Clark Kent lo miró desde su elevada posición, permanecía en el aire frente a él, dentro de su habitación su rostro reflejaba un conjunto de distintas emociones: sorpresa, miedo y arrepentimiento. La mirada de disculpa en su rostro impoluto le provocaba a Bruce un dolor inmenso.

Sus ojos azules inigualables lo hacían sentir culpable, dejaban a Bruce sin saber que hacer, sin saber como escapar. Nada se comparaba a esa sensación, a la sensación de sentirse sucio...

Sentirse un error.

Ni sus peores enemigos habían logrado causarle tanto daño en tan poco tiempo, ni si quiera el Joker, Bane o Ra's al Ghul; nadie le había causado tanto dolor con una simple mirada, provocando en Bruce unas enormes ganas de llorar.

—Lo siento Bruce... esto no debió suceder... yo estoy con Lois y yo no... —Su voz salió cargada de culpa y arrepentimiento.

Cada de una de las acciones de Clark eran la causa de que Bruce sintiera ese dolor, dolor que ocultaba con todas sus fuerzas y años de práctica y experencia en negar sus propias emociones.

Antes de que pudiera decir más, Bruce lo detuvo.

—Vete, Clark, olvida esto, nunca pasó —dijo desde la cama, pasó una mano a través de su cabello en un gesto que para el otro podría ser considerado casual e indiferente, pero que en realidad reflejaba debilidad y nerviosismo.

Solo una sábana negra hasta la cadera cubría el cuerpo de Bruce, mostrando el resto de su cuerpo marcado, las marcas en su piel no solo eran sus cicatrices de años de lucha, si no también pruebas de lo sucedido entre ambos, pruebas de las manos y boca de Clark sobre su piel.

—... Lo siento —susurró Clark, antes de desaparecer a través del balcón.

Obviamente escapando, dejando a Bruce ahogándose en un mar de sentimientos dañinos.

Una profunda tristeza lo envolvía, Bruce se sentía como una pobre prostituta, como basura. Él jamás pensó sentir semejante opresión en su pecho por una situación como esa. Era tan ridículo.

Se dio cuenta de que en realidad no era nadie, tan solo era un idiota que por un momento creyó que las cosas en su vida podrían cambiar, que el peso sobre sus hombros quizás seria mas llevadero a lado d eun compañero a su lado.

Solo era un estúpido que por una noche, creyó podría ser amado por quien amaba.

Al final una vez más la realidad se estrellaba contra Bruce, se daba cuenta de que realmente solo había sido un error estúpido.

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Mucho ooc por venir. Gracias por leer.