozar.

Son, no te metas, este es asunto con ella, no contigo, dijo uno de los jóvenes.

Todo lo que tenga que ver con Milk, tiene que ver conmigo,......., decía el niño de cabello alborotado.

-.Fin del Recuerdo: Tiempo actual.-

Todo lo que tenga que ver con Milk, tiene que ver conmigo, si eso es cierto, porque Milk es especial para mí, muy, muy especial, desde que la conocí tuve ganas de protegerla y más cuando supe que no tenía papitos, cuando la veía tan triste, al menos ahora ya sonríe y su sonrisa es la sonrisa más hermosa que e visto, bueno ella es muy linda parece una muñequita como dice mamá, es más cuando seamos grandes me gustaría que sea mi novia, claro eso será cuando seamos grandes y si ella lo quiere también, aún estamos muy chicos para andar de novios aunque ella me guste, porque me gusta, me gusta, como no me va gustar si es la niña más linda que e visto en mi vida pero por ahora no puedo decirle que me gusta, solo seremos amigos, los mejores amigos, solo eso, mientras tanto yo solo viviré para cuidarte y hacerte sonreír, pensaba el apuesto niño de cabello alborotado mientras sus mejillas se teñían de carmín.

Habitación de Milk:

Una pequeña pelinegra se encontraba sentada sobre su cama mirando una foto que hace algunos días Gine les había tomado a ella y a su hijo menor en una feria.

¡Gokú¡ mi ángel guardián, eres tan lindo y dulce conmigo, desde que llegue a tú casa, siempre estás tratando de hacerme sonreír, me cuidas y me proteges de todos los niños y niñas que intentan burlarse de mi por no tener padres, contigo a mi lado me siento tan, tan feliz que a veces siento que mi corazón estallara de alegría y más cuando veo tú sonrisa, tú sonrisa es muy linda de verdad con ella me trasmites tanta paz, de seguro mis papitos te pusieron en mi camino para que seas mi apoyo, para que seas mi ángel guardián, por ello tengo que buscar la manera de agradecerte todo lo que haces por mí, pero ¿cómo puedo agradecerte tanto cariño?, ¿cómo?, pensaba la pequeña niña pelinegra mientras sus ojitos brillaban de alegría y en su bello rostro se plasmaba una dulce sonrisa.

Al día siguiente:

Un par de niños pelinegros abordaban un auto con sus mochilas en la mano luego de varias horas de clase en su escuela.

¡Gokú¡ dijo la pequeña pelinegra al estar sentada junto al niño.

Dime, ¿qué sucede?, respondió el apuesto niño de cabello alborotado.

Cuando lleguemos a casa te daré algo, dijo Milk con las mejillas sonrojadas.

Algo, ¿por qué?, si no hemos competido aún con las tareas, decía Gokú sonriendo.

No es por las tareas que te lo daré, respondió Milk.

¿Entonces?, dijo Gokú.

Ya lo sabrás, solo quería que supieras que te daré algo, respondió Milk con una dulce sonrisa.

Minutos después:

El par de niños bajaron del auto y echaron a correr con sus mochilas al hombro.

¡Buenas tardes mamá¡ ¡buenas tardes papá¡ decía Gokú mientras entraba a la casa.

¡Buenas tardes tíos¡ dijo Milk que iba tras el niño de cabello alborotado.

Esas no son formas de entrar a la casa, dijo Bardock con molestia mientras los pequeños continuaron su loca carrera.

Cariño, son niños, respondió Gine.

Si es cierto pero nuestro hijo no es un niño corriente pero tal parece que por culpa de esa niña se le están pegando los malos hábitos, dijo Bardock.

No seas así cielo, no tiene nada de malo que entren corriendo a casa, respondió Gine con calma.

Hay mujer, solo espero que esa niña no nos de problemas a futuro, dijo Bardock con molestia en su voz.

Que problemas podría traernos una muñequita como Milk, respondió Gine.

No quiero ni pensar por ahora en esos posibles problemas, dijo Bardock.

Mientras tanto:

Un par de niños entraban a una habitación, dejaron sus mochilas en el piso y luego se pusieron frente a frente.

¿Qué me darás y por qué?, pregunto el niño de cabello alborotado.

Esto, dijo la pelinegra dándole un beso en la mejilla al niño de cabello alborotado haciendo que este sonrojara al igual que ella.

¿Por qué hiciste eso Milk?, decía nervioso Gokú.

Porqué quiero darte las gracias por ser tan bueno conmigo, por brindarme tu amistad, tu cariño y por siempre estar cuidándome, respondió sonrojada Milk.

Lo hago con gusto porque eres especial para mi Milk, por ello siempre te cuidare, dijo sonrojado el niño de cabello alborotado mientras tomaba las manitos de la pelinegra.

¿En verdad?, pregunto emocionada Milk.

Si es verdad, respondió el niño de cabello alborotado sonriendo.

Vamos a jugar a los columpios hasta que sea la hora de almuerzo, dijo Milk sonriendo.

Si, vamos, respondió Gokú mientras corría junto a la pequeña pelinegra tomados de la mano hacia el jardín de su casa.

Minutos después:

En un jardín un niño de cabello alborotado ayuda a columpiarse a una pequeña pelinegra mientras pensaba: ¡Te quiero, te quiero Milk, por ello a partir de ahora prometo siempre hacerte sonreír y cuidarte siempre, siempre¡

En un determinado momento el pequeño niño dejo de impulsar el columpio donde estaba sentada su pequeña amiga haciendo que este se detenga.

¿Ya te cansaste?, dijo Milk intrigada mientras aún permanecía sentada en el columpio.

No, solo quería darte algo, respondió Gokú antes de colocar sus labios sobre la mejilla de su pequeña amiga haciendo que esta se sonroje.

¿Y eso?, dijo Milk con las mejillas sonrojas.

Es porque te quiero, respondió Gokú mientras la miraba dulcemente.

Yo también te quiero, dijo Milk poniéndose de pie para abrazar al niño de cabello alborotado que sonrío ante las palabras de la pequeña pelinegra al tiempo que los ojitos de ambos brillaban de la emoción.




FIN




Nota:

Este es el primer one shot que forma parte de esta colección llamada "Sentimientos" y que esta basada en la historia titulada "Mi Verdad", a través de este one shot quise plasmar el amor dulce e inocente de la niñez, espero haber podido lograr ello y poder haberles trasmitido a través de está historia la pureza de un amor de niños.

De antemano gracias a todas las personas que se den la oportunidad de leerlo ya que lo escrito con muchísimo cariño para ustedes.

Y con este proyecto será hasta una nueva actualización, que tengan un lindo fin de semana.

Con mucho cariño.

PrincesaLirio.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro