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El Nuevo Ángel

-En el cielo-

Miguel: *Llegando hasta el trono de Dios* Mi Señor, me honro ante su presencia.

Dios: *Hablando de manera trascendental* Ponte de pie Miguel.

Miguel: *Se levanta* Gracias su excelencia, he de decirle que mi protegida, a quien mi Señor me ha encomendado durante este periodo de prueba, ha comenzado a escuchar el evangelio de parte de su mejor amiga mi Señor.

Dios: Siento una dicha tan grande al ver a una noble oveja escoltar a su hermana de vuelta al prado, mi voluntad ha comenzado en ella.

Miguel: Estoy seguro de que sabrá retomar el camino de mi Señor, pero... me siento un poco temeroso, aún presenta dudas en ella.

Dios: El corazón del hombre se resiste a escuchar mi mensaje, pero recuerda que mi palabra no retorna atrás vacía.

Miguel: Su palabra toca hasta lo más profundo del corazón del hombre, y he sido testigo de ello desde la fundación del universo.

Gabriel: *Se acerca con Miguel y se postra frente a Dios* Sumo rey de los cielos, mi glorioso Señor y creador.

Dios: Ponte de pie Gabriel.

Gabriel: He hecho correr un mensaje a mis compañeros arcángeles, al parecer, nuestra amada Senko está comenzando a desarrollar una cierta afección hacia su protegido.

Dios: ¿Eso en qué hace diferencia a mi relación con ustedes y los hombres?

Gabriel: Mi Señor, como su mensajero e ilustrador del Tercer Cielo, quiero hacer saber de mi boca que Senko probablemente se está enamorando de un ser humano.

Dios: Así ha de ser mi voluntad.

Gabriel: ¿Mi Señor?, ¿cómo puede usted permitir esto?

Dios: Gabriel, hijo mío, eres pilar delante de tus hermanos y eres mi voz delante de ellos, a través de tus mensajes los hombres pueden oír lo que les he mandado decir, y por ello, has de saber que mis designios ocurren desde antes de la fundación de los cielos.

Gabriel: Le ruego me disculpe mi falta de comprensión Señor, pero con todo respeto, lo mismo nos ocurrió una vez en los inicios de nuestros mundos cuando varios de nuestros compañeros tomaron mujeres en la tierra y de ellos descendió la generación de gigantes; sabe lo que esto ha de significar si ha de volver a ocurrir.

Dios: Las cosas no pasan dos veces de la misma manera Gabriel.

Gabriel: De no ser así, ¿qué me propone hacer?

Dios: No te propongo, yo te mando a que hagas llamar a Shiro, que con ella yo quiero hablar.

Gabriel: La haré venir mi Señor *se va volando*.

Miguel: *Viendo nuevamente a Dios sin poder dirigir su mirada a su rostro*.

Dios: Miguel, regresa con tu protegida, que de ti necesita.

Miguel: Como ordene Señor *desciende hacia la tierra*.

-En la tierra-

Miko: *Llega hasta un puesto* Es aquí.

Hana: *Super desconfiada* ¿Qué es lo que piensas hacer Miko?

Miko: Librarme de esto, eso es lo que quiero.

Hana: Yo ya te di la biblia, aunque sea trata de leerla.

Miko: No tengo tiempo para leer más de mil páginas, solo... quiero terminar con esto de una buena vez *se acerca hasta la que atiende*.

Hana: Miko...

Miko: *Hablando con la que atiende* Disculpe, ¿tiene algún rosario que me haga alejar a los malos espíritus de mí?

Medium: Vaya, pero qué fascinantes jovencitas, debo decir que eso dependerá sobre a ¿qué tipos de malos espíritus te refieras?

Miko: Solo quiero alejar a Satanás y a todas las legiones de sus demonios de mí, y es urgente.

Medium: Sí quieres alejar a las fuerzas del reino de las tinieblas, entonces... *se da la vuelta* creo que tengo lo que necesitas.

-La mujer anciana toma un rosario al azar y se lo entrega a Miko-

Medium: Toma, este rosario tiene un fuerte poder de protección contra los malos espíritus.

Miko: ¿Me asegura que podrá alejar a todos?

Medium: Podrá alejar a cualquier espíritu, alma en pena o espíritu que ronde o divague por este mundo.

Hana: *Viéndola molesta* No es por querer ofender su ignorancia, pero es completamente antibíblico asumir la existencia de espíritus y almas en pena divagando por este mundo.

Medium: ¿Eso no lo dice la biblia?, quizás lo decía otro libro relacionado a esta.

Hana: La biblia es la única fuente de autoridad, fe y conducto de Dios para los hombres.

Medium: *Viendo a Miko* ¿Por qué no te lo pruebas?

Miko: *Tomándolo*.

Hana: *Insistiéndole* Miko, no lo hagas, Satanás está buscando que te aferres a un objeto extraño para humillarte y hundirte todavía más en tu tribulación.

Miko: No me detengas Hana, si pasaras por lo que yo estoy pasando, créeme que lo harías *se lo pone en la muñeca*.

Hana: Eso lo dudo.

Miko: *Lo levanta y lo muestra ante los demonios a su alrededor que la acechan*.

-Todos los demonios a su alrededor comienzan a retroceder y a dirigirse hacia otra dirección, lo mismo hacen los ángeles-

Miko: Todos se van, aparentemente funciona.

Medium: Yo te dije que era efectivo.

Miko: *Viendo a Hana* Y decías que un libro podía protegerme *le muestra el rosario* esto también pudo hacerlo.

Hana: *Se queda brevemente callada*.

Miko: *Viendo a la médium* Ahora ¿cuánto...?

-De pronto es interrumpida por una aguda voz que le susurra al oído-

La voz: Y eso demuestra, que el hombre seguirá estando ciego ante mí *chasquea sus dedos*.

Miko: *Se impacta al escuchar dicha voz y el rosario se rompe*.

Hana: *Increíblemente sorprendida* Ah... no puede ser.

Medium: *Igualmente sorprendida* Seguramente el elástico era viejo querida, iré a buscar entre... *viendo que no le presta atención* oye me estás escuchando?

Miko: *Viendo una resplandeciente luz frente a ella se queda atemorizada*.

¿?: *Viéndola de frente* ¿Tú sabes quién soy verdad?

Miko: *Sintiendo miedo* Eres un ángel, ¿no es así?

¿?: Estás en lo correcto, soy el líder de las legiones de los ángeles desterradas y condenadas a morar largos siglos en este mundo.

Miko: ¿Quién eres?

¿?: *Acercándose a ella* ¿Yo? *camina lentamente a ella* me conocen por muchos nombres; la antigua serpiente, el gran dragón, el dios negro, el dios de este siglo, Belcebú *viendo hacia el cielo* como una vez me llamó mi destructor, Lucifer *viéndola de nuevo* o como me han renombrado en este mundo, Satanás.

Miko: *Se queda sorprendida al verlo* -¿Este ser realmente es el diablo?, no se parece nada a como yo me lo imaginaba, parece un ángel como cualquier otro, pero... es uno muy hermoso a comparación de los otros que he visto-.

(En realidad la biblia describe a Lucifer como un ser realmente hermoso, esa imagen que nos han vendido del diablo de que es un ser con cuernos y pezuñas de cabra no puede estar más lejos de la realidad, por ser hermoso es por lo que se creyó ser superior a Dios).

Lucifer: ¿No dirás nada?, ¿te sorprende ver a alguien cuyo aspecto... *da vueltas alrededor de ella* es completamente ajeno a todo lo que alguna vez te contaron?

Miko: *Lo mira sin decir una sola palabra*.

Lucifer: Sí, soy un ángel de luz, así como dice mi nombre yo soy y sigo siendo la luz de este mundo, aquel que lo gobierna, lo mueve y lo hace funcionar conforme a mi voluntad. Hice este pequeño hueco para que me conocieras aprovechando la visión que ahora tienes, y lo hago, para que seas presente de la verdad que está detrás de mí, que no es para nada aquello que te han venido haciendo creer durante todo el tiempo de tu vida.

Miko: ¿La verdad?

Lucifer: *Toma una de las piezas del rosario del suelo* ¿Le diste tu confianza a esto?

Miko: Es un rosario, o lo era, antes... de que se rompiera.

Lucifer: Si aquello por lo que te aferraste se termina rompiendo, así de fácil se romperá tu fe por dicho objeto. ¿Para qué necesitaste esto?

Miko: Para librarme.

Lucifer: *Viéndose curioso* ¿De qué?

Miko: De... ustedes, los demonios.

Lucifer: Me insultas, ¿por qué buscas alejarme? *se aleja unos pasos de ella* si te aferraste a un monarca que solo manda a sus empleaduchos a que te den instrucciones y que te digan qué hacer sobre una maldición que él mismo trajo sobre ti, ¿por qué te molestas en seguir confiando en él?

Miko: *Voltea a ver a su amiga Hana y luego mira a Lucifer* Porque... es mi única alternativa.

Lucifer: *Se acerca a ella* Nah... el hombre ha puesto su confianza en aquello que no puede ver durante miles de años de existir de esta tierra, yo lo sé, he vivido todos sus años.

Miko: ¿Ah?

Lucifer: Y en base a que he determinado las acciones del hombre cuando se confían y enceguecen a través de un ser que no pueden ver *le muestra con su poder una pantalla mostrándole lo que hicieron los judíos con Jesús* esto es lo que ocurre.

Miko: Dios mío.

Lucifer: ¡¿Acaso creíste que su pueblo lo defendió, acaso vio por él, acaso crees que vino a este mundo para librarte a ti del mal que a todos los hombres persigue?!

Miko: *Se queda callada*.

Lucifer: Claro que no, él los ha abandonado, desde el momento en que ustedes pecaron *la voltea a ver* jeje, sí, así es como el lo llama; ustedes no han significado nada más para él. El hijo del hombre vino a este mundo a morir, ¿y para qué?, las guerras no han cesado, las pestes siguen destruyendo al hombre, la gente muere de hambre sin tener que comer, los ricos siguen oprimiendo a los menos favorecidos, y él *apunta hacia arriba* ¿les sigue diciendo que los ama?

Miko: *Se pone a llorar*.

Lucifer: *La toma de los hombros* Pequeña, no sigas aferrándote a quien no puedes ver, mírame a mí, aquí estoy, ¿dónde está tu Dios? *extendiendo sus brazos* en este mundo yo soy el Dios.

Miguel: *Con suma fuerza y velocidad aterriza a la diestra de Miko* Yo soy una lumbrera de Dios en medio de tu oscuridad, Lucifer.

Miko: *Asustándose de nuevo* Ah...

Lucifer: Miguel, que grata sorpresa tenerte frente a mí.

Miguel: No juegues conmigo, quizá puedas engañar a los hombres, pero yo no me trago tus mentiras.

Lucifer: *Viendo a Miko* Solo ella puede decidir la verdad entre tú y yo, ¿verdad Miko?

Miko: *Sintiéndose presionada asiente con la cabeza*.

Lucifer: *Viendo a Miguel* Ella ha comprendido la verdad sobre tu desquiciado jefe, y ahora, es una menos en los planes de Dios para con los hombres.

Miguel: *Empuñando su espada* Apártate de ella, que no tomarás su vida si yo me opongo.

Lucifer: *Mueve con su poder a Miko hacia él y la pone frente a Miguel* Tu poder, será dividido entre mí y tu protegida.

Miguel: *Se detiene* No puedes usar un ser humano entre nuestros encuentros Lucifer.

Lucifer: Este es mi mundo, y el que decide siempre he sido yo, luego hablamos de política.

Miguel: *Envaina nuevamente su espada* Miko, ya lo escuchaste; sus palabras, sus respuestas, la altanería con la que habla, su auto superación delante de Dios, aléjate de él.

Lucifer: *Tomando a Miko del hombro* Mira, ¿ahora quién está siendo el altanero?, quizá deberías mostrar atención a aquello que dices Miguel, ¿acaso esas palabras vienen de Dios?

Miguel: *Viendo a Miko* Miko escúchame, todo lo que él te dijo, todo lo que te hace creer, todo lo que asume, es mentira, él es el padre de la mentira, yo lo desterré del cielo cuando intentó apropiarse del trono de Dios y convenció a una tercera parte del cielo en revelarse contra él.

Lucifer: ¿Por qué razón?, ¿no crees que sabíamos lo que ese gran dictador hacía con nosotros y yo les alcé la mano tratando de liberarlos?

Miguel: *Viéndolo* Tú sabes... que esa nunca fue tu intención, así como lo dijiste delante de Dios: "Subiré al cielo en lo alto, junto a las estrellas de Dios levantaré mi trono, sobre las alturas de las nubes subiré y seré semejante al Altísimo".

Lucifer: *Susurrándole a Miko* Dios... te puso la carga que ahora llevas, él te quiso corromper, él te tiene atada, escribe tu vida como un ser ruin sin darte un rumbo fijo y no te deja la oportunidad de elegir.

Miguel: *Gritándole* ¡Miko, no es cierto!, no dejes que te manipule, todo lo que dice y todo lo que ofrece te hunde y lentamente te consume; lo mismo es siempre, matar, hurtar y destruir. Es más, él no te da nada, TODO, todo te lo quita, te destruye, y si lo que te digo te redarguye, apártate de su mal y sigue a Jesús como tu Señor y salvador.

Miko: *Se aparta de Satanás y da un paso hacia Miguel*.

Lucifer: Escucha a las tinieblas, no escuches a la luz, a ese tal Jesús yo lo maté en una cruz.

Miguel: A él nadie lo mató, si no que se entregó él mismo, para salvar a este mundo y rescatarlo del abismo.

Lucifer: ¿Este mundo?, ¿es un chiste?, ¿este mundo que sigue gobernado por mí?

Miguel: *Viendo a Miko* Miko, recibe y acepta mi dirección, se sabia y no endurezcas tu corazón.

Lucifer: No lo escuches a él, te confunde y te engaña, es lo mismo que te ha hecho Dios, usarte para todas sus mañas.

Miko: **Ve momentáneamente a Lucifer, aparta su mirada de él y ve directamente a Miguel*.

Miguel: Miko, Dios te ama, él siempre ha estado contigo y yo también, nunca te ha dejado sola, y yo por la gracia de Dios siempre seré una luz en medio de tu oscuridad.

Miko: *Se aparta de Lucifer y corre hacia Miguel con lágrimas en sus ojos*.

Lucifer: *Enfureciéndose* ¡¿Ah...?!

Miguel: *Recibiendo a Miko en sus brazos* Miko... bendito Dios este ser de inmundicia no te apartó de mí.

Miko: *Lo abraza fuertemente*.

Lucifer: No puede ser.

Miguel: *Viendo a Lucifer* Tú, ya puedes irte con tu mentira, Miko ha decidido y tú ya no tienes nada más por hacer con ella.

Lucifer: Otra vez te saliste con la tuya, pero... no me importa, no me importa porque todavía hay millones de personas que decidieron seguirme a mí en vez de a ti Jajajaja...

Miguel: *Lo ve con coraje*.

Lucifer: ¿Y sabes qué, sabes qué?, lo que más me emociona es que hay tantos que dicen seguirte a ti y están dormidos en la iglesia jaja, ya no están predicando, no están haciendo nada jajajajajajaja...

Miguel: Sí, quizás haya algunos que estén dormidos, pero todavía hay un pueblo que sigue orando, que sigue predicando, que sigue sembrando la semilla que a su tiempo dará fruto para que el hombre le entregue su corazón a Dios.

Lucifer: Ha... ok, pero no voy a rendirme, no voy a rendirme, seguiré como león rugiente buscando a quien devorar; hay tantos que ya murieron, antes de seguirte a ti se perdieron... jajajajajajaja...

Lucifer: Sí, pero tú sabes que muchos antes de morir le entregaron su corazón a Dios, y tú sabes que el que cree en él, aunque esté muerto, VIVIRÁ.

-Satanás se esfuma y los demonios a su alrededor se van con él-

Miguel: No dejes que nadie más guie tu camino, busca a Jesús y él te dará la respuesta.

Hana: *Se acerca a Miko* Miko.

Miko: *La voltea a ver* Hana, ¿por qué no te fuiste?

Hana: Quizá no lo vi, pero lo pude sentir, y no podía dejarte sola amiga.

Medium: *Aún asombrada* Yo lo vi perfectamente.

Miko/Hana: *La voltean a ver* ¿Eh?

Medium: Lo siento, pero ya cerramos *cierra las puertas de su local*.

Miko: *Viendo a Hana* Hana...

Hana: ¿Eh?

Miguel: *Dándole apoyo a Miko* Hazlo.

Miko: Quiero que me enseñes a escudriñar las escrituras.

-En el cielo-

Shiro: ¿Eh?, ¿qué está haciendo Senko?

Dios: La he mandado a restaurar la vida de un nuevo protegido que le he comendado a su mano, he de decir que Tn, su protegido, ha reaccionado muy bien ante ella.

Shiro: Entonces ¿para qué me mandó a llamar?

Dios: Permítele a tu Señor hablar.

Shiro: Discúlpeme.

Dios: La oscuridad que ha envuelto la vida de esta noble alma, no ha podido ser consumida del todo, por lo que es tiempo de que un ángel más apoye a Senko en su tarea de restaurar la vida de Tn, un nuevo instrumento y vaso el cual usaré para perfeccionar mi obra en él.

Shiro: Sea su bendición y sus planes para con los hombres, iré a mimarlo como se debe, haré lo que Senko no ha podido hacer con él, hasta dejarlo satisfecho.

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