-¡¡¡POR EL IMPERIO!!!-.
Fue el grito de batalla de un soldado que cargo llevando una pesada maza,
blandio el arma de tal forma que se quebró la espalda, pero valió la pena,
la maza surco su recorrido con gran vigor y retumbó mientras...
-¡¡¡!!!-.

Era imposible, el golpe desgarrador que soltó sobre la joven de piel gris, había fallado por completo.

La chica, que para ese entonces había irrumpido en el palacio de los tres señores, asesino sin piedad alguna a cuánto guardia se cruzara en su camino.

Fue obvio que la intrusa había ido por el armamento requisado que se almacenaba ahí,
pero nadie pudo dar la alarma pues.. Coraline se los impedía.

-¡Uojk, KKUUJJCCHJJKH!-.
El soldado de la maza vómito sangre, y cayó de rodillas cuando una gruesa cuchilla ligeramente curvada le atravezo la columna y broto por su pecho.

Los colmillos de luna de Coraline, se extendieron extasiados por la sangre, y desplegaron su filo para ensartar a otros tres imperiales.

La Titan, se relamio con gusto,
ahora no quedaba ningún sobreviviente dentro del palacio..bueno, no es que los hubiera matado a todos, era solo que no quizo perder el tiempo asesinando a los criados.

Era mas divertido enfrentarse a guerreros.

Coraline ensanchó su sonrisa, y a paso ligero se acercó a las demás armas almacenadas ahí.

Los guantes cuchilla de su hermano Evansz, el bate de Demian, y la espada de Saharam.

-Quizas me agradezcan si se las llevo-.
Se encogió dé hombros y envolvió todo como pudo..aún tenía el collar en el cuello, pero no parecía importarle.

De todas formas, sellada o no..ella era Coraline, la Titan de la corrupción.

......................................................................

Una cuadrilla de soldados marchaba a gran prisa, siguiendo el rastro de caos y horror desatado por los civiles que huían de la zona donde se encontraban aquellos sucios salvajes.

La unidad de repliegue ligero sabía muy bien que debía encargarse de los salvajes que hasta hace poco yacian en la torre de extracción, pues a sabiendas de lo fuerte que era Shanoóth, ninguno se atrevería a luchar directamente con el.

Eso era algo que le correspondía a Bator, quien junto a sus alumnos ya le había sacado ventaja.

....

-No sabía que tuvieras alas, jaja-.
El maestro Elitezard se movía a gran velocidad mientras un círculo de runas en sus pies lo ayudaban a trasladarse por los aires.

Saharam lo seguía de cerca, volando gracias a sus alas sagradas, mientras que el resto de sus compañeros se movían a su propio ritmo.

-Maestro Bator...fue un placer haber sido parte de su familia, este corto tiempo me a enseñado el valor de-.

-¡¿Eh?!, ¿De que estás hablando Saharam?, Suenas abatido..¡!, ¡¡¿Ese es el muchacho al que desapareciste en?!!-.
Bator se había extrañado y hasta incluso preocupado por el tono afligido de su alumno, por un momento pensó que eso se debía a la cercanía de Devoured..sin embargo, cuando a lo lejos distinguió a Demian organizando una defensa con el resto de salvajes, comprendió lo que estaba pasando.

-Lo siento maestro..prometo salvar a sus alumnos, ellos no tienen porque morir-.

-Sahar, ¡¡JK!!, ¡!-.
Y Bator cayo en picada, el Titan sagrado lo había noqueado.

No era su intención que el maestro Elitezard y los suyos sufrieran las consecuencias, pero debía actuar en pos a sus hermanos.

Y esa, era la hora esperada.

....

-¡Ulvh, mantennos informados!-.
Endraegon fue encargado para la primera linea de defensa junto a Ulvh,
si el plan era causar el mayor caos posible, entonces que mejor forma que organizar una sólida resistencia contra los soldados que se les fueran encima.

Claro..Demian aguardaba a la llegada de sus hermanos,
pero a juzgar por la enorme cantidad de energía sagrada que se se acercaba q gran velocidad, supuso que no debía esperar mucho más a Saharam.

-Has llegado rápido-.

-El anciano canceló el torneo, parece que nuestra huida se ya vuelto más caótica de lo esperado,..-.
Saharam meneó su cabeza en forma de negación, en el centro de la plaza, estaban amontonados todos los guardias que aún seguían con vida.

Gemían y maldecian, pero nada podían hacer, Diyagore los observava con ojos apagados, mientras escuchaba los gruñidos de sus compañeros,
los guerreros saivajes querían destrozarlos, pero Shanoóth sugería que quizás podrían usarlos como barricadas, Endraegon asintió ante esta idea.

Sin embargo, antes de que el Titan sagrado pudiera protestar, la hija bastarda de un Eli, levanto su mano para que un aura brillante brotara del suelo y envolviera al cúmulo de cuerpos ensangrentados.

Pronto, su energía sagrada intensificó su luz, y los guardias comenzaron a arder, desapareciendo en un destello de fuego y cenizas ardientes.

-Puedo sentir tu presencia a kilómetros de distancia..desde que salí de la torre, supe que eras como yo..¿Quizás mejor?, Eso no lo se..emanas una presencia similar a la mía..pero más pura-.

-¿E,eres una Eli?-.
Saharam parpadeó un par de veces, extendiendo una de sus manos para intentar palpar el rostro de Diyagore, y está no demostró ninguna resistencia,
en su lugar solo lo miro con una expresión apagada.

-Tan solo una vil cría impía..eso es todo, pero si..quizás tú puedas aceptar que por mis venas corre la sangre de un Eli, uno que en mis tierras se hizo llamar el dios guardian de la luz-.

El Titan guardo silencio, consciente de que su hermano lo miraba con firmeza.. había algo extraño en la manera en la que Demian le clavaba los ojos..
¿Era impaciencia..o celos?.

-Pero realmente eso no importa..veo que tú hermanito y tú solo nos están ayudando porque eso les conviene, perfecto..porque yo-.

-Por favor..no tienes que decirlo, en su lugar, pelea por lo que creas justo, por lo que amas..por tu vida y el futuro de tu hermana-.
Saharam la había leído con solo verla, fue esa falta de resistencia ante su privacidad, la que lo convenció de que la joven saivaje al igual que ellos, solo intentaba encontrar un hogar.

Diyagore sonrió.

-Bien, en ese caso, no veo porque permanecer aquí, quieren caos..yo a mi hermana..ja..les dare todo el caos posible mientras llego hasta ella-.

-¡Diyagore espe¡!-.

-Dejala Demian..ella tiene su propia parte, nosotros la nuestra, haci que sigamos con el plan, ¿Dónde está Coraline?-.

¡BOOOMMMFFFSSHHH!

Una explosión de aire y electricidad a lo lejos contesto su pregunta.

-Fue por su arma-.
Demian sonrió nerviosamente, mientras de fondo las primeras filas de soldados Imperiales llegaban a la zona dónde se encontraban.

Ulvh, en su forma de halcón gigante,
descendió en picada y se deslizó entre los grupos pesados para levantar por los aires a cuánto soldado enemigo pudiera, creando ondas de viento para hacerlos retroceder, y rasgando sus armaduras y carne con sus poderosas garras y pico.

-Es una necia...-
Saharam carraspeó, y ante la mirada atenta del resto de guerreros saivajes, apretó los puños y dió un grito de batalla apuntando en dirección a los imperiales.

-Tu hermano tiene agallas..pudo tener una gran vida al servicio de esa nación, y prefirió renunciar a ello por ti y tus hermanos-.
Reconoció el gran Shanoóth, mientras tronaba sus dedos con lentitud y gozo.
-Demos una buena batalla-.

-....-.
Demian miro de reojo al pequeño Elketh, quien parecía nervioso..no por tener miedo..no..el Titan podía intuir que había algo más en su expresión.

Una preocupación igual a la que se reflejaba en Saharam...

......................................................................

Bator había caído en picada contra una casa de tres pisos, rebotó contra el enlosado y termino deslizándose hacia otra casa pero de tamaño menor.

No sintió dolor, solo un intenso entumecimiento en la nuca,
Saharam lo había golpeado con precisión y era más que obvio que uso su energía sagrada.

¿Pero porque?...con dificultad se puso de pie, observó el horizonte y soltó un largo suspiro.

Sus alumnos pronto llegarían para apoyar a los soldados..pero..

Al igual que el..quedarían aturdidos por la repentina traición del joven "Eli".