Sasuke sonrió al cielo tras la ventana, ese día hacía un calor sofocante, aun que dentro de la casa no lo notaba gracias al aire acondicionado. Por un instante sus ojos viajaron a la fotografía de él con sus padre sy sus hermanos. Se acercó lentamente y acarició el rostro de sus padres con la yema de sus dedos.

-Buenos días.- Susurró a la fotografía.- Hoy es mi cumpleaños, me gustaría que estubieseis aquí, conmigo.-Sonrió tristemente.- Aun que me hayais mandado a Karin y a su prima, os necesito.

Tras dejar la foto nuevamente en el mueble, se dirigió a la ducha, hoy sería feliz, ya que sabía que su hermano le había preparado una fiesta de cumpleaños. Ese año si tenía familia con quien celebrar algo. Dejó que el agua caliente mojara su cuerpo y se enjabonó el cabello con una hermosa sonrisa en sus labios ¿Que le habría preparado? Realmente se sentía emocionado.

Al salir de la ducha, abrió su armario lentamente y dio un vistazo a toda su ropa blanca. Pensó que era aburrido, ya que por desgracia no podía elejir colores ¿Por qué era tan complicado todo? Se vistió con el pantalón y la camiseta blanca y tras peinarse y calzarse las zapatillas de algodón, bajó corriendo las escaleras.

-¡Buenos días!- Gritó al entrar en la cocina emocionado.

-¡Buenos días!- Contestaron Itachi y Karin a la vez.

-¿Y Sakura?- Sasuke la buscó con la mirada por toda la cocina.

-Anoche se quedó en casa de Tayuya.- Karin arrugó el ceño y se recolocó las gafas- Dijo que vendría a las cicnco.

-Esta bien.- Sasuke sonrió forzadamente, aun que ella le hiciera daño de alguna forma, le alegraba verla.-¿Que hay de desayuno?- Preguntó pasandose la lengua por los labios.

-Tú siempre tan especial.- Itachi sonrió.- Vamos a ver.- Dijo divertido.- Hoy te preparé un zumo de naranja natural, un vaso de leche y una pieza de fruta cortada. También tienes una rebanada de pan casero y un poco de mermelada que trajo Karin el otro día.

-Gracias.- Dijo mirando a Karin agradecido.-¿No os olvidais de algo?- Infló sus mofletes y se cruzó de brazos, como si de un niño de cinco años se tratara.

-¡Felicidades!- Dijo la pareja al unísono.

-Gracias.- Sasuke se levantó comicamente de la silla y les hizo una reverencia divertido.- Creí que os habías olvidado.

-Jamás.- Itachi se levantó de la silla y se acercó a su hermano, para revolverle sus cabellos negros.- Eres mi único hermano y tengo que mimarte.- Y le sonrió.

-¿Que haremos hoy, trabajais?- Y miró a la pareja de enamorados.

-No.- Itachi tiró de la mano de Karin.- Queremos darte tu primer regalo.

- Siguenos.- Karin cogió la mano de Sasuke.

-Que bien.- Sasuke los siguió hasta la sala y abrió los ojos de par en par, al ver un regalo bastante grande envuelto en papel blanco.-¿Que es?- Dijo bastante excitado de la emoción.

-Solo quita el papel con cuidado y enciende la tele.- Itachi abrazó a Karin contra su pecho.-¿Le gustará?- Susurró a su novia al oído.

-Seguro.- Karin besó sus labios.- A todos los niños les gustan los videojuegos ¿No?- Y miró sus ojos negros.- Calmate.

-¿Que es?- Sasuke quitó el papel de un solo movimiento y observó aquella caja extraña transparente con algo cuadrado y blanco dentro.

-Dejame que te enseñe.- Itachi encendió la pantalla y sacó un juego de una caja más pequeña.- Solo sientate y disfruta.

-Se llama Wii.- Karin se sentó al lado de Sasuke y sacó unos guantes de la caja que había encima de la mesita.- Dejame que te ayude.- Tras colocarle los guantes, sacó los manos de la caja.- Vamos a divertirnos un rato.- Y le sonrió.

Las horas pasaban demasiado deprisa, Sasuke no se había dado cuenta de la hora que era. Itachi miró a su hermano complacido y sin que él se diera cuenta, se escapó al piso de arriba para llenar la gran piscina que Orochimaru había creado para su hermano. Itachi sonrió al ver la mostruosidad de cristal que tenía en el piso de arriba, abrió el grifo y dejó que el agua corriera por la nueva instalación que habí ahecho Kakuzu. Tras asegurarse que se estaba llenando perfectamente, bajó al piso de abajo a hacer algo de comer.

-¿Te lo estas pasando bien, Sasuke?- Preguntó desde la puerta a su hermano.

-Calla.- Le dijo Sasuke ladeando casi todo su cuerpo hacía la derecha.- Creo que voy a ganar a Karin.

Karin se echó a reir y Sasuke gruñó. Itachi sonrió complacido y se adentró en la cocina. Cinco minutos después, Karin estaba haciendole compañía.

-Creo que tu amigo ha hacertado.-Karin abrazó a Itachi por la espalda.- Sasuke está muy feliz al descubrir el Mario Kart.- Y besó su espalda.

-Después de comer, he pensado ponerle el Mario Party.- Itachi manchó la nariz de Karin de memelada de cerezas.- Así estas más guapa.- Puntualizó.

-Eres un guarro.- Karin lo giró del todo y se apoyó sobre el cuerpo de su novio.- Limpialo.- Le dijo enfurruñada.

-Esta bien.- Y sin pensarselo dos veces, lamió la nariz con su lengua.

-Eres doblemente guarro.- Karin se separó de su novio sonrojada.- Cerdo empedernido.

-Le estoy haciendo una tarta de cerezas ¿Te gusta?-Itachi le mostró una tarta de bizcocho y mermelada.

-Me encanta.- Karin se relamió los labios.- Pero falta ponerle algo.- Y señaló la nevera.- Espera, se me ocurrió una cosa.- Karin sacó cerezas enteras y se acercó a la tarta.- Pondremos felicidades con trocitos.

-Voy a avisar a Sasuke, al comid aya está preparada.- Itachi se lavó las manos, guardó la tarta en la nevera y salió a la sala.- ¿Sasuke?- Miró el sofá, pero su hermano no estaba.

-Calla.- La voz de Sasuke sonró desde el suelo.

-¿Que haces tendido en el suelo?- Itachi rodeó el sofá y lo miró divertido.

-Me duele todo el cuerpo.- Se quejó Sasuke.- Creo que tendré que hacer de nuevo pesas.- Y sonrió a su hermano levantandose del suelo.-¿Ya está la comida?

-Si.-Itachi lo cogió de la mano y lo arrastró a la cocina.- Sientate.

Karin se giró divertida y Sasuke abrió los ojos como platos.

-Hoy seré su camarera, caballero. Solo pida y sus deseos serán ordenes.- Karin sacó una libretita del delantal blanco que se había puesto y sonrió al menor de los Uchiha.

-¿Que llevas puesto?- Sasuke señaló el pequeño vestido blanco, y el delantal a juego con el pequeño gorrito que llevaba en la cabeza.

-¿Esto?- Señaló la ropa.- Solo arreglé una de esas camisetas aburridas y me la puse.- Karin tocó con su dedo indice la nariz del menor.- Solo queriamos divertirnos y que no olvides nunca tu cumpleaños.

-¿Itachi?- Sasuke miró a su hermano divertido. Itachi llevaba la camiseta blanca y el pantalón decorados con retales blancos.

-¿Qué?- Itachi rió a mandíbula batiente.- Estabas tan ensimismado con el juego, que no te diste cuenta de mi atuendo.

-Llevas escrito Sasuke con retales en tu pecho.- Y señaló el pecho de su hermano.

-Y yo felicidades en el delantal.- Karin hizo un puchero.- Mira.

La pareja de novios se puso junta y el azabache pudo leer "Felicidades, Sasuke"

-Gracias.- Sasuke se levantó de su asiento y abrazó a su hermano y a Karin.

-Hora de comer.- Itachi le sirvió zumo natural de manzana y se sentó a su lado.- Karin, los platos, por favor.

-Con mucho gusto, señores Uchiha.- Karin puso tres platos de carne asada con patatas fritas decorandolos.- Que aproveche.

-Sientate, anda.- Itachi tiró de la manga del vestido de Karin.

-Si.- Karin se sentó y los tres comieron recordando los mejores momentos del juego.

-Y en el último momento, me tiró una piel de plátano y salí rodando de la pista.- Sasuke chasqueó la lengua.-Tsk.

-Has quedado segundo.- Karin alzó el tenedor con una mueca en sus labios.- Así que no te quejes, perdedor.

-No soy un perdedor.- Sasuke observó la spocas patatas que le quedaban en el plato y sonrió con malicia.- Para ser mi primera vez, he jugado mejor que tú, viciosa.- Y le tiró un puñado de patatas al pecho.

-Serás.- Karin miró divertida a Itachi.- Me ha atacado ¿No vas a decir nada?

-Que tiene razón.- Itachi le tiró un trozo de pan.

-Dos contra uno.- Karin s elevantó de su asiento y recogió las patatas y el pan.- Mierda para cada uno.- Dijo lanzandoles a los Uchiha la comida.- Comeros esa.- Y los señaló.- Tonto el último que llegue al salón.

Los dos Uchiha se levantaron de golpe del asiento y corrieron al salón. Karin suspiró aliviada y sonrió mirando la puerta por donde habían salido.

-¿Karin?- Itachi entró en la cocina.-¿Por qué no vienes?

-Voy a limpiar esto y salgo.- Karin besó los labios de Itachi suavemente.- Ahora salgo, pon el Party y ves explicandole.

-Esta bien, te quiero.- Itachi golpeó suavemente el culo de su novia.- No tardes.- Y salió al salón.

-¿Como pongo esto?- Sasuke miró a su hermano con al cej aalzada.

-Yo lo cambio.- Itachi le dio un golpecito en el hombro y le quitó el juego.

Las horas seguían pasando rápìdamente mientras jugaban a la consola. Itachi subió un par de veces a asegurarse que la piscina estaba en perfectas condiciones. Tras llenarse, bajó al salón y miró al hora... eran más de las seis y media de la tarde ¿Donde estaba Sakura?

-¡Te gané!- Sasuke chilló sin darse cuenta.

-Si.- Karin miró a Itachi.- Nos ha ganado.- Y sonrió.

-Apaguemos esto.- Itachi se acercó a la consola.

-Espera.- Sasuke miró a la pareja.- Dejarme un poco más.- Suplicó con inocencia.- ¿No teneis que hacer cosas de adultos?- Y levantó una ceja.

-¡Sasuke!- Karin golpeó la nuca de su cuñado y rió.

-Bien.- Itachi le hizo un gesto con la cabeza a Karin.- Te dejo un rato más. Acompañame a la cocina.- Dijo mirando a Karin.

La pareja salió del salón y entró a la cocina.

-¿Donde esta Sakura?- Itachi miró serio a su novia.- Creí que vendría a las cicno y son casi la siete.

-No lo sé.- Karin sacó el móvil.- La llamaré.

-Es una maleducada.- Itachi abrió al nevera y sacó el pastel.- Estoy cansado de esperarla.

-¿Sakura?- Karin le indicó que guardara silencio con el dedo.-¿Donde estás?

-Es la pesada de mi prima.- Sakura miró a Tayuya.

-¿Que más te da?- Sakura arrugó el ceño y bufó.- No me acordaba, ahora voy.

-¿Que quería?- Anko apartó un instante la mirada de la carretera para observarla.

-Reclamarme.- Sakura tiró el movil con mala gana dentro del bolso.- Porque no he ido al cumpleaños del Uchiha.

-¿No era a las siete?- Anko volvió a mirarla.

-Era a las cinco.- Sakura miró por la ventanilla.

-Eres la ostia.- Anko aceleró un poco más el coche.- Eres mala.

-¡Dejala!- Tayuya golpeó el asiento de Anko.- ¿No ves que va pedo?

-Igual que tú, zorra.- Anko aparcó el coche en la entrada de la casa de los Uchiha.- Nos vemos pronto...si no te matan.- Anko empujó a Sakura fuera del coche.- No te olvides tu regalo.

Sakura cogió al bols ay miró enfadada a sus amigas, eran unas perras. Caminó lentamente hacía la casa y sonrió satisfecha, a ella no le mandaba nadie. Tras darse una larga ducha de desinfección, se vistió con el traje blanco y se colocó el gorro.

-Ya estoy aquí.- Sakura entró al salón y empezó a reir cogiendose el estómago al ver lo que se presentaba delante de ella.- Se te va a caer la lengua.- Sakura se acercó al sofá.- Mejor guardala.

Sasuke estaba jugando al Mario Party sentado en el suelo enfrente de la televisión. Sin darse cuenta, había sacado por el lado de la boca la punta de la lengua y miraba la pantalla anonadado. Cada vez que le tocaba una prueba, hacía gestos bruscos con el cuerpo, aún no se había acostumbrado a ello.

-¡Sakura!- Karin apareció tras ella.- Crei que te había dicho que era a las cinco, no a las siete.

-Estaba recogiendo el regalo del niño.- Sakura miró a su prima y dejó de reirse.- Se me ocurrió una idea a última hora.

-Ya.- Karin tiró de su brazo hací ala cocina.

-Encima que le traigo un regalo.- Sakura abrió la puerta de la sala de esterilización y sacó la bolsa.- Ten.- Se lo dio a Karin.-Lavarlo primero.

-Sakura.- Itachi se acercó a la pelirosa.-¿Estas borracha?

-Solo un poco.- Y sonrió.- Anoche celebramos una pequeña fiesta de pijamas.- Sakura miró a Itachi muy seria.- Por haber aprobado.

-Me parece muy bien.- Itachi la guió hasta el asiento de la cocina.- Ahora comeremos el pastel y le diré que tu regalo debe esperar.- Y miró al bolsa.-¿Que es?

-Es ropa.- Sakura sonrió.- Ayer cuando em tinté la camiseta sin querer de mora, pensé que podría tintar así algunos trajes de Sasuke.

-Vaya.- Karin miró al ropa.

-Es tinte natural y no tiene porque hacerle daño ¿No?- Sakura miró el traje rojo.

-¿Con qué lo has hecho?- Karin sacó otro morado.

-Yo no lo he hecho.- Sakura miró al puerta de la cocina.- Estan esterilizados, pero si no os fiais, podeis lavarlos antes.

-¿Quién lo ha hecho?- Itachi los guardó en la bolsa de nuevo.

-Orochimaru.- Sakura sonrió.- El otro dí ate escuché hablando por teléfono.- Y señaló a Itachi.- Escuché que él lleva la investigación de la cura de Sasuke.- Y se encogió de hombros.

-¿Y?- Itachi miró la puerta de la cocina al escuchar a su hermano quejarse.

-Pues busqué en internet y encontré sus istalaciones, así que est amañana, fui a verle y le comenté mi idea.- Sakura se sirvió un vaso de zumo.- Y le pareció buena, así que me ayudó.

-Gracias.- Itachi se sentía confuso, en algunos momentos parecía que ella odiara a su hermano, pero en otros...

-¿Que pasa?- Sasuke entró en al cocina y miró al trio.-¿Vamso a comer la tarta?

-Si.- Itachi la sacó de la nevera y Sasuke sonrió.- Felicidades, hermano.

-Cumpleaños feliz, cumpleaños feliz.- Sakura se había levantado de su asiento y cantaba la canción mirando a Sasuke.- Te deseamos todos, cumpleaños feliz.

-Feliz, feliz en tu día, amiguito que dios te vendiga, que reine la paz en tu día y que cumplas muchos más.- Karin siguió el juego de su prima.

-¡Basta!- Sasuke las miró con las mejillas rojas.- No hace falta tanto.

-Una foto.- Itachi disparó la camara del móvil.- Que bien.

-Ahora tú.- Sakura se levantó del asiento y les hizo una foto al trio.

-Ven.- Karin tiró de la mano de Sasuke.- Sigueme, aún no ha acabado la tarde.

-¿Más?- Sasuke miró a su hermano sorprendido.

-Siguela.- Itachi lo empujó despacio.-¿Que quieres?- El azabache mayor miró a Sakura.- Cuando llegaste a esta casa, te comportabas mejor.

-Lo siento.- Sakura miró a Itachi a los ojos y se maldijo por hacerlo, eran identicos a los de Sasuke y aquello no le gustaba.- De verdad que lo siento, pero tengo ganas de ir a Konoha y ver a mi gente, estoy nerviosa y estar encerrada todo el día no me ayuda.

-Te voy a pasar lo de hoy.- Itachi apoyó las manos abiertas sobre la mesa.- Pero no habrá una próxima vez.

-Lo entiendo.- Sakura asintió con la cabeza.

-Recoge todo esto, estaremos arriba del todo.- Y salió dejando a Sakura sola en la cocina.

Karin entró en al habitación de Sasuke y le tendió una pequeña bolsa blanca. Sasuke la miró son duda y la cogió con manos temblorosas ¿Que hay dentro? Se preguntaba una y otra vez mientras la abría.

-No te va a comer.- Karin le sonrió.- Es del mismo tejido que llevas siempre.- Y le señaló los pantalones largos blancos.- Pero cortos y de otra forma.

Sasuke sacó un pantalón blanco corto de la bolsa. Tenía una S cosida con la misma tela blanca pero en relieve sobre el camal izquierdo.

-Te espero fuera, pontelo.- Le pidió Karin.

-¿Le ha gustado?- Itachi le preguntó nada más la vio salir de la habitación.

-Supongo que esta sorprendido, no sabe para que es.- Y besó lso labios de su novio.-¿Has subido las toallas?

-Si, yo ya me he cambiado.- Y le mostró el mismo pantalón pero con una I cosida.-Ahora te toca a ti.- Y le dio un bikini de la misma tela.- Este es para Sakura... si le interesa.

-Se lo dejaré en la banca de arriba al lado de la puerta.- Karin suspiró y se adentró en la habitación de los dos para ponerse el bikini.

Sasuke sonrió al ver lo bien que le sentaba ese pantalón, abrió la puerta con una sonrisa en sus labios, realmente ese día se lo estaba pasando muy bien... sería un cumpleaños inolvidable.

-¿Llevamos lo mismo?- Le preguntó a su hermano sorprendido.

-Si.- Itachi lo cogió por los hombros.- Es hora de seguir divirtiendonos.

-Ya estoy lista.- Karin abrió la puerta y Sasuke la miró sorprendido una vez más.-¿Os gusta?- Dio una vuelta sobre si misma.- El blanco me queda genial.

-Estas hermosa.- Itachi la acercó a él y besó sus labios.

-Puaj.- Sasuke arrigó el ceño.-¿Para que sirve esto?- Y los señaló.- No puedo ir a la playa ni a la piscina que tenemos en el jardín.

-Eso es lo divertido.- Itachi cogió a su hermano de la muñeca y tiró de él ansioso.

-¡Itachi!- Sasuke se soltó bruscamente.- Me haces daño, emocionado.

-Lo siento.- Itachi se sonrojó.- Es un regalo de tu padrino.- Y abrió la puerta de arriba.

-¿Orochimaru?- Y entró sorprendido.-¿Es?

Karin e Itachi sonrieron satisfechos.

-No sé nadar.- Dijo tristemente.-¿Y si me ahogo?

-Para eso estamos aquí.- Karin se subió a las escaleras y se dejó caer dentro de aquella enorme piscina .- Esta muy buena el agua.-Rio.-Ven, corre.

Sasuke siguió a Itachi y subió las escaleras dudoso. Al llegar al borde, miró el agua y suspiró. Karin se pudo de pie y Sasuke comprobó que no le cubría la cabeza. Se sentó en el borde despacio y metió los pies.

-Vamos, Sasuke.- Itachi estaba en el agua al lado de Karin.- No tengas miedo, estoy aquí contigo.

-Como siempre.- Sasuke sonrió a su hermano y se dejó caer dentro del agua.- No llego.- Dijo con sorpresa.- Creí que no cubría y miró a Karin.

-Estoy subida ne el borde.- Karin se separó de la pared y se hundió un poco.- ¿Ves? A mi también me cubre.

-Sino, no tendrí agracia.- Itachi sujetó a Sasuke y lo llevó al borde.- Aquí no cubre y allí al final tenemos un escalón muy ancho.- Y lo llevó hasta allí.-¿Ves?- Aquí tienes unos metros para practicar.

Sakura maldijo aquellos momentos, deseaba salir de esa casa de una maldita vez ¿Desde cuando deseaba algo con tanta fuerza? Dejó el secamanos bruscamente sobre la mesa de la cocina y subió las escaleras enfadada ¿Que se habían creido? Al llegar arriba, vio el bikini blanco sobre la banca al lado de la puerta.

-¿Un bikini?- Lo levantó dudosa.

La pelirosa escuchó las risas y los chapoteos que provenían de detras de la puerta y acercó su oído a ella. Pudo escuchar a Itachi gritarle algo a Sasuke y a Karin reir como una loca ¿Que estaban haciendo en el cuarto de lavado?

Sakura se encogió de hombros y decidió ponerse el bikini para investigar. Se quitó la ropa allí mismo y s elo colocó. Era feo, como aquella ropa blanca sin color. Abrió la puerta y sus ojos se abrieron de par en par al ver aquella enorme piscina.

-¡Sakura!- Karin se subió al borde y le hizo señas para que acudiera.- Ven, esta buenisima y es muy divertdio.

-Ya veo.- Sakura subió las escaleras y se lanzó sin pensarselo.-¿Quien ha traido esto?- Preguntó.

-Es un regalo de Orochimaru.- Itachi la alzó al aire y la lanzó contra el agua.- Para Sasuke.

-Bruto.- Sakura lo miró con los ojos entrecerrados.- No hagas eso.

-¿Esto?- Itachi volvió a lanzarla probocando las risas de Sasuke.

-Basta.- Sakura se sonrojó.- No me gusta.

Karin se lanzó sobre su prima y la undió un par de veces. Cuando quisieron darse cuenta, el día había pasado y a Sakura solo le quedaba una semana en aquella casa. La pelirosa salió de la piscina, se adentró en su cuarto alegando que no tenía hambre y tras darse una ducha, se dejó caer contra la cama ¿Por qué le pasaba eso cada vez que tenía a Sasuke cerca? Cerró sus ojos y recordó una y otra vez el cuerpo semidesnudo de Sasuke, sus ojos negros y aquella risa infantil cuando la había hundido unas cuantas veces.

-Maldito seas.- Sakura golpeó el colchón.- Solo eres un maldito capricho, cuando te haga mio de una buena vez, te olvidaré y seré feliz de nuevo con Lee.- Se dijo así misma unas cuantas veces antes de dormirse.

Sasuke se había divertido mucho ese día. Al salir del agua, había bajado abajo y se había comido otro trozo del pastel de cerezas. El azabache se bebió un vaso de leche fría y dio las buenas noches a su hermano y a su cuñada.

-Hasta mañana.- Karin besó su frente.- Que descanses, pequeño.

-Gracias.- Sasuke miró a su hermano.- La verdad es que estoy muy cansado.- Afirmó.

-Normal, no estas acostumbrado a tanto ajetreo.- Itachi lo abrazó.- Mañana llamaré a Orochimaru y le diré que te han encantado los regalos.

-Mañana te daré el regalo de Sakura.- Karin miró a Sasuke.- Prefiero asegurarme de que está bien esterilizado.

-Si.- Sasuke sonrió a la pareja.- Gracias por este día, será inolbidable.

Tras aquellas palabras, subió a su habitación con una sonrisa en sus labios. Lo había pasado realmente bien. Entró directo a la ducha y tras enjabonarse, enjuagarse y secarse, se colocó un pantalón blanco y se tiró sobre la cama.

-Sakura.- Susurró mirando la pared de su habitación.

En el agua, más de una vez había tenido que contenerse. La pelirosa estaba muy sensual con los cabellos mojados y sonriendo. Sasuke recordó als veces que la había ahogado y lanzado por el aire como Itachi. Una de las veces, su pecho había rozado los de ella y había tenido que separarse de golpe y alejarse.

-¿Por qué me pasa esto?- Sasuke sintió su cuerpo arder nuevamente, cada vez que pensaba en ella, se endurecía sin poder evitarlo.-¿Que has hecho Sakura Haruno?- Sasuke se puso de lado y apretó la almohada entre sus brazos.-¿Por qué me tratas como si no existiera?

Después de darle muchas vueltas a esas preguntas en la cabeza, cayó al fin rendido. Sus ojos negros se cerraron y su respiración se acompasó.

-Te amo.- Susurró entre sueños.