Caminaron en silencio hasta el campus, JungKook llevaba a Taehyung de la mano, acariciando suavemente durante el trayecto.

Llegaron a la habitación del azabache y antes de entrar JungKook se puso en frente de Taehyung.

-Cierra los ojos- Sonrió mientras con sus manos guiaba a Taehyung para que cerrara sus ojos.

-¿Por qué no puedo ver?- Estaba nervioso y ansioso.

-Es una sorpresa-

-Pero ya sé que es mi regalo de aniversario- Taehyung intento abrir los ojos.

-No hagas trampa- Le dio un beso en los ojos, obligándolo a cerrar nuevamente. -Ya sé que te dije que era tu regalo, pero igual tienes que cerrar los ojos-

-Esta bien, está bien- Taehyung suspiró resignado.

El azabache celebró y reviso que Taehyung tuviera sus ojos cerrados, abrió la puerta de su habitación, encendió la luz. Ayudo a Taehyung a entrar en la habitación con cuidado, se detuvieron al lado de la cama.

-No abras todavía-

-Ok, ok- Taehyung reía nervioso.

-No hagas trampa- Le dijo mientras removía cosas. Se escuchaba que algo estaba haciendo en la habitación.

-No estoy haciendo trampa-

Taehyung permaneció unos minutos allí, esperando con nervios.

-Listo, ya puedes abrir-

Taehyung abrió sus ojos y lo primero que vio fue un hermoso corazón de peluche con las iniciales de ambos.

Taehyung sonrió emocionado y se acercó para agarrar el corazón, era suave, acolchonado y olía al perfume de JungKook. Lo olfateo encantado, disfrutando del aroma.

Volteó a ver a su novio y este lo miraba sonriente mientras sostenía algo en las manos.

-Esto es para ti- Le entregó un papel y Taehyung lo recibió sorprendido y feliz.

-¿Que es?-

-Míralo- Dijo con emoción.

Taehyung miró aquello y sonrió. -¿Y esto?-

-Tú Sensei te está entregando tu diploma-

-¿Soy el mejor novio?- Dijo sonrojado.

-El mejor de todos- Se acercó y acunó el rostro del pelirrojo. -Quiero conocer todo de ti, quiero que confíes en mí, déjame acompañarte en todo-

Taehyung no pudo evitar llorar, su novio era muy especial con él y por miedo le ocultó algo importante de su vida, él merecía saber la verdad.

-Perdóname por...-

-No digas nada, yo esperaré hasta que estés listo-

-A veces pienso que no te merezco- Limpio lágrimas que caían por sus mejillas.

-Y yo pienso que el afortunado soy yo al tenerte a mi lado- JungKook lo abrazo. -Ser tu Sensei ha sido lo mejor que he hecho en mi vida, saber que fui el primero en todo me enorgullece-

-También te excita- Sonrió coqueto.

JungKook lamió sus labios con lujuria, lo miró de arriba a abajo, lo abrazó por la cintura.

-Cuando los chicos propusieron que te enseñara tácticas de conquista, para que salieras con Hoseok- Jungkook hizo una pausa y lo miró fijamente. -Sentí muchos celos, yo.. acababa de encontrarte y al verte supe que mis sentimientos hacia ti aún estaban aquí- Señaló su corazón. -Acepte ser tu Sensei, pero mi meta era enamorarte, que te olvidarás de Hoseok-

-Sin saber que no tenías que hacer nada, yo ya estaba enamorado de ti- Dijo Taehyung y sus mejillas se tornaron rojas.

-Si, no te dije nada porque no quería perderte- Lo acercó a su cuerpo y afianzó el agarre en la cadera.

-Dos bobitos enamorados sin decirse nada- Taehyung estaba feliz, su hermosa sonrisa lo demostraba.

-No sabes lo que sentí al probar tus labios- Le dio un corto beso. -Desde ese momento supe que no quería que nadie más te besará, fui el primero y me propuse en ser el último-

-Hablas como si te fuera a cambiar por alguien- Su sonrisa fue tímida al decirle esto.

-Si, suena egoísta...- Taehyung interrumpió

-Celoso, suena celoso-

-Bueno, egoísta y.. celoso- Le dio un beso en la mejilla, descendiendo por el cuello. -Te quiero solo para mi, por eso trato de ser el mejor para ti-

Taehyung cerró sus ojos, el cuello era su punto débil. -Eres el mejor.. mgh... lo sabes-

-Hoy te entrego este certificado, pero las lecciones siguen, hay mucho que quiero enseñarte-

Taehyung alzó una ceja y lo miró. -¿Ah si?- Rodeó el cuello de su novio con sus brazos. -¿Cómo cuales?-

-Solo necesito tu permiso y aprobación para empezar- Jungkook con sus manos amasó el trasero de Taehyung, con lentitud.

-Soy tuyo, tienes mi aprobación- Mordió sus labios sin dejar de mirar a Jungkook fijamente a los ojos.

-Por ahora te voy a hacer el amor, como premio por tu graduación, luego vemos lo de las demás lecciones- Metió una mano por debajo de la camisa y empezó a acariciarle la espalda.

-Me parece un buen comienzo-

El amor no era una duda entre ellos, en muchas oportunidades lo habían profesado con palabras, acciones y demostraciones de afecto.

JungKook siempre se esmeraba un poco más por ser el mejor, el merecedor de un amor tan puro y genuino como el que Taehyung le regalaba.

Para Taehyung nunca hubo nadie aparte de JungKook, solo él gobernaba su mente y su corazón. Eso era algo que el azabache se reprendía mentalmente, al haber besado y tocado otros cuerpos.

Nadie lo amó como Taehyung, nadie nunca le entregó su ser, su alma y su corazón.

Y si, era realmente egoísta y celoso con su precioso, al ser el primero en todo lo hacía merecedor de cuidar aquella joya tan preciosa que era su pelirrojo.

Un hermoso chico, tierno, dulce y enamorado de él, solo de él. Sin malicia en su corazón noble, siempre ayudando a quien lo necesitará.

¿Cómo no amarlo?

¿Cómo no querer protegerlo?

Desde niño quiso ser un superhéroe para salvarlo de aquel horrible hombre que tenía como padre, se lamentó no poder hacer más que estar a su lado cuando lo necesitaba, como su lugar seguro.

Le dolió en el alma saber que Taehyung al irse de su lado, tuvo que soportar maltratos sin su soporte.

Por esa razón, cuando volvió a su vida, su meta era hacerlo feliz, así eso significará enseñarle para conquistar a otro.

No contaba que su amor hacia él, lo volvería egoísta, probar los labios de Taehyung por primera vez fue algo que nunca pudo describir, el sentimiento en su corazón fue abrumador, quería más, mucho más.

Sin embargo pensó en Taehyung y no en él y sus necesidades, quiso darle a su precioso la mejor relación que pudo, él no era una aventura en su vida, él era el amor de su vida.

Durante el inicio cometió errores, hiriendo a Taehyung, nunca quiso hacerlo sufrir, aquella vez dónde los malos entendidos opacaron su hermosa sonrisa.

Decidió que le diría todo, abriría su corazón completamente, amándolo sin restricciones. Sabía que aquel momento vivido horas antes, tenía relación con su padre.

Taehyung nunca habló sobre su vida después de irse, el tema de su padre siempre era casi nulo, lo único que sabía, fue que murió y ellos regresaron.

Con amor, mucho amor, le profesaba sus sentimientos, tanto con palabras como acciones. Cada vez que hacían el amor, se sentía como la primera vez.

Los labios de JungKook lo besaban con adoración, disfrutando de la piel que era solo para él, Taehyung se estremecia ante la mínima caricia y eso le encantaba en demasia.

En aquella habitación, JungKook desnudo a Taehyung con lentitud, siempre disfrutando de cada roce y cada caricia. Lo había visto desnudo tantas veces, pero siempre lo admiraba como si fuera la primera.

Era embriagador escuchar los gemidos que salían de aquellos labios gruesos, mientras lo besaba por el cuello.

JungKook era adicto a Taehyung.

Dejó algunas marcas, mientras recorría aquella piel canela, lamió cada pezón, hasta dejarlo rojo y sensible.

No había sonido más precioso que la dulce voz del pelirrojo gimiendo.

-Jungkook... JungKook...-

Los cuerpos se rozaban, sus miembros estaban erectos, la lujuria y el deseo se combinaba con el amor que sentían, era maravilloso hacer el amor con el amor de tu vida.

-Te amo tanto, mi precioso-

Llevo sus dedos a la entrada, Taehyung jadeo ansioso por sentirse lleno en su interior y un gemido agudo se escuchó cuando las paredes se expandieron por la intromisión.

Taehyung enterró sus uñas en la espalda ancha de su novio mientras su entrada era preparada con esmero.

JungKook besó a Taehyung con ferocidad y acomodó su miembro en la entrada, quería enterrarse, no quería esperar más y con suavidad entró, amaba siempre la forma en que el cuerpo de su pareja se retorcía de placer al sentirlo.

Taehyung era hipersensible a su toque y eso le encantaba, lo prendía más, Taehyung era como su droga, entre más la probaba, más adicto era.

Los movimientos al inicio siempre eran lentos, adorando cada gesto y respuesta del pelirrojo a sus embestidas, la desesperación en el rostro de su amado pidiendo más fuerza y más velocidad lo hacían sentirse dueño y amo.

Le encantaba sentirse poderoso, tener en su dominio cada gemido y cada súplica.

Amaba ser su Sensei, ser su único y su todo.

Llamenlo sumiso o dominado, pero amaba mucho más cuando Taehyung era quien dominaba sus encuentros.

En un movimiento lento sin salír de aquella deliciosa cavidad, el azabache volteo el cuerpo de su pareja, quedando debajo y Taehyung encima de él.

-Muevete mi precioso- Le ordenó

Era una orden, creía él y así se sintió así hasta que Taehyung empezó su movimiento de caderas, lento, tortuoso y dominante.

Taehyung era su perdición.

Con fuerza amasó los glúteos, queriendo controlar los movimientos pero el pelirrojo con picardía y poderío no se lo permitió.

JungKook se resigno y entregó el poder, beso el torso de su novio mientras su polla era envuelta por aquel agujero que lo enloquecía.

No tardaron mucho en aumentar los movimientos, Taehyung saltaba gustoso mientras besaba a JungKook con pasión.

Entre besos y gemidos, ambos llegaron al climax, con gritos de satisfacción por un encuentro maravilloso.

En aquella posición, se besaron con dulzura mientras el orgasmo se desvanecía.

Aquella como muchas noches, se entregaron en cuerpo y alma, existían muchas cosas por vivir como pareja, ambos lo sabían.

Taehyung estaba listo para hablar sobre su pasado, su karma, su trauma.

La muerte de su padre, el tormento de sus noches, la culpa y el arrepentimiento.

Un ser que marcó su vida, lo dañó, lo destrozó, llevándolo a cometer un acto del cuál se arrepiente de no haber echo antes.

Hola mis Lorechizadas, está semana ha sido un poco difícil, espero este capítulo les ayude a sobrellevar todo.

Cómo muchos saben, escribo porque es mi pasatiempo favorito, mi inspiración siempre es mi hermoso Taekook.

Ahora que no están, es difícil para todos, sin embargo, escribir sobre ellos y su amor bonito me conforta, espero a ustedes también.

Los quiero, Lore 💚💜🐰🐻