Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

ONE SHOT: "¡GRACIAS¡"


(Basada en la futura historia GoChi, titulada: "Una nueva oportunidad de sentir")


Un apuesto hombre, de aproximadamente 30 años, mirada meditabunda, se encontraba parado junto a una ventana mirando hacia el exterior de su pequeña pero acogedora casa, a una bella mujer de piel blanca cual porcelana y cabellos negros cual noche, de aproximadamente la misma edad que él, quien se encontraba colocando en un tendedero algunas prendas, que minutos antes había lavado.

Milk, mi bella Milk, ni pensar que han pasado tantos años ya desde que nos conocimos, tantos años de amistad, de apoyo, de locuras juntos, si tantos años de locuras juntos, tantos años desde que me diste una nueva oportunidad de sentir, si una nueva oportunidad de sentir, de sentir amor, si amor, y yo que pensaba que ya no podría volver a enamorarme tras aquella desilusión, pero tú me devolviste la esperanza, la ilusión, tú me devolviste la ilusión, me hiciste volver a creer en el amor. Aún recuerdo lo que me dijiste tras algunos meses de falso noviazgo, justo para esta fecha.

-. Recuerdo .-

Un par de atractivos jovencitos pelinegros se encontraban bebiendo unos refrescos mientras platicaban en una de las mesas de un pequeño local, al tiempo que música navideña inundaba el lugar.

Y si lo hacemos real, decía con dulzura una bella pelinegra mirando fijamente a un apuesto jovencito de cabello alborotado, que ante la petición le dio un ataque de tos.

Cof cof cof

Cof cof cof

Gokú, dijo preocupada la pelinegra poniéndose de pie, para darle de palmaditas en la espalda su amigo.

Ya, ya, ya estoy mejor, ya no me golpees así Milk, decía el apuesto jovencito con una sonrisa nerviosa.

Pero si no te estoy golpeando, solo estoy dándote palmaditas y muy suaves, respondió la pelinegra.

Si tienes razón, disculpa, dijo Gokú aún en tono nervioso.

¿Qué sucedió?, a poco te puso nervioso lo que dije, decía la pelinegra sonriendo.

No claro que no, además me imagino que no hablabas en serio, ¿verdad?, solo bromeabas, ¿no es así?, respondía el joven de cabello alborotado con seguridad mirando a su bella amiga.

No, no bromeaba, dijo en tono ofendido la joven.

¿No?, respondió confundo el joven de cabello alborotado.

No, claro que no, dijo Milk con firmeza, haciendo una pausa para continuar diciendo: Gokú, hablo en serio, creo que podemos intentarlo, hay buena química entre los dos, además......

¿Y Vegueta?, respondió rápidamente el joven de cabello alborotado.

A ese imbécil no me lo menciones, es un estúpido irrespetuoso, nunca hubo nada entre los dos, ni lo abra, dijo con firmeza la pelinegra.

Vaya, y yo que pensé que por mi culpa lo de ustedes no llego a darse, ya estaba con sentimiento de culpa, respondía Gokú.

No, claro que no, entre los dos nunca hubo nada, solo saliditas, pero nada más, sino no hubiera aceptado ayudarte, aunque mi ayuda no valió para mucho, bueno, si para algo, decía Milk.

No comprendo, respondió Gokú.

Para darme cuenta que anduve perdiendo el tiempo buscando el chico perfecto en hombres equivocados, cuando siempre lo tuve junto a mí, dijo la pelinegra, haciendo que su apuesto amigo se sonrojará.

Pero Milk, somos amigos,..., decía Gokú un tanto sonrojado.

Bueno eso lo sabemos nosotros, pero ante los demás somos novios, respondió Milk sonriendo.

Es cierto, pero quedamos que solo sería por un tiempo para molestarla, pero ya vez, de nada sirvió, decía con amargura Gokú.

Gokú, respondió la pelinegra, mientras tomaba las manos de su amigo entre las suyas, poniéndolo más nervioso.

¿Qué?, dijo el joven de cabello alborotado.

No tengas miedo, hagámoslo real, déjalo todo en mis manos, yo,..., yo, yo te amo, dijo con firmeza la pelinegra mientras miraba dulcemente a su apuesto amigo.

-. Fin de recuerdo: Tiempo actual .-

Y ese día empezó todo entre los dos, ya todo era distinto entre los dos, debía ser porque deje de verte como la novia falsa, para verte como mi novia de verdad, por ello hasta el beso que nos dimos esa tarde me fue distinto, y los demás días solo sirvieron para que tú cada día te ganes más y más mi corazón, pensaba Gokú, al tiempo que por la puerta de la casa entraba ya con un canasto vacío la bella mujer, quien al ver a su esposo meditabundo dejo el canasto sobre una silla y camino hacia él.

¿En qué piensas?, dijo Milk tras besar la mejilla de su esposo.

En ti, respondió Gokú.

¿En mí?, dijo la pelinegra sonriendo.

Si mujer maravillosa, en ti, respondió Gokú mirando con dulzura a la pelinegra.

Voy a calentar el asado, vi que ya cortaste el pino más alto del bosque, sin duda este año, tendremos en casa un gigantesco árbol de navidad para decorar, respondía Milk sonriendo.

Sí, los niños me ayudaron a elegir cual cortar, y hablando de los niños, ¿dónde están?, decía Gokú.

Papá vino por ellos y se los llevó al pueblo, me dijo que les compraría algunos regalos aprovechando los días previos a la navidad, porque si espera hasta el mismo día ya no podrá hacerlo pues las calles estarán repletas de gente, respondía la pelinegra.

Si, de hecho es así, entonces en cuanto los niños vengan, decoramos con ellos el árbol, ¿te parece?, dijo Gokú mirando a su esposa.

Si, mientras tanto, haré una ensalada, respondió la pelinegra, mientras se colocaba un delantal, todo seguido por la mirada de su esposo.

Milk, tengo tanto que agradecerte sin duda, no solo me hiciste volver a creer en el amor, me regalaste una familia, dos hermosos hijos, me das paz, pero a la vez alegría, sin duda tú siempre fuiste la chica que yo buscaba solo que no me daba cuenta, pensaba Gokú, mientras observaba a su esposa picar las verduras.

Horas más tarde:

Ja ja ja ja, aún no niños, aún no, ello lo tienen que abrir en navidad, decía un gigantesco hombre.

No te preocupes padre, yo me encargo de que estos niños no quieran ver sus regalos antes de ello, decía Milk sonriendo.

Pero mamá, se quejaban un par de niños, uno más pequeño que el otro.

Hijos, el abuelo les compro otros juguetes, jueguen con ellos, pero estos aún los guardaran para la navidad, dijo Milk.

Mejor vamos a que me ayuden con el árbol, dijo Gokú.

Si, si, dijeron el par de niños.

Gohan, cuida a Goten, decía Milk.

Si mamá, respondió el niño más grande.

3 horas después:

Una pelinegra miraba desde el umbral de su puerta el gigantesco pino que había sido adornado con cadenitas de colores y coloridas figuras de diferentes formas.

Solo faltan los regalos, dijo Gohan.

Si, acotaba Goten.

Ellos los podremos el mismo día de la navidad, respondió Gokú con calma.

Ya acabaron, dijo Milk sonriendo.

No, aún no, falta la estrella, respondió Gokú.

Entonces yo la pondré dijo Milk.

Bien, ven te ayudo, respondió Gokú con dulzura.

La pelinegra se acercó a su esposo, para que la ayudara a subir en una escalera de metal y así pueda colocar la estrella en la parte superior del árbol.

Mientras la mujer pelinegra hacia su trabajo, su esposo no dejaba de contemplarla, mientras recordaba.

-.Recuerdo.-

Ja ja ja, que gracioso te ves Gokú, decía una pelinegra, tras rodear a un joven de cabello alborotado con unas cadenas de color verde.

Así, pues ahora verás quién se ve más gracioso, respondía Gokú mientras colocaba una de las cadenas sobre la cabeza de la joven.

No se vale, decía Milk.

¿Por qué?, respondió Gokú.

Porque fue mi idea, usar las cadenas, dijo Milk sonriendo.

Entonces que uso, decía Gokú, posando su mirada en una estrella que había en una caja.

No sé, pero no puede ser lo mismo que yo, respondió la pelinegra, al tiempo que el joven de cabello alborotado tomaba la estrella de la caja.

¿Toma?, decía Gokú, al tiempo que colocaba una estrella de papel en el cabello de la pelinegra.

¿Qué me has puesto?, respondió Milk.

Se ve bien en tu cabello, dijo Gokú sonriendo, mientras la pelinegra llevaba una de sus manos a su cabello.

Una estrella, dijo Milk sonriendo.

-.Fin del recuerdo: Tiempo actual.-

Gokú, Gokú, Gokú, escucho el apuesto hombre.

¡Eh¡ dime amor, dijo Gokú.

Los chicos te están diciendo buenas noches, respondió Milk dulcemente.

Buenas noches hijos, dijo Gokú mirando a sus retoños.

Buenas noches papá, dijeron los niños, antes de retirarse del lugar.

Quedo lindo, dijo Milk mirando el árbol.

Si, respondió Gokú,

¿Te pasa algo?, te siento como pensativo, decía Milk posando su mirada en su esposo.

¡Eh¡ no, no me pasa nada, respondió Gokú, haciendo una pausa para decir al tiempo que tomaba las manos de su esposa: Milk quiero decirte algo.

¿Qué?, respondió intrigada la mujer.

Gracias, dijo Gokú mirando fijamente a los ojos a la pelinegra.

¿Gracias?, respondió Milk sonriendo.

Si, gracias por llegar a mi vida, gracias por darle alegría, gracias por ser mi cómplice, mi consejera, mi amiga, mi mujer, mi amante, gracias por esta bella familia, gracias por tu paciencia, tú amor y comprensión, gracias por todo, pero gracias sobre todo por haber sido tú quien propuso que lo nuestro sea real, si no lo hubieras hecho tal vez seguiríamos aún como amigos, y no hubiera podido conocer la verdadera felicidad, por ello no me cansare de darte las gracias, te amo Milk, eres el amor de mi vida, dijo Gokú mientras acercaba el rostro al de su esposa.

Y tú él mío, siempre lo fuiste, siempre, siempre, respondió la pelinegra antes de sentir los cálidos labios de su esposo sobre los suyos.





FIN





Nota:

En vísperas de la navidad, decidí crear este pequeño one shot ambientado en esta época del año, con el cual doy por concluida esta obra llamada "Sentimientos", espero y one shot sea de su agrado, así como toda esta obra en general.

Les reitero nuevamente mi agradecimiento a cada una de esas personitas que leen mis historias, ¡Gracias por hacerse un tiempo en su vida para leer mis obras¡ ¡Gracias¡ ¡Muchas Gracias¡

Esta obra ha terminado, pero las historias que figuran en ellas será ampliadas a futuro Dios mediante.

Buen fin de semana, y conmigo será hasta una nueva actualización de mis obras en proceso.

Con mucho cariño.

PrincesaLirio.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro